martes, junio 05, 2007

Tres maneras de hacer una comedia (3ª parte)

Seto no Hanayome

Historia alocada, narrativa alocada

Hace X tiempo un mangaka se presentó ante su editor con dos ideas para su siguiente manga: un romance entre un hombre y una sirena, y otro entre un hombre y la hija de un mafioso. El primero tenía drama y el segundo comedia, pero eran ambas historias ya muy vistas y trilladas, y aunque tenían posibilidades no parecían tener gran gancho. Así pues, el mangaka rizó el rizo y decidió fusionar ambas ideas. Un joven que se enamora de una sirena mafiosa. Eso es esta serie.
Obviamente, con un argumento así, cualquier ápice de sentido común o seriedad esta fuera de lugar. La historia es una chorrada tan grande que por lógica tiene que funcionar, pero el problema es que normalmente este tipo de historias dan para unas risas en los primeros episodios y tras la sorpresa queda una historia que no da para más. Sólo existen dos maneras de sacar adelante una serie así, una es que bajo el surrealista argumento haya una buena historia y que el equipo sea bueno, y la otra... la otra es que el estilo de la serie sea aún más alocado que su propio argumento. Esa es la solución por la que opta esta serie, y el resultado -al menos para mi gusto- es explendido.
En enero del año pasado se estrenó una pequeña serie llamada Magikano que trataba sobre un idiota rodeado de hechiceras que peleaban por su corazón provocando al mismo tiempo todo tipo de catastrofes. Era una serie divertida, desenfrenada y capaz de cualquier cosa. Poco después se extrenó Galaxy Angel Rune, que si bien estaba restringida al universo Galaxy Angel y no resultaba tan brillante, era igualmente una ida de olla espectacular. Ambas series compartían staff, y este es el nuevo trabajo de ese grupo de hombres. Comparte el estilo de ambas, y seguramente las supera.
Nagasumi es un joven que es salvado de morir ahogado en la playa por una sirena, sin embargo este acto condena a esta a morir debido a que deben permanecer en secreto, la única solución para que San-chan sobreviva es que Nagasumi se una a su clan y sea uno de los suyos, es decir, se casen. Naturalmente el padre esta en contra, asi como gran parte de los mafiosos que lo rodean, naturalmente la hija es bastante corta y feliz (y ademas siempre revela en el peor momento posible alguna ley del orgullo sirenil que le obliga a actuar de manera casi suicida), y naturalmente acaban viviendo juntos, yendo al mismo instituto y teniendo todo el tipo de problemas que siempre se ven en estas series (solo que llevados hasta el extremo). Lo bueno es que la serie sabe que es una parodia y disfruta siéndolo.
Seno no Hayanome carece por completo del sentido del ridículo. No sólo tenemos el habitual uso de fondos negros, aquí los hay de todos los colores y con todos los adornos y rótulos posibles. Hay cambios del formato de animación dependiendo del dramatismo -y cuando digo dramatismo quiero decir absurdez- de la serie, uso y abuso de los super-deformed, de la narración en todas las personas posibles, las imaginaciones de los personajes se transforman en realidad (los personajes se caracterizan como personajes bíblicos y se transforman en narradores si es necesario). Y todo ello sin perder en ningún momento la perspectiva de la alocada historia.
Una chorrada suprema, pero un gran entretenimiento.

2 comentarios:

Raistlin dijo...

Totalmente de acuerdo, toda una sorpresa, no esperaba que me fuera a resultar tan divertida ^^

eter dijo...

Massa-san es mucho Massa-san!