viernes, noviembre 23, 2007

Ejemplo de novela sobrevalorada

El perfume

Esta primera novela del escritor alemán Patrick Süskind ejemplifica como pocas las virtudes y los defectos de la literatura actual. La novela se convirtió casi en el momento de su publicación en un best-seller, un libro increiblemente popular en todo el mundo. Además, en el caso de esta novela, el halo que la rodeabe era más engañoso todavía pues al contrario que lo que normalmente consideramos "best-seller" o "literatura de aeropuerto", la obra siempre era descrita como una obra maestra y un ejercicio de estilo y de descripción impresionante. Es cierto hasta cierto nivel. Sin embargo, y dejando claro que la novela es muy buena (y que además no tengo verdaderamente nada contra los best-seller (novelas como "El ocho" o "Los pilares de la tierra" me han entretenido bastante)), el recibir tan buenas críticas es algo que siempre repercute en contra de la impresión del lector.
Supongo que toda la parrafada anterior se puede resumir en que el libro me ha decepcionado, pero no creo que sea una impresión tan simple y rápida. "El perfume" es un buen libro, un gran libro. No obstante, no me parece la gran obra maestra que se me ha vendido desde que tengo algo de memoria literaria.
Tiene virtudes y defectos, como la inmensa mayoría de los libros. Pero si bien en las obras maestras las virtudes hacen que nos olvidemos de los defectos, tal cosa no sucede en esta novela.
La simpleza argumental es un gran contratiempo. El argumento de la novela es tan endeble que, de no ser por su magistral narración (y siendo francos por el interés del lector en leer un libro tan famoso) podríamos abandonar su lectura en las primeras páginas. Este aspecto me parece curioso porque verdaderamente no me gusta el estilo del autor (o quizás, la forma en la que ha sido traducido) pues abusa de la reflexión en primera persona, alternando esta con un narrador omniscente sin mediación alguna. Naturalmente esto es una cuestión de gustos personales, el autor lo hace muy bien, pero no me gusta ese tipo de narración. Y luego en el otro lado de la balanza tenemos la magnífica capacidad descriptiva de Süskind que consigue hacer que "olamos" la francia del siglo XVIII. Este extraño equilibrio se rompe para mi gusto en algunos momentos, pues el autor en ocasiones se va por las ramas con las historias de los secundarios o, sencillamente, se lía una o dos frases de más con alguna descripción.
En resumen, un buen libro (además es bastante corto), que presenta un personaje y unas situaciones bastante originales y sugerentes (aunque si no se es algo complice con la historia resulta ridículo), pero no una obra maestra.

3 comentarios:

Carboanion dijo...

Yo lo leí hace muchísimos, muchísimos años (estaba en segundo de BUP, así que hace unos catorce años de eso XD) y me impresionó vivamente: insisto en que hace demasiados años, pero lo que de veras me fascinó y por lo que agradecí esas historias de los secundarios es que el protagonista atrae la ruina sobre todos ellos, gracias a él terminan del modo que han estado evitando toda su vida (lo digo por la muerte de la vieja y el derrumbe de la casa del puente). Es más, el final me parece una interpretación literal del amor xD En la película no vi nada de eso, aunque digan que una imagen vale más que mil palabras, guardo mucho mejor recuerdo del libro que lo que me ofreció la película.

En fin, yo soy de las que hablan bien del libro xD

Carboanion dijo...

P.D: El Ocho sí que me parece sobrevalorada... Para mi gusto, tiene un final de lo más fullero, en plan "Juer, qué de páginas llevo escritas, estoy cansada y quiero terminar ya" :P

eter dijo...

A mi las historias de como morían todos los que se cruzaban con él me gustaban con recelo. Estaban bien, pero a mi gusto eran excesivas. No me gustaba esa demonización del protagonista por su carencia de olor ("No tengo olor, soy un demonio, todos me odían y traigo el mal sobre ellos").
No obstante si que son algo casi imprescindible del libro y que son imposibles de plasmar en una película.

Y bueno, con respecto a "El Ocho"... no creo que el final sea lo peor. Es apresurado y demás, pero a mi lo que menos me gusta es el aire a fantasía adolescente que tiene el libro. No soporto cuando el protagonista pertenece a una profesión aburrida (y yo soy informático) y por a o por b acabe metido en una conspiración judeomásonica y el mundo depente de él. Y por supuesto se lleva a la chica (tiarrón ruso de las fantasias juveniles de Neville en este caso).