domingo, abril 21, 2019

La guerra es amor. El amor es guerra

Kaguya-sama wa Kokurasetai: Tensai-tachi no Renai Zunousen

Kaguya-sama es una divertida comedia romántica que parte de la premisa de sumisión o inferioridad de la confesión romántica. El presidente y la vicepresidenta del enésimo superinstituto de élites japones están más o menos enamorados, pero ninguno quiere ser el que se confiese, ambos son demasiado orgullosos y quieren ser quien le conceda al otro el favor de la relación como si esta fuera un privilegio. La premisa es sencilla, pero efectiva, y hasta cierto punto realista. 
Así pues la serie es una comedia donde cada uno quiere forzar al contrario a que se confiese. El referente más claro sería "Death Note", pudiendo verse esta "Kaguya-sama" casí como una parodia de ese tipo de series en el que al margen de las acciones o los diálogos tenemos una gran parte del metraje dedicado a mostrar los pensamientos de los personajes, en los que veremos como se suceden planes y contraplanes, como razonan ante las acciones de su opuesto y como tienden trampas constantemente en una auténtica guerra psicológica romántica solo alterada por los agentes libres que son el resto de personajes de la serie.
La serie es bastante divertida y recomendable. Claramente ha optado por adaptar unos tres capítulos del manga original en cada episodio sin complejos, como una clara sucesión de "batallas" que muchas veces no están especialmente cohesionadas más allá de la obvia evolución de personajes y escenarios (aunque el ritmo de la serie sea ágil, esto también aporta el riesgo de que algunas tramas relativamente intrascendentes como la de la pareja que les pide consejos sean anodinas y se sientan claramente de relleno). Algunos episodios son más flojos, pero en general la serie es bastante divertida con esa guerra tan absurda como exageradamente enrevesada que vemos entre los dos protagonistas.
A nivel técnico es una serie más que competente. El nivel de la animación es bastante consistente y, aunque no destaca especialmente en su diseño de personajes estos tampoco se sienten especialmente tópicos. Lo mejor de su narrativa es el constante viaje a la cabeza de la pareja protagonista merced a un narrador omnipresente y a una exposición muy clara de comparaciones o esquemas que nos presentan el mundo que ven los dos protagonistas y las posibilidades que dibujan en sus cabezas como si fueran planes de guerra o experimentos científicos.
La serie peca de cierto inmovilismo porque el status quo no deja de ser el escenario inevitable según la lógica de ambos personajes, pero más allá de algún momento puntual una docena de episodios no son suficientes como para que el desarrollo se haga repetitivo o monótono. Tan original como extrañamente inevitable dentro del anime actual, la serie es bastante divertida y recomendable.     

6 comentarios:

OtakuLogan dijo...

Jo, tanto Fujiwara-chan en el podcast y aquí ni la mencionas, xD.

A mí me ha divertido mucho (ya lo he dicho, me va el rollo "enésimo superinstituto de élites japones"), al principio me parece que exagera las reacciones de los personajes (que ya de por si están exageradas) pero luego se me vuelve más natural dentro de su locura. El final también me parece un poquillo flojo, pero bueno, el manga esta abierto y lo voy a seguir.
Eso sí, para mí claramente lo peor de este anime era la música del opening, no la aguantaba.

eter dijo...

Bueno, menciono un par de factores libres, Chika estaría dentro de esa categoría XD.

conforme avanza gana algo de naturalidad, al principio con tramas como la de la pareja de novios es más floja, luego con más secundarios y la serie asentada mejora.

A ver si hacen una segunda temporada, porque desde luego la historia pide verlos saliendo y con batallas por ver quien invita a quién en Navidad o medir los regalos de San Valentín primero y luego el ¿White monday? (no recuerdo como se llamaba exactamente)

El opening tenía fans... a mi particularmente me dejaba bastante indiferente, pero bueno, al menos se salía un poco de la rutina habitual de este tipo de series.

Anónimo dijo...

Le tengo unas ganas raras a la serie.

Veo que en japón es popu, puesto que veo que en las librerías a las que voy le hacen bastante publi y hay Chika por aquí y Chika por allá. Casi me compro el #1 de segunda mano por 100円 para ver qué tal, pero antes que arriesgarme veré el anime.

Y bueno, la premisa es una tontería tan épica que es difícil ignorarlo. Y aunque la gente se pusiera pesadilla con Chika, y me estuviera dando la impresión de ser la típica waifu tonta y sosa moe con tetas grandes de la temporada... ¿creo que es algo 'cheeky' y 'bicho'? Me suelen gustar las tías con gracia y mucha tontería sin llegar a retrasadas, así que igual voy a ello con menos miedo.

eter dijo...

Chika es muy divertida, es la clásica chica animada de este tipo de series... pero no diría que es tontilla, es feliz como ella sola y va a lo suyo, queriendo solo divertirse.

Anónimo dijo...

Jhon Kei

Esta serie tenía ganas de verla cuando termino y...aquí estoy, casi 1 año después de su estreno en televisión.

Como ya resumiste en aspectos generales la obra, voy a centrarme en agregar un par de puntos personales con la misma:

a) Después de 2 episodios es impresionante como uno...sencillamente no puede quitarse la duda de si lo que está viendo le gusta o no. Entre las escenas recicladas para introducirle la premisa al espectador, el narrador asquerosamente invasivo y el eje principal del show que es el duelo psicológico entre los dos protagonistas que se quieren, pero ninguno quiere ser el primero en admitirlo.
Mi conclusión simple era que la serie abusada de su premisa absurda y necesitaba:
1. Dejar de meter tanto al narrador.
2. Dejar de introducir en cada episodio su premisa.
3. Meter a más secundarios (que por este entonces la serie solo tenía a la pobre Chika como herramienta para meter un poco de un aire freso).

b) Después de finalizada la serie....No sé si hubo un cambio de director, el editor del manga metió la mano...Pero todo lo arriba mencionado se aplico bastante rápido:
a) Punto 1. y 2. literalmente desde el episodio 3;
b) Y Punto 3 no estoy seguro. Podríamos decir que desde el episodio 7 con la llegada de Ishigami, pero estaría obviando que personajes que ya estaban como Chika o Hayasaka comenzaron a tener escenas cada vez más memorables desde el mismo episodio 3 que Fujiwara ayuda al presidente a ser bueno en el voleyball.

El resultado final es que una comedia romántica ligera que aprende de sus errores y pasa de ser algo recomendable con matices a ser sencillamente fácilmente recomendable (al menos si estas buscando algo de esta índole) con personajes muy disfrutables como Chika con sus locuras o Hayasaka que es casi como un lector queriendo juntar a los protas pero sin olvidar su posición como sirvienta de la familia Shinomiya.

Eso sí, ese final huele mal de acá a la China. Que ha pasado 10 años y todavía recuerdo que estos de A-1 Pictures se inventaron los últimos 2 episodios de Working! solo para meter un fanservice simple y sencillo: una cita entre la pareja más popular de la serie (algo que no sirvió de nada, porque tuvimos 2da y 3era temporada y este suceso se trato como si NUNCA hubiese pasado). Y aquí no quiero decir que pasó exactamente lo mismo porque igual y es material adaptado del manga...Pero vamos, la nunca mención del padre de Shinomiya y el desarrollo tan pero TAN típico de todo.

eter dijo...

A mi el narrador me gusta, pero es cierto que es intrusivo y la serie en sus principios peca de ser demasiado repetitiva (además, tramas como la de esa pareja que les piden ayuda a cada uno de ellos no son especialmente buenas ni originales); gana conforme aparecen Chika y el resto de secundarios (sobre todo la primera, de la meido de Kaguya o el tesorero no soy tan fan como el resto del mundo) y la serie se aleja un poco del romance para conseguir ocasionalmente algunos momentos de slice of life