Empezando Shuffle:memories, lo que parece ser una secuela-remake, es un buen momento para echar la vista atrás y recordar lo que fue esta serie.
Shuffle fue una serie que se emitió durante el último semestre del 2005 y que obtuvo bastante éxito -al menos entre la comunidad otaku de internet-. Basado en un juego hentai de Navel, el anime narraba las peripecias de un joven llamado Rin, y de cinco muchachas que se peleaban por él. En el mundo había demonios y diosas -aunque todos buenos- y eso dotaba a la seríe de varios elementos fantásticos y elementos mágicos... aunque en ningún momento dejaba de ser un harem de colegialas.
Estaba dotada de una animación bastante correcta, con un buen diseño artístico y algunas secuencias bastante elaboradas. El casting de seiyuus era excelente, y tanto las canciones como el score conformaban una buena banda sonora. Además, el ritmo de los episodios era bastante bueno e incluso algunos directores optaron por dotar a sus episodios de encuadres y planificaciones muy poco convencionales. Shuffle no era, desde el apartado técnico, un clon del estilo visto en Love Hina y en tantas otras series.
Pero lo más importante es que no lo era argumentalmente. Shuffle tenía muchos elementos de comedia -y se agradecían- e incluso tenía una carga echii muy superior a la media (veíamos de verdad numerosos desnudos), pero lo más importante es que tenía una importante -e inusual- carga dramática. Durante los primeros diez episodios -de 24- vemos la clásica presentación de personajes donde predominan los gags cómicos y echiis, pero despúes la serie madura hacia aspectos más serios. Vemos como las diversas pretendientes van superando poco a poco los traumas que les atormentan, pero al mismo tiempo todos comienzan a sufrir pues el protagonista, en su deseo de no hacer daño a ninguna no se decide, y les hace daño a todas. Esto provocara un gran sufrimiento de todos al final, en especial del protagonista y las dos pretendientas que llegan hasta el fínal. Este extraño dramatismo hace que la serie no caiga en los clásicos clichés de felicidad que imperan en este género y hacen que pocas de sus series se sostengan.
Shuffle! es pues una muestra de lo mejor que el género harem -en su variante más clásica- puede ofrecer.
Shuffle fue una serie que se emitió durante el último semestre del 2005 y que obtuvo bastante éxito -al menos entre la comunidad otaku de internet-. Basado en un juego hentai de Navel, el anime narraba las peripecias de un joven llamado Rin, y de cinco muchachas que se peleaban por él. En el mundo había demonios y diosas -aunque todos buenos- y eso dotaba a la seríe de varios elementos fantásticos y elementos mágicos... aunque en ningún momento dejaba de ser un harem de colegialas.
Estaba dotada de una animación bastante correcta, con un buen diseño artístico y algunas secuencias bastante elaboradas. El casting de seiyuus era excelente, y tanto las canciones como el score conformaban una buena banda sonora. Además, el ritmo de los episodios era bastante bueno e incluso algunos directores optaron por dotar a sus episodios de encuadres y planificaciones muy poco convencionales. Shuffle no era, desde el apartado técnico, un clon del estilo visto en Love Hina y en tantas otras series.Pero lo más importante es que no lo era argumentalmente. Shuffle tenía muchos elementos de comedia -y se agradecían- e incluso tenía una carga echii muy superior a la media (veíamos de verdad numerosos desnudos), pero lo más importante es que tenía una importante -e inusual- carga dramática. Durante los primeros diez episodios -de 24- vemos la clásica presentación de personajes donde predominan los gags cómicos y echiis, pero despúes la serie madura hacia aspectos más serios. Vemos como las diversas pretendientes van superando poco a poco los traumas que les atormentan, pero al mismo tiempo todos comienzan a sufrir pues el protagonista, en su deseo de no hacer daño a ninguna no se decide, y les hace daño a todas. Esto provocara un gran sufrimiento de todos al final, en especial del protagonista y las dos pretendientas que llegan hasta el fínal. Este extraño dramatismo hace que la serie no caiga en los clásicos clichés de felicidad que imperan en este género y hacen que pocas de sus series se sostengan.
Shuffle! es pues una muestra de lo mejor que el género harem -en su variante más clásica- puede ofrecer.
Shuffle es una de esas series en las cuales me digo... "¿pq coño he perdido mi tiempo con esto?... pero... a ver, nada me obliga a ver todos los episodios", y me los pegé toditos, y ahora... sabiendo que es una pérdida de tiempo, voy y estoy viendo el remake... ¿¿nani?? melospliqueeen
ResponderEliminarShuffle tiene una extraña virtud -en este género- y es que, si bien esta claro que no es demasiado original... al menos da en parte la sensación de ello. Y además, y esto es más importante, hay cierto drama y las braguitas no se convierten en el núcleo de la historia.
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