Tres maneras de hacer una comedia (1ª parte)

Lovely Complex

Historia normal, narrativa alocada

Esta entrada es la primera de tres que analizaran otras tantas series de esta temporada de anime. Comedias románticas todas ellas que, independientemente de su calidad, muestran tres maneras distintas de afrontar este género.
Lovely Complex parte de una premisa sencilla, la relación entre un chico y una chica que estan ambos acomplejados por sus respectivas alturas. No hay nada paranormal o extraño, es una historia normal donde todo el peso cómico recae sobre el desarrollo de la trama. La narrativa es desenfrenada y se usan sin reparos deformaciones de los personajes y de la propia escena para reproducir visualmente lo que se quiere narrar. En este aspecto la serie es sobresaliente, sus diseños no son nada del otro mundo y la animación esta bastante desfasada con lo que se suele ver hoy en día, pero la serie consigue un aspecto bastante resultón y atractivo. Contamos además con dos protagonistas bastante cortos y un buen elenco de secundarios, lo cual hace que la mayoría del tiempo se originen bastantes gags y que el ritmo de la serie sea muy bueno.
Pero, a pesar de todo, la historia tiene el problema de todo este tipo de animes y es que la historia da para muy poquito. Tenemos el romance entre ellos y poco más, y cuando la serie profundiza algo más en los sentimientos de ambos y muestra su parte serie -inevitable, por otra parte- pierde gran parte de su fuerza y se hace bastante más lenta y menos atractiva.
De momento la serie me esta gustado bastante, es escandalosamente divertida, pero... sólo espero que las facetas dramáticamente más puras -como los varios episodios que estan empleando con las declaraciones y el establecimiento del noviazgo- duren poco y que la serie vuelva a sus orígenes puramente cómicos. Esta serie se maneja increiblemente bien en la alegria, pero por ello mismo lo hace mal en la tristeza.