Grandioso capítulo de la serie que resume lo mejor del espíritu de entre sagas de One Piece. En este episodio tenemos un poco de todo: despedida de los piratas de Lola (y presentación de una nueva e inquietante presencia en el triángulo Florian), fiesta oficial de unión de Brook a la banda, conversación entre Sengoku, Garp y Kuma sobre la banda de Luffy y presentación de un nuevo personaje que marca el comienzo de una nueva saga. Son muchos aspectos a analizar y me he dejado en esa lista precisamente el mejor: la "Red Line".
El principio y el final del capítulo son lo más tradicional del capítulo. Son buenos momentos y hay un par de detalles de genialidad: esta inquietante sombra que Lola divisa y que todavía no sabemos que és (y puede que jamás lo sepamos, recordemos que este es un mundo fantástico y habrá muchas incógnitas que nunca sean desveladas y cuyo cometido no es otro que "ambientar"); y esta Caimie, primera sirena propiamente dicha que la banda encuentra en su viaje (olvidemos a Kokoro y recordemos siempre esa entrada paródica de Superman "¿es un pescado? ¿es una persona?") y que se supone que hara las veces de guía hasta la isla de los tritones y nos involucrará de lleno en esta nueva saga. Ante estos dos detalles hay que quitarse el sombrero. El primero por lo extraño y verdaderamente inquietante de esa sombra, uno no sabe cual es su verdadero fin y el hecho de que la banda se haya alejado no hace si no aumentar el misterio de esa extraña región cubierta perpetuamente de niebla. El segundo porque nos recuerda a Laboon, a como Oda nos presentó la historia de Brook antes que al propio personaje. Ahora ha hecho algo parecido, repescando a un personaje aparentemente irrelevante como era la sirena que acompañaba a Hatchan en su minihistoria y dándole un rol importante en la serie.
Sin embargo, lo que verdaderamente me ha gustado de este capítulo ha sido la llegada a la "Red Line" y un par de viñetas que la acompañan y que muestran todo el espíritu aventurero de la serie. Todo puede pasar y Oda nos lo muestra ligeramente en este capítulo. Hacía tiempo que no veíamos las verdaderas maravillas de este mar y el autor ha aprovechado la llegada a la gigantesca cordillera que divide el mundo para volver a monstrarnos el mar que Luffy y su grupo estan atravesando. Las islas son maravillosas, pero el mar no es menos y Oda nos regala en este capítulo no ya sirenas, si no todo tipo de monstruos, un poético arcoiris circular y las tormentas más locas que es capaz de idear. La inventiva del autor es monstruosa y estos pequeños detalles, este amor por la aventura, el romanticismo, los misterios y las maravillas que siempre quedan por descubrir en un viaje siempre hacia delante son una de las claves del éxito de este manga.
Hemos alcanzado ya el segundo gran hito en el viaje que el autor se propuso con este manga (el primero fue obviamente la entrada en la "Gran Line"), así pues podemos afirmar que hemos visto aproximadamente el 60% de la historia, aunquq igualmente es de suponer que "el nuevo mundo" es la parte más larga y compleja de toda la historia y será la que más páginas abarque (y hemos de tener en cuenta que esta parte de la Grand Line no debería darse por acabada hasta que acabemos esta nueva isla). Si echamos la vista atrás vemos que en el "Est Blue" apenas vimos nada, el elemento más fantástico que encontramos fue el Baratie y la banda de tritones de Arlong park, así como -obviamente- todos los usuarios de frutas diabólicas. En la Grand Line todo cambió, cada mundo era un lienzo en blanco para que Eiichiro Oda dibujara sus más fantasiosos y surrealistas paisajes, para que rindiera homenaje a todas las influencias artísticas que haya podido tener en su vida y para que nuestros protagonistas afrontaran una nueva aventura siempre distinta a la anterior. Todo es exageradamente fantástico en este manga y eso es lo que lo hace tan especial y por lo que me han gustado tanto simples imágenes de transición como las que hemos visto en este capítulo. En los cabos gemelos vimos una ballena tan grande como una montaña, Whiskey Peak nos presentó un poblado de cazarrecompensas con claras referencias de western, Little Garden era una selva poblada por dinosaurios y gigantes, Drum un reino nevado, Arabasta un desierto en guerra, Skypea una isla maya en el cielo ¿?, Long Island una isla donde todo era largo, Water 7 una urbe veneciana, Ennies Lobby una isla rodeada por catarátas, Thriller Bark una mansión fantasmagórica y la isla de los tritones un reino submarino. Y todo ello sin contar la galería de personajes de todo tipo (y no necesariamente asociados siempre a una fruta demoníaca). La imaginación de Oda no tiene límites.
Queda mucha historia por contar. Tenemos que ver la batalla por el trono del rey de los piratas, a los tres poderes desequilibrados y al ejército de Dragon en escena. Sobre este escenario veremos a multitud de personajes carismáticos librar grandes batallas y vivir escenas inolvidables, pero hoy no quiero pensar en ello. Me basta con pensar en la posibilidad de contemplar el reino de Elbaf, o en ver el lugar de donde surgen las frutas demoniacas, o en el momento en el que contemplemos Raftel. Hay un mundo muy grande todavía por explorar.
El principio y el final del capítulo son lo más tradicional del capítulo. Son buenos momentos y hay un par de detalles de genialidad: esta inquietante sombra que Lola divisa y que todavía no sabemos que és (y puede que jamás lo sepamos, recordemos que este es un mundo fantástico y habrá muchas incógnitas que nunca sean desveladas y cuyo cometido no es otro que "ambientar"); y esta Caimie, primera sirena propiamente dicha que la banda encuentra en su viaje (olvidemos a Kokoro y recordemos siempre esa entrada paródica de Superman "¿es un pescado? ¿es una persona?") y que se supone que hara las veces de guía hasta la isla de los tritones y nos involucrará de lleno en esta nueva saga. Ante estos dos detalles hay que quitarse el sombrero. El primero por lo extraño y verdaderamente inquietante de esa sombra, uno no sabe cual es su verdadero fin y el hecho de que la banda se haya alejado no hace si no aumentar el misterio de esa extraña región cubierta perpetuamente de niebla. El segundo porque nos recuerda a Laboon, a como Oda nos presentó la historia de Brook antes que al propio personaje. Ahora ha hecho algo parecido, repescando a un personaje aparentemente irrelevante como era la sirena que acompañaba a Hatchan en su minihistoria y dándole un rol importante en la serie.
Sin embargo, lo que verdaderamente me ha gustado de este capítulo ha sido la llegada a la "Red Line" y un par de viñetas que la acompañan y que muestran todo el espíritu aventurero de la serie. Todo puede pasar y Oda nos lo muestra ligeramente en este capítulo. Hacía tiempo que no veíamos las verdaderas maravillas de este mar y el autor ha aprovechado la llegada a la gigantesca cordillera que divide el mundo para volver a monstrarnos el mar que Luffy y su grupo estan atravesando. Las islas son maravillosas, pero el mar no es menos y Oda nos regala en este capítulo no ya sirenas, si no todo tipo de monstruos, un poético arcoiris circular y las tormentas más locas que es capaz de idear. La inventiva del autor es monstruosa y estos pequeños detalles, este amor por la aventura, el romanticismo, los misterios y las maravillas que siempre quedan por descubrir en un viaje siempre hacia delante son una de las claves del éxito de este manga.
Hemos alcanzado ya el segundo gran hito en el viaje que el autor se propuso con este manga (el primero fue obviamente la entrada en la "Gran Line"), así pues podemos afirmar que hemos visto aproximadamente el 60% de la historia, aunquq igualmente es de suponer que "el nuevo mundo" es la parte más larga y compleja de toda la historia y será la que más páginas abarque (y hemos de tener en cuenta que esta parte de la Grand Line no debería darse por acabada hasta que acabemos esta nueva isla). Si echamos la vista atrás vemos que en el "Est Blue" apenas vimos nada, el elemento más fantástico que encontramos fue el Baratie y la banda de tritones de Arlong park, así como -obviamente- todos los usuarios de frutas diabólicas. En la Grand Line todo cambió, cada mundo era un lienzo en blanco para que Eiichiro Oda dibujara sus más fantasiosos y surrealistas paisajes, para que rindiera homenaje a todas las influencias artísticas que haya podido tener en su vida y para que nuestros protagonistas afrontaran una nueva aventura siempre distinta a la anterior. Todo es exageradamente fantástico en este manga y eso es lo que lo hace tan especial y por lo que me han gustado tanto simples imágenes de transición como las que hemos visto en este capítulo. En los cabos gemelos vimos una ballena tan grande como una montaña, Whiskey Peak nos presentó un poblado de cazarrecompensas con claras referencias de western, Little Garden era una selva poblada por dinosaurios y gigantes, Drum un reino nevado, Arabasta un desierto en guerra, Skypea una isla maya en el cielo ¿?, Long Island una isla donde todo era largo, Water 7 una urbe veneciana, Ennies Lobby una isla rodeada por catarátas, Thriller Bark una mansión fantasmagórica y la isla de los tritones un reino submarino. Y todo ello sin contar la galería de personajes de todo tipo (y no necesariamente asociados siempre a una fruta demoníaca). La imaginación de Oda no tiene límites.
Queda mucha historia por contar. Tenemos que ver la batalla por el trono del rey de los piratas, a los tres poderes desequilibrados y al ejército de Dragon en escena. Sobre este escenario veremos a multitud de personajes carismáticos librar grandes batallas y vivir escenas inolvidables, pero hoy no quiero pensar en ello. Me basta con pensar en la posibilidad de contemplar el reino de Elbaf, o en ver el lugar de donde surgen las frutas demoniacas, o en el momento en el que contemplemos Raftel. Hay un mundo muy grande todavía por explorar.
Lo que me parece genial en One Piece es que mientras otros mangakas van explicando horas y horas del porque que un tipo se puede mover a super velocidad, pueda volar en el aire, o tratar de probar científicamente (y de forma forzada)movimientos o técnicas imposibles, Oda simplemente se limita a poner esos recursos y ahí se queda, como si dijese: "Lo pongo porque me sale de los ****** y ya esta"
ResponderEliminar¿Creéis que Camie sea la nueva Nakama de Luffy? o mas bien...... ¿ara el papel de Conis como en Skypea?
Estos capitulos son los mejores. A ver si volvemos a ver a Hatchan por ahi xDDDDD
ResponderEliminarYo creo que hara un papel como Conis... y de llevarse a algun nakama de esta isla, debera tener piernas y no cola (si no, en las islas le deberian dejar tirado por ahi, a no ser que se comiese una fruta 'pierna-pierna' o 'hombre-hombre' (como Chopper) o algo asi. Pero viniendo de Oda, todo es posible.
PD Me ha encantado toda la entrada. Muy buena.
Me ha sorprendido que Oda cogiera a un personaje de portada de capítulos y lo introdujera en la historia.
ResponderEliminarEl momento en que ven lo fuertes que se han hecho y que ya han recorrido la mitad del camino es genial al igual que cuando Brook pregunta a Nami de que color tiene las bragas xD
Hombreella podria vivir en el acuario del barco que es enorme
ResponderEliminaralquimio_125, hombre, Oda lo explica... a su manera; me encanta esa imagen de Zoro haciendo el pino y flexiones con los pulgares mientras sostiene con los pies una pesa de una tonelada. Animalada.
ResponderEliminarParticularmente le veo un papel del tipo Conis, les ayudará a entrar en el mundo y les explicará algo de él. En este aspecto creo que, de entrar un nuevo compañero, tendra una entrada tipo Franky o Wiper.
jeparla, particularmente tengo mucha curiosidad por saber como afectan las "akuma no mi" a los tritones. En todo caso, mi apuesta va por una tritona no atractiva. Se supone que "la chica" es Nami, así que no espero un bellezón (el propio Sanji ha dicho muchas veces que la belleza de Robin es distinta, más madura).
yoshishi. El momento de las bragas es grandioso. Lo bueno de Oda es que repite una y otra vez estos chistes, pero siempre con algún matiz que los hace distinto y te arranca una sonrisa.
Aquí otro que se ha emocionado con este capitulo. Supongo que es irremediable cuando ves que los Mugiwara se topan con Red Line y como eso les genera una serie de sentimientos diversos. Estoy de acuerdo en que estamos en en el 60% del viaje aunque no sé si contar Gyoujin o no como parte de ese porcentaje.
ResponderEliminar¿La sombra que se deja ver no será algún que otro elemento del Florian Triangle? Tanta desaparición de barcos tb podría venir explicado por esa figura...
Y bueno, con Camie a bordo ya tenemos a nuestra Conis de Gyoujin xD Esta sirenita abrirá el camino a la isla como Conis a Skypiea. Su presentación es genial, lleno de gags bestiales de los que Oda nunca se olvida de poner y que agradezco bastante.
Y bueno, yo sí creo que Luffy se llevará a alguien de Gyoujin como nakama y espero que sea una sirena/tritona. A ser preferible que esté de buen ver y que rebose carisma. No creo que tardemos mucho en verlo.
El otro día pensaba como planificaría Oda el Nuevo Mundo y confío en que lo hará perfectamente pero resulta dificil encuadrar a la Marina, Shichibukais, Yonkou, algún conocido (no me olvido de Buggy y Alvida que vendrán con ganas)y el papel que puede jugar Dragon y su ejercito revolucionario. Esto puede ser muy grande ya no tanto por los actores sino por el cómo. Veremos como lo encuadra todo el maestro Oda.
xesu, la imagen de la "Red Line" es sencillamente majestuosa. Un muro infranqueable que verdaderamente parece el fin del mundo y que supone un claro punto de referencia.
ResponderEliminarEn cuanto al nakama gyoujin, no sé... todos esperamos tanto uno (y además una sirena) que Oda es capaz de burlarse de nosotros haciendo que se una en esta saga un buhonero bizco que pasaba por la isla. Aunque lo dudo, Oda tiene pasión por dibujar animales y tener a otro "Chooper" en la tripulación es algo que le debe tentar mucho.
Pero lo que más me interesa de lo que has dicho es lo último: el nuevo mundo. No sé como se lo va a montar Oda, pero en esa parte del mundo en teoría no gobierna la marina así que no sería muy lógico que tuvieran la fuerza que tenían en la Grand Line, y los piratas tampoco creo que ejerzan un mando parecido. Pienso que será un caos absoluto con muchos piratas y algún que otro almirante o shichibukai y... por supuesto, Smoker.
La tritona ha de ser fea como un cardo.
ResponderEliminaryo tengo la duda de la utilidad de una sirena (sin piernas) por eso creo que quizás no sea camie la nueva nakama, pero creo que es pronto para comenzar a especular ya que nos espera por delante un nuevo y apasionante mundo por descubrir... Ahora toca ver como la imaginación de Oda nos presenta este nuevo mundo. Tengo ganas de ver como será y a quien nos podremos encontrar xD
ResponderEliminarpd: como siempre una excelente entrada ^^
jeparla, siempre lo he dicho, un cruce entre trucha y Conan el bárbaro.
ResponderEliminaryue_sayuri. Oda me da miedo aquí. Su pasión es dibujar animales, y en todas las sagas lo ha demostrado. Aquí... en un reino en el que sus habitantes son mitad hombre mitad animal tiene que sentirse como pez en el agua (chiste malo, lo sé).
ps: esta entrada me ha quedado extrañamente poética ^^
poetica y tremenda n_n te ha quedado genial. Que se vea que con 490 episodios a sus espaldas la serie tiene más frescura que muchas otras (y lo que le queda! :D).
ResponderEliminarYo a Camie la veo como guia, tipo Conis. Nos presentará de nuevo a Hatchan, un poco la ciudad, etc.
Entre que no se como puede ser la isla y que el capitulo 500 está cerca estoy nervioso y todo xDD a ver si Oda nos prepara alguna sorpresa para ese capitulo ^o^
Haro, no sé, no creo que pase de una portada en color y alguna que otra cosa así. Pero Oda ha demostrado siempre un respeto y un cuidado increible hacia su historia, así que no creo que la fuerce para adelantar o retrasar un momento importante para que coincida con tal acontecimiento. Además... con el ritmo habitual de la serie, donde todas las semanas pasa algo, unicamente sería significativa alguna revelación del tipo "Shanks es el hijo de Gold Roger". Yo, si acaso, apostaría con algo relacionado con Robin y los Phonegryphs, las apariciones de estos suelen estar cerca de los episodios centenarios.
ResponderEliminar... Me bajé el anterior episodio y éste, porque lleváis bastante tiempo comentando mucho la serie. Le había tomado manía al arcoiris, entró en la página y ¡zas! "Poético arcoiris" ... En fin, lo volveré a dejar con la esperanza de que tengas razón y vuelva Smoker.
ResponderEliminarPor otra parte, lo de la Red Line 2... en el anime, cuando explican el Grand Line, Raftel sale antes de llegar a otra Red Line (en realidad solo salen unas 7 islas, pero en fin...). Supongo que algo tenía que separar por ambos lados los mares del este y el oeste, pero me parece un poco rebuscado decirlo ahora. ¿No hubiera sido mejor otro continente?
Siempre que comento algo critico la serie y me gustaría que no fuera así, pero es que has hecho un post increíble, eter, y hay 12 comentarios, y el episodio la verdad es que no cuenta nada...
Esperando post sobre Claymore para demostrar que no tengo tanta malícia como aparento.
No se, pero en el capitulo 100 Oda comentaba que adelanto la entrada al Grand Line cuando en realidad el tenia un par de cosas que contar en Logetown. A si que no podemos estar seguros.
ResponderEliminar"Deseo para el futuro" con One Piece: "Señor Oda por favor sea tan amable de mostrarnos ese recurso tan usado en los shonen como Reborn!, Naruto o Bleach que nunca a utilizado... si, estoy hablando de los "entrenamientos" ".
Porque hasta ahora lo único mas cercano a eso, que hemos visto es a Zoro levantando pesas.
Y a eso no puedo llamarle entrenamiento.
otakulogan
ResponderEliminarJe, lo cierto es que en el capítulo no pasa gran cosa y esta entrada es más para hablar de la facilidad que tiene Oda para crear mundos que para comentar la historia. En este aspecto me gana mi pasión por la fantasía, me gustan escenarios tan complejos y bestiales como fue Skypea, pero estos pequeños detalles que no dejan de ser anécdotas como los monstruos marinos o el citado arcoiris me parecen un gran acierto.
Además... me gusta que navegen. ¡Son piratas! ¡Deberían pasar más tiempo sobre el agua (y por eso me extraña la debilidad de las akuma no mi) que en tierra! Todavía espero la gran batalla naval que tarde o temprano tendremos que ver (me encantaron pequeños anticipos como el Baratie o la Buster Call).
Claymore... la comenté hace una eternidad después de leerme los 6 primeros tomos. La serie entonces ya era muy buena, aunque ni mucho menos tenía el nivel que tiene ahora.
No sé cuando haré una próxima entrada sobre ella (debería haber comentado la 75...) pero ahora mismo me desconcierta. Me gusta el ritmo y me gusta que Clare, Miria y cia hayan regresado hechas unas bestias pardas y se hayan cepillado a toda una nº2 como si nada, pero Yagi tiene que replantear toda la historia tras el salto temporal y no puedo evitar sentir algo de miedo. Pero de momento... una serie que ha cogido muy dignamente el relevo de Berserk.
alquimio
Acelerar no es tan grave, y además el 100 es muy simbólico y Oda quería hacerlo coincidir con el grand Line. Entendería que sucediera algo parecido con el Nuevo Mundo, pero prefiero que no y para mi Oda ganaría mucho si no forzara la historia por algo simplemente anecdótico como es la coincidencia de unos números.
Particularmente no quiero ver entrenamientos. Es algo que me aburre soberanamente y que veo más como un recurso narrativo que argumental. Oda juega con la ambigüedad de los viajes marinos y me basta con los miniflashback que de vez en cuando vemos sobre entrenamientos.
Eso sí... Franky entrenando a los "débiles" y creando un "Battle Franky Squadron" sería impagable.