Un día vi una vaca vestida de uniforme

One Piece 595 - Promesas

Un salto temporal ya inevitable, unos supernovas que han llegado para quedarse y que ayudan a redefinir el futuro de la historia, una historia que no para de complicarse. Hay miga, así que hoy... reseña por partes

Trafalgar Law: No hace nada, el capitán de los piratas del Corazón no hace nada. Decide, a falta de una palabra mejor, sestear mientras todos los rookies emprenden la carrera por el One Piece. En cierta manera creo que es bueno que Oda recalque que no estamos ante una carrera, y que si todos los que hay en el Nuevo Mundo no han conseguido el One Piece es por algo. Las reglas en este océano parecen distintas. En todo caso, la calma del doctor es inquietante. El que no quiera hacer nada es, como cuando salvó a Luffy, una muestra de que va algo a contracorriente. Como Luffy, se sale de la norma y estos son los personajes más peligrosos. Guarda algún tipo de secreto, y aquí hace lo más inquietante que se puede hacer en ese aspecto... pasa turno sin mover.

Scrachment Appo: El punto hilarante de la semana. Appo y sus hombres son perseguidos por un grupo de jabalis gigantes, saltan por un barranco y tanto ellos como sus perseguidores se encuentran volando por los aires. Oda disfruta dibujando animales y paisajes, y me da que se tiene que estar frotando las manos ante las posibilidades que ofrece el oceano que esta dibujando.

X Drake: A Drake le toca el punto sugerente del capítulo. Nuestro buen ex-marine llega a una isla de Kaidoh y, sin tener nada mejor que hacer, no se le ocurre otra cosa que provocar a este. Que Drake es fuerte es innegable, pero que se encuentra casi tan lejos del nivel de un emperador como el "T-Rex" de Iceburg tambien es poco discutible. Nuestro buen hombre-saurio esta provocando a un emperador y la razón no puede ser ni querer vengarse ni querer suplantarlo. Drake es uno de los supernovas con más trasfondo de la historia y, perfilándose Kaidoh como uno de los grandes villanos del futuro del manga, resultará muy interesante ver como se desarrolla esta parte de la historia.

Jewelry Bonney: La representante del bello género entre los rookies se revela en este capítulo como un personaje con mucho más de lo que parecía. Esa perpetua pose suya despatarragada ha demostrado que no sólo sirve para diferenciarla del estilo natural de Nico Robin o Boa Hancock, si no que también le permite dar buenas patadas. Ahora bien, Jewelry parece que no va a morir tan pronto como los cinco ancianos nos hacían presagiar en el capítulo anterior, ahora vemos que el propio Akainu ha ido a por ella. Las palabras del perro rojo hablan de "fuga", luego Jewelry no parece ser precisamente una desconocida que se ha dado a la pirateria, si no alguién relacionada con las más altas esferas. Si tenemos en cuenta que no deja de ser una fuente de la eterna juventud andante podemos llegar a conclusiones muy sugerentes sobre su importancia en la serie.
Barbanegra: El pirata de piratas de la serie sigue mostrándose como un auténtico bribón. Conspirador a la par que idiota, vulgar y grosero, y fuerte pero cobarde. Barbanegra es tocho tocho, y no parece haberle costado mucho someter a una Jewelry a la que tacha de débil, pero no duda en huír ante un Akainu ante el que la victoria podría salirle demasiado cara. Barbanegra no se arriesga por nada. En Marineford tenía un escenario favorable y se emborrachó de poder, pero una batalla contra un logia tan destructivo y con haki como es nuestro buen perro rojo podría costarle más de lo que esta dispuesto a sacrificar. Pero además de esa cobardía tan saludable, su tripulación nos regala momentos de auténtico disfrute como son las risas ante el rechazo de Bonney a ser parte del harem que Barbanegra quiere formar para compensar -literalmente- lo fea y desagradable que es su tripulación. Una banda de borrachos y "gentes de mal" bastante egoistas y también bastante idiotas (memorable que pensaran cruzar el nuevo mundo en la triste balsa de Barbanegra... y más memorable aún que quisieran hacerlo con San Juan Wolf como tripulante).

Akainu: El Clint Eastwood de la serie aparece por sorpresa y hace huír nada más y nada menos que a Barbanegra con toda su tropa. Pero el hecho de que no persiga a estos y se quede con Jewelry y le dirija a esta las palabras que le dirige hacen pensar en la verdadera importancia de esta. El gobierno había prometido intercambiar un crucero por la rookie, para conducir a esta valdría un vice-almirante pero el hecho de que Akainu haya ido en persona parece más querer indicar que el gobierno no estaba dispuesto a que Barbanegra se la jugara. Jewelry parece tan importante como para que nuestro buen asesino de logias de fuego prefiera quedarse con ella antes que perseguir al que quizás sea el hombre más peligroso del mundo. Hay otra lectura posible y es muy terrible, y es que a "Akainu" pueda gustarle Barbanegra. Hay una máxima sobre el terrorismo que dice que "cuanto peor, mejor", y en ese aspecto Akainu podría priorizar la caza de piratas "agradables" antes que la de villanos puros y duros a fin de satanizar más la figura del pirata (aunque creo que aquí estoy divagando yo demasiado).

DonQuixote Doflamingo: El tio más feliz del mundo. El titiritero con pluma sigue a su bola y conspira por aquí, por allá y por donde puede. En esta ocasión lo vemos con aquel que le encargó cargarse a Moria, alguién con mucho peso en el gobierno mundial cuyo nombre y rostro aún no se nos revela (en la mejor tradición de la serie). No obstante, nuestro buen "Joker" no duda en reafirmar ante el lector que él no es vasallo de nadie y que sencillamente hace lo que le da la gana. Ni siquiera necestia mucho su título de Shichibukai, y como buen caos que encarna, esta contento de que Moria viva.

Gecko Moria: Que, también en la mejor tradición de la serie, no muere. Dudarse de Oda no se duda, y nuestro bueno "ex-shichibukai" perezoso es posible que se haya despertado de la siesta en la que vivia. ¿Regresará? Si conocemos a Oda yo apostaría a que sí. Y un Moria "en forma" es un enemigo sumamente poderoso. Mi apuesta feliz desde este momento es verlo como un tripulante de la banda de Big Mom.
Tony Tony Chooper: Quizás para mi la parte menos interesante del capítulo. Emotivo ver a Chooper recordando su primer encuentro con Luffy y proponiéndose ser más fuerte para ayudarle en su proposito. En su isla parece haber una buena colección de hierbas y "sustancias" raras, así que es de suponer que su power-up venga por ahí y que las "rumble ball" evolucionen.

Sanji: Ya tranquilizado, Sanji descubre que los okamas tienen una comida que vuelve más fuerte (y en su imaginación más sexys a Nami y Robin). Como buen cocinero, su objetivo será hacerse con esa receta a cualquier precio, y después de un diálogo de besugos entre un Hombre muy Hombre y un Okama muy Okama, Ivan-chan consiente en enseñarle la receta si supera el mal videojuego que sería recorrer toda la isla de los travestis derrotando a los 99 maestros del estilo okama-kempo mientras otro ejercito de travestis le persiguen para travestilos. No es muy original, y sigo esperando el "Death Wink" de Sanji, pero si los guionistas del anime estan inspirados nos puede garantizar una saga de relleno apoteósica XD.

Como Luffy tras su encuentro con Aokiji, parece que toda la banda ha despertado a la realidad de su propia debilidad. No quieren seguir dependiendo tanto de su capitán y se dan cuenta de que han sido un lastre para él y que ni siquiera han estado con él cuando este más los ha necesitado. Los "power-up" y el salto temporal parecen ya definitivamente inevitables. Es de esperar que los siguientes capítulos nos muestren por donde tiraran los desarrollos del resto de nakamas... y que hará Luffy durante este tiempo.