Luffy of the rebellion

Dejando a un lado la comedia obvia que todos sabíamos que desencadenaría el cambio de cuerpo de la banda y que da lugar a escenas surreales rematadas por un dibujo magnífico de Oda (en especial me parecen terriblemente expresivos Chopper dentro del cuerpo de Sanji y Franky dentro del cuerpo del mapache), este me parece uno de los capítulos más torpes que le recuerdo a Oda. Aunque no llega a la altura ese Mr.3 que apareció magicamente junto a Ace, si llega al nivel de esa burbuja que voló de la nada hacia Luffy y Noah durante la lucha con Hodi Jones. Naturalmente Oda conoce más su manga que yo, es obvio, pero es una pena como algunas pequeñas ideas que se intuyen en algunas sagas no terminan de rubricarse en ocasiones. No todas las sagas son Water 7 o Shabody, eso lo sabemos, pero en algunas ocasiones Oda fuerza demasiado el argumento y ni la ligereza de sus personajes permite milagros. Este es uno de esos capítulos.

Sí, hoy procedía fanservice de CC Koala

La saga era hasta ahora poco menos que impecable... sin embargo siento como si Oda hubiera empañado el excelente resultado que había conseguido en esta última decena de capítulos. En primer lugar me habría gustado que la banda continuara separada, pues creo que los dos grupos habrían dado bastante juego. Pero en segundo lugar, y mucho más importante, me parece que Oda sencillamente ha desarrollado una escena muy rara frente al laboratorio. El encuentro entre Luffy y Law es bastante correcto y añade un poco más de misterio al pirata con nombre de desastre español... pero a partir de ahí uno no sabe porque Law manda a Luffy tras los miembros de su banda tras haberles intercambiado los corazones a estos, la escena de Luffy a unos pocos metros del agonizante Smoker es rara... pero más raro resulta todavía que Tashigi aparezca corriendo de la nada con sus piernas unidas y Law la ataque cambiándole el "corazón" con Smoker... que sigue teniendo el boquete en su pecho pero que no tiene problemas para mantenerse en pie. No es ya que la fruta de Law sigua siendo demasiado rara, que Smoker tenga más corazones que el akatsuki aquel de Naruto... es que sencillamente argumentalmente veo que hay demasiados agujeros. Oda ha querido mostrar en estos diez capítulos los misterios de la isla, ha intercambiado cuerpos propiciando gags memorables... pero en el último instante parece haberse dado cuenta que tenía ante él una bomba a punto de explotar en forma de tormenta de hostias entre tios muy bestias y recoloca todas las fichas sobre el tablero con un semireset que me parece bastante chapucero.

¡Puto Akainu~desu!

Tras ese reset comienza una nueva recolocación de las piezas e incluso hemos tenido una pizarra en la que se nos ha explicado lo que parece definitivamente son los los tres frentes claros de la isla:

1) La banda. Rodeados por infinidad de niños pequeños y distraidos por las inevitables coñas que conllevan el cambio de cuerpos, Oda aún tiene dos puntos pendientes relacionados con el samurai (cuyo nombre si no me equivoco aún no se ha dicho): su torso y su hijo. Parece obvio que todavía que algún misterio en la isla, como también parece que el samurai de los disfraces (me encanta el hecho de que en la isla aislacionista desconozca el concepto de las frutas del demonio) tendrá un papel importante en la serie... supongo que como mínimo como el vínculo de la banda con otra nación terriblemente fuerte que podría sumarse a ellos en la batalla final.

El samurai no vino solo. Todo noble japonés ha de tener una buena meido-ninja

2) La Marina. La ausencia de corazón no parece frenar a un Smoker ahora terriblemente pudoroso, lo cual en cierta manera anula el sobredimensionamiento de la fuerta de Trafalgar del último capítulo. Así mismo, ahora Smokey tiene otro problema, y ese es que ha perdido los poderes de su fruta y alguna que otra dioptría. El cambio de corazones de Smoker y Tashigi hace todavía más evidente el hecho de que Law debe pasarse al bando de los buenos, pues por mucho que me guste la idea de ver a una fémina en plan tia dura como lo es ahora Tashigi-chuan es obvio que no va a trascender más allá de algunos capítulos en esta isla. Y el el(la) propio(a) Smoker(Tashigi) el que da el nombre del que parece el villano definitivo de la saga.

3) Caesar Crown. Cesar como el título de los Emperadores romanos que comenzaron con el célebre Julio (y en si ya se discute la etimologia de "caesar" en su nombre... aunque no espero ni cesareas ni elefantes cortados en la saga XD); y Crown, corona en ingles. Caesar Crown aspira desde ya al título de portador del nombre más molón de la serie. Pero el Cesar Coronado no es sólo un hombre con unos padres con buen gusto ni una nube de gas bebedora de batidos que ahora ya tiene manos, es un científico loco colega de Vegapunk y especialista en armas de destrucción. Parece de todo menos alguién a tomarse a la ligera. Considerando a Mone como una subordinada, queda ahora la duda de saber por qué Law está trabajando con él... pues verdaderamente no parece pintarle mucho.