El primer episodio de esta serie es muy malo, tanto que casi quita las ganas de ver el segundo... que es oscuro, sugerente y ostenta una más que notable calidad. El tercer episodio es flojito... pero el final es bastante potente y arrastra todavía un poco del encanto del segundo. Y a partir de ahí la serie es una sucesión de episodios lentos con otros de relleno donde el desarrollo de la trama y los personajes brilla con la fuerza de unos destellos de incongruencia espantosos.
En esta temporada repleta de zombies por alguna de esas extrañas modas japonesas (el zombie magical-girl de Kore Wa Zombie o la fantasma calenturienta de Otome X Amnesia), esta parecía la joya de la corona, la sublimación del poderío otaku: la moezificación del zombie. Y todo ello apoyado por unos niveles de producción muy altos que hacen que ver este anime sea toda una delicia para los ojos. Ahora bien, hay algo que falla en Sankarea. Sería muy fácil decir que "todo", pero también sería poco divertido... así que haré leña del árbol caído y me ensañaré de sobremanera con ella, que para algo que sufrido la tortura de ver sus doce episodios a fin de poder hacer una entrada en el blog con un título tan "ingenioso" como el de esta...
Primero. ¿Zombis moe? El hombre es una criatura fascinante e, igual que puede desentrañar los misterios del universo puede propiciar la parilla televisiva actual española... y los japoneses en concreto tienen un extraño talento para buscar fetiches nuevos. No hablamos de meidos o enfermeras, no hablamos de un tio que tenga debilidad por los ombligos o de alguién a quien le gusten los olores como si del protagonista de "El perfume" se tratara. No. Hablamos de zombies. Los zombies, partiendo de los mitos sobre los bokor, son una creación de Hollywood, y basicamente son gente que se va cayendo a pedazos y que persigue a los vivos para comérselos o incorporarlos a sus filas (con en el caso de los vampiros, siempre me han parecido piramides alimenticias explosivamente suicidas). Ahora bien, partiendo de la imagen clásica de la película de Romero o de muchas de versiones... un japonés tuvo la brillante idea de adaptar los zombies a la comedia romántica. Curioso y cuanto menos raro... los zombies son como los nazis en la cultura pop, sólo sirven para matarlos.. pero con los nazis siempre puedes jugar con el pequeño masoquista que todos llevamos dentro y poner a una alemana con aspecto de valkiria enfundada en un traje ajustado de las SS y a Seinfeld me remito para justificar como acabaría esa batalla entre los dos cerebros de un hombre (video que youtube no me deja insertar: http://youtu.be/CxKIx8E2dAU).
Así pues esta claro que el zombie tiene que ser una monada, porque la gente juega al Resident Evil para manejar a Jill Valentine, no para que una versión putrefacta de esta se los coma. Pero eso nos lleva al segundo punto...
Si esta buena... ¿qué mierda de zombie es? Aquí esta lo gracioso. Sanka es lo más bonico que pisa la tierra. Es una chica delicada, tímida y perfecta a todos los niveles de diseño. Es la personificación de Yamato Nadeshiko. ¿Entonces donde queda el concepto de zombie? La gente no huiría de los zombies si estos fueran una joven virginal y mona con una herencia millonaria. Los zombies son un monstruo... la cosa es que acojonen un poco, sin zombies "high school of the dead" sólo sería fanservice de tías.
Aunque HSOTD es lo que es, el 5% de gore le da la excusa a los autores de que los protagonistas quieran sentirse vivos como si de jugadores de una gran bola negra se tratara. |
Pero bueno, aceptemos la existencia de una zombie kawaii en la tierra del sol naciente. Las consecuencias de esto serían el tercer punto.
¿Como reaccionaría la gente ante una zombie monilla? Dando por supuesto que la zombie no se lanza de cabeza a por los sesos de la gente, queda la incógnita de como reaccionaría la gente ante esta (naturalmente hablo de aquellos que lo supieran). Particularmente no soy capaz de imaginarlo... pero la reacción más común ante lo desconocido es el miedo, y cuando un gran número de personas tienen miedo de un número muy pequeño normalmente la cosa acaba en un asesinado preventivo de cuya justicia y necesidad la masa se autoconvencera sin demasiados problemas.
En esta serie no. ¿Qué Sanka es una zombie? ¿Qué los zombies existen y son herbívoros aunque de vez en cuando -pillines ellos- les da por comer carne? Pues nada, los aceptamos sin problemas, incluso aunque tengamos alguna disputa con ellas.
Hay casos particulares, por supuesto, pero aún así sigue siendo un argumento muy difícil de sostener. Dejando a un lado al protagonista (¿un niño obsesionado con los zombies cuyo sueño es echarse una novia zombie? ¿y que además tiene uno de esos horribles peinados que le hacen parecer tener orejas?), tenemos al padre de la criatura... un padre terriblemente obsesivo y enfermizo marcado por la muerte de la madre de la protagonista... que acepta que su hija se levante de entre los muertos con las pupilas teñidas de rojo como si nada. Yo me considero un hombre de ciencia, pero como diría Benjamin Linus... "Lo muerto, muerto esta. Nada puede vencer a la muerte". Cuanto menos creeria que un espíritu maligno -en Japón hay tropocientos, lo sabemos- se ha apoderado del cuerpo de mi hijita y esta haciendo guarrerias con ella como si de Linda Blair se tratara.
Y así pasamos al cuarto punto: la zombie en si. Quizás sea el personaje más consistente de la serie. Una niña que sólo quiere ser libre y poco más. La historia de abusos de su sobreprotector padre (el citado episodio 2) vale para marcar a cualquiera. No tengo quejas con respecto a este personaje, no es el mejor de la historia... pero no da vergüenza ajena. Ahora bien, el tratamiento que hace el autor de los zombies es bastante tramposo, adaptándose mucho las debilidades y fortalezas de estos a las necesidades del guión, y definitivamente su hambre zombie no tiene mucho sentido cuando la serie intenta afrontar la zombizificación desde un punto de vista relativamente científico.
Todo eso son defectos argumentales, que son importantes pero pasables... y sobre los que quizás me he ensañado un poco excesivamente. No obstante, el problema de la serie radica en su narración, que basicamente me parece una mierda.
No tengo nada contra las narraciones lentas, y uno entiende que la muerte de la protagonista es algo que ha de ser narrado con pausa, así como su recuperación de semejante trauma. Pero esta serie, sencillamente, tiene un ritmo aleatorio. Tan pronto como te mete episodios en los que no pasa nada, te mete otros en los que la trama avanza a un ritmo bastante más elevado. Alterna momentos de drama con otros absurdamente cómicos. De la cantidad de fanservice bamboleante que mete ya ni habló. Y luego mete en su recta final episodios de relleno para completar a los personajes secundarios... que no digo que haya que ignorarlos, pero en una serie de 12 episodios no puedes gastar 20 preciosos minutos en profundizar en una historia secundaria que no aporta nada (en un manga queda bien, pero es un lenguaje diferente, en un anime se supone que contratas a unos guionistas para que estas cosas no pasen).
En resumen: una mala serie. Tiene un nivel de producción brutal, y la historia en si tiene un par de ideas sugerentes, y tiene buenos personajes secundarios... pero la idea principal es una soberana chorrada y el protagonista es insufrible... y para rematarlo la narración y el montaje parecen haber sido realizados al azar.
Y llego el turno de Sankarea.
ResponderEliminarMi justificación para verla es esta: Es Rea "animada", es la única razón que necesito para verla.
Y creo el termino necrofilia quedaba mejor aquí que en Otome.
Yo particularmente prefiero, y por mucho, a Wanko a pesar de su fanservice.
ResponderEliminarJaja, te has ensañado de lo lindo, y excelente el video de Seinfeld, me eché unas buenas risas, gracias, justo las necesitaba.
ResponderEliminarEn lo personal el manga me gusta, aunque a donde se dirige y ciertos hechos son aún raros y cuestionables, para una lectura una vez al mes no sale nada mal. Pero ahora el anime, que con su torpe narrativa, se me hizo pesadísimo en momentos y más ligero en otros, y que más decir? ya lo dejaste bien en claro en la entrada.
P.D.: Aarrghh! quería ver a Darin-chan animada. Tal parece que en mi caso la partida de ajedréz no la ganó cerebro.
Oh si, olvide comentar, buen vídeo el de Seinfeld, creo que a todos nos a pasado alguna vez.
ResponderEliminarno creo que ni el autor del manga sepa adonde va su serie. Rea es la novia que todo el mundo querría para si, pero ya esta, no más donde rascar.
ResponderEliminarnvsmp, es que la narrativa es muy rara, secuestran al prota... y a cuento de nada te meten el episodio de la hermana, y luego en el secuestro te meten algo forzado todo el pasado de la familia. Raro, raro XD.
ResponderEliminarØvn¥, y falta el corolario del gran George Constaza en ese video (hablo de memoria):
George: Hasta los 40 siempre gana el pene.
Jerry: ¿Y después ya gana el cerebro?
George: No, pero si la partida dura mucho a veces el pene se retira
juan, todo lo de los zombies... funciona demasiado a voluntad de necesidades del guión, that´s a problem XD
El anime no me ha gustado nada, y eso que me leo el manga regular y religiosamente.
ResponderEliminar@eter "Øvn¥, y falta el corolario del gran George Constaza en ese video (hablo de memoria):
ResponderEliminarGeorge: Hasta los 40 siempre gana el pene.
Jerry: ¿Y después ya gana el cerebro?
George: No, pero si la partida dura mucho a veces el pene se retira"
Jajaja XD
Dios donde estaba esa serie que nunca la he visto, haré un buen uso del internet y me la descargare.
Jesús T. chusetto, el manga tiene muy buena fama... y lo poco que he ojeado esta bien... pero el anime es una cosa rara que intenta usar un estilo demasiado literario
ResponderEliminarØvn¥Seinfeld en los 90 era Dios en EEUU, pero por ejemplo aquí en España fue una serie muy minoritaria.
Pero vamos, a mi particularmente me parece la mejor sitcom que he visto (y de lejos).