Una de mis anécdotas cinéfilas favoritas es aquella de cuando al gran Billy Wilder le comentaron una idea para una comedia de enredo en la cual un hombre tenía una amante y usaba el apartamento de un compañero para intimar -eran los 60- con ella. Aquella era, para aquel hombre, una idea divertidísima que podía dar lugar a una notable comedia de enredo. Wilder sin embargo se quedó fascinado por la otra parte de la historia, la de ese triste hombre que alquilaba su apartamento como picadero y que luego tenía que dormir sobre las sábanas aún calientes. Era una historia mucho más interesante. Nació así esa obra maestra del cine que responde al nombre de "El apartamento". Porque, como dice otro dicho, lo extraordinario está en lo ordinario. ¿Qué merito tiene contar una historia de amor? Lo realmente mágico, no es el primer beso, son los 40 años que le suceden, ahí es donde esta la verdadera proeza de esa relación.
Ookami kodomo me recuerda esa idea. En sus dos anteriores -y portentosas- películas Hosoda Mamoru contaba grandes historias de amor. En "La chica que saltaba a través del tiempo" narraba un romance imposible con tintes de tragedia de ciencia-ficción. En "Summer wars" el universo familiar de Ghibli conocía Matrix en una epopeya romántica de reconciliación familiar. En esta "Ookami kodomo" vemos enamorarse a una chica y un hombre lobo... argumento que bastaría para levantar una grandísima película. Y entonces el hombre-lobo muere en un trágico accidente y la joven se ve obligada a cuidar ella sola a los dos niños-cachorro de la pareja. Y ahí encontramos la verdadera epopeya, el como una joven ha de dejarlo absolutamente todo atrás y emprender una nueva vida por sus hijos teniéndolo que aprender todo sobre la marcha.
Durante las dos horas de duración de la película atravesamos tres claros segmentos. Uno primero romántico donde la protagonista y su pareja se enamoran. Uno segundo, más de comedia costumbrista, donde la pobre viuda ha de cuidar a sus dos vástagos con los problemas de los niños y los cachorros, y uno tercero donde el drama lo ocupa todo y los niños han de enfrentarse al problema de aceptar su verdadera naturaleza.
La película tiene muchísimos menos personajes que la desbordante Summer Wars, pero me parece mucho más ambiciosa su narración a lo largo de unos quince años y el desarrollo completo de tres personajes (dos de los cuales ni siquiera han nacido durante los primeros minutos de la narración). El narrar saltos temporales en cine es algo muy complejo, muy pocas películas sobreviven a ellos. Pero esta lo hace, y a la perfección.
El ritmo de la película es prodigioso, pasando de romance a comedia, y finalmente a drama, de una forma gradual y completamente natural. No hay nada forzado la historia, como tampoco nada chirría en el desarrollo de sus personajes (aunque quizás se trampea un poco con Ame). La película logra hacer reír y divertir, pero igualmente emociona en su clímax y consigue transmitir su mensaje.
Tecnicamente goza de una animación magnífica, suave y fluida, con unos travellings usados a la perfección para las refrescantes carreras que simbolizan la libertad. Recurre sorprendemente poco al simbolismo y se las ingenia también para generar algunos buenos recursos propios (magnífico el plano de crecimiento de los niños mediante el enfoque de sus aulas). En su factura técnica quizás lo único que le achacaría es que en algunas partes la banda sonora me ha parecido algo floja en comparación con el despliegue de animación, guión y dirección.
No es una película recomendable. Es una película obligatoria.
Sinceramente, no se me ocurre como Hosoda Mamoru puede no ya superar esa película, si no mantener el nivel que él mismo se ha autoimpuesto con sus películas. Pero espero desde ya su próximo trabajo, ya mantenga sus historias y personajes normales en escenarios con una pizca de magia, ya salte descaradamente a un género que no sea este. Este director, hoy por hoy, me parece el más interesante de toda la animación nipona, y de esta última frase se puede quitar sin problemas el atributo "nipona"... y quizás también "de toda la animación".
Pues... si es obligatoria, es obligatoria! A verla se ha dicho!
ResponderEliminarMuchas ganas de verla. Las dos anteriores me gustaron bastante, especialmente La Chica... que me encantó. Y esta tengo unas ganas terribles de verla, porque veo además que todas las críticas apuntan a la misma dirección.
ResponderEliminarDesde luego y para mi, junto con Shinkai, de lo más a tener en cuenta del panorama de animación.
Madre mía, ¡ni me había enterado de que había hecho otra película! Bajando ya. La chica... está en mi olimpo de películas animadas, y Summer Wars, qué curioso, no me gustó nada la primera vez pero un revisionado hace unos meses me hizo más o menos cambiar de opinión, aunque considero a la otra superior. Raro es que esta no me guste.
ResponderEliminarMe extraña que digan en dos comentarios que les gustó más "La chica que saltaba a través del tiempo" a "Summer Wars"... "Wolf Children" es otra delicia de Hosoda, sin duda uno de los realizadores actuales más interesantes del panorama animado.
ResponderEliminar¿Con qué nos volverá a sorprender en su próximo trabajo?
erGuiri, ya contaras tus impresiones... pero creo que pocas cosas mejores puedes encontrar en este mundillo ahora mismo.
ResponderEliminarRaistlin, para mi Shikai tiende demasiado al preciosismo visual, le veo más interesado en el como que en el que.
Kururin, creo que la Chica hace un poco de daño a Summer wars a la hora de verla... Summer es de un optimismo y una felicidad que chocan algo de primeras.
Neovallense, sus películas son muy parecidas... pero al mismo tiempo bastante distintas. No se ha repetido nada en estos últimos años (aunque al parecer Summer Wars es clavada a su primera película de Digimon). Tengo muchas ganas de ver lo siguiente con lo que se ponga.
Magrat Ajostiernos, si, pero ese final agridulce es una gran virtud... cuando Hana sale a buscar a Ame te crees que de verdad puede llegar a pasar lo peor.
gracvias por recomendarla , esta pelicula junto con sacamichi no apollo esta entre mis favoritas.
ResponderEliminarpara eso están los blogs :)
ResponderEliminarpara popularizar cosas no demasiado mainstream o publicitadas :)
La acabo de ver, en un impensable giro uno de los canales se señal abierta en mi pais ( Venezuela ) decidio trasmitir anime de calidad los sabados y domigos a las 2 de la tarde, los sabados series y los domingos una pelicula y este le toca a esta magnifica peli.
ResponderEliminarMelancolica, triste, con unas buenas risas, si bien a las primeras de cambio me costo entender como el novio-esposo-papa-lobo muere tan rapido y de forma tan desafortunada, despues entiendo que ese es realmente el gatillo de lo que viene.
El paso del tiempo mostrando los numeros de las aulas fue un puntazo, gran detalle, y como con el pasar de los años, las personalidades de los niños van cambiando, cierto lo de Ame fue como muy precipitado es que no nos muestran donde comenzo, mientras que con yuki es la relacion con sus amigas la que genera un cambio en ella.
Por suerte */*Spoiler Alert- no mataron a la pobre mama en el bosque es que me esperaba lo peor */* ... con lo que les encanta hacer sufrir a estos nipones a nuestros pobres corazones.
Hermosa pelicula y no sabia que era del mismo hombre que hizo la chica que salta en el tiempo y summer wars, de verdad que el tipo es un crack... hay que esperar su proximo trabajo si o si.
nos leemos Eter.
primero... tenéis suerte con la tele, aquí eso que me comentas se me antoja tristemente imposible.
ResponderEliminarEl marido tiene morir, es triste y demás, pero claramente la historia que le interesa al director es la de la madre con los hijos, que es una historia hermosa y desgarradora al mismo tiempo... que por suerte acaba medio bien, porque hay un par de momentos que te esperas casi lo peor.
Los niños están bien, aunque quizas este algo acelerada en un par de momentos.
El plano de las aulas para ejemplificar el paso del tiempo aún hoy lo recuerdo, sencillamente prodigioso.