La única limitación es la imaginación

Una comedia harem echii sobre vigilantes de trenes (ver reseña)

Shaf ya renunciando a toda lógica (ver reseña) 

Matrix con flags (ver reseña)

Un club de juegos sin respeto por la palabra contención (ver reseña)

Una recreación de la historia que hace parecer seria a Sengoku Basara (ver reseña)

El mundo de las elecciones (ver reseña)

Un tio que se muere y resucita como el perro de su escritora favorita (ver reseña)

Uno piensa que lo ha visto todo en el mundillo del anime, que ya nada puede sorprenderle. Y entonces la realidad le recuerda que siempre se puede ir más allá...

No hay tontería que un japones no pueda imaginar, y ya si nos ponemos a pensar en fetiches, el pensar en límites es simplemente insultante.

Ore wa twintail ni narimasu

El prota es un tio obsesionado por las coletas que al fin cumple su sueño ¡ir al instituto que más alumnas con coletas tiene por metro cuadrado! Pero la vida es muy cabrona y entonces una horda de alienígenas dignos del sentai más cutre aparece, y estos alienígenas roban el "atributo de coletas" de las chicas, haciendo que todas dejen de llevar tal peinado. Por suerte para el prota, otra alienígena transdimensional aparecerá para darle un brazalete que le transformara en tía y, junto con otro par de guerreras, podrán hacer frente a la amenaza anticoletil.

El parráfo anterior es una sarta de gilipolleces dificilmente cuantificable... pero es sólo el primer episodio, después aparecerá la madre del prota con una obsesión por que cualquier tía se tire a su hijo (y de la cual era su sueño y el de su marido engendrar a un superheroe), descubriremos que una de las guerreras se hace más fuerte conforme se despelota porque así se libera de su inhibiciones y muestra su verdadero ser (y que resulta ser la heredera de un clan de millonarios cuyas matriarcas se miden por las coletas), la villana principal resultará ser una alienígena fan de la alienígena que da los poderes que se ha pasado al lado oscuro  (y que tiene un fetiche por las gafas que intentará propagar como idol), descubriremos que los villanos tienen una sociedad jerarquica (y que uno de ellos es una lombriz con tutú)... Todo ello mientras vemos una parodía de comedía romántica con una alienígena en celo y una amiga de la infancia plana... y el prota ha de encontrar su verdadero ser y la auténtica fuerza de las coletas ante el terrible dilema de comenzar a ser infiel a su amor por las coletas con otros fetiches.. 

La serie es una soberana chorrada, no creo que eso nadie lo dude ni por un instante. Pero la serie tampoco lo duda y es, durante todo su tiempo, una parodia de las comedias románticas fetichistas y de las series de superhéroes. No es una buena parodia, eso es muy complicado. La serie es, como he dicho antes, un cúmulo de tonterías. Se dedica a meter una tras otra todas las chorradas que se le ocurren amoldándolas a la tontería de las coletas como puede. Es una serie que ataca por cantidad, no por calidad. La serie tiene su gracia en sentido más fácil y triste, porque básicamente es tal sucesión de tonterías que uno la ve para ver que idiotez se inventarán a continuación y como la insertarán en el gigantesco montón de despropósitos argumentales que la han precedido.

¿Recomendable? Ni de coña para la gente normal. Es una serie que para colmo tiene unos valores de producción bastante bajos y que técnicamente tiene lo justo y poco más. Para la gente a la que le gusten las películas premeditadamente cutres y malas rollo Asylum... para esa gente es todo un imprescindible.