Tras una excelente primera temporada (ver reseña), esta serie de voleibol regresó haciendo gala de todas sus virtudes y, añadiendo algunas más de camino. La animación sigue siendo muy buena, con algunos momentos escandalosamente espectaculares. La comedia sigue estando presente en casi todo momento y ayuda a que tomemos más cariño a los personajes ya conocidos y a los nuevos. El ritmo es todavía mejor que en la primera temporada; verdaderamente no hay emoción más allá del partido final, pero la serie consigue que los entrenamientos y los enfrentamientos contra equipos menores sean interesantes por el crecimiento de los personajes. Es una serie que sobrevive a si misma, ya no tiene el factor sorpresa y no puede vivir de presentar personajes o normas de voleibol, y el manga -y por extensión este anime- tiene que conseguir que su historia y su desarrollo enganchen semana tras semana y no caigan en la monotonía o el aburrimiento. Y lo consigue.
Ahora bien, antes he dicho que la serie no podía vivir de presentar personajes, y lo cierto es que alguno nuevo se suma al reparto, lo cual es lógico porque la serie comienza a preparar el escenario "nacional" para que los enemigos que allí aparezcan no parezcan salir mágicamente de la nada. En ese sentido es modélica la saga de campamento, que sirve para los diversos protas más o menos crezcan como jugadores, y lo hacen amparados por jugadores rivales que después serán enemigos, pero que asumen aquí un rol de "maestros" que les hace ganar mucho carisma. Algunos de estos personajes son nuevos y otros son repescados de la primera temporada y potenciados (esta serie maneja muy bien la sensación de que todos, y no únicamente los protagonistas, están continuamente mejorando). Tenemos también al entrenador antiguo del equipo y algún que otro nuevo aficionado o miembro del pasado del equipo -o de los personajes- para ampliar la sensación de que este equipo esta apoyado por años de historia, y tenemos a una nueva manager adorable que refuerza la comedia de la serie de una forma increíble y ayuda a darle un toque distendido y divertido sin tener que recurrir siempre a la estupidez de los principales protagonistas.
Un gran acierto de la serie es que no pretende conseguir épica constantemente. Hay grandes partidos y, debido a la naturaleza del deporte y lo dinámico de su marcador, hay momentos para el lucimiento de muchos personajes y pequeñas grandes escenas... pero en general los equipos no se están jugando la vida, sólo hay simple y llana deportividad. Y los protagonistas son buenos, no son los mejores, pero si son buenos, y en este sentido la serie intenta darle emoción a los partidos preliminares con algunos detalles técnicos de los rivales o alguna baja entre los protagonistas. Quizás recurran un poco demasiado al tópico de contar con un flashback un drama cutrecillo que refuerce a los rivales, pero en general la serie no crea una tensión artificial e incluso estos partidos -cuyo resultado es más que previsible, como todos, porque sabemos que el equipo ya no va a perder- son muy disfrutables.
Tan entretenida o más que su predecesora, es una serie muy divertida a cuyos personajes se les coge mucho cariño y cuyos partidos resultan muy emocionantes, consiguiendo además que veamos claramente como los personajes mejoran como jugadores y se van superando.
Confirmada ya una tercera parte para animar la final contra Shiratorizawa, uno no puede si no esperarla... y luego esperar también a que veamos una cuarta ya con los nacionales.
Pensé que demorarían más en anunciar la tercera, vaya momento escogieron para terminar esta.
ResponderEliminarA mi me ha encantado, los nuevos personajes están bien, me ha gustado que hayan profundizado algo más en tsukishima (Best Character xDD) La manager nueva funciona y aún no han recurrido al recurso del romance cutre, aunque supongo que será tentador.
Sobre los partidos, opino lo mismo que tu, se enfocaron en que el primer partido fuese el importante, el opening te lo decía en la cara de todas formas (gran opening por cierto) Ganas hay del partido con Shiratorizawa, la tentación de agarrar el manga es grande.
PD: Sigues el manga de HXH? o no quisiste hacerte más daño y solo te quedaste con el anime? xD
Que dure mucho este anime, es un divertimento fantástico, bien realizado y con carisma.
ResponderEliminarEl manga es una delicia aun ateniéndose a las convenciones. Gana sin arriesgar, que en un género con tendencia a la desmesura ya es mucho. La serie caerá en un tiempo pero ganas no faltan.
ResponderEliminarDarkking91, el problema es que Shiratorizawa es tan imponenten que si haces otra temporada de 24 episodios la segunda docena se quedarían muy flojos en comparación con la primera. Eso sí, a saber que hacen con la serie en el futuro porque luego les va a faltar material para una hipotética cuarta temporada durante bastante tiempo.
ResponderEliminarTsukishima mola, y se lo suficiente del manga como para esperar un auténtico festival por su parte en la final.
Yachi es adorable y, sí, es un acierto que no haya romance... pero la serie en general funciona muy bien en ese sentido, no cayendo en los tópicos más mánidos, sin ir más lejos la relación Hinata-Kageyama es muy fresca, haciendo que el gran rival sea también un ceporro en un lugar del clásico genio.
El manga de Hunter no lo sigo de momento, me esperare a que avance bastante... que a fin de cuentas el anime ya lo cerraba muy bien y bastante sufrimiento tengo con seguir Berserk XD.
Yer_Wells, yo diría que manga hasta el 300-350, un spokon más largo se me antoja excesivo... y eso que este tiene muy buenos mimbres con los personajes.
Kururin, el dibujo del manga es algo... particular, el del anime es mucho más tradicional -y está soberbiamente animado-, supongo que para algunos puede significar una perdida de carisma e identidad, pero a mi me gusta más el aspecto del anime.