La adaptación ha llegado

Esperado me he a su salida en DVD y su visionado en una pertinente marathon para reseñar la primera temporada de la que es, la adaptación cinematográfica que más he esperado en mi vida desde que Jackson cerrara hace casi una década la trilogía de los anillos. Tan titánica como la tarea de llevar al cine la Tierra Media me parecía dotar de vida a Westeros... pero ante la hazaña de HBO no queda otra alternativa que quitarse el sombrero.

Nuestra es la historia

Naturalmente el primer problema al que se enfrentaban los productores de la serie, aún contando con el apoyo y la colaboración completa de George RR Martin, era adaptar el libro. "Juego de tronos" no es demasiado largo, sólo 700 páginas lo convierten en el libro más corto de la franquicia. Pero si bien no es largo, es increiblemente denso. Tenemos varias líneas argumentales, todo un mundo terriblemente complejo que se nos presenta y una infinidad de personajes que ejercen de narradores y dan un enfoque completamente distinto unos de otros. Además Martin es tramposillo y algunas cosas las narra en segundo plano, amén de que en ocasiones los narradores no son los protagonistas directos de sus frentes narrativos (con es el caso de Catelyn o, en menor medida, Sansa).
La opción elegida por el equipo de la serie ha sido simplificar y escalonar la historia. Se reduce drasticamente el nombre de casas, dinastias, abanderados, linajes, guardias y demás. En la novela original se nos indicaba el nombre de todos los personajes y el de la mitad de sus familias... todo esto se ha perdido. No lo considero una gran perdida, al menos no para esta primera temporada. Cuando uno lee la primera novela no se queda con la mitad de esos nombres, e incluso tiene tendencia a simplificar Stark = buenos y Lannister = malos. Uno apenas le presta atención a Pycelle y no recuerda el nombre de los capas blancas más allá de Jaime y con suerte Selmy. Me da miedo de cara a la segunda temporada y las siguientes, pero creo que sinceramente los guionistas no tenían otra opción pues en un libro es muy fácil dejar caer el nombre de las siete hijas de la viuda de un caballero... pero en la serie insertar personajes aparentemente secundarios como Kevan, Theon o Lancel es todo un desafío para los guionistas pues es dificil que un espectador medio se quede con alguién que no sea un lobo, un leon o un dragón (e incluso dentro de ellos personajes como Rickon, Myrcella o Thomen parecen casi figurantes).

¿Sabéis como me van a llamar en la tercera temporada?

Hay algunos cambios de frases, y personajes como el Perro si bien tienen presencia no dejan de estar meramente presentados de cara a la segunda temporada para no hostigar demasiado al sufrido espectador. Se han insertado algunas escenas para humanizar a los personajes y revelar hechos que en el libro eran presentados mediante los pensamientos de los personajes, pero son diálogos muy bien escritos y sostenidos además por unos excelentes actores... por curioso que sea escenas originales de esta adaptación como los diálogos entre Varys y Meñique o la conversación entre Cersei y Robert son de lo mejor de la serie. Más discutible es lo que han hecho con Renly y Loras... pero nunca he sido un gran aficionado a esta parejilla, así tampoco es algo que me duela especialmente.

Oye mi casting

El guión es muy bueno, y además está al servicio de unos grandes actores. Curiosamente Sean Bean, el cabeza de cartel, no me parece lo más destacado. Sean Bean es un pedazo de actor y da gusto verlo en un papel para su pleno lucimiento... pero el suyo es un rol quizás demasiado plano y se queda eclipsado por otros actores. Algo parecido me sucede con Cersei, cuyo personaje esta algo suavizado, o con el mismo Jon, que es demasiado plano. Incluso diría que Tyrion no me parece lo mejor... porque el actor hace un gran papel... pero es que sencillamente Tyrion es semejante regalo para un actor que creo que incluso Shaquille O´neall sería convincente como tal una vez comenzara a recitar sus líneas. Algo parecido sucede con Meñique y con Varys, cuyos actores tienen que actuar con toda la contención que pueden para disimular lo mucho que disfrutan interpretando a semejante par de conspiradores. De la fiesta de Mark Addy como Robert ya ni hace falta hablar.

¿Es cierto eso de que tu padre caga oro?

Diría que el actor que más me ha gustado es Nikolai Coster-Waldau, Jaime es demasiado villano en las primeras novelas de la serie y su conversión en narrador en "Tormenta de espadas" cambia muchas de las ideas que teníamos sobre la historia, pero aquí el actor consigue que su Jaime -que en tiene una escena brutal al final del primer capítulo- tenga un carisma avasallador. Es uno de los roles que más temía, y el actor me parece que sencillamente lo borda. Al igual que en el caso de Jaime, los actores que interpretan a Robb y Theon me han parecido muy convincentes.
Arya es adorable hasta decir basta, Dany es una cabra loca entrañable, Jorah es confiable, Sam es la defición de torpeza entrañable, Syrio Forel y Barristan aparecen en el diccionario junto a la palabra carisma, Tywin domina la pantalla como su personaje ha de hacerlo, y Sansa y Catelyn... bueno, pues están, no se puede decir que no estén.
Y no puedo evitar no mencionar a Joffrey y Viserys, que sencillamente son odiables desde el primer momento, y su parte de merito tienen los actores, que ya son aborrecibles antes de verles siquiera hablar.

Atrezzo y CGI

Westeros esta bien reproducido. No diré que son los siete reinos de mi imaginación... pero creo que posiblemente serán de los mejores que estan dentro del presupuesto de una superproducción televisiva.
Los exteriores son perfectos. Las praderas de Invernalia son majestuosas, los bosques helados del muro son oscuros y opresores, el mar de hierba de los khal es... eso, un mar de hierba. Uno tiene la sensación de estar transportado a Westeros.

Todos los hombres mueren... pero hoy no

En los interiores ya no todo es tan perfecto y me parece que, irónicamente, sólo Nido de las Águilas esta a la altura de su versión literaria (quizás por ser el más fantástico de todos). Desembarco del Rey, Invernalia y el Castillo Negro se notan trabajados... pero se nota también que son muy pequeños y que hay un par de trampas para que parezcan mayores. Se añaden torres digitales para aumentar el tamaño de las fortalezas, como se añaden soldados o carpas para aumentar el tamaño de los campamentos.
En la serie se han gastado mucho dinero... pero claro, el poder de la imaginación de Martin y sus lectores puede incluso superar al del cine. La batalla es una trampa gigantesca porque no hay dinero para ella (además hay que mencionar que los duelos a espadas no terminan de transmitir la emoción que se les supone), como la horda de Drogo en ningún momento parece tener más de unos pocos cientos de jinetes. No se puede hacer nada. Los Wargos de los Stark son unos husky entrenados lo mejor posible, pero en ningún momento transmiten la sensación de magia que Fantasma, Viento Gris, Verano o Nymeria desprenden en los libros. Supongo que en las siguientes temporadas se uniran a Viseryon, Drogon y Rhaegon en el trabajo de los especialistas en CGI, pero de momento se ha tirado de artesanía.
Y se ha abusado de artesanía, y eso me parece un acierto, todos los trajes, armas y armaduras se sienten reales, y cada uno de ellos parece no ya de una casa sino de una persona distinta, el trabajo de atrezzo y la dirección artística en general de la serie es sencillamente perfecto.
Tecnicamente, al margen de los Wargos, la batalla y algún que otro truco narrativo, la única pega que le vería seria el score, que me parece bastante pobre dejando al margen el tema principal y los sobervios créditos iniciales.

Los reyes chocaran...

La historia esta simplificada pero es tan genial como siempre lo ha sido, el ritmo es bastante elevado y en cada capítulo los diversos frentes de la historia suelen avanzar y finalizar en un giro de guión sorprendente que te atrapa y obliga a ver el siguiente capítulo. Tecnicamente es un producto sobresaliente. Las interpretaciones, magníficas.
No recomiendo ver esta serie, recomiendo antes leer los libros y después disfrutar del magnífico homenaje que estos son.