Ha finalizado la longeva obra de Fujishima. Poco puedo añadir a lo que comenté hace unos meses cuando el manga alcanzó su capítulo 300 (ver reseña). La serie encaraba desde hace unos años su final, cuando un arco claramente shonnen se convirtió en una reescritura y una culminación de la premisa inicial con una declaración sincera de amor y compromiso por parte de los dos protagonistas con unos inmejorables testigos de por medio. Aparecieron los personajes que aún quedaban pendientes de aparecer, el dibujo siguió siendo de escándalo, el humor siguió presente, el carisma de los secundarios lució y el autor intentó también una salida medio simbólica con todo lo de la dama del lago (parte que a mi no me gustó especialmente, pero cuya valentía e intención no se puede negar).
Su autor ya ha anunciado que el siguiente mes volverá con una serie de tipo "mansión ikkoku" que comenzó algunos años y que tenía en stand-by. No deja de ser algo muy parecido a lo que era esta serie, con una pareja protagonista muy clara y un puñado de secundarios liándola a su costa. Es un estilo inocuo y algo anacrónico que el autor controla, y que no deja de resultar arriesgado sin el colchón que da una franquicia asentada durante muchos años pero supongo que Fujishima estaba ya hastiado de Belldandy y cía y temía quemar una serie que daba síntomas claros de agotamiento.
"¡Oh, mi diosa!" ha acabado, puede gustar más o menos su final, pero creo que es bastante digno y, sobre todo, es un final... algo que se hace muy difícil de ver en mangas como este. Porque yo puedo ser un poco más viejo, pero desde que me adentré en el mundillo "¡Oh, mi diosa!" estaba allí. Esta era una de esas series que uno conocía en los 90 cuando el boom de los grandes shonnen impulsó el manga en occidente, era una de esas series que apareció junto con clásicos como "3x3", "Gun Smith cats" o "Alita", eran esas series distintas que mostraban que los japoneses pensaban en algo más que en rubios destrozando planetas (ver reseña), un inquietante homoerotismo (ver reseña), el desconocimiento total de los deportes (ver reseña) o el erotismo cómico inocentón (ver reseña). Este manga estaba ahí antes de los coleccionables con "Ninja Scroll" y "Akira" en su primer fascículo y "Ghost in the shell" en el segundo, incluso estuvo ahí con una nueva adaptación de su anime cuando los fansub explotaron en internet.
Su calidad puede ser discutible, y está claro que su puritanismo resulta claramente fuera de lugar en estos días. Pero era una de esas series que uno identificaba con el mundo. Podían llegar épocas de mechas, podían llegar fiebres de moe, el echii podía desatarse algunos años, podía haber Haruhis o Titanes... pero al margen de las modas esta era una de esas series que siempre quedaba.
Ahora ha acabado.
La serie merecía un descanso y ha tenido un final digno, pero tras 25 años de presencia constante de las diosas... no va a dejar de ser curioso acostumbrarse a la idea de que esta serie ha finalizado. Echaré de menos a Keiichi, Belldandy, Urd, Skull, Peorth y Hild.
No se si es una serie que recomendaría a todo el mundo, pero creo que es justo catalogarla como "imprescindible" del manga. Es historia misma del medio.
Flipante! 25 años! Eso es una eternidad! Y es como dices, siempre ha estado ahí, desde que yo recuerde!
ResponderEliminarYo llegué a ver las dos series "modernas" y me encantaban. Eran simples y divertidas. Nunca vi los OVA anteriores, pero sabía de su existencia, efectivamente, siempre ha estado ahí! Lo increible es que "siguiese" estando ahí.
La verdad es que no sé si echarle huevos y leer 25 años de manga o esperar a que hagan una serie con el final.
No he leído ni un tomo, ni visto nada de sus adaptaciones al anime, pero que una serie dure tantos años es por algo. Es bueno que su autor haya sabido darle un final (espero que Miura tome nota...)
ResponderEliminarSaludos
erGuiri, bueno, son 25 años pero "solo" 48 tomos, y es de esas series que se lee medio rápido.
ResponderEliminarEso sí, simpática y todo eso, pero es de esas series que hay que ver con el hype al mínimo XD
Neovallense, bueno, Berserk en verdad lleva la mitad XD. Esta serie tiene casi los mismos capítulos que Berserk siendo mensual, mientras que la de Miura es quincenal... debería ir ya por el 500 o por ahí... pero a estas alturas yo creo que la mayoría de sus seguidores somos bastante pesimistas con respecto a ella.
He leído muchos capítulos sueltos. Entretener, entretiene, desde luego. Es un punto y aparte en la historia del harem, anda que no hay series que la han plagiado vilmente. Ha aguantado tanto por la fidelidad de su público, treintañero en su mayoría, poca cannnne enseña pa los prepúberes. Eso sí, qué cansino el tío con las motos y las carreras.
ResponderEliminarGunsmith Cats y Gunnm, cremita de la güena, y lo de los VHS...daría para un post aparte. Aaaah qué tiempos, el Chojin...
Otra obra que se suma a la colección de "Terminó y no tienes más escusas para no leerla".
ResponderEliminarBueno, al menos estoy avisado que mis expectativas tienen que ser bajas y es comedia, así que una lectura gradual de un tomo cada tanto creo que sería lo ideal.
Kururin, la ausencia de fanservice es tan rara que hace un par de años al leer un capítulo donde la cámara siempre buscaba el plano más erótico de Hild me costó creer que no era un doujin que alguién había colado.
ResponderEliminarJhon Kei, bueno, es simpática y muy representativa de una época... pero no te vayas esperando nada que te vaya a marcar.
Nunca he sido fan de esta vaina, y de hecho solo ví de este título unos ovas, pero esa línea... quedarse con la diosa para siempre? brrrrrrrrrrrrr!! asco me da ese "para siempre" que tanto rezan jaja.
ResponderEliminarSkuld me gustaba mucho... hasta que el ecchi actual me corrompió.
hombre, es una serie que nació en los 80, eran unos años más puros e inocentones... si no el echii de esta serie sería brutal con el dibujo que se gasta el autor XD
ResponderEliminar