sábado, abril 18, 2015

Moore, Roger Moore

Continuo con mi ciclo de películas de Bond, y llega el momento de analizar las películas interpretadas por Moore, el actor que oficialmente más veces ha sido 007 y el que, tengo que decir, me ha encantado. Las películas de Connery eran malas, y las de Moore no lo son menos, pero son conscientes de ello y pronto se convierten en una sucesión de locuras exageradas que convierten al personaje de Bond en una parodia terriblemente divertida, carismática y sumamente fácil de ver. Moore es, sencillamente, mi Bond favorito.

Vive y deja morir

Es triste, pero quizás lo más memorable de esta película sea su tema musical por Paul y Linda McCartney y la versión que un par de décadas después hicieron Guns and roses. Sin embargo esto no es necesariamente malo, a estas alturas uno ya se ha dado cuenta de que las películas de Bond son un género en sí, y un genero bastante malillo dicho sea de paso.
Moore funciona como Bond. Tiene planta y presencia, y le queda bastante bien el smoquin. El suyo parece un Bond más refinado y elegante que el de Connery, pero cuando se tiene liar a puñetazos se lía sin problema. 
La película sigue el esquema habitual de las películas de Bond, encontrando en esta ocasión en una carrera de lanchas la secuencia de acción a la que lo apuesta todo. Sin embargo, aún teniendo un villano con un plan relativamente plausible y no estando el destino del mundo en juego, el desarrollo acaba siendo alocado y surreal por momentos con en cualquier película de Bond anterior. Ahora bien, si bien la de las lanchas es la gran escena de acción, la idea exótica de esta película es otra: los negros.
Suena racista (aunque quizás sea todo lo contrario si tenemos en cuenta el año en el que apareció la película), pero lo cierto es que el 90% del casting es de color, y resulta cuanto menos curioso en una serie tan "blanca" como esta. Y naturalmente los negros, como cualquier otra etnia, no salen ganando. Porque si bien las películas de Bond son un tópico con patas, esta lo es por partida doble, porque a los tópicos de Bond les añade todos los tópicos de los afroamericandos de los 70, todos ellos parecen camellos o proxonetas que visten horteras y coloridas ropas y llevan afro. Y para rematar la galería de despropositos, en esta ocasión el paisaje a visitar es Nueva Orleans y el Caribe, apareciendo el vudú con la ligereza esperable en una película de nuestro agente al servicio de su majestad favorito.

El hombre de la pistola de oro

Sorprendentemente buena. Buena, dentro de lo buena que puede ser una película de Bond, pero buena. La trama de la película es relativamente simple; tenemos una trama sobre el control de la energía solar, pero por encima de todo tenemos un juego de cazadores y presas en el que Bond se enfrenta al mejor asesino del mundo.
Tenemos a Christopher Lee como villano, con su presencia y su carisma para llenar la pantalla. Pero por encima de todo tenemos... contención. La trama tiene su vertiente de megavillano, pero esto apenas se explota pues el personaje de Lee apenas tiene interés en ello. Y lo psicodélico viene dado quizás por un extraño circo donde Bond y su enemigo se enfrentan... pero nada más.
La película apenas tiene puntos débiles más allá de un enano cargante que no llega a ser el secuaz que los productores habrían querido, un tal "JW" que no se a cuento de que la serie recupera del film anterior y una Good Nigth que parece idiota hasta para los baremos de las chicas Bond. Pero por lo demás... buenas peleas y buenas persecuciones, y ningunas absurdamente eternas. Hay giros de guión y sorpresas bastante efectivas para lo que es la franquicia. En paisajes tenemos el exotismo de Hon Kong y las famosas islas de Thailandia. Moore se encuentra más cómodo como Bond, y la confianza dota a su personaje de una socarronería que ya raya la autoparodia.

La espía que me amó

Y con esta película, Moore supera a Connery. Una buena película, y una buena película siendo además una de Bond en el sentido más clásico de la palabra: con un megavillano con un plan tan absurdo como acabar con todo el mundo para construir un nuevo mundo en el fondo del mal.
Lo curioso de esta película es que, teniendo todo lo que hace entrañablemente ridículas a las películas de Bond, consigue funcionar y desarrollar su trama y su historia con bastante consistencia. Las secuencias de acción tienen sus flipadeces, y los gadgets están a la orden del día con el nuevo coche de Bond, pero todo ello es más comedido y no se eterniza (ni siquiera la clásica batalla de ejércitos de masillas). Y si bien el villano no es demasiado carismático, Jaws es un esbirro memorable con una presencia brutal y algunas secuencias ridículamente épicas con sus mandíbulas y la absurda obsesión por solventarlo todo con estas. Y luego tenemos Triple X, de lejos la mejor chica Bond que he visto al ser una versión femenina del agente y no un espectacular florero al servicio de la misoginia de la franquicia.
Y por último, una mención especial para Moore, que ya se ha hecho por completo con el papel y lo ha convertido en una parodía, nunca vacilando, dando mamporros como casas, siempre con el chiste fácil en la punta de la lengua y con un desprecio a las mujeres patológico.

Moonraker

Y llegó la locura. Las películas previas de Moore habían sido algo serias, y lo habían sido con un protagonista que cada vez era más paródico. El formato había funcionado extraordinariamente bien, pero también creo que era muy difícil realizar películas que aunaran algo parecido a un desarrollo serio de la trama con esa explosión de carisma paródico que era el Bond de Moore. Así pues productores y guionistas parecieron estar de acuerdo en saltar definitivamente al terreno de la comedia y hacer el Bond más surreal y disfrutable desde Casino Royale. Y al menos en mi opinión lo consiguen. Moonraker puede ser muchas cosas, pero por encima de todo es entretenida.
Con Star Wars en todo lo suyo, los productores pensaron que después persecuciones sobre y bajo agua, en la nieve, en el aire, en la jungla, en las ciudades, en los desiertos y todas partes... había que llevar a Bond allí donde nunca había llevado. Y así, tenemos a Bond en el espacio. Y si ya en tierra hay poco respeto por la física (la secuencia de la persecución de Venecia es antológica, con una surreal toma de una paloma y todo), pues que decir en el espacio, donde los productores incluso se las ingenian para montar la clásica guerra de masillas, esta vez con rayos láser.
La chica Bond vuelve a ser un florero, el malo naturalmente quiere destruir el mundo, y de esbirro recuperamos a Jaws, ahora reconvertido casi a bueno por su gran popularidad.
El argumento, sobra decirlo, es una chorrada. Una mera excusa para llevar a Bond por medio planeta y al final sacarlo de él mientras desfilan por pantalla una interminable sucesión de tías buenas y cada dos por tres tenemos a Bond en alguna persecución o en alguna pelea... a cada cual más rebuscada y surreal.
Pero lo dicho, es todo tan alocado y tan surreal que es tremendamente divertido. Roger Moore, definitivamente, es un gran Bond.

Sólo para sus ojos

Película de corte más "intimista", en el sentido de que no hay un megavillano que quiera destruir el mundo, si no simplemente un poco de guerra fría con rusos intentando robar un secreto militar británico. Es una película de corte más pequeño, con un espionaje sencillo sin grandes misterios y más cercano al cine de aventuras.
Ahora bien, es una película curiosa, por una parte Moore sigue siendo muy paródico, siempre con una sonrisa en la boca, como si toda la misión fuera una continua fiesta. Pero por otra parte, además de ser menos catastrofista, es una película con una violencia sorprendentemente explícita y directa en algunas escenas, así como también resulta raro las pocas mujeres con las que Bond se acuesta y que luego la película flirteé con un tema tan tabú como el de las niñas precoces.
Ahora bien, creo que si por algo se caracteriza esta película, es por su persecuciones. Cada dos por tres hay persecuciones, y habiendo llevado la serie las carreras a todas las superficies posibles, ahora opta por carreras en varias etapas, en ciudades, y con piruetas imposibles. Y ahí que decir que las carreras son variadas y muy entretenidas, y relativamente realistas, con un trabajo de los especialistas sencillamente espectacular. Algo así también podría decirse de las peleas, con elementos muy variados y extraños.
Es curioso, porque la película comienza recordando a la mujer de Bond (y después con una surreal y prescindible escena de venganza con el nº1 de Spectra que no venía a cuento de nada), y después, con la motivación de la chica, uno piensa que la película ira sobre la venganza y lo absurdo de ella... pero la película pronto se olvida de cualquier aspiración de este tipo y se limita a ser una película... de Bond.
Rebaja un poco el nivel de locura de las últimas películas, pero sólo por tener unos villanos de perfil más bajo, la saga hace tiempo que abandonó cualquier intento de seriedad y vive en la coña constante del inmenso carisma de Moore.

Octopussy

Desde el principio Bond siempre ha sido una saga muy turística; con Connery la cosa llegó al extremo con su viaje a Japón... pero Moore no se quiso quedar atrás y tras su viaje a la América "negra", llegó después el momento de "Bond en la India"... donde tenemos al agente secreto valiéndose de todos los tópicos más clásicos de faquires, tigres, elefantes, militares cazadores, mujeres exóticas y comida asquerosa. Pero por supuesto recorre estos tópicos con el estilo Moore, es decir, con una sucesión de absurdeces exageradas ante las que Bond siempre sonríe.
La película es algo extraña, y casí diría que parecen dos películas en una. Por una parte tenemos una trama relativamente seria, quizás la que más seriamente trata la Guerra Fría dentro de la serie. Pero por otra tenemos una sucesión de secuencias surreales con Bond en una isla repleta de mujeres, y luego un Bond convertido en payaso. Es una película que parece ser seria, pero en la que cada X minutos explota todo el potencial de autoparodia del carismático Bond de Moore.
En esta película se nota que definitivamente Bond ha entrado en los ochenta. A la trama más seria se le une un tratamiento de la acción bastante más directo y explícito de lo habitual en la serie, con secuencias de tiroteos directos que nunca habían sido demasiado habituales en la saga que se suman a las ya clásicas persecuciones sobre las que consiguen seguir innovando. Eso si, en contra hay que decir que Moore se nota ya muy viejo en esta entrega, en las secuencias de romance consigue mantener el tipo gracias al maquillaje, su carisma y una acertada elección de chicas Bond "maduras"... pero en las secuencias de acción se notan demasiado los dobles.

Panorama para matar

Última película de un ya demasiado viejo Moore como Bond. En esta película continúa el viaje de Bond hacia nuestros días, ahora la saga ya no tiene miedo en unir a rusos, nazis y psicópatas... no es que cambie mucho la cosa, pero la serie ya no se limita a villanos millonarios megalómanos... y aunque el de esta película en verdad encaje en esa descripción, al menos se preocupa de darle un poco de trasfondo. Y así mismo la trama, obviando el plan absurdo -digno del peor Lex Luthor- del villano para acabar con Silicon Valley, se muestra más actualizada, con la informática ya como un elemento crucial de la sociedad actual y sus amenazas.
Las escenas de acción suben un nivel, siendo ya directamente imposibles y buscando siempre rizar el rizo, especialmente en las persecuciones. Mayday mola, y Christopher Walken siempre esta bien en cualquier película en la que le toque hacer de loco... pero en su recta final la película pierde algo el rumbo con una persecución surreal por San Francisco en un camión de bomberos, un villano demasiado maligno en la caótica secuencia en la mina y un final extraño y algo anticlimático en el Golden Gate.
Moore consigue mantener el tipo en las escenas de acción gracias a los dobles, pero el actor y el resto del casting original se notan ya demasiado ancianos para sus papeles en algunos primeros planos.
Es una película entretenida, y Moore sigue siendo muy carismático como 007, pero se nota que tanto por edad como por temática el tiempo de su James Bond ya ha pasado.

11 comentarios:

  1. Mi Bond favorito. Estas son las pelis de Bond que yo veía cuando era pequeño.

    Pero Moore tenía otro super poder, tambien era "El Santo". No recuerdo nada de "El Santo" salvo su existencia y su COCHE (Un Jaguar xjs que juraría tenía yo como juguete!) Dicho Santo creo que era famoso internacionalmente, España incluida.

    Y mi juguete favorito.. el Lotus submarino de "The Spy who loved me" (sorry, yo me crié in the U.K. y tengo prohibido repetir los nombres de las pelis en otros idiomas).

    Moonraker me encantaba, también de niño. Eran pelis como tu dices ya de locura, hasta para todos los públicos. Jaws LOL como molaba Jaws y su novia "aria" jajajaja

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  2. Debo hacer una corrección. Moore no conducía un Jaguar en "El Santo" sino un Volvo. Era el otro santo el que conducía un Jaguar. .. bueno.. da igual.. Moore Bond conducía un Lotus Espirit xD (entre otros)

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  3. Anónimo11:42 a. m.

    Bah, me encanta que me digas cuáles son las mejores. No tengo mucho tiempo, así que veo solo un par de películas de cada actor basándome en tus reseñas.

    Y estoy gozándolo bastante, la verdad.

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  4. OtakuLogan10:30 p. m.

    Me da que alguien se ha saltado una peli, ¿no? "Al servicio secreto de su majestad", a mi me trilló ver a Ersnt Stravo siendo interpretado por otro actor sin que se explicara hasta la siguiente película lo de las cirugías faciales. Me pasé la peli pensando que todo era un ejercicio de metalenguaje, Bond no reconocía a Stravo porque era otro actor y Stravo no reconocía a Bond porque era otro actor (no obstante lo había visto en la anterior peli, no entiendo porqué no le reconoce en su primer encuentro si no era por hacer la coña).

    Roger Moore tiene su gracia, de sus películas viene el arquetipo de Bond con villanos de planes absurdos. Pero también es un fin de saga, a partir de él solo puedes resetear o seguir siendo un Bond de coña como Brosnan, que a mi particularmente me hace menos gracia.

    Ahora toca mi James Bond favorito, Timothy Dalton, que hizo justo lo mismo que ha hecho ahora las de Craig, pasar de la parodia a lo totalmente serio, con la diferencia de que las pelis de Timothy Dalton tienen el ritmo de su época (hoy día pueden ser pesadas y obviamente la acción es la que es) y, sobretodo, no tenía un fenómeno fan como el de ahora, capaz de hacer el salto de género sin que el público le de la espalda. Una pena que Timothy se quedara en dos películas, creo que tenía mucho más que ofrecer.

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  5. erGuiri, el Santo me pilla demasiado lejos en el tiempo, soy consciente de la existencia de series como esa y "Los vengadores", pero no llegue a verla en su día (ni después).
    En todo caso, el mejor coche de Bond es... el 2 caballos de la persecución por la Sierra "de Madrid". Toda esa secuencia es una maravilla.

    Anónimo, tambien te digo que, siendo todas tan repetitivas, parte de la gracia es ver las pequeñas variaciones entre unas y otras.

    OtakuLogan, de hecho además de "Al servicio secreto de su majestad" me he saltado de momento "Nunca digas nunca jamás" y la "Casino Royale" de Sellers. Las reseñas de esas tres están escritas en una entrada conjunta sobre Bonds "raros", y supongo que también meteré ahí las de Dalton (no me gusta demasiado esto, pero tampoco me gusta hacer una entrada para sólo 2 películas).
    Moore se nota que al final estaba ya fuera de lugar. Su Bond encaja en los 70, pero en los 80 la gente requería más acción... y aquí no tengo muchas esperanzas en Dalton pues al pobre le toco la saga en decadencia, el estudio en bancarrota y el cine en los tiempos de reinado de Stallone, el Chuache, Willis y cía.

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  6. OtakuLogan12:22 a. m.

    Uh, meter en el mismo saco a "Al servicio secreto de su majestad" y las de Dalton con las dos apócrifas no da la sensación de que sean Bonds raros, sino Bonds malos, aunque reitero que me gustan las de Dalton y me gusta más Dalton como Bond.
    Ya leeré en la próxima reseña, pero para mí la de Sellers es malilla (al no ser de cine no la puedo considerar como realmente es, infecta, porque tiene momentos lamentables, y solo un par de puntos muy buenos) y la vuelta de Connery es simplemente absurda, remakeando su propia peli pero peor porque "Nunca digas nunca jamás", sin ser horrible, me parece que no supera en nada a "Thunderball". ¡¡El traje de Bond "profesor maduro" en "Al servicio..." ya merece más que esas pelis!! A mí me cae bien George Lazenby a pesar de todo (incluyendo ser el peor Bond), xD.

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  7. El tema es que no quiero hacer demasiadas entradas porque se quedarían repetitivas... las de Connery y Moore se agrupaban facilmente, pero las de Dalton me daban ese problema... y de hecho es posible que también junte las de Brossnan y Craig.
    La de Sellers más que mala -que lo es, y un rato- es psicodélica, como si se hubieran fumado todo lo fumable para hacerla.
    Nunca digas nunca jamás es normalita y, como dices, no tiene mucho sentido, pero al menos recortan las interminables secuencias de acción de Thunderball.
    "Al servicio de su majestad" me gustó bastante, de hecho me gusta bastante más que la media de Connery. Lazenby no me parece un mal Bond de por si, pero el hombre no tuvo tiempo para hacer suyo el personaje y vive a la sombra de Connery

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  8. Sin duda, el Bond que más me gustaba de chaval. Moonraker era una flipada y de niño me encantaba, pero más adelante, con un poco más de cabeza, me quedo con "La espía que me amó".

    Quién tuviera el coche sumergible...

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  9. OverMaster5:22 p. m.

    ¿Haras una entrada con rankings eventualmente? Como mejor/peor Bond, mejor/peor villano, mejor/peor trama, mejor/peor Chica Bond, mejores/peores Q y M, mejor/peor secuaz, mejor/mas churrera y chicharresca secuencia de acción, mejor/peor canción...

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  10. Anónimo7:46 p. m.

    Solo he visto las películas de Brosnan y Craig y creo que no todas, pero leyendo estas entradas me dan ganas de por lo menos ver algunas de Connery y Moore.

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  11. dececon, obviando la locura superlativa de Moonrake... La espía que me amó es seguramente la mejor película de Moore... y quizás de la franquicia.

    OverMaster, uff, se me hace imposible semejante comparación, demasiadas categorias y demasiadas películas.
    Eso si, mejor Bond: Moore.
    Mejor villano: Hank Scorpio.
    Mejor trama: Desde Rusia con amor.
    Mejor chica: La espia que me amó.
    Mejor secuaz: Tiburón / Oddjob / Famke Jamsen
    Mejor villano: Supongo que Nº1
    Mejor persecución: El 2cv de Solo para tus ojos y el tanque de Goldeneye.
    Mejor secuencia de acción... no lo sé, las hay bastante buenas
    Mejor canción: Vive y deja morir

    Anónimo, Brosnann es, como ya comentaron en la entrada de Connery, un Moore bajado de vueltas. Si te gustaron sus películas, las de Moore seguramente te divertiran.

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