Las de Alatriste son una de las sagas de novelas más populares en España en las últimas décadas. Además soy murciano, así que tenía algo de curiosidad por conocer este personaje más allá de la película que se estrenó hace ya una década. La idea de un soldado de fortuna venido a menos como guía de un Imperio en el que comenzaba a ponerse el sol no deja de ser terriblemente potente.
Leído el primer libro, si bien creo que los autores se recrean demasiado en lo decadente y la crítica (me parece un defecto porque creo que el narrador juega demasiado con la ventaja de la omnisciencia), y si bien creo que se abusa del "fanservice histórico" con Quevedo y varios grandes de España e incluso alguno del extranjero para colocar a un don Nadie en un escenario sugerente, creo que la novela es relativamente recomendable. Se lee fácil y es una entretenida historia de capa y espada ambientada en un periodo muy interesante.
No obstante, esa ligereza es al mismo tiempo una virtud y un defecto. Desconocía que la novela no sólo estaba firmada por Arturo Pérez-Reverte, si no también por su hija, y que se escribió cuando esta no era todavía adulta. La intención del escritor era componer con su hija una novela para esta, una historia juvenil de aventuras. Es comprensible así el tono ligero y desenfadado, así como la presencia de muchas figuras históricas. Esta historia no tiene la seriedad de una novela adulta ni se rige por las estrictas normas de las aventuras más serias y elaboradas. No lo sabía, y por ello me he encontrado una historia muy sencilla y algo maniquea.
Esperaba algo más serio y elaborado, y por eso no puedo evitar sentirme algo decepcionado, pero es justo decir que la culpa de esta decepción es mía y no del par de plumas que firman la historia... que no hacen si no escribir un relato histórico que me habría encantado leer en mi adolescencia. No ha dejado de parecerme un relato entretenido y disfrutable, y quizás lea algo más de la serie en el futuro, pero esperaba algo con más sustancia.
Son libros muy disfrutables, pero para bien o para mal copia los grandes males de las películas comerciales.
ResponderEliminarAventuras ligeras, trama sencilla (y narración más sencilla aún), hechos metidos con calzador, y lo peor de todo, que a partir del cuarto donde la rubia "novia/amante" del narrador sale porque tiene que salir.
Tengo que leerme la saga de Alatriste algún día. Empecé el primer volumen en mal momento y la dejé muerte de risa. A ver si cae el año que viene.
ResponderEliminarEn atención sobre todo al comentario de Juan Truchado, me niego a ver cómo defecto la sencillez de una historia. Otra cosa es que eso impida elevar a la novela al panteón de las obras literarias más grandes de todos los tiempos, pero para disfrutarla, ¿qué más da? La sencillez puede ser una virtud.
Ten en cuenta que yo si me he leído los 5 o 6 primeros y se de lo que hablo. La sencillez de la historia esta muy bien para el primero, segundo y hasta el tercero... Ha partir de ahí, aburre.
ResponderEliminarLa repetición de esquemas y situaciones se vuelve monótona, y el hecho de que nunca termine de arrancar la gran trama prometida desde el segundo, es rematadamente absurdo.
Al final se notan que muchos de ellos son puro y duro relleno.
juan truchado, uff, no lo de la femme fatal cutre ya se entrevee en esta... me alegró mucho que al final hiciera poco porque tenía muy mala pinta (supongo que además irá a peor conforme crezcan los personajes con escarceos amorosos, bodas y cosas así con la clásica tía que nunca sabes si manipula por completo al tío o también está enamorada en el fondo y blah, blah).
ResponderEliminarBastante decepcionante lo que comentas del relleno y el alargamiento... supongo que verían la gallina de los huevos de oro en la franquicia y querrían mantenerla abierta todo el tiempo posible.
El Tipo de la Brocha, como tu, no tengo nada contra una novela ligera... son muy entretenidas y fáciles de leer por definición... pero suelen ser intrascendentes. No esperaba de Perez-Reverte un "Guerra y paz"... pero el periodo histórico da para escribir algo con un poco más de sustancia, algo más cerca de un "Conde de Montecristo" que de un relato de "el barco de vapor".