Hace algunos años se anunció el "remake-reboot-homenaje-loquesea" de la franquicia Sailor Moon. Tardó en llegar casi tanto como las películas de Evangelion, pero finalmente hace un par de años apareció "Sailor Moon Crystal" (ver reseña). La serie tenía unos diseños más fieles a los originales, y supuestamente adaptaba la historia de una forma más rigurosa ya que andaba por ahí la autora y no estaba dispuesta a que masacraran su obra como hicieron en el mítico anime de los 90. El problema es que a aquella serie le faltaban minutos y yenes, haciendo que la historia fuera siempre muy acelerada y que además fuera poco menos que horrible visualmente.
Era un remake fallido. Una oportunidad perdida. Aún así, la Toei decidió seguir con la serie y producir una tercera parte con una de las sagas más populares -si no la que más- de la franquicia: el arco de las Death Busters. Un arco en el que tenemos a un nuevo grupo de villanas que quieren invocar a un monstruo de otra dimensión y que, en líneas generales, putean mucho a los estudiantes y a la gente en general. Las brujillas estas y ese jefe que responde al épico nombre de "Master Pharaon 90" sacan la maldad de la gente y la transforman en una especie de monstruos horribles, no son lo que se dice buenas personas.
Pero el carisma de esta saga estaba en las nuevas Sailors: Pluton, Urano, Neptuno y la utilisima Saturno (que cuando es invocada se carga el mundo; aceptamos que es pretty... pero "guardian" como que no). La estrella es, por supuesto, Urano, con todo ese trasfondo sobre su sexualidad y la polémica que siempre la ha acompañada (recordemos que en España ella y Neptuno pasaron a ser primas en los 90 como si de Clark Gable y Grace Kelly se tratase). Neptuno y Pluton están por ahí, pero tampoco hacen gran cosa. Saturno tiene una trama muy "emo" y exageradamente dramática que sirve como motor de la serie y para el crecimiento de la serie y de Chibiusa, digamos que cumple, ya que no creo que nadie espere maravillas del guión de esta serie.
La trama es una soberana tontería y el interés está en las sailors y sus relaciones, bastante bien desarrolladas en su primera mitad, con tiempo para alguna que otra tontería de dinámica de grupo de las sailors originales y unas buenas presentaciones de las nuevas. En su primera mitad la serie tiene un ritmo medianamente decente y muy superior al de las dos primeras temporadas; desgraciadamente luego llega la acción y la serie pierde bastante ritmo e interés, las pruebas a la que están expuestas y las formas de superarlas y crecer son bastante tópicas.
Esta serie se ve por la nostalgia, y argumentalmente yo nunca le he pedido gran cosa. Eso sí, lo que si se le exigen son unos mínimos de producción que no estaban antes y que aquí si se encuentran presentes. En esta ocasión no tenemos un anime emitido por la web, tenemos 13 episodios emitidos por televisión como los de cualquier anime. Y tenemos unos niveles de producción medios altos. Los buenos diseños de la serie esta vez están bien animados, sin bajones notables e incluso con algún pequeño momento de lucimiento. Las batallas no son nada del otro mundo, y además se tiene a reutilizar las escenas de los ataques, aunque es algo normal y al menos en esta ocasión no se abusa demasiado de las transformaciones para llenar minutos. Con sus diseños claramente retro y con una animación correcta, no estamos hablando de una serie que fascine visualmente, pero es bonita de ver y no insulta a la vista.
Es, como he dicho, una serie que se ve por nostalgia, y en ese sentido cumple. Con más minutos podría haber habido tiempo para más comedia y para reforzar las relaciones de las protagonistas, pero esta serie mejora por mucho a sus predecesoras y si bien no volveré a colocarle la etiqueta de imprescindible o la recomendaré especialmente, tampoco diré que sea una serie de la que haya que huir.
¿No vas a hacer un post sobre el absoluto desas-- digooooo, el final de Bleach?
ResponderEliminarEso de primas te lo has sacado de la manga. En España son amantes. Eso es invención de USA. Lo único que se hizo en España es cambiarles los nombres.
ResponderEliminarOverMaster, es que dejé de seguirla hace mucho XD. Más o menos, como salía al tiempo que OP, sabía lo que pasaba y los desastres que se sacaba Tite de la manga (y uno no se puede perder el bankai de Kenpachi o lo que sea que tuviera Yoruichi con su forma felina XD).
ResponderEliminarPero no, no haré reseña. No tengo ahora mismo intención de leer todo lo que me quedaba (350 capítulos más o menos, mucho tiempo que podría aprovechar mejor de otra forma). Y ponerme sólo a hacer una crítica de coña destructiva.... me parecería una falta de respeto a la gente a la que le haya continuado gustando la serie (digo yo que alguno o alguna habrá XD).
Anónimo, hace demasiado que la vi... y he caído en la leyenda urbana XD. Gracias por la corrección.
Si mañana anuncian un remake de Chicho Terremoto con la animación de la nueva Berserk, ¿me equivoco al pensar que habría reseña en el blog?
ResponderEliminarYa veo. ¿Y el final de Nisekoi, tampoco?
ResponderEliminarOtakuLogan, bueno, de Chicho ya hay una reseña en los momentos míticos.
ResponderEliminarOverMaster, Nisekoi tengo menos ganas de leerla aún que Bleach. Quizás si continuan animándola la siga viendo.... pero tampoco es algo por lo que este rezando. Además, al final ganó la chica que menos me gustaba de todas XD
Yo admito que no puedo ser imparcial con Sailor Moon. Es mi manga favorito de todos los tiempos, pero en este anime sí que estoy de acuerdo contigo que ha ido mejorando en animación. Las dos primeras temporadas había momentos que daba algo de miedo esa animación tan... En fin xD
ResponderEliminarAhora queda esperar a que ojalá hagan el resto de la historia.
¡Saludos!
Es que viendo como acabaron las anteriores (parecían hechas con paint y flash) no mejorar habría sido todo un reto XD.
ResponderEliminarA ver si hay suerte y adaptan el siguiente arco... como profano en la franquicia siento curiosidad