Normalmente no veo ninguna de las películas que componen mi pequeña colección de DVDs. Sea pereza o sea falta de tiempo, normalmente no suelo ponerme a revisionar ninguna de las películas o series que tengo en este formato. Tengo que forzarme a ello, y con este cometido -más o menos- mi hermano y yo ocasionalmente nos metemos entre pecho y espalda alguna que otra marathon cinéfila para volver a disfrutar de algunas joyas y conocer otras a las que les tenemos ganas. Tocaba una marathon de anime.
Ninja Scroll.
Creo que cualquier sesión películera de anime tiene que tener esta película. Es malilla, eso es indudable, pero es un clásico como pocos. Todos recordamos aquellos coleccionables en los 90 en los que la primera entrega eran esta película y "Akira". Ninja scroll es el arquetipo de anime, sangre y violencia a mansalva, con ninjas y monstruos masacrándose, solo dejando a un lado el baño de sangre para contar algun chiste malo o enseñar a alguna muchacha de generosas proporciones en bolas (y en ocasiones tampoco hace falta renunciar a la sangre para introducir humor malo o carne femenina). Exagerada como ella sola, Ninja Scroll no aspira a más que a divertir... y eso lo consigue de sobra. Además, siendo una película con casi una veintena de años, tanto el diseño de personajes como la animación en si han envejecido muy bien.
Ghost in the shell.
El anime ha tenido siempre una rama "cyberpunk" muy marcada, y me parece que esta es la gran película en este sentido (no considero a Akira una película tan de género como esta, además de que independientemente de como sea el manga original de Otomo, esta película me parece más redonda). Ghost in the shell plantea un mundo futurista terriblemente coherente y posible, y se vale de los pensamientos de una cyborg para hacernos pensar en el concepto de inteligencia y consciencia y, en definitiva, en lo que nos hace humanos. Pero lo grande de esta película no es que sólo necesita hora y media para desarrollar toda la historia del proyecto 2501, sino que además lo hace con un montaje excelente y con un gran número de escenas de acción que hacen muy entretenida y espectacular esta película. Y es que, aún a dia de hoy, esos primeros siete minutos con la mayor Kusanagi fundiéndose con la ciudad y los posteriores títulos de créditos con el montaje de esta me parecen una de las cumbres no del anime sino del cine en si.
El viaje de Chihiro.
Todo lo que diga de Chihiro será poco o no hará justicia a esta obra maestra de Miyazaki. Es lenta y pausada, pero con un desarrollo sorprendentemente natural de la historia y de los personajes. Tiene mucha mitologia japonesa y eso la hace complicada de ver y entender, pero la fuerza plástica de las obras de Miyazaki es increible y es una de las películas más bellas y mágicas que he visto en mi vida (basta con recordar el momento en el que Haku recupera su nombre). Y todo ello culminado por una banda sonora inolvidable. Esta película no es anime, no es ni siquiera cine, es arte en el sentido más puro de la palabra, un auténtico tesoro de la humanidad que muestra todo lo bueno que esta puede generar.
Y la marathon la completamos con dos pequeñas joyas de Mamoru Hosoda: "La chica que saltaba a través del tiempo" y "Summer Wars". Ya he reseñado antes estas películas en el blog, así que no hablaré de ellas. Basta decir que cualquier excusa es buena para rememorar lo importantes que son los frenos de una bicicleta y recordar que una familia unida puede derrotar lo que se le ponga por en medio.
Ninja Scroll.
Creo que cualquier sesión películera de anime tiene que tener esta película. Es malilla, eso es indudable, pero es un clásico como pocos. Todos recordamos aquellos coleccionables en los 90 en los que la primera entrega eran esta película y "Akira". Ninja scroll es el arquetipo de anime, sangre y violencia a mansalva, con ninjas y monstruos masacrándose, solo dejando a un lado el baño de sangre para contar algun chiste malo o enseñar a alguna muchacha de generosas proporciones en bolas (y en ocasiones tampoco hace falta renunciar a la sangre para introducir humor malo o carne femenina). Exagerada como ella sola, Ninja Scroll no aspira a más que a divertir... y eso lo consigue de sobra. Además, siendo una película con casi una veintena de años, tanto el diseño de personajes como la animación en si han envejecido muy bien.
Ghost in the shell.
El anime ha tenido siempre una rama "cyberpunk" muy marcada, y me parece que esta es la gran película en este sentido (no considero a Akira una película tan de género como esta, además de que independientemente de como sea el manga original de Otomo, esta película me parece más redonda). Ghost in the shell plantea un mundo futurista terriblemente coherente y posible, y se vale de los pensamientos de una cyborg para hacernos pensar en el concepto de inteligencia y consciencia y, en definitiva, en lo que nos hace humanos. Pero lo grande de esta película no es que sólo necesita hora y media para desarrollar toda la historia del proyecto 2501, sino que además lo hace con un montaje excelente y con un gran número de escenas de acción que hacen muy entretenida y espectacular esta película. Y es que, aún a dia de hoy, esos primeros siete minutos con la mayor Kusanagi fundiéndose con la ciudad y los posteriores títulos de créditos con el montaje de esta me parecen una de las cumbres no del anime sino del cine en si.
El viaje de Chihiro.
Todo lo que diga de Chihiro será poco o no hará justicia a esta obra maestra de Miyazaki. Es lenta y pausada, pero con un desarrollo sorprendentemente natural de la historia y de los personajes. Tiene mucha mitologia japonesa y eso la hace complicada de ver y entender, pero la fuerza plástica de las obras de Miyazaki es increible y es una de las películas más bellas y mágicas que he visto en mi vida (basta con recordar el momento en el que Haku recupera su nombre). Y todo ello culminado por una banda sonora inolvidable. Esta película no es anime, no es ni siquiera cine, es arte en el sentido más puro de la palabra, un auténtico tesoro de la humanidad que muestra todo lo bueno que esta puede generar.
Y la marathon la completamos con dos pequeñas joyas de Mamoru Hosoda: "La chica que saltaba a través del tiempo" y "Summer Wars". Ya he reseñado antes estas películas en el blog, así que no hablaré de ellas. Basta decir que cualquier excusa es buena para rememorar lo importantes que son los frenos de una bicicleta y recordar que una familia unida puede derrotar lo que se le ponga por en medio.