Este juegecillo, fruto de la compañía Leaf, es otro más de esas novelas interactivas que alternan el eroge con otros géneros. Leaf, en concreto, gusta de escenarios épicos y mitológicos. Este anime recuerda inevitablemente a otra adaptación de la compañía "Utawarerumono". Como aquel, es una anime sencillo y sin demasiadas pretensiones, donde un grupillo de amigos (basicamente un hombre y su haren de rigor) van por el mundo defendiendo el pequeño reino del que son soberanos y enfrentándose a monstruos mitológicos y ejercitos invasores. Estos animes prescinden del echii y las chicas no son otra cosa que guerreros como el resto, luego no hay más fanservice que algún que otro diseño un pelín cantoso que no molesta demasiado. El humor no es demasiado ingenioso, pero tampoco ofensivo y se mantiene de acuerdo con el tono ligero de la obra. La épica es relativa, pero esta medianamente bien conseguida y el enfoque de esta serie es además mejor que el de su predecesora.
Utawarerumono fallaba por tener un argumento demasiado confuso. Había muchos personajes y además cada dos episodios estos acababan una guerra y buscaban la siguiente más rápido que el Equipo A en sus mejores tiempos. Eso hacia que el espectador llegara cansado al final de la serie y que tampoco el hilo argumental central se desarrollara correctamente. En "Tears to tiara" todo gira en torno a un gran argumento y, apenas podemos distingir tres o cuatro grandes sagas, presentándose además la inmensa mayoría de personajes en el primero de ellos. Lo único que aquí encuentro criticable en el desarrollo es que el paso de luchar con enemigos mortales a hacerlo con divinos es demasiado brusco, aunque esto es clara herencia de su origen de videojuego (se nota demasiado lo que serían las pantallas de inicio, las de "en medio", y las últimas). El argumento es meramente funcional y se basa en unos personajes más o menos molones, unas féminas basadas en estereótipos y una extraña mezcla de mitología artúrica, griega y romana que compone una surreal reinterpretación del mito del rey Arturo.
La factura del anime es normal. Tiene una animación normal y no hay demasiados altibajos. En las batallas solventa el problema de la sangre al rodarla con rapidez y sin demasiados salpiqueteos. Presenta algunos encuadres interesantes, aunque la velocidad de la acción esta bastante limitada por el presupuesto de la serie y los creadores del anime han tenido que imitar la estrucutra de las películas de "El señor de los anillos" con lo que tenían (la inspiración es tan clara que incluso han plagiado algo de la música).
No es este un anime que pasará a la historia, pero soporta bastante bien su longitud (26 episodios de un nivel bastante parejo) y es disfrutable por todos aquellos que, por temática y estética, simpaticen con el género. No es un anime excesivamente recomendable, pero tampoco ocasiona cancer ocular.
Utawarerumono fallaba por tener un argumento demasiado confuso. Había muchos personajes y además cada dos episodios estos acababan una guerra y buscaban la siguiente más rápido que el Equipo A en sus mejores tiempos. Eso hacia que el espectador llegara cansado al final de la serie y que tampoco el hilo argumental central se desarrollara correctamente. En "Tears to tiara" todo gira en torno a un gran argumento y, apenas podemos distingir tres o cuatro grandes sagas, presentándose además la inmensa mayoría de personajes en el primero de ellos. Lo único que aquí encuentro criticable en el desarrollo es que el paso de luchar con enemigos mortales a hacerlo con divinos es demasiado brusco, aunque esto es clara herencia de su origen de videojuego (se nota demasiado lo que serían las pantallas de inicio, las de "en medio", y las últimas). El argumento es meramente funcional y se basa en unos personajes más o menos molones, unas féminas basadas en estereótipos y una extraña mezcla de mitología artúrica, griega y romana que compone una surreal reinterpretación del mito del rey Arturo.
La factura del anime es normal. Tiene una animación normal y no hay demasiados altibajos. En las batallas solventa el problema de la sangre al rodarla con rapidez y sin demasiados salpiqueteos. Presenta algunos encuadres interesantes, aunque la velocidad de la acción esta bastante limitada por el presupuesto de la serie y los creadores del anime han tenido que imitar la estrucutra de las películas de "El señor de los anillos" con lo que tenían (la inspiración es tan clara que incluso han plagiado algo de la música).
No es este un anime que pasará a la historia, pero soporta bastante bien su longitud (26 episodios de un nivel bastante parejo) y es disfrutable por todos aquellos que, por temática y estética, simpaticen con el género. No es un anime excesivamente recomendable, pero tampoco ocasiona cancer ocular.