domingo, febrero 19, 2017

Despidiéndonos de Terry Pratchett

La corona del pastor

Y con esto acaba Mundodisco. Y es una despedida triste, no ya sólo por lo que esta novela significa, si no porque esta inconclusa y se hace dolorosamente patente el estado en el que el genial Pratchett se encontraba cuando escribía esta novela. Sobra decir que a un autor que se ha mostrado tan dedicado no se le puede reprochar nada, pero es una pena que su última novela sea claramente una novela inacabada, porque las ideas están ahí, pero sencillamente el cruel alzheimer se llevó al británico antes de que pudiera terminar este libro.

Es el final del Mundodisco, echo en falta a Rincenwind y a algún que otro, y verdaderamente la odisea de Tiffany contra los elfos no es una historia muy potente, pero Pratchett sabía que no le quedaba más tiempo y que tenía que acabar la saga, y el suceso que da comienzo a la saga es tan potente como inesperado, y tras él no puede haber más novelas de la saga. La pena es que tras las primeras 100 páginas, muy sentidas y muy trabajadas, todo lo que queda es apenas un borrador, un esbozo de 200 páginas que seguramente habrían engordado un centenar más conforme el escritor las fuera puliendo. Pero no es así. Tenemos un trama protagonizada por un "brujo" que podría dar mucho más de si y que se queda en nada, y los elfos y su rebelión podrían también haber desembocado en algo muy sugerente, pero nuevamente quedan en nada (y es especialmente sangrante el errático desarrollo del personaje de su reina). Y Tiffany no es santo de mi devoción, y creo que en este libro se tiene que calzar unos zapatos demasiado grandes, pero aún siendo la protagonista no se libra de numerosos párrafos donde todo sucede tan deprisa que uno piensa que se está confundiendo al leerlo. 

El libro tiene, como siempre, algunas buenas ideas, pero todo pasa de una forma demasiado precipitada. Este libro no es una novela como tal, es un borrador en el que se nota que muchas páginas están pendientes de una reescritura que las dotara de mayor densidad e ingenio.
Obviamente, nada se le puede reprochar a Pratchett, esta novela es un ejemplo de hasta que punto lo dio todo por sus libros. Solo podemos lamentar lo tristemente pronto que vino la vieja huesuda vino a secar esa pluma tan prodigiosa.

6 comentarios:

Anonimatus dijo...

Supongo que Pratchett esperaba que el huesudo (es un esqueleto varón) le daría algo más de tiempo y que podría dar su despedida al Mundodisco en una entrega posterior. O simplemente que otros seguirían con su legado y que por la tanto no había que darle a esta novela un significado especial.

eter dijo...

Con respecto al género de la Muerte... no me queda claro, yo siempre pienso en el personaje como masculino (y con la voz de Christopher Lee, of course), pero ocasionalmente utilizan artículos femeninos.

Pratchett tenía en mente algunas otras ideas, pero definitivamente, con lo que sucede al principio de este, que además es lo único que se nota reescrito hasta la saciedad, creo que sabía que no iba a tener más tiempo.

Es una lectura terrible en ese sentido, ves lo que esa enfermedad le ha hecho a una mente tan brillante y es descorazonador.

Varric dijo...

A la Muerte yo siempre la ví como femenina: La Parca, La Muerte, La Señora de la Guadaña... Aunque en Supernatural su representación es masculina (el actor le da cierto carisma) y su primera aparicion es una de las mejores presentaciones de un personaje que he visto nunca: https://www.youtube.com/watch?v=u1EzU9sLQ6I

eter dijo...

Es curioso, porque la Muerte como tal siempre la he considerado femenina por el "la"... pero luego la mayor parte de las veces es representada por un actor alto y huesudo y parece casi lo más natural.

Harad dijo...

Aun voy muy atrás con Mundodisco, pero es una pena que la ultima novela sea de Tiffany, aun no he leído ninguno de sus libros pero dan la impresión de ser una parte menor, si la enfermedad lo hubiera permitdo la Guardia, Rincewind o incluso la Muerte serian mejores opciones para ponerle punto y final.

eter dijo...

Tengo que discrepar... la Muerte nunca me ha parecido que haya terminado de tener novelas redondas, y la Guardia al final también decae algo... y en verdad entre Vimes y Yaya -que siempre está con Tiffany- diría que la bruja es más importante, pero... sí, Rincewind debería ser el que hubiese finalizado el universo. Una pena que a Pratchett no le diera tiempo.