Tomo 15Este tomo completa la batalla contra Poseidon y narra toda la transición hasta el comienzo del partido contra "los vaqueros". No se trata de un gran tomo, pues veo elementos muy forzados, pero sin duda en este tomo comienza a verse la verdadera "épica" del manga pues los Devil Baits comienzan a enfrentarse con sus enemigos de toda la vida.

El desenlace de la batalla contra Poseidon es muy bueno, Sena evoluciona (para mi gusto lo hace un poco pronto) y se nos muestra un compañerismo muy idealista entre los dos equipos al finalizar el partido. Una batalla dura pero muy noble. Creo que en esta batalla se ha forzado demasiado al equipo, pues todo ha sido muy agónico y esto puede ser negativo de cara a los futuros enfrentamientos, pues es de esperar que estos no sean más fáciles y el lector puede acabar saturado de milagros si los autores no se manejan bien.
Una vez acabado "Poseidon" llega el turno de los "Gunman", equipo del que hasta ahora se había mostrado relativamente poco y del cual se incide de nuevo en su desmesurada potencia de ataque. Se profundiza en el enigmático Kid, se presenta al "maestro" de Sena para que la evolución de este ya sea total de cara al enfrentamiento con Shinn y se explica también algo más del pasado de los Devil Baits y Musashi.
Para mi gusto, el festival deportivo no es excesivamente cómico y la inclusión de Riku me parece demasiado "oportuna", pero es un buen tomo de transición y supone una notable mejora con respecto a la decepción que me estaba suponiendo el gran torneo.
El dibujo sigue su pequeña escala ascendiente y logra momentos muy buenos aunque, como siempre, se maneja mejor en los partidos que en la vida cotidiana de los personajes.
En definitiva, un buen tomo en el que acción, humor (aunque este no este muy logrado) y desarrollo de personajes se dan la mano como en pocos tomos de esta serie.
Tomo 16
Sencillamente, el mejor tomo de la serie hasta el momento. Este tomo narra la primera mitad de la batalla entre Seibu y Deimon y es, sencillamente, una batalla sin cuartel donde todo se reduce al ataque.
Es terriblemente divertido ver los ataques de cada uno de los dos equipos y como sus adversarios tratan de sobreponerse a ellos. Además, Seibu es un enemigo que ya si tiene carisma y ello juega en favor del espectaculo.

Es un tomo extraño pues es un tomo "gozosamente" derrotista. Poco a poco el equipo protagonista va siendo derrotado por un equipo que, sencillamente, juega mejor que ellos al futbol americano. Sena y sus compañeros consiguen pequeñas victorias parciales, pero para lo único que estas sirven es para que la distancia que sus enemigos consiguen no se dispare monstruosamente. Derrotas de las tres estrellas de Deimon ante las de Seibu mejoran el capítulo, especialmente a Hiruma, con un desarrollo mucho más trabajado y pronunciado que en los tomos anteriores. No obstante, la llegada de Musashi al final del tomo y la reunión del verdadero equipo de los Deimon Baits le da al tomo un tono final espectacular y esperanzador.
A nivel gráfico el tomo mantiene un nivel similar al anterior. Se agradece que, acabado Poseidon, se acabe con el ya pesado simbolismo de las olas y que este ahora, aunque siga presente, sea mucho menos descarado. El partido se refleja con unos angulos interesantes, sobre todo cuando se muestra el partido a traves de Hiruma (una interesante sucesión de contrapicados y sombreados) y con unos planos largos del campo de juego que se hacen imprescindibles en un tomo que es principalmente un duelo de quarterback.
Gran tomo con algo de comedia y de drama pero, sobre todo, con una espectacular batalla que es, de lejos, la más divertida, espectacular y emocionante que han retratado los autores de este manga.
Tomo 17El anterior tomo me había parecido el mejor de la serie. Este lo mejora. Se trata de un tomo que, sencillamente, mejora la serie. La mejora porque el partido es mejor aún que en el tomo anterior porque si en los anteriores partidos toda la batalla se centraba en un par de jugadas o estrategias, aquí es una batalla global que alcanza a todos los jugadores, un interminable intercambio de touchdown frenético y espectacular. La mejora porque los Seibu Wild Gunman eran carismáticos antes de empezar el partido y lo son aún más tras finalizarlo. Lo mejora porque todos los Devil Bait crecen y comienza a verse el verdadero equipo que serán en el futuro. Lo mejora porque los protagonistas pierden.

Sinceramente, no esperaba que perdieran, pensaba que ganarían y se enfrentarían a Oujou en la final. Pero no ha sido así, han perdido y ahora se ven obligados a jugar un partido de repesca para jugar la Christmas Bowl, partido que, en la última página, se revela les enfrentará al verdadero "Eyeshield 21". Sena, Monta, Kurita, Hiruma, Musashi y los tres hermanos han mejorado en este tomo como no lo hacían en mucho tiempo. Este partido ha sacado lo mejor de cada uno de los jugadores y los ha mostrado convencidos de si mismos y de sus ambiciones. Además, como he mencionado antes, Seibu ha ganado en fuerza y el autor se ha reservado así un enemigo más para el gran torneo de Kanto. La serie, en este momento, presenta un aspecto inmejorable.
Del grafismo se puede decir poco. En el partido se muestran algunos encuadres verdaderamente inusuales para mostrar los atrapes y las luchas por el balón. El simbolismo se reduce al mínimo y la batalla tiene una nitidez impresionante. Así mismo, los rostros de los protagonistas han ganado en expresividad y los autores estan comenzando a sustituir cuadros de díalogo por pequeñas virgerías gráficas.
Trabajo, en general, sublime de los autores en este tomo.
Tomo 18
Otro gran tomo, quizás algo inferior a los dos anteriores pero sin duda de los mejores de la serie. Apenas hay transción y, tras una explicación algo forzada para que "el as de los ojos rojos" no juege contra Oujou, llega el turno del partido en el que Sena se enfrentara al verdadero Eyeshield.
El partido es muy bueno y, sobre todo, muy táctico. Si el anterior era un intercambio salvaje de puntos, este es un partido mucho más inteligente y planificado por parte de sus enemigos. Hayato y Kotaro son sorprendentemente carismáticos para el poco protagonismo que han tenido hasta la fecha y son también -además de muy buenos- divertidos y agradecidos de cara al espectador. Hayato, como el verdadero Eyeshield, es una auténtica bestia parda dotado de una técnica sencillamente monstruosa, y me ha gustado que no lo hayan convertido en otro jugador rápido como se hizo con Riku (pues en este caso sería más difícil incluso explicar una hipotética victoria por parte de Sena).
Pero lo más importante del tomo es que, por fin, la careta de Sena ha caído y ha abandonado su nombre falso para revelarse como verdadero y orgulloso jugador. Era algo que me parecía ridículo a estas alturas del manga, pero creo que los autores finalmente han realizado una gran escena para su verdadera presentación. La evolución del personaje de Sena se ha completado por fin y ha dejado atrás un peso que le estaba lastrando demasiado, y a su paso ha ido -en menor medida- una pequeña pero agradable evolución de Mamori y de otros personajes que ya han depositado en Sena una confianza total como estrella del equipo.
Tomo 19Otro tomo muy bueno que demuestra que la serie se halla en su mejor momentos. La resolución de la batalla contra "las arañas" es muy buena, a pesar de que estos enemigos no parecían demasiado impresionantes al principio se han contagiado del estado de gracia en el que se encuentra en la serie y ha resultado ser una gran batalla. La evolución de Sena era previsible y esta muy bien conseguida (y en verdad se aprecia como han recreado la leyenda de "Eyeshield 21" para que no pareciera que Sena era un ladrón si no el digno heredero de ese nombre), pero lo que más me ha sorprendido de este tomo ha sido la inesperada evolución de Taki. Incluso el miembro más estúpido del equipo ha crecido.

La saga del torneo de Tokyo se cierra con un combate algo "trucado" entre Oujou y Seibu que los primeros ganan facilmente pero que resulta una derrota "circustancial" para los segundos al carecer de su receptor. Después tenemos la clásica escena de selección de onces de ataque y defensa donde volvemos a ver a los principales protagonistas de esta parte, ya finalizada, de la historia.
Y la serie, en su mejor momento, se prepara para aforntar su torneo más decisivo. El campeonato nacional con los ocho equipos más fuertes. De los conocidos han pasado los tres más carismáticos y completos: Deimon, Oujou y Seibu; y también están presentes los "egipcios" y los "dioses", este último el equipo más poderoso y temido y que ya ha sido designado como primer rival de los protagonistas. Me ha sorprendido bastante en este aspecto que el cruce de semifinales fuera con Oujou, pues estos dos equipos parecían estar llamados a repartirse el primer y el último partido de este torneo.
Supongo que a continuación vendran algunos episodios de relleno a fin de profundizar algo más en los personajes antes de comenzar la siguiente gran saga que, nada más y nada menos, se inaugurara con un enfrentamiento contra "el mal absoluto".
Tomo 20
Otro excelente tomo. Pensaba que tendríamos bastantes capítulos de transición -un tomo- hasta que comenzara el partido contra Nara, pero no ha sido así. Apenas han sido unos cuatro o cinco episodios. Ahora ha comenzado el partido más duro de todos los enfrentados hasta ahora por el grupo, un partido a vida o muerte en el que se tienen que enfrentar al equipo más poderoso y al jugador más genial y terrible de todo Japón.
Este primer tomo abarca la primera mitad del partido y es claramente catastrofista. Cualquier táctica o esfuerzo de los protagonistas es contrarrestado por sus adversarios por fuerza, técnica o simple genialidad. Se trata de un tomo en el que, cualquier carrera que realice un protagonista será realizada por un enemigo en una décima de segundo menos. Todos dan lo mejor de sí pero son aplastados por una fuerza mayor. Evidentemente no perderán, ya perdieron hace poco y hacerlo ahora conllevaría el fin del torneo -y en consecuencia del manga-, pero Nara parece una montaña imposible de superar y, caso de hacerlo, parece que la historia se forzara mucho.
El partido que se nos muestra es dinámico y muy adictivo, pero, independiente de él, hay un interesante desarrollo de personajes. Primero se profundiza algo más en la historia de Hiruma, Kurita y Musashi y en sus antecedentes con estos enemigos; se reincide en la determinación de todos los miembros del equipo por ganar (y esta se refuerza con la promesa de la incorporación de Yuki al equipo después de quince tomos calentando el banquillo), y por último se nos muestra a un equipo hundido, humillado, enloquecido y más maduro y fuerte.
Poco más diré después de este macroanálisis. La serie, después de unos comienzos esperanzadores atravesó muchos altibajos, pero ha llegado por fin a su punto álgido. Y este punto esta muy alto.