sábado, agosto 29, 2020

EL APASIONANTE MES FURRY DEL BLOG (1/4)

Centaur no Nayami

Dentro de la selecta categoría de “¿Qué demonios se han fumado estos japoneses?” esta serie se alzaría en una posición bastante elevada, y no lo haría por su argumento, que no deja de ser el de una serie para amantes de los furris o las chicas monstruo en este particular mundo en el que vivimos que ha dado lugar a la existencia de tales fetichismos. No. Esta serie es extraña por su desarrollo.
Pongamos una serie donde algunas de las chicas son como pequeños demonios con cuernos y alas membranosas. Perfecto, la clásica imagen de súcubos de la cultura popular actual. Pongamos que hay otras chicas gata en plan cola y orejas. Guay, nekomimi mode on y pocos pelos. Pongamos que hay otras que son angeles. No problemo, aunque ya es algo raro que su halo sea de pelo y que lo tengan que llevar porque si no podrían denunciarlas por discriminación… lo que ya comienza a ser algo raro. Pongamos que hay sátiros y centauros. Vale, de todo hay en la villa del Señor. Pongamos que hay sirenas. Logico y previsible, y además lo son de rodillas para abajo, con lo que los chistes de siempre no tienen lugar… y esa ausencia de chistes ejemplifica muy bien la serie, porque todo esta ridículamente pensado en esta serie. Es como si al autor le hubieran pedido una serie furry y el hombre hubiera aceptado porque tiene que comer, pero se la hubiera tomado en serio y se hubiera hecho todas las preguntas habituales diseñando la serie para responder a estas. Así pues las sirenas –y los sirenos- tienen entrepierna porque sencillamente pueden aparearse con las otras razas, y la serie lo dice con naturalidad, como también dice que la hibridación de centauros con otras razas es complicada porque obviamente una mujer normal no puede llevar en su vientre un potro, e igual que trata estos temas aborda otros más banales como la ropa de razas con cola o el como se diseñaría un coche para centauros. Y todo esto ya haría la serie extrañamente sólida de por si, pero es que el autor va más allá y crea el mundo.
Un mundo extraño, donde las protagonistas viven su vida de yuri light de chicas de instituto japonés con sus tonterías de kissus y hazukashī, pero donde tienen cuidado de no discriminar a nadie por su raza porque vemos que todas viven a la sombra de lo que parece ser una policía política, porque la serie no duda en ponernos flashback en los que vemos como los centauros eran esclavizados o incluso un demencial capítulo en el que la primera mitad va de sapos indígenas del Amazonas cuasi terroristas y la segunda nos lleva a los campos de concentración de la segunda guerra mundial de ese mundo. Es todo muy extraño, podemos tener una comedia con tres trillizas adorables en un minuto para pasar a ver en el siguiente como su hermana –la clásica inchou de la serie- es una sacerdotisa que estafa sin remordimientos a terceros porque necesita dinero.
Es una serie terriblemente sorprendente por lo absurdamente elaborado de su mundo en contraposición a lo simple de sus historias. Su mundo no la hace una buena serie, es una serie normalita, con algún que otro personaje y episodio simpático a la par que otros francamente normalitos o malos (que además se me hacían extrañamente largos, supongo que por la densidad de todo), pero es hipnótica en cierta forma porque uno nunca sabe que se va a encontrar a verla, si un episodio serio o uno chorra (e incluso los episodios ligeros tienen alguna que otra frase que te hace enarcar la ceja cual Spock ante las connotaciones que implican).
Técnicamente cumple, tiene algunos diseños bonitos o adorables, pero no destaca especialmente más allá de la ingeniería visual que se ve en su mundo para adaptar objetos cotidianos a este tipo de criaturas. Su ritmo sencillamente es inexistente, las tramas de las chicas son completamente episódicas más allá del ligero punto de inflexión que constituye la llegada de una alumna de intercambio poco antes de la mitad de la serie, pero estas peripecias ligeras están salpicadas por segmentos casi dispuestos al azar de otros personajes.
No es una serie que pueda recomendar especialmente, pero si es una cuyo visionado me parece interesante y curioso.

miércoles, agosto 26, 2020

Del barro venimos y al barro iremos

Los héroes

Le tenía bastantes ganas a Abercrombie, ya que junto con Sanderson es uno de esos autores que se ha abierto paso en los últimos años en el muy reducido grupo de autores de fantasía con cierta fama. Y lo cierto es que esta "los héroes" no solo me ha encantado, si no que me ha parecido tan original como bien escrita.
Lo primero es lo primero, esta novela se encuadra en un mundo fantástico que el autor ya comenzó en la saga de "la primera ley", forma parte de un grupo de novelas independientes que son pseudosecuelas de aquella trilogía. El mundo es el mismo y se referencia a algunos personajes que protagonizaron aquellos libros y que aquí han alcanzado ya casi un estatus de leyendas. Seguramente conociendo la saga original esta obra se valore más, pero yo no la conocía -lo que he comentado no dejan de ser meras nociones que he obtenido navegando por webs- y la he entendido  y disfrutado sin problemas.
La historia nos coloca en un mundo de fantasía medieval con una magia tan ligera que podemos incluso dudar si existe verdaderamente o no. Un reino -la Unión- está en guerra con sus vecinos norteños, un grupo de tribus bárbaras conocidas simplemente como los norteños. Ambos bandos llevan enfrentados bastante tiempo en un conflicto hasta que un mago -con bastantes pocos escrúpulos- que actúa como gobernante de facto de la Unión decide que es hora de acabar con el conflicto. Lo que hasta entonces eran ligeras escaramuzas que se solían resolver con viejos guerreros curtidos hablando y viendo como en sus encuentros podían llegar a acuerdos para salvar la vida y el honor de todos se verá abocado de repente a un enfrentamiento brutal entre la totalidad de ambos ejércitos en torno a una pequeña colina.
Y no hay más. La novela son más de 800 páginas que narran una batalla de 3 días entre dos ejércitos con un prólogo y un epílogo. 800 páginas que se leen en un suspiro y donde el punto de vista cambia entre varios personajes que cubren todo tipo de posiciones en ambos bandos y donde cada uno afronta la guerra de una forma distinta. Una visión sucia y nada mitificadora del conflicto, donde todos los personajes ven la muerte, la miseria y la degeneración a su alrededor y tratan de sobrevivir lo mejor que pueden en ese terrible marco donde muchas veces sus peores enemigos están en su propio bando o dentro de ellos.
Las transiciones entre los personajes son ágiles, la historia se va contando entre todos, pero el autor no usa el cambio de narrador para crear falsos cliffhanger o mantener la espectación, es más como si fuera puliendo poco a poco una historia inevitable y obvia desde el principio, que se va haciendo más inevitable con cada capítulo y donde todo parece más obvio aún cuando la visión de un soldado de infantería complementa la de un espía del bando contrario del capítulo anterior. Todos los personajes tienen su propia personalidad y su forma de hacer las cosas, y la novela transmite a la perfección que cada uno de ellos tiene su pasado, su historia y su posible futuro, teniendo cada uno de ellos sus prioridades muy claras y estando todas ellas normalmente muy alejadas de la gloria o el bien común. Me parece una novela muy adulta en su desarrollo, no juzga las acciones de sus personajes -a pesar de que en algún momento puede ser un poco ventajista- y en todo momento no sabes si estos van a vivir o morir, o si van a hacer lo correcto o no (de acuerdo a nuestra moralidad actual); todo su desarrollo es lógico en su contexto, y su contexto es sucio y brutal, pero la novela tampoco se recrea especialmente en la violencia ni da la sensación de que intente venderse en base a esa corriente de falsa madurez en la que parece que cuantos más hombres mueran y más mujeres sean violadas más adulta y más real es una obra. Se agradece que, a pesar de lo cruel de la guerra, la narración suela ser elegante y concisa normalmente, con unos capítulos que no son especialmente largos o cortos, y con algún que otro recurso bastante notable como narrar una secuencia única prácticamente sin pausa saltando de un narrador a otro.
En general, me ha encantado. 800 páginas que se devoran en un suspiro y que han hecho que este autor me haya conquistado como lector. No creo que pueda decir nada mejor ahora mismo. Craw, Calder, Escalofrios, Tunny, Bremer, Beck o Finree necesitan ser conocidos.

domingo, agosto 23, 2020

Audio reseñas de la semana - 18

One Piece 988 - Perdonad que os hayamos hecho esperar

24 (temporada 1)

Nueva colección de reseñas en formato audio, en esta ocasión del último capítulo de One Piece y de la primera temporada de la mítica serie protagonizada por Jack Bauer.




como siempre, se agradecen comentarios, likes o subscripciones.

Proximamente en este formato las reseñas de la segunda temporada de 24, la primera de Expediente X y el videojuego Trails of Cold Steel. 

jueves, agosto 20, 2020

EL MEJOR ANIME DEL 2020

Kakushigoto

Por alguna extraña razón abandoné en su día Zetsubou-sensei y nunca la retomé. Asignatura pendiente, sin duda, pero lo curioso es que estuvo a punto de pasarme lo mismo con esta serie... pero afortunadamente no lo hice y pude disfrutar de una de las series del año.
Kakushigoto nos presenta a un mangaka autor de echiis de éxito mediano cuyo principal objetivo en la vida es que su hija no descubra su deleznable profesión. Así pues, todos los esfuerzos del protagonista se centran en aparentar ser un oficinista normal y corriente y que su hija de 10 años jamás pueda imaginar que forma parte del estrato más bajo de la sociedad japonesa. Para ello jamás dibuja frente a ella, no recibe a su editor o ayudantes en casa, y siempre que va hacia su estudio lo hace trajeado. Pero el mundo parece conspirar contra él para que su encantadora e inocente hija descubra su terrible secreto.
Naturalmente el argumento es el de una comedia, el de una comedia alocada con infinidad de metareferencias al medio, de hecho. Y como tal funciona de maravilla. El estilo histriónico y exagerado de Kouji Kumeta, caracterizado por una locuacidad frenética y unas frases tan abruptas como carentes de complejos funciona a las mil maravillas para recrear las miserias de un mangaka de medio pelo y sus conversaciones con sus ayudantes y editores, metiendo referencias a otras series y dando dibujando también pinceladas de la cruda realidad de un trabajo muy sufrido. Kakushigoto es una comedia, pero es una terriblemente fácil de creer. Y dejando a un lado el relativo realismo de su escenario laboral, al salir a la calle Goto -nuestro protagonista- se transforma también en un protagonista de comedia de enredo con todas sus medidas extremas para disimular su trabajo y un extraño harem que se monta a su alrededor sin que el en ningún momento se de cuenta de ello ya que todo, absolutamente todo, en su vida está enfocado en criar a la pequeña Hime.
La comedia loca y el enredo con crítica social se mezclan no obstante con cierto drama. La serie tiene como eje una relación paterno-filial, y estas siempre han funcionado muy bien. Goto es viudo y tiene la tarea de cuidar bien a su pequeña hija a la que no puede ver la mayor parte del tiempo; el ver como un personaje adulto se enfrenta a este problema, y el contraste que siempre lleva inherente la figura del niño es algo que funciona muy bien a nivel dramático tradicionalmente generando historias de gran ternura. No obstante, a pesar de que estaríamos más cerca de una primera mitad de "Usagi Drop" que de una recta final de "Kramer contra Kramer", el drama no siempre es puro e inocente, y en cada episodio hay indicios de un final triste -la historia se narra como un gigantesco flashback de la hija al descubrir el secreto de su padre- que nos hace pensar que la historia finalizará de una forma triste. Estos indicios de oscuridad sirven para realzar la comedia y para, en su recta final, permitir a la serie conseguir un final terriblemente emotivo.
En la producción, todo funciona. La animación es francamente buena, no es preciosista porque los diseños de Kumeta son sencillos -que no simples- y el número de trazos o sombras es reducido, pero todo se mueve a una gran velocidad con multitud de deformaciones y recursos cómicos de todo tipo que en todo momento mantienen una calidad muy alta de detalle y le dan a la serie un aspecto visual muy potente. El reparto de voces también tiene que ser mencionado, con un inevitable Kamiya Hiroshi encarnando como sólo el podría hacer al desquiciado y frenético protagonista estándar de Kumeta, aunque el resto de voces no dejan de ser igualmente muy remarcables. A nivel de ritmo la serie se muestra sobresaliente también, sin apenas bajones de este y consiguiendo insertar bien los momentos de ternura y drama para que la trama vaya avanzando lentamente mientras somos testigos de un frenesí de gags y locura que, no obstante, no llegan a hacerse cargantes en ningún momento.
Sencillamente, una pequeña maravilla que dudo sea superada por ningún otro anime este año.

lunes, agosto 17, 2020

OPDM - 066 - Nuestras películas favoritas


Nueva edición del podcast en la que nos salimos un poco de nuestra temática friki de nicho habitual para tener una relajada charla cinéfila sobre algunas de nuestras películas favoritas (no hay demasiados spoilers, más allá de los universalmente conocidos en el caso de películas muy populares)



Las películas, y los tiempos del programa, son:

00:01 - Gattaca
00:17 - La fiera de mi niña
00:30 - El viaje de Chihiro
00:41 - Donnie Darko
00:51 - Megapiraña
01:07 - Parque jurásico
01:29 - Wasabi: El trato sucio de la mafia
01:45 - La princesa prometida
01:54 - Los Goonies
02:08 - Regreso al futuro
02:29 - Cadena perpetua
02:39 - Indiana Jones y la última cruzada
03:06 - Star Wars: El imperio contrataca
03:24 - El señor de los anillos: El retorno del rey
03:55 - Los cazafantasmas

Como siempre, gracias por escucharnos. Esperamos vuestros comentarios sobre este programa o sobre el podcast en general (aquí o en ivoox), así mismo también agradecemos likes, retuits (@eter_nigromante, @STZtwi y @chusetto) o subscripciones.

viernes, agosto 14, 2020

Bakarina, Baka para los amigos

Otome Game no Hametsu Flag Shika Nai Akuyaku Reijō ni Tensei Shiteshimatta...

Katarina Claes es la hija de una importante familia de la nobleza que un día, al darse un golpe, recuerda de golpe toda una vida anterior. Una vida en la que era una otaku japonesa, y al ser consciente de esa vida de pronto se da cuenta de que su vida actual de cuasi princesa en mundo medieval con magia se parece sospechosamente a la de un otome que jugaba. Poco a poco se ira convenciendo de que ha renacido en el mundo de "Fortune lover" al ver a los personajes de ese juego en torno a ella, pero tiene ante si el gran problema de que Katarina en ese juego era la villana y todos los finales del juego acababan con su muerte o deportación... algo que ahora tendrá que evitar con sus conocimientos de las tramas futuras. El problema es que de donde no hay no se puede sacar, y digamos que Katarina no es un prodigio en el uso de las neuronas

Conocida normalmente como "Hamefura", esta serie se encuadra dentro del subgénero de parodia de isekai, teniendo a una prota encantadoramente idiota que teóricamente conoce todo lo que pasará y que ha de manipularlo para que no suceda tal y como pasaba en la historia original. Pero Bakarina no tiene muchos talentos más allá de su capacidad para trepar árboles y un estómago aparentemente sin fin, y su capacidad para analizar las situaciones no es la mejor del mundo. Sin embargo, el carisma de esta chica es poco menos que infinito y, a pesar de ser incapaz de hacer el mas mínimo mal, conseguirá pronto evitar cualquier mal final por el simple hecho de que todos los chicos -y chicas- de la serie se enamoraran perdidamente de ella convirtiendo la parodia de isekai también en una parodia de harem. Así pues, tendremos a una protagonista absurdamente carismática, elaborando planes absurdos para evitar todos los death-flags que la rodearan sin darse cuenta nunca del enorme polígono amoroso de la que ella es el centro absoluto.

Hamefura es una comedia loca de enredo que parodia varios géneros y que funciona a la perfección debido al desbordante carisma de su protagonista, que resulta tan tierna y bondadosa como adorablemente densa y tonta (incluyendo aquí sus espectaculares pensamientos que toman la forma de un consejo de cinco aspectos de su personalidad). Los diseños de los personajes son preciosos, con una animación bastante sólida y unos diseños bastante bonitos con unos trazos finos muy agradables y un vivo contraste de colores. El aspecto sonoro también funciona con unos buenos actores de doblaje y un opening que incluso apunta a una de mis debilidades con Angela. 

¿Tiene entonces esta serie algún problema? Sí, uno muy importante: el ritmo. El problema de esta serie es que sus primeros episodios son tan buenos que la serie no logra alzarse por encima de ellos; su final es correcto -más o menos la serie consigue buscar una trama "dramática" para su cierre-, pero varios de sus episodios centrales se notan descaradamente de relleno y funcionan bastante peor que el resto. La serie es tremendamente divertida por momentos, pero digamos que cuando no brilla se le notan demasiado las costuras. No obstante, el resultado general es con mucho más que positivo, y Bakarina es sin duda uno de los personajes más carismáticos de estos últimos años de anime con lo que si bien creo que no puede considerarse un imprescindible si que creo que es sin duda una serie absolutamente recomendable.

martes, agosto 11, 2020

Audio reseñas de la semana - 17

One Piece 987 - El brocado del vasallo leal

Assassin´s Creed II

Nueva colección de reseñas en formato podcast, con el capítulo semanal de One Piece y la reseña del celebrado segundo juego de la saga de asesinos de Ubisoft.

sábado, agosto 08, 2020

Casi agradezco que Pratchett haya muerto

Rompiendo la tónica del blog, hoy casi un artículo editorial, pero no porque el odio es fácil y divertido de escribir, si no porque ahora parece que los seguidores de una saga no pueden soñar con una adaptación de ella si no que tienen que dar gracias a lo que le echen. Así pues, vamos con la imagen que ha desatado mi indignación:



¿Qué mierda es esto?

No sé lo que es, pero se lo que no es. Y oye, luego la serie podrá estar muy bien, pero yo no la voy a ver a no ser que oiga una cantidad monstruosa de buenas críticas, y aún en ese caso no la vería como "Mundodisco" o "la Guardia", porque desde luego eso no lo es. 
Si yo a finales de los 90 me ilusioné cuando escuche hablar de la adaptación de "El señor de los anillos" fue porque quería soñar con ver mi imaginación cobrar vida, y los pelos se me pusieron de punta cuando vi aquel primer traíler con ese plano en el que veíamos desfilar a los nueve miembros de la comunidad, porque eran como siempre los había imaginado, porque los reconocía de inmediato (menos a Merry y a Pippin, claro, ese par siempre han sido completamente intercambiables).


Claro, uno pensaría que no tendría mucho mérito diferenciar a un enano de un elfo en circunstancias normales... sería lo lógico y normal, pero yo al menos no veo a Jovial CuloPequeño en la imagen de arriba.

Y así hemos llegado a esta época, donde nos quieren vender un producto genérico de acción con su comedia y su romance de primero de guionista y con alguna que otra falsa pretensión artística a la que colocan la etiqueta de una marca conocida a explotar y ¡voilá! ¡Tenemos un blockbuster!

Yo al menos no paso por ahí. Adoro Mundodisco, pero no voy a ver esta cosa. ¿Por prejuicios? Por supuesto, prejuzgo las cosas, como todo hijo de vecino. Tengo X tiempo, X horas que puedo dedicar al ocio, y no es que tenga muchas cosas que ver, es que tengo muchas que ya he aceptado que no me dará tiempo a ver en vida, triste que suene. Me gustaría terminar de ver alguna vez "The Shield", me gustaría leerme "el Romance de los tres reinos", y me gustaría rejugar o releer muchas cosas. No tengo tiempo para todo, y si aparece un producto nuevo tiene que llamarme la atención. Si ese producto se ambienta en alguna franquicia que me guste, perfecto... pero no por gustarme los videojuegos espero la película de Mario, ni voy a ver más temporadas de Castlevania cuando en la primera temporada perdieron 1 episodio con un diálogo sobre follar cabras. Hay excepciones, por supuesto, siempre hay cosas que ves por las risas con amigos y supongo que veré algún día el episodio IX y el Mandaloriano, pero no tengo especial prisa por hacerlo.

Pero porque a algo le pongan el nombre de One Piece o de Mundodisco no voy a verlo, precisamente porque amo esos universos no voy a tragar con cualquier cosa que lleve su título. El título no hace al producto.

Y que veo en esa imagen:

- Jovial: ¿Qué es eso? En serio, no se si es un actor o una actriz, y eso no es malo en ese personaje, de hecho todo lo contrario... pero desde luego no es un puto enano. ¿Por qué es tan alto? ¿Por qué no tiene barba?

- Angua: Perfecta. Me mola.

- Vimes: El actor me gusta, aunque le veo demasiado enfocado a la acción... me lo imaginaba más pasivo, o más quemado, por decirlo de alguna forma.

- Detritus: Bueno, un trol, me lo imaginaba más ancho que alto, pero bueno, lo importante es ver su ballesta.

- Zanahoria:  Quiero pensar que es un tema de la imagen, pero parece como si le faltaran bastantes centímetros de altura y de hombro a hombro. Se supone que la gracia inicial del personaje es que diga ser un enano y mida dos metros... y luego ha de parecer "señorial". No sé, en otras imágenes si que tiene buena pinta, así que creo que es un tema puntual de ese montaje (en la siguiente captura si que tiene buena pinta, aunque Angua parece una yonki)


Luego, por supuesto está el quinto elefante en la habitación...

Lady Sybill. Vamos a obviar el hecho de que sea negra, eso no importa. Lo que importa es... ¿por qué demonios esta ahí? Sybill es una millonaria excéntrica entrada en años que cuida dragones, no una jodida amazona que va por ahí con hachas como cabeza de cartel... es que es muy ridículo. Y ya no entramos en el tema de la diferencia de edad con Vimes, porque esto nos lleva a otro personaje:

Vetinari. Que pasa a ser una mujer. Diría que no habría problema, una buena aristócrata mola y lo único que conllevaría sería seguramente convertir en varón a una vampiresa con la que tiene cierto "entendimiento"... lo diría si confiara en los guionistas, lo diría si no me imaginara que no van a poder resistir el meter una extraña tensión sexual con Vimes, lo diría si la diferencia de edad con respecto a Sybill -y el aspecto de esta- rompieran por completo el carisma de esa pareja con la oronda y despistada madre de dragones siendo la única que llama al hombre más poderoso de la ciudad Havelock (que supongo que ahora cambiará).

No sé, está Carcer por ahí y hay un actor para interpretar a John Keel, con lo que quizás todo esto sea porque la historia se basará en Ronda de Noche con todo lo que ello conlleva, pero entonces... ¿que pintan Jovial, Angua y Zanahoria ahí?

Y lo más importante...

¿Cómo demonios se puede plantear una serie de la Guardia sin Fred Colon y Nobby Nobbs?

jueves, agosto 06, 2020

Girando hacia nuevos horizontes

JoJo no Kimyou na Bouken Part 7: Steel Ball Run

Séptima entrega del universo Jojo, y primera tras el reinicio que supuso en cierta forma el final de la sexta. En esta Jojo nos trasladamos a finales del siglo XIX, más o menos a las mismas fechas en las que el primer Jojo se enfrentaba al vampiro Dio... pero este es un universo alternativo, y aquí tenemos a Johnny Joestar, un jockey parapléjico que se une a la "Steel Ball Run", una suerte de Paris-Dakar yanki en la que un millonario ha prometido una recompensa de 50 millones de dólares al que cruce antes todos los Estados Unidos desde San Diego a Nueva York. Johnny seguirá al verdadero protagonista de la historia: Gyro Zeppeli, que supone el regreso de esta mítica familia de la franquicia con un joven que tiene como armas un par de bolas de acero que controla mediante el poder de la "rotación". Sin embargo, mientras se enfrentan a otros participantes y sus poderes, Johnny y Gyro descubrirán que se encuentran inmersos en el centro de varias conspiraciones.
La rotación es el nuevo negro, o la nueva respiración. El poder del giro vendría a suplantar al poder del "hamon" de las dos primeras entregas, y me gusta tan poco como aquel. Basicamente Gyro, con su par de bolas, puede hacer cosas muy raras que afectan a todo lo que le rodea sin que uno nunca sepa muy bien a que reglas atenerse... algo que luego se extenderá a Johnny cuando este descubra su stand y el poder de este sea... "disparar sus uñas que giran sobre si mismas a una gran velocidad". Es muy raro, pero esto es Jojo, si ahora a los stand -que se muestran más contenidos- le sumamos un nuevo tipo de poder tampoco vamos a extrañarnos. Como he dicho, esto es Jojo, sabíamos a lo que veníamos. La rotación es rara, pero es que incluso los stands son raros hasta para los estánderes de Jojo y el que sean menos poderosos no es un impedimento para imaginación de Araki.
Tengo sensaciones encontradas con esta Jojo. Tiene algunas de las mejores críticas de la saga, pero particularmente no he llegado a conectar del todo con ella. Tiene un ritmo muy bueno espoleado por las diversas etapas de la carrera donde se presentan bien las batallas (el que la publicación pasase a mensual y los capítulos sean más largos proporciona una mejor narración en los capítulos ante la desaparición de la obligación de un cliffhanger cada 18 páginas), y esa misma competición le permite mostrar una gran alternancia de escenarios y poder hacer ligeros reset. Es una Jojo que no cae en la escalada de poder habitual de la franquicia, y más o menos se muestra comedida en todo momento con unas batallas en las prima más el ingenio que la fuerza bruta porque los propios enemigos atacan basándose más en un contexto que favorezca a sus stand que en la fuerza bruta de estos. Ni siquiera el jefe final está tan dopado como algunos de sus antecesores y se encuentra en problemas en más ocasiones de las normales. 
Pero no me gusta especialmente el tema de los giros, y ni Gyro ni Johnny me gustan tampoco especialmente como personajes a pesar de estar bien construidos. Con personajes como el nuevo Dio o el villano Vallentine me encuentro más cómodo, así como con el indio que hace la carrera a pie, la grandísima HotPants o ese coloso de personaje que es Lucy Steel y que se ha convertido para mi en el mejor -o al menos el más heroico- personaje de la franquicia. Es una sensación extraña, porque en esta saga el grupo protagonista se ha reducido a dos en una clara "road movie" con tintes de western por su espectacular paisaje; pero en esta "Centauros del desierto" disfruto más cuando aparece Hotpants como tercer miembro del grupo, o cuando la narración salta directamente a otros personajes -antagonistas incluso- y vemos las extrañas alianzas temporales que se forjan fuera del marco de la carrera y del conocimiento de la dupla Gyro-Johnny. Es extraño y no puedo evitar que me parezca algo triste. Johnny y Gyro no son malos personajes, pero no me gustan especialmente ni ellos ni sus habilidades, y aunque haya momentos disparatamente geniales como la batalla contra "Scary monsters" (en el top de las batallas de la franquicia) también es cierto que cuando el enemigo no terminaba de gustarme o todo se centraba en las rotaciones estaba esperando a que acabará ese enfrentamiento lo antes posible. 
Del arte no tiene sentido hablar ya, estamos hablando de un Jojo ya muy maduro dentro de la franquicia. El arte de Araki es indiscutible, y casi diría que en esta saga se ha autocomedido en cuanto a poses y "ángulos de cámara" (en Stone Ocean no había nadie que mantuviera durante más de una viñeta una postura anatomicamente cómoda), ahora bien la ropa es más elaborada y enrevesada que nunca, y naturalmente con algunos de sus stands la locura visual es la absolutamente predecible, además durante sus 24 tomos el mangaka se enfrenta casi en cada viñeta a ese desafío constante que es dibujar caballos desde todos los ángulos posibles en el marco de unos paisajes naturales inconmensurables.
Es una Jojo extraña, y creo que ha jugado en mi contra el tener una espectativas muy altas. Creo que constituye un muy necesario paso hacia la contención en una franquicia que se había precipitado demasiado hacia la locura en el último tercio de "Stone Ocean", y creo que tiene algunos momentos sencillamente memorables y una historia muy bien construida... pero lo de los giros sigue sin gustarme especialmente, y en mi particular ranking la seguiría colocando por detrás de las partes 3 y 4, más o menos al nivel de la 6, estando por encima de 1,2 y 5.

Y ahora, como me aburro, ranking de mis batallas favoritas de la franquicia:

1. Lucy Steel vs "el puto mundo entero" (Cath the Rainbow, Tubular Bells, Funny Valentine y Dio)
2. Hayato vs Yoshikage Kira
3. Limp Bizkit vs Ermes Costello & Jolyne Kujoh & Foo Fighters
4. Kakyoin & Polnareff vs The hanged man
5. Iggy vs Pet Shop
6. Dio & HotPants vs D4C
7. Jotaro & Okuyasu vs Red Hot Chili Pepper (se que es trampa y que en verdad son varias)
8. Dio & Scary Monsters vs Gyro Zeppeli & Johnny Joestars
9. Buciaratti & Mista vs Greateful Dead & Beach Boy
10. Kakyoin vs Death 13
11. Giorno Giovanna vs Black Sabbath
12. Cesar A Zeppeli vs Wammu

lunes, agosto 03, 2020

Audio reseñas de la semana - 16

One Piece 986 - Mi nombre

El séquito

Catherine Fullbody

Nintendo Direct Mini Julio 2020

Nueva colección de reseñas en formato podcast, en esta ocasión con el contenido de dos semanas, con un MiniDirect de Nintendo, un videojuego, una serie y un capítulo de One Piece.