Últimamente me parece que soy algo duro con esta serie, pero se dice que cuanto más fuerte es el amor más duele la traición, y a Claymore creo que podemos pedirle bastante más de lo que nos está dando últimamente. En este capítulo no ha muerto Miria, y tampoco ha pasado algo raro con Priscilla o con Clare.... no es un mal capitulo en el sentido argumental, pero tampoco es un buen capitulo en este aspecto, y formamente si me parece un capitulillo bastante malo.
La cosa va de que Helen y Deneve (y Cynthia y Uma, si a alguién le importa) regresan a la ciudad sagrada de Labona (también conocida como la Unica ciudad del manga), y allí se encuentran con una batalla campal entre una horda de espectros y las fuerzas de la ciudad.
Es un gustazo ver a Galatea luchando con su estilo habitual, y es otro gustazo ver a Miata repartiendo a diestro y siniestro... y el resto de las Claymore hacen sus cositas e incluso los soldados muestran que se puede estar frente a un espectro y hacer algo más que gritar y morir. Pero todo esto no nos cuenta nada. Al parecer los malvadísimos hombres de negro de la Organización mandan a los espectros a la ciudad para acabar con ellos por su neutralidad... no termino de entender muy bien porque no lo habían hecho antes, y tampoco si es que temían a las Claymore teniendo a las gemelas y a "la horda de claymores anónimas más fuertes que Miria", además que tampoco me gusta un acto de maldad tan caricaturesca e innecesaria. Porque es este tono simplista del capítulo lo que menos me ha gustado.
Vale que Yagi quiera hacer algo de tiempo hasta resolver el asunto de Clare (vale, pero tampoco "vale" mucho), vale que quiera terminar de dibujar a la Organización como malos, vale que muera Miria... demos por válidas muchas de las discutibles decisiones que Yagi ha tomado ultimamente. Puedo entender estas cosas si estan al servicio de la historia global. Pero una cosa es el contenido y otro el continente. Y las formas de Yagi se han echado a perder últimamente, y este capítulo es una muestra muy clara de ella. El capítulo no tiene un gran fondo argumental pero... ¡¿Qué demonios?! A todos nos gusta ver de vez en cuando una buena batalla. El problema es que lo que vemos esta muy lejos de ser una buena batalla. El grafismo de Yagi es bueno, y hay alguna que otra buena escena de acción, pero la batalla en líneas generales... es muy decepcionante. No pido ver una batalla planificada como las que Miura nos presentaba en la Edad Dorada de Berserk, ni tampoco pido un salvajismo o una brutalidad extremas las de la obra del mangaka fan de Idolmaster... pero no quiero ver una batalla Disney. Y eso es lo que he tenido la sensación de leer en este capítulo. Niñas que corren y Claymore que corren para salvarlas, pobres mujeres indefensas atacadas por demonios y a las que salva milagrosamente una Claymore a pesar de que este altruista acto la pone en una situación muy peligrosa. No quiero ver violaciones, no quiero ver una casqueria sin sentido... pero tampoco pasa nada porque en una guerra se vea un poco de sangre y alguna que otra muerte. Las Claymore estan luchando contra demonios, contra bichos muy, muy malos y muy, muy asquerosos.... Yagi, lo divertido de los malos es que hacen cosas malas, no pasa nada por mostrarlo, es a lo que se dedican.
pd: la imagen con la que acompaño la reseña no pinta nada... pero me hace gracia imaginar lo que sería un eroge protagonizado por las Claymore.
La cosa va de que Helen y Deneve (y Cynthia y Uma, si a alguién le importa) regresan a la ciudad sagrada de Labona (también conocida como la Unica ciudad del manga), y allí se encuentran con una batalla campal entre una horda de espectros y las fuerzas de la ciudad.
Es un gustazo ver a Galatea luchando con su estilo habitual, y es otro gustazo ver a Miata repartiendo a diestro y siniestro... y el resto de las Claymore hacen sus cositas e incluso los soldados muestran que se puede estar frente a un espectro y hacer algo más que gritar y morir. Pero todo esto no nos cuenta nada. Al parecer los malvadísimos hombres de negro de la Organización mandan a los espectros a la ciudad para acabar con ellos por su neutralidad... no termino de entender muy bien porque no lo habían hecho antes, y tampoco si es que temían a las Claymore teniendo a las gemelas y a "la horda de claymores anónimas más fuertes que Miria", además que tampoco me gusta un acto de maldad tan caricaturesca e innecesaria. Porque es este tono simplista del capítulo lo que menos me ha gustado.
Vale que Yagi quiera hacer algo de tiempo hasta resolver el asunto de Clare (vale, pero tampoco "vale" mucho), vale que quiera terminar de dibujar a la Organización como malos, vale que muera Miria... demos por válidas muchas de las discutibles decisiones que Yagi ha tomado ultimamente. Puedo entender estas cosas si estan al servicio de la historia global. Pero una cosa es el contenido y otro el continente. Y las formas de Yagi se han echado a perder últimamente, y este capítulo es una muestra muy clara de ella. El capítulo no tiene un gran fondo argumental pero... ¡¿Qué demonios?! A todos nos gusta ver de vez en cuando una buena batalla. El problema es que lo que vemos esta muy lejos de ser una buena batalla. El grafismo de Yagi es bueno, y hay alguna que otra buena escena de acción, pero la batalla en líneas generales... es muy decepcionante. No pido ver una batalla planificada como las que Miura nos presentaba en la Edad Dorada de Berserk, ni tampoco pido un salvajismo o una brutalidad extremas las de la obra del mangaka fan de Idolmaster... pero no quiero ver una batalla Disney. Y eso es lo que he tenido la sensación de leer en este capítulo. Niñas que corren y Claymore que corren para salvarlas, pobres mujeres indefensas atacadas por demonios y a las que salva milagrosamente una Claymore a pesar de que este altruista acto la pone en una situación muy peligrosa. No quiero ver violaciones, no quiero ver una casqueria sin sentido... pero tampoco pasa nada porque en una guerra se vea un poco de sangre y alguna que otra muerte. Las Claymore estan luchando contra demonios, contra bichos muy, muy malos y muy, muy asquerosos.... Yagi, lo divertido de los malos es que hacen cosas malas, no pasa nada por mostrarlo, es a lo que se dedican.
pd: la imagen con la que acompaño la reseña no pinta nada... pero me hace gracia imaginar lo que sería un eroge protagonizado por las Claymore.
8 comentarios:
Yo sigo insistiendo desde hace la tira de capítulos: los monstracos no molan, no tienen personalidad o carisma, a nadie le importa que un bicharraco sin cara la palme, y desde el salto temporal los enemigos kakuseisha son mayoría. Eso es muy distinto a la Claymore 4 que estaba loca, a Priscilla joven, etc...
Por eso no estoy de acuerdo con lo del nivel de la serie ahora mismo: no es ni mucho menos tan buena como antes del salto pero me sorprende que alguien tan positivo como tú le de tantos palos, siendo para mi estos dos últimos capítulos al menos decentes. Otra cosa es que le pidamos más, por supuesto (yo lo hago); pero hace 5, 10, 15 capítulos, la serie estaba peor.
Yo antes era más comprensivo. Más o menos desde la muerte de Isley hemos visto a Yagi tomar decisiones muy arriesgadas... y más o menos le daba un voto de confianza porque ¡joder, si ha matado a Isley y Riful será por algo! Eso quería pensar. Pero la cosa es que ya llevamos como un par de años que la trama avanza hacia una dirección que creo que nadie entiende, y eso no es malo... si no lo hiciera de una forma tan errática.
Y la trama, bueno, seamos comprensivos y pensemos que Yagi la tiene pensada. Pero a todo esto se le suma las largas que el autor le dio al combate de Priscilla contra Raphaluci (que aún no se ha visto), y que luego además Miria murio de una forma poco menos que lamentable... y ahora coloca esta batalla en la que no muere ni un alma, y yo soy positivo... pero hay cosas por las que ya no puedo pasar.
Completamente de acuerdo en lo que comentas de los enemigos. El gran problema que le he visto a esta segunda temporada es que no hay clase media. Hay enemigos que son basura al lado de las Claymores y otros para los que ellas son basura... no hay un termino medio.
Eso de que, "entre más grande el amor, más duele la traición" es perfecto, no lo hubiera yo podido decir mejor.
Lo siento mucho, pero deverdad creo que "hemos" perdido a Claymore, la verdad con cada capítulo le pierdo más la fé de que vaya a levantarse otra vez.
Y es doloroso decirlo, porque apesar de que prometí dejar de ver la serie, nada más no puedo hacerlo.
Esta serie es preciosa, chicas hermosas con espadas enormes y además todas rubias, ¿hay algo mejor que eso?.
Pues ese "algo mejor" era precisamente el argumento y aunque fue emocionante ver a Galatea y a Miata hacer lo que mejor hacen aparte de mostrar la belleza, la verdad al final me quedé igual que como empecé.
Claymore es como la novia que lastima, pero no puedes dejarla.
Yo todavía le doy un voto de confianza. Yagi ha tomado unas decisiones muy valientes y desde luego nada propias de alguién que está improvisando. Eso sí, el camino hasta ese "algo" al que quiere llegar se me esta haciendo bastante duro.
Yo apelo de nuevo al doble rasero: ¿por qué Berserk esta en su saga mala pero Claymore va para abajo? No lo entiendo; hace dos capítulos sí, pero ahora que mata a Miria de forma realista y deja a un lado a Clare, cuando más puedo prometer una remontada si se centra en los personajes... Los Youmas del principio de la serie tampoco matan a nadie de la ciudad.
Argumentalmente... confio en Claymore, formalmente me parece que Yagi ha hecho algunas cosas muy discutibles ultimamente. Y la muerte de Miria, si bien esta bien que no sea la enésima muerte épica que todos estamos cansados de ver.... me parece también muy forzada.
En todo caso, lo que menos me gusta de la serie ahora mismo es el ritmo. Llevamos unos 30 capítulos casi con el mismo hilo argumental desde que Riful revelara la estatua de las dos hermanas abrazadas. Cierto que han pasado muchas cosas... pero es que eso eran como 4 sagas en la primera parte de la serie, y creo que en ese sentido hemos perdido bastante el ritmo que la caracterizaba (y que me parecía una de las virtudes de la serie). Antes Claymore era una serie mensual, ahora me parece que sus capítulos son los de una semanal un poco alargados.
Luego ya, comparando con Berserk.... Claymore lleva un par de malos años. Berserk lleva un lustro en el que lo único que me ha gustado ha sido la imagen de Gatsu sobre Zood, el resto han sido anodinos capítulos de batalla o de "mirar al bello Griffith". Claymore esta mal, pero es un prodigio de ritmo y emoción en comparación con la serie de Miura en estos momentos.
No he leído nada para evitar spoilers, pero al ver la foto he pensado "What the Fuck?". Luego sí he leído la PD XD.
Pásalo bien.
Haces bien en mantenerte alejado, que ahora mismo es muy fácil spoilear la serie y joderla.
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