Las reseñas literarias siempre son complicadas, pero si hablamos de novelas como esta ya directamente rozan lo imposible y lo sacrílego.
"100 años" es realismo mágico en su sentido más puro; una prosa increíblemente poética y meláncolica donde todo tipo de sucesos completamente mágicos enmarcan la vida del árbol genealógico de los Buendía y del pueblo de Macondo en sí. Mucho se ha escrito sobre este libro, y en cierta manera da vergüenza intentar hablar de él en unos párrafos cuando libros enteros se han llenado con opiniones e interpretaciones sobre esta obra magna de la literatura universal. Un servidor llega a lo mínimo, la extrapolación de la vida de Macondo y de Úrsula como la vida de una persona, con sus diversos periodos como la infancia mágica donde todo es posible, la juventud esperanzadora llena de sueños y amor, las revoluciones políticas y sociales, la madurez desencantada y los años finales decrépitos que esperan la muerte mientras rememoran la juventud.
"100 años de soledad" es un libro denso, es largo y ocurren muchas y muy variadas cosas... y muchas de ellas muy raras. Es un libro que exige mucha atención al lector, con muchos nombres, con párrafos muy descriptivos sucedidos por otros en los que suceden de repente muchas cosas. Salta hacia atrás y hacia delante en el tiempo. Y me pareció que se alargaba algo en su recta final cuando lo leí por primera vez hace 15 años y me lo sigue pareciendo ahora. Es un libro muy raro. Y cuando afronté su relectura pensaba que me iba a decepcionar por lo mitificado que lo tenía y lo extraño y particular de su contenido y su narrativa. Me equivocaba. En esta nueva lectura, siendo una persona diferente a la que era cuando siendo adolescente lo leí por primera vez, el libro me ha maravillado tanto más que entonces.
Es un libro que, a falta de una descripción mejor, sólo puedo decir que tiene un "algo", una magia intangible que se encuentra en muy pocos libros. Una de esas obras en la que disfrutas cada página y te alegras de, en algún momento de tu infancia, haber cogido un libro y haberte convertido en un lector.
En el siguiente momento mítico Rita Hayworth nos señalará el camino a Zihuatanejo.