lunes, septiembre 07, 2009

Antes diversión que innovación

Tales of symphonia

Después de un Final Fantasy y un Dragon Quest, me ha parecido divertido continuar mi pequeña marathon de RPGs con un "Tales". Ninguno mejor para ello que esa pequeña joya de Gamecube que en su día no pude acabar y que me pareció uno de los mejores juegos de su decepcionante catálogo. Ahora por fin he acabado ese último combate en el que me quedé y estoy preparado para volver a ver a Lloyd y compañía en Noviembre, cuando llegue "El despertar del nuevo mundo".
Vaya por delante que no he jugado ningún Tales además de esta entrega, luego no puedo comparar este juego con el resto de los de su saga (aunque como comenté a raiz del anime de "Abyss", esta es una saga argumentalmente muy simple y basada en unos preceptos muy juveniles e idealistas). En este juego nos encontramos con unas premisas muy simples, un mundo en decadencia que exige un viaje de peregrinación de una elegida para mostrar a una diosa la valía de la raza humana. Pero a este viaje pronto se uniran elementos más complejos y universales, la discriminación, el menosprecio de la infancia, el deseo de reconocimiento de los adultos, la perdida de los ideales, el idealismo en si... conceptos universales tratados de una forma que puede parecer simple en un principio pero que consiguen calar en el jugador gracias a una sana carencia de pretensiones y a unos personajes bastante bien construidos que crecen conforme el jugador crece. No creo que se pueda decir que los personajes de este juego son una oda a la originalidad y al trabajo de guión, pero cumplen de sobra. Tales bebe mucho del anime y el manga, y si su argumento es el de un shonnen normal, también lo son sus personajes, y así tenemos al idealista Lloyd y a la ingenua y angelical Colette como protagonistas, pero a su lado tenemos las figuras paternas de Kratos y Raine, a la divertida tsundere que es Sheena, al ligón cargante que es Zelos, a la loli autista Presea, al atormentado y silencioso Regal y al niño desencantado que es Genis. Todos estos elementos pueden parecer demasiado tópicos, pero funcionan. La historia, aún con sus momentos dramáticos y serios, es ligera y se desarrolla en un ambiente distendido y relativamente alegre (aquí el juego agradece mucho una serie de diálogos opcionales que sirven para profundizar en los personajes). Un juego de estas características ha de tomarse siempre en broma, pues obviamente hay elementos jugables como son las batallas contra los espíritus que en un argumento serían poco menos que imposibles de justificar.
Pero lo importante de este juego, de la saga Tales -al parecer- no es otra cosa que su jugabilidad, y en especial sus combates. Y aquí nos encontramos con JRPG clásico a más no poder con unas batallas terriblemente divertidas. El juego es muy simple. Tenemos a nuestro grupo de héroes e iremos con ellos de un lado a otro, de una ciudad a una mazmorra, alternando diálogos con los que conoceremos algo más de la historia con las clásicas batallas de estos juegos. La historia es bastante lineal y resulta complicado perderse en ella o no saber hacia donde dirigirse en cada momento (además de que el juego tiene un cuaderno de viaje en el que se nos orienta algo en este aspecto), aunque ofrece algunas sidequest bastante rebuscadas que alargan considerablemente la vida del juego. Además, en las ciudades encontraremos un buen surtido de tiendas que nos permitiran mejorar nuestro equipo y comprar las habituales pociones que necesitaremos a mitad de los combates. En las batallas es donde encontramos la gran virtud de esta serie. Batallas en tiempo real en las que manejas a uno de los cuatro miembros de nuestro equipo. Con nuestro héroe, aunque es posible cambiarlo supongo que la inmensa mayoría de los jugadores manejaran personalmente a Lloyd, podemos atacar y defendernos de nuestros enemigos como si casi de un beat´em´up se tratara, mientras que los otros cuatro miembros restantes de nuestro grupo actuaran de acuerdo a las pautas que les hayamos marcado (tipo de movimiento, tipos de ataque, distancia a la que se moveran) ; las pautas en las que se mueven estan bastante bien implementadas (salvo algún que otro momento en los que vemos como a nuestro sanador o hechicero se les va la cabeza y tratan de atacar fisicamente a un monstruo gigantesco), pero también podemos modificarlas siempre que queramos desplegando un menú y forzando a cada personaje a realizar un hechizo, hacer algún tipo de ataque concreto o utilizar algún objeto. Las batalles cuenta además con un aliciente que añade más espectaculo visual del inherente a este tipo de juegos, y ese es un pequeño marcador que iremos llenando conforme "acertemos" en nuestro enemigo y que nos permitira realizar ataques conjuntos en los que nuestros 4 personajes encadenaran los ataques que nosotros seleccionemos, formando con ello un combo más que notable que quitara mucha vida a nuestros enemigos sin que estos tengan posibilidad de contraatacar y sin que nos cueste un solo punto de magia.
Tengo que mecionar sin embargo, un par de elementos que restan dificultad a las batallas y al juego mismo. El primero es que después de cada una de ellas siempre recuperamos algo de vida y de puntos de magia, lo cual hace que el desgaste que siempre suponen los enemigos pequeños en este tipo de juegos aquí no se lleve a cabo. El segundo elemento que no me gusta es que, aunque no permite cambiar de miembros del equipo durante una batalla, aquellos que no usamos tambien ganan experiencia, algo que nunca me ha gustado en estos juegos pues no premia a aquellos jugadores que traten de hacer que todos los personajes avancen a la par.
Tecnicamente es un juego correcto. Un escenario en 3D a modo de mapamundi y sobre él ciudades y mazmorras creadas también en 3D, pero a las que una camara fija permite dotar de un nivel de detalle bastante grande. La estética es colorida y variada, y el diseño de personajes, a cargo del mangaka de "Oh, mi diosa!" le sienta de fábula a la historia. Los personajes tienen una estética super-deformed lo cual, unido a su desarrollo clásico, hace que nos encontremos ante un juego más parecido a los clasicos de snes o de los primeros tiempos de playstation que a la estética que se ha impuesto en estos tiempos y de la que la saga "Tales" continua tratando de escapar.
El juego esta doblado al ingles y tiene unas voces que podemos considerar aceptables, aunque aquí habría preferido que existiera la opción de disponer del doblaje original y disfrutar actores de doblaje como Katsuyuki Konishi, Yumi Touma, Kuwashima Houko o Okamura Akemi. No obstante, las voces no son malas, y a ellas se une una traducción al castellano magnífica.
En resumen, "Tales of Symphonia" es un correcto RPG que en ningún momento pretende revolucionar el género y que, con su consistente historia, sus buenos personajes y -sobre todo- su adictivo sistema de batalla, proporciona facilmente más de unas 40 buenas horas de juego.
Un juego muy recomendable del que ya estoy esperando su segunda parte a pesar de que algunas de las novedades jugables que este parece tener no terminan de convencerme.

11 comentarios:

Battosai dijo...

Es un juegazo como la copa de un pino... pero no sé yo si lo volvería a jugar. Creo que me duró 60 horas, y aunque tardase mucho menos la segunda vez... qué pereza me da ponerme.

Por cierto, si no lo has jugado te recomiendo probar Baten Kaitos.

Muramasa dijo...

Quién no ha probado hacer "Fotón!" como Raine...

eter dijo...

Battosai, yo en su día no termine de pasarmelo, me quede en el último monstruo (en su segunda transformación, para más inri). Pero por aquel entonces no podía jugar bien por varias razones.
Ahora he podido disfrutarlo más y, además de pasarmelo -obviamente-, jugar más despacio, cansarme de luchar y realizar algunas de las sidequest.
El Kaitos, junto con el Fire Emblem, es una de mis asignaturas pendientes de la Cube. Pero ambos son poco menos que imposibles de encontrar.

Muramasa, grande Raine y su "foton". No es mi personaje favorito (Sheena), pero era terriblemente útil con sus hechizos de recuperación y muy divertida cuando se ponía a divagar en plan arqueologa o profesora.
Una pena que no se mantuviera el doblaje original. En japones le pone la voz Urd de "Oh, mi diosa", y me encanta la voz de esa actriz.

Eratia dijo...

Como comenté hace tiempo, este Tales ha sido siempre uno de mis juegos favoritos, al igual que pueden ser el Golden Sun o el Grandia II.

Ahora mismo yo me lo estoy pasando gracias a que me he encontrado un alma caritativa que me deje tanto este Tales como el Fire Emblem, lo cual agradezco.

Entrando en el tema de los personajes, aunque mi favorito sigue siendo Sheena, aquí la mayor parte de los personajes tienen momentos que hacen que acaben gustándote todos (Raine en su modo arqueóloga, Genis intentado ligar con Presea... y fracasando estrepitosamente, Kratos y su pasado...). Sencillamente, por muy tópicos que sean los personajes, crecen con el guión, que ya es mas que suficiente. Y la historia tiene momentos trágicos (lo de Raine y su madre, sin ir mas lejos), pero también tiene muchos momentos divertidos que aligeran la historia (El primer encuentro con Sheena sin ir mas lejos. Pobrecita, pero lo que me pude llegar a reír en ese momento)

Por otro lado, la historia que hay detrás, la de Cruxis, Mithos y Ygdrassil, es realmente grande.

Para mí, uno de los pocos juegos que deberían de ser imprescindibles.

eter dijo...

Hay ganas de ver ese Golden Sun nuevo para la DS. :)

El Fire Emblem de la Cube es un juego que me encantaría poder jugar, el de la Wii me parece de lo mejor de la consola.

Sheena cae muy bien por ese aire de tsundere brutal que tiene y por todos sus pactos con los espíritus, pero Presea y su historia son preciosas, Raine es otra que tal, y Zelos es un descojone con sus idas de olla, incluso Regal que es muy serio y entra bastante tarde en la historia tiene sus grandes momentos.

Para mi gusto es otro imprescindible, la historia puede ser mejorada, es cierto. Pero si otros juegos cojea la jugabilidad al tratar de innovar, aqui no. Es clasico a más no poder, pero las batallas son entretenidas y ese suele ser el problema de estos juegos. Solucionado ese punto conflictivo... el resto de elementos formulas de efectividad más que probada.

Bassdrum D. Txema dijo...

Excelente reseña para un juego que lo merece. Uno de esos "juegos de culto" que sin pretender ser Final Fantasy dejan un agradable sabor de boca.

Una alegría para aquellos dificultosos tiempos de la GameCube.

eter dijo...

hombre, tanto como sin pretensiones no diría. Vale que no es Final Fantasy, pero no deja de ser una saga muy reputada en Japón.

Anónimo dijo...

Te comento ahora porque acabo de terminar el anime de Tales of Sympohonia (11 capítulos) y he sentido la urgencia de recomendártela. Es corta, intensa, y bien planteada. De cosas malas, que alguna hay, no te diré nada para no chafarte.

Ufotable en plena forma. Symphonia. 11 capítulos. Piénsalo.

Un saludico!

eter dijo...

Lo conozco, me gusta bastante... aunque sobre todo al final, la primera parte se nota demasiado que esta hipercomprimida (me habría gustado que hubieran animado esta serie con 24-26 episodios como hicieron con Abyss).

PD: Y tiene uno de mis opening favoritos :)

Anónimo dijo...

Síii el primer opening es chulísimo, y juega brillantemente con alguna nota de la ost del juego.

Fíjate, que a mí el final, teniendo fresca la experiencia, es lo que menos me ha gustado. Demasiado clímax largo tras clímax largo, que se me ha hecho muy muy cargante a pesar de estar bien narrado. Diría que los 4 episodios de Tethe'alla son los que más he disfrutado, por ritmo, revelaciones y nuevos personajes.

Nada, pues. Creía que no la habías visto porque no habías hecho reseña, pero me alegro de que sí, porque debe de ser de los mejores animes basados en un videojuego que se han hecho.

eter dijo...

Yo la vi hace demasiado, así que no la tengo muy fresca. Tethe´alla recuerdo que me encantó, aunque sólo fuera porque las 4 primeras me decepcionaron por estar todo ultracomprimido... y luego además los personajes de Tethe´alla me encantan, con esa historia de Presea o todo el arco mi adorada Sheena :)