Siguiente novela de Mundodisco que leo y reencuentro con Rincewind tras bastantes libros centrados en otros personajes. Y hemos de recordar que Fausto Eric ni siquiera era una gran aventura del mago, era un relato corto extendido para gloria del ilustrador; la última gran aventura de Rincewind se remonta al incidente del Rechicero, y entonces Mundodisco era algo muy distinto a lo que es ahora. Mundodisco nacio de la mano de Rincewind, pero ese mundo que el mago nos presentó en compañía de Dosflores cambión con la llegada Ridcully, Escurridizo, lord Vetinari y la Guardia. Yaya y la Muerte consiguieron integrarse a este mundo, con esta novela Pratchett se redime de haber dejado de lado a su primer protagonista. Rincewind vuelve a protagonizar una novela de Mundodisco y, después de haberse cruzado con gran parte de los secundarios ahora clásicos de la serie, hace lo que mejor sabe hacer: expandir el mundo.
Y Rincewind nos lleva al continente Contrapeso, al Imperio Ágata, donde un pequeño panfleto escrito por un turista esta a punto de desestabilizar el organizado -y tranquilo- imperio. Pero lo importante es que Rincewind nos presenta la que, tras las historias de los guardias, es la mejor novela de la serie. Pratchett consigue encontrar una historia sólida y la desarrolla a la perfección a la par que consigue retratar y parodiar una suerte de culturas orientales. El desarrollo de la novela es coherente y continuo, sin encontrar los habituales tiempos muertos que abundan en la serie. Las parodías resultan elegantes y cómicas, y el escritor británico tampoco se obsesiona con repetirnos gags o reincidir en paralelismos que considera brillantes. Es una novela donde todo resulta bastante contenido, y por eso mismo funciona a la perfección. Por eso y por Cohen.
Cohen el bárbaro, personaje recurrente en la mitología de la serie reaparece aquí en todo su esplendor, derrochando carisma por los cuatro costados y liderando una horda de siete ancianos cuyo potencial cómico es poco menos que infinito. Cohen, un personaje que divierte y se hace querer, alterna protagonismo con Rincewind, haciendo que ninguno de los dos se haga demasiado pesado y permitiendo también a Pratchett el dividir la historia en dos frentes y contar en ambos con un narrador poderoso. Además la presencia del Equipaje es relativamente pequeña, Pratchett no se empeña en repetir los gags del baúl homicida y al no saber como manejarlo acierta al dejarlo en un modesto segundo plano; así como a Dosflores, cuya presencia en el libro es mucho menor de la que se podía presuponer en un principio.
Grandísimo libro de la serie, seguramente el mejor alejado de esa gran urbe que es Ankh-Morpork.
Y Rincewind nos lleva al continente Contrapeso, al Imperio Ágata, donde un pequeño panfleto escrito por un turista esta a punto de desestabilizar el organizado -y tranquilo- imperio. Pero lo importante es que Rincewind nos presenta la que, tras las historias de los guardias, es la mejor novela de la serie. Pratchett consigue encontrar una historia sólida y la desarrolla a la perfección a la par que consigue retratar y parodiar una suerte de culturas orientales. El desarrollo de la novela es coherente y continuo, sin encontrar los habituales tiempos muertos que abundan en la serie. Las parodías resultan elegantes y cómicas, y el escritor británico tampoco se obsesiona con repetirnos gags o reincidir en paralelismos que considera brillantes. Es una novela donde todo resulta bastante contenido, y por eso mismo funciona a la perfección. Por eso y por Cohen.
Cohen el bárbaro, personaje recurrente en la mitología de la serie reaparece aquí en todo su esplendor, derrochando carisma por los cuatro costados y liderando una horda de siete ancianos cuyo potencial cómico es poco menos que infinito. Cohen, un personaje que divierte y se hace querer, alterna protagonismo con Rincewind, haciendo que ninguno de los dos se haga demasiado pesado y permitiendo también a Pratchett el dividir la historia en dos frentes y contar en ambos con un narrador poderoso. Además la presencia del Equipaje es relativamente pequeña, Pratchett no se empeña en repetir los gags del baúl homicida y al no saber como manejarlo acierta al dejarlo en un modesto segundo plano; así como a Dosflores, cuya presencia en el libro es mucho menor de la que se podía presuponer en un principio.
Grandísimo libro de la serie, seguramente el mejor alejado de esa gran urbe que es Ankh-Morpork.
5 comentarios:
Has llegado a la que es uno de mis libros favoritos del autor, junto a Nigh Watch.
Para mí, uno de los mejores momentos de cachondeo es el de la Horda Plateada, 7 viejos, después de todo, atacando a todo los ejércitos. Sinceramente, es un momento impagable.
Por otro lado, es fascinante como el autor enlaza en un libro con tanta burla y parodia una crítica tan bestial contra la cultura china, la antigua y creo que también a la moderna.
Y como critica también a las revoluciones, en las que , como realmente ocurre, alguien, manipulando al pueblo y sus esperanzas, los usa para hacerle el trabajo sucio y luego ponerse al poder. Sin duda, las palabras de Rincewind al Ejército Rojo el la prisión, son de una dureza, pero a la vez de una claridad impresionantes.
Para mí, aun con toda la carga de cinismo que llevan, son un discurso frente al cual no hay menos que quitarse el sombrero ante el autor. Porque, sinceramente, ver a Rincewind gritando a alguien e intentando, cara a cara, que entiendan algo que el, un cobarde capaz de actuar heroicamente si es necesario (aún recuerdo las veces en que en Rechicero y en La Luz Fantástica hizo cosas estúpidamente heroicas, como ir a atacar a un Rechicero el solo, sabiendo que ni siquiera los dioses podían vencerlo).
Con este libro, para mi Rincewind se consagra en mi personaje favorito, empatado con Vimes, y seguidos a muy poca distancia por Yaya Ceravieja.
La Horda de Plata es impagable, entrañables a la par que salvajes. El Profe es otro gran acierto. Y luego momentos como el de la compra de la manzana o el saludo a la señora en un intento por civilizarse son brutales, y ya ni hablar del enfrentamiento con los ninjas o con los ejércitos.
Y luego además añaden una crítica brutal a todo lo que es un sistema jerárquico tan cerrado. Aquí Pratchett esta mucho más acertado que de costumbre, siempre trata de ser demasiado obvio o directo, y aqui sencillamente suelta el discurso político en el momento justo. Muy grande la escena de la carcel que comentas.
Y también como comentas, Rincewind esta mucho mejor en este libro sin esos ataques de heroismo protagonista tan forzados de sus últimas aventuras.
La horda de plta es genial xDDDDDDDDDD Yo me lo pasé muy bien con este, la verdad, y es verdad es questá mucho mejor escrito que los anteriores de Ricewind (que eran por otro lado de los primeros, y tiene lógica). No es mi libro favorito, pero me lo pasé igual de bien que en Imágenes en acción, por ejemplo.
El manifiesto creo que es una parodia de "Viaje a occidente", si no he acertado mal al ubicarla xD.
Si veis que faltan letras... es que mi teclado y mi empanamiento mental están alcanzando límites insospechados esta semana. Y eso que acaba de empezar.
En primer lugar creo que todos somos tolerantes con las faltas, que siempre se nos cuelan o faltan letras. Mientras no nos pongamos a escribir en plan movil.
Para mi gusto es superior a "Imágenes en acció". Los libros temáticos de la serie tienen el problema de que Pratchett quiere contar demasiadas cosas (en aquel, parodiar demasiadas cosas del mundo del cine), y ya conoces el refrán "quien mucho abarca...". Y aquí, afortundamente esta bastante contenido y parodía lo que hay que parodiar en el momento justo.
Rincewind ha subido mucho con respecto a los primeros libros, y la Horda de Plata es la guinda que corona el pastel.
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