domingo, marzo 19, 2017

Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos...

La rosa de Versalles

Este es uno de los mangas más celebrados de la historia. Y con razón. "La rosa de Versalles" es uno de los mejores y más satisfactorios mangas que he tenido el placer de leer; y si me ha maravillado en pleno siglo XXI no quiero imaginar lo que esta obra supuso a principios de los 70, cuando los géneros y las narrativas estaban aún por explorar. Impulsora del shojo y del manga histórico, esta obra que nos traslada a la Francia prerevolucionaria no ha envejecido un ápice y sigue manteniendo una fuerza increíble.
El punto de partida es simple. Maria Antonieta llega a Francia para casarse con Luis XVI, allí conocerá a muchos personajes históricos, y entre ellos destacará el conde sueco Hans Axel de Fersen, con el que estallará de inmediato un platónico romance. A ellos se les sumará como tercer vértice de la historia la gran protagonista de la obra: Oscar François de Jarjayes, una noble ficticia que ha sido criada como hombre y ostenta un importante cargo en la guardia de la corte. Este trío, al que podrían añadírsele algunos nombres más, formaran el eje de una historia de amores imposibles enmarcados en una época increíblemente turbulenta. 
La veracidad de la historia, por supuesto, es relativa y discutible; la obra es una ficción cuyo corazón es una historia romántica, pero el manga tampoco falsea demasiado la realidad. Por las páginas de esta obra pasean Robespierre, la condesa de Polignac o el mísmisimo Napoleón, y vemos hechos como el episodio del collar o cada uno de los hitos históricos más importantes de la Revolución Francesa. Y puede que Maria Antonieta no sea reflejada como una déspota, pero ni mucho menos la pintan como una dama inocente víctima de las circunstancias. Quizás se podría acharcar a la autora que Oscar es un personaje terriblemente moderno con unos ideales avanzados incluso para nuestros tiempos y que seguramente sería imposible no ya su existencia en ese tiempo si no el hecho de que ostentase los cargos que ostentaba, pero me parece que es el único anacronismo relativamente importante de la obra. Naturalmente, el manga no puede tomarse como una lección de historia, pero es una obra que se muestra muy respetuosa con los hechos que narra y no los banaliza en ningún momento (además, son frecuentes ciertas anotaciones para explicar hechos o dar cameos a personajes importantes). 
Formalmente, la obra es otra maravilla. El dibujo de Ikeda es excepcional, precioso, con un gran detalle en los fondos y en el vestuario de los personajes. Incluso a pesar de que la mayoría de las féminas comparten peinados en muchos bailes, siguen siendo distinguibles (aunque si que tendría en contra de su diseño, por meros gustos personales, esos gigantescos ojos con unas cruces en su interior a modo de brillo). Y si bien en la esgrima fracasa, en las escenas de batalla no lo hace y creo que el estilo de la autora capta bastante bien el movimiento. Tengo algunas sensaciones encontradas con respecto a la composión de las páginas, pues el ritmo de la obra es tan elevado que facílmente pasa de un escenario a otro sin que nos demos cuenta y sin ningún tipo de recuadro que lo indique; las transiciones entre escenas, o a veces entre planos, son en ocasiones demasiado bruscas. Y más allá de las florecitas o los fondos brillantes tradicionales de los shojos, o de los secundarios cómicos deformados en segundo plano heredados de la escuela de Disney, la autora se permite recursos visuales muy potentes como deformaciones extrañas, fundidos, o alguna que otra metáfora visual, y así mismo para algunas de las escenas más cruciales no se vale de ningún simbolismo y nos planta la decapitación de Luis XVI o alguna escena de sexo.
La modernidad visual de este manga es increíble, pero no menos rompedora es su trama. Independientemente de su realismo, la revolución francesa le permite a la autora plantear temas universales, y sumarles a ellos una óptica femenina y añadir esta potente baza al repertorio de tramas y conflictos que viven los personajes. Y entre los grandes temas de la libertad, la fraternidad y la igualdad, se mueven además temas muy tabús, pues no olvidemos lo odiada que era aquella reina de Francia y de todo de lo que se la acusaba, y aquí el manga no se moja mucho... pero el sólo plantear esa escena en la que Maria Antonieta apeló a todas las mujeres en un juicio no deja de ser muy valiente.
Es, en resumen, una obra increíble. Terriblemente sólida a nivel de personajes y trama, y con un ritmo endiablado que siempre mantiene el interés en una historia que consigue sorprendernos a pesar de todos sabemos hacia donde conduce. Un manga que era maravilloso hace medio siglo y que hoy en día no lo es menos. Absolutamente recomendable.

10 comentarios:

j. e. dijo...

pues vaya que se escucha bien.. ojalá pudieses hacer más reseñas de obras 'clásicas' de este tipo..

eter dijo...

Quiero ver si hago más... al final todas estas obras clásicas tan conocidas no dejan de ser obras maestras. Con ellas, como con la literatura o el cine, el tiempo constituye el mejor de los filtros posibles.

Hugo Camilo dijo...

La voy a buscar. Que tan extensa es?
Aprovecho para preguntar si se han acercado a "cesare" que va sobre los Borgia. Aunque no se ha concluido aún

Pchan dijo...

La verdad es que tengo muchas ganas de leer este manga y esta entrada todavía me da más ganas de empezarlo. Quizás este año sea el año, o por lo menos mantengo la esperanza.

Anonimatus dijo...

Que los personajes protagonistas tengan valores anacrónicos es imprescindible para que una obra moderna guste al público moderno.

Una cosa buena de los mangas de aquella época, que no tenían problemas para incluir sangre y sexo cuando estaba justificado sin importar su género.

La primera vez que supe de la existencia de esta obra fue en un capítulo de Lupin the Third aunque no lo supe hasta años más tarde y fue cuando me di cuenta del impacto que ha tenido en el mundo del manga con los montones de referencias en otras obras.

eter dijo...

Hugo Camilo, la descatalogada edición española que yo leí eran 5 tomos de unas 400 páginas cada uno (aunque el último tomo lo rellenaron con una historia corta de los muchos "spin-off" o anexos que esta serie ha tenido).
No tenía ni constancia de "Cesare". Apuntada queda.

RiKanna, cuanto más tardes, más te arrepentiras de ello al leerla :)

Anonimatus, Oscar es bastante "actual", pero el resto de personajes no me parecen tan anacrónicos... se ha suavizado el machismo y Maria Antoñeta no deja de ser una de las buenas de la historia, pero en general me parece un mérito increíble de la mangaka el haber escrito unas personalidades e historia relativamente fieles a la época.

Belldandy dijo...

No sabes lo que me alegra una valoración tan positiva por tu parte. A ver si recomendada por ti más gente se anima a leerla =D

eter dijo...

Toda la gente que se anime será poca. Joyaza atemporal que se marcó la amiga Riyoko Ikeda.

Scarlet dijo...

A mi también me ha alegrado ver que te ha gustado tanto. Para mí, La Rosa de Versalles es una obra maestra de principio a fin :3

eter dijo...

No le sobra ni una página... lastima no poder pillar facilmente todos los relatos extras de los personajes.