miércoles, abril 29, 2020

La era de los Otakus

Fate/Grand Order - Absolute Demonic Front: Babylonia

Hace ya cerca de dos décadas, el universo Fate nació como un simpático eroge que partía de una idea bastante enrevesada sobre el bien y el mal en el que un joven se liaba con una heroína al tiempo que héroes mitológicos se daban de palos entre si (ver reseña). Eso era, a grandes rasgos, la razón de Fate. Consiguió una gran popularidad y poco a poco fue expandiendo su universo hasta que esté entró en contacto con el mercado de juegos de móvil, y ahí se produjo una conjunción astral en la que waifus y husbandos de todas las épocas y todos los clichés otakus encontraron en los gachas su recipiente perfecto. Fate GO nos trasladaba a un mundo en el que la humanidad casi se había extinguido y el jugador -como última esperanza de la humanidad- debía de viajar a diversas épocas de la humanidad para resolver las anomalías temporales que allí se producían como si de una encarnación del Doctor Who se tratase, y en esas épocas lucharíamos con y contra servants de todo tipo.
Esta "Babilonia" nos traslada al que es prácticamente el último arco del juego, donde en el ocaso de la era de los Dioses, una alianza de Tres Diosas intenta acabar la incipiente humanidad, una civilización comandada por uno de los grandes clásicos de la franquicia: Gilgamesh.
A lo largo de 21 episodios veremos un choque de Dioses y Hombres que no tiene más objetivo que ser divertido y espectacular. La serie no pretende ser otra cosa que divertida y -muy para mi sorpresa- no acaba divagando demasiado en las cuestiones filosóficas en las que la franquicia suele caer. Simplificando mucho, la serie es una preciosidad visual con mucha comedia y una acción constante en la que predominan las explosiones y las patadas para lucimiento de glúteos. Tenemos muchos personajes que molan mucho, y cuando no están luciéndose en escenas de acción suelen estar chinchándose los unos a los otros de alguna forma en una forma de comedia tan simple como efectiva. Este producto encaja en lo que yo siempre he llamado "idea preconcebida del anime" (ver máximo ejemplo): personajes guays haciendo cosas guays con un marco visual francamente potente. Y si bien la comedia chorra funciona aunque solo sea porque la franquicia sabe que tiene a la tsundere por excelencia -con permiso de Rie Kumigiya- que es Toshaka Rin, es en lo visual donde sencillamente te gana merced a un trabajo impresionante de Cloverworks, con una música preciosa, unos fondos y unos personajes preciosos y exquisitamente definidos y un presupuesto holgado para una animación que en cada episodio donde deja alguna que otra secuencia de acción espectacular y donde las grandes batallas acaban en clímax disparatadamente épicos y grandilocuentes.
El mayor problema sería la historia, supongo. No por su endeblez en sí, ya que esto no deja de ser un juego de móviles en el que lo prioritario es cosechar waifus y husbandos que se digan chorradas entre ellos y den lugar a combates molones, si no porque estamos en el séptimo arco de una gran saga de la que prácticamente no sabemos nada. Sin embargo, creo que la serie sobrevive a este problema. Cada arco es una época, y verdaderamente sólo son comunes a todos el anodino protagonista -bastante Gary Stu, pero supongo que es inevitable su atonalidad al no dejar de ser un avatar del jugador- y su servant principal -aka culminación de décadas de cultura del moe-; tras ellos se dibuja un trasfondo triste y meláncolico que se refuerza con puntuales flashback que nos dan pinceladas de aventuras anteriores. Es una pena no poder ver esas aventuras, aunque creo que la serie consigue dibujar con firmeza su trama y en su sencillez y ligereza encuentra unas virtudes que seguramente no encontraría si a estos 21 episodios les hubieran precedido más de 100 con tramas parecidas. 
En definitiva, no es una gran serie a nivel argumental, pero creo que eso es casi lo mejor que se puede decir de ella. Es una serie que desprecia cualquier complejidad argumental o pretensión filosófica para convertirse en un entretenimiento repleto de acción y carisma plenamente disfrutable y recomendable.

7 comentarios:

Rindou dijo...

A ver, mierda filosófica de Fate típica no le falta, solo que no es tan bruta y está más en el subtexto xD Se pueden escribir muchos ríos de tinta sobre el significado del juego y sus temas solo tomando el juego de móvil. Digamos que el punto principal de la obra es "el valor de la humanidad y los servants como avatares de su historia". Y curiosamente, en la batalla contra Tiamat todo esto se potenció más aún, y me da que en el templo de Salomón volverá a pasar.

Y en fin, no queda nada más que pueda pueda decir. Bueno, sí, que te leas los mangas xD Turas Realta y Mortis Stella, entre esos dos llenas los agujeros de las singularidades sin problemas.

eter dijo...

Sí, esa filosofía esta ahí, pero creo que al tenerla más sutil queda mucho mejor que en otras donde directamente al final tenías a la gente disertando durante los últimos episodios en torno a un agujero negro que era el grial (aquí además el tener a un monstruo lovecraftiano y no disimularlo ayuda mucho en ese sentido).
Salomon me da miedo, tiene pinta de que va a ser un Kotomine pasado de vueltas XD

OtakuLogan dijo...

Veo un filón en esta franquicia para trolear en el podcast o aquí en el blog, cuando se diga que El ataque a los titanes se esta alargando demasiado o que Death note no era tan buena, puedo sacar el comodín de "vosotros seguís viendo Fate y nadie os lo echa en cara salvo yo", xD. En serio, para mí su serie original ya tenía muy poco que ofrecer (para combates entre Pokémon raros y paranoia ves "C, el dinero del alma y la posibilidad de control" y ya vas bien surtido), así que esta iteración número... la que sea, por mucho que pula al extremo los defectos originales, no sé porqué alguien como yo (o como vosotros, salvo la inercia) tendría ganas de verla.

Rindou dijo...

A ver, dado que este es un mundo donde tenemos la libertad de expresión me la tomo para responder también a OtakuLogan yo también.

1. La comparación con los Titanes no tiene mucho sentido porque eso es una serialización, una única serialización si ignoramos los no-sé-cuantos spin-off que hay. Fate es una franquicia de una compañía y donde la gran mayoría de los productos son independientes entre sí. Y ya la comparación con Death Note: gustos.

2. La serie original... no es la serie original. Y dado que las adaptaciones del producto original (y la mayoría de los spin-offs) son de calidad muy dudosa, entonces ahí poco se puede decir sin leerla. Es las visual novel por antonomasia ya, es la más popular entre los aficionados a la lectura de ellas y en Japón impactaron mucho tanto ésta como su obra hermana Tsukihime. Si además preguntas al fan medio te dirá que la razón por la que FSN es tan relevante es porque entre sus tres rutas llega a conclusiones bastante potentes dentro de sus temas. Habrá Visual Novels mejores, y conectará tanto ésta con todo el mundo, pero en el medio es un nombre respetado y de un escritor con un estilo muy característico (que gustará al que le guste).

3. La gracia de la franquicia sus personajes, junto al cómo interpretan la historia mediante estos, y además su mundo. Al ser común con Tsukihime, Kara no Kyoukai y Mahoutsukai no Yoru se tiene un universo lo suficientemente interesante como para seguirle el hilo si además disfrutas de las obras en sí.

4. Siempre puedes pensar que hace 40 años se diría lo mismo de Gundam. Y encima cada Fate tiene un escritor completamente diferente y con ello otro estilo y otras ideas. Nasu, el padre de la franquicia y de Tsukihime, KnK y Mahouyo, hizo FNS y su secuela y Fate/Extra y sus secuelas. Apocrypha es de Yuuichiro Higashide (autor de Ayakashibito), Prototype es de Hikaru Sakurai (autora de Shiei no Sona-nyl), Fate/Requiem de Meteor Hoshizora (autor de Fire Girl y Forest), Zero es Urobuchi, Strange Fake de Ryougo Narita (autor de Baccano y DRRR!!)... y el propio Grand Order de todos los anteriores menos Narita y Urobuchi, con Nasu a la cabeza. Si eso el crimen de Fate es que por su culpa se han dejado de lado Mahouyo y Tsukihime en gran medida, siendo partes de su mundo igual de dignas e interesante.

5. Grand Order no podía ser más diferente en estilo al resto de Fate. Porque se ha cogido el capítulo más popular para este anime (mas no el mejor, sin duda alguna hay capítulos mejores en el juego, y sin ir más lejos pondría por encima el arco de Grecia, el último que han sacado), pero a grandes rasgos un One Piece en estructura. La gracia es la aventura, donde cada arco es una historia que puede conectar o no con la siguiente, pero que todas forman un gran todo.

Y eso es todo. Que a mí me la suda lo que la gente opine de Fate, pero ya ese argumento se me hizo algo flojo.

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Cambiando de tercio, eter, no digas lo de lovecraftiano y fate a la vez, que si vieras lo que han hecho con lo verdaderamente LOVECRAFTIANO fliparías bastante para mal. Que el capítulo donde lo introdujeron estuvo muy bien, pero todo lo que vino después ha sido un despropósito muy olvidable salvo... Nyarlothotep, que es increiblemente acertado (convertir a la mayor liante de la franquicia en su representante fue... demasiado acertado).

eter dijo...

OtakuLogan, aquí estoy con Rindou, a su manera -y se que suena extraño decirlo- Fate se ha convertido casi más en un medio que en un fin. Nasu desarrolló la idea, y ya al principio tenía su pequeño "Nasuverso", pero al final las posibilidades de los servants eran tantas que no le importó licenciar su idea para ver universos alternativos... y ya con GO y una franquicia consolidada encontró un lienzo para contar una historia mucho más grande que la que desarrolló en su día para lo que no dejaba de ser un eroge. En GO literalmente puede contar lo que quiera y resetearlo para casi olvidarse de ello de cara a la siguiente aventura. Ahora mismo diría que GO es lo importante, y que más que una secuela de la original... esta era un prototipo.

RindouNyarlothotep tiene que molar mucho si aparece como liante... pero meter temas de Lovecraft más allá de presentar a este como un Caster me parece muy arriesgado, ahí el monstruo más menor es un horror cósmico que provoca locura inmediatamente, más allá de usarlo como algún mega final boss ocasional es algo muy complicado de manejar XD

Anónimo dijo...

A mi también me ha gustado mucho este arco, aunque quizás el penúltimo episodio es en el que tengo más quejas, no le hicieron justicia a Grand Assassin y le quitaron una parte a Gilgamesh para dársela al prota.

Muchas ganas de ver las películas de Camelot, no pensé que se atreverían a animarlo.

Y Solomon yo apuesto a que también sera una película, o una serie de televisión con un numero de episodios raro como esta.

eter dijo...

Yo del Assasin me esperaba algo más, la verdad. Se que es el Assassin original, pero lo habían puesto tan bestia que me esperaba que fuera alguna cosa supertocha como Cain o la propia Muerte... pero no me molestó demasiado. Lo de Gilgamesh si me dolió mas, creo que le sacan muy poco partido y esperaba más de su conflicto con Enkidu