One Piece 1138 - Textos sagrados
Si había alguna duda, se confirma que Shamrock es el gemelo malvado de Shanks, y se revela que es el mayor -algo irrelevante- y que Shanks parece que regresó a Marie Geoise pero prefirió seguir viviendo en los sucios mares. Esto último es más curioso ya que, al margen de si ese retorno fue en la Reverie del capítulo 900, parece que tuvo una oportunidad que Doffy no tuvo, con lo que uno se pregunta como acabó exactamente en el barco de Roger durante el incidente de God Valley. Luego tenemos la escena de Cerbero, con la que diría que Oda ha destrozado con una indiferencia brutal una de las teorías más asentadas entre los seguidores... pero lo que más me llama la atención -más allá de la locura que las cabezas salgan volando y les salga la espada de la boca- es que la espada se transforma de una forma parecida a como lo hacía el Gorosei, y que en su presentación tampoco indican la fruta (como sucedía también con los Cinco Ancianos), todo esto es... curioso.
Esta parte terminaría con Gunko mostrando un nuevo tipo de uso de su poder, así como la mención a un refuerzo que llamarán y la revelación de que su nuevo objetivo serán los niños, con lo que podemos presuponer que se dirigirán a la escuela. Jimbe y Franky deberían estar allí, pero no parece factible que ni ellos ni Saulo y Ripley basten para hacer frente a tres Caballeros Celestiales. La duda es si Oda se limitará a que secuestren a Colon, o si será cruel y meterá a Robin de por medio y matarán a Saulo en frente suya o se cargaran la biblioteca y el mural. Porque Luffy y Zoro de momento están lejos, y Shamrock y compañía deberían poder campar libres algo de tiempo antes de que los protagonistas principales aparezcan acompañados por -ahora parece inevitable- Scopper Gaban (si el tercer caballero aparece en el mismo sitio que los anteriores se va a encontrar un escenario gracioso).
Pero claro, todo el capítulo queda eclipsado por el final del capítulo con el mural y la narración de Robin.
Volvemos al tema de los niños y a lo infantil del sueño de Luffy, algo obviamente muy importante. No deja de ser extraño que todo el drama del mundo -se dice pronto- al final vaya a ser solucionado con algo que hizo reír a Roger y los suyos. Es el espíritu de la obra, pero quiero ver como lo cuadra Oda finalmente porque desde luego no es lo que uno espera como desenlace de le épica bíblica que se nos viene encima.
Ahora hay que cuadrar las eras. La tercera es la actual, eso parece claro. La segunda debería corresponderse con el siglo vacío. Con la primera es con la que tengo dudas de si acabó con el inicio del siglo vacío o mucho antes. Tendría sentido que fuera muy anterior y que allí tuviésemos a Nika, pero se me hace un poco extraño porque no sé como lo narraría Oda. La serpiente roja parece la Red Line (aunque tiene marcas similares a las de Dragon), y con los esclavos pienso en el periodo de esclavitud de los enanos -y supongo que también de los bucaneros-, pero hay tanto simbolismo en las pinturas y en el poema que es difícil asegurar nada (que además recordemos que el japonés es muy particular y Oda además es muy tramposo, con lo que es complicado hasta que una buena traducción sea posible). El Dios del bosque parece claro que es Ihm-sama con sus demonios (o siendo el origen de las frutas). El clan de la media luna no parece descabellado que sean los D, mientras que la luna completa puede agrupar a los samurais, a los minks y a los lunarian. La furia del Dios del mar puede ser la subida de los mares o el que las frutas se hundieran en ellos. Y luego tenemos las imágenes, donde en una diría que podemos a los 19 reyes postrándose ante Ihm (aunque si pertenece a la primera Era no cuadraría por fechas), con un demonio sometiendo a la serpiente mientras de fondo tenemos a Noah, y a ¿Zunisha y el Arca de Enel?, mientras en la otra tenemos a ese mismo demonio -¿Ihm, con el gorosei a sus pies?- enfrentándose a Joyboy, Emeth, Poseidon, Lili y varias figuras que representan a las diversas razas de la serie. Es todo tan sugerente como ambiguo.
Y tendría que decir que todo esto no me gusta. No me gusta lo de que el futuro esta escrito o vaticinado. No me gusta nada lo del destino... pero dicho eso, el capítulo es increíble. La majestuosidad que transmite el mural, esa grandeza que Franky ve ante si, es increíble. Y nunca me ha gustado lo de Nika demasiado, pero claro, Oda ya ha confirmado aquella teoría de los fans de que aquellos dioses que conocimos en el flashback de Skypea eran el primer vistazo a esta larguísima epopeya. Estamos ante el final de un viaje de cientos de años, y la sensación que ello provoca en el lector es indescriptible. Es el primer vistazo directo no sólo al siglo vacío, si no a la totalidad de la historia en la que se enmarca esta ya no tan pequeña historia de piratas. No deja de ser curioso como algo que comenzó como una aventura ha acabado desembocando en una especie de odisea de un planeta entero, un cambio de tonalidad más que evidente que hace que muchas veces se eche de menos el One Piece ligero del principio, pero que ahora vemos que siempre ha estado ahí y hacia el cual Oda ha virado muy lentamente (o improvisado, porque el sentido común hace que me sea imposible pensar que el hombre tenía planeada una trama tan compleja y basta desde el principio).