Manabi no es un anime normal. Es uno de esos extraños casos en los que todo lo que puede salir bien en un anime sale bien.
No es monster, eso es obvio, no nos encontramos ante una obra con ese espiritu de trascendencia. Nos encontramos ante un simple anime de los llamados "style of live" ambientado en unas chicas de instituto, pero sencillamente esta muy bien hecho. En primer lugar es un instituto solo para chicas, y con eso nos evitamos los clásicos escarceos amorosos y fanservice en general que caracteriza a estas series. Manabi va, simplemente, de 5 jovenes que quieren divertirse, que quieren aprovechar cada instante de su vida y no tener que arrepentirse de ello. En este aspecto, esta serie es una muy digna sucesora del espiritu del "Haruism" que se hizo célebre el año pasado en este mundillo. Porque las semejanzas son evidentes y Manabi hace el rol de Haruhi -sin divinidad- y es un torrente de energía que saca al resto de sus compañeras de sus anodinas vidas y las arrastra en su frenesí. Este tipo de argumentos da lugar, inmediatamente, a la comedia por los clásicos choques de actitudes de la protagonista con el resto de las niñas y por las propias estupideces que esta suele cometer por pensar poco. Pero tras este velo de comedia se esconde un interesante retrato de la infancia, de los sueños que se tienen, de los ideales utópicos condenados a desaparecer y de los que la protagonista no quiere renegar, de los primeros pasos en el mundo de los adultos, de las responsabilidades, de la alegria. Manabi, como ya hacia Suzumiya Haruhi y como también hacían series como Azumanga o Ichigo Mashirano, nos muestra una visión adulta de la niñez, de como los adultos añoramos un tiempo que sabemos no volverá.Independientemente de lo sugerente de su argumento, o de lo bien tratado que pueda ser en futuros episodios, nos encontramos con el apartado técnico de la serie. Y es espectacular. El diseño de los personajes es excelente, cada uno se distingue del resto y son todos muy "kawaiis" sin tener un ápice de sex-appeal (como dije antes, se agradece que haya tan poco fanservice). La animación es fluída y elegante, con un trabajo bastante cuidado y que carece de la clásica sensación de "ya visto" que tiene este género. La música es también bastante correcta y reparto de voces es sencillamente espectacular. La dirección, como suele ser normal en UFOtable, es sobervia, altera secuencias muy clásicas con un enfoque centrado en los personajes y sus rostros con otras de pura fantasía para exteriorizar los mundos interiores de los personajes. El ritmo es endiablado pero al mismo tiempo clásico, y todo se desarrolla a la perfección.
No es monster, eso es obvio, no nos encontramos ante una obra con ese espiritu de trascendencia. Nos encontramos ante un simple anime de los llamados "style of live" ambientado en unas chicas de instituto, pero sencillamente esta muy bien hecho. En primer lugar es un instituto solo para chicas, y con eso nos evitamos los clásicos escarceos amorosos y fanservice en general que caracteriza a estas series. Manabi va, simplemente, de 5 jovenes que quieren divertirse, que quieren aprovechar cada instante de su vida y no tener que arrepentirse de ello. En este aspecto, esta serie es una muy digna sucesora del espiritu del "Haruism" que se hizo célebre el año pasado en este mundillo. Porque las semejanzas son evidentes y Manabi hace el rol de Haruhi -sin divinidad- y es un torrente de energía que saca al resto de sus compañeras de sus anodinas vidas y las arrastra en su frenesí. Este tipo de argumentos da lugar, inmediatamente, a la comedia por los clásicos choques de actitudes de la protagonista con el resto de las niñas y por las propias estupideces que esta suele cometer por pensar poco. Pero tras este velo de comedia se esconde un interesante retrato de la infancia, de los sueños que se tienen, de los ideales utópicos condenados a desaparecer y de los que la protagonista no quiere renegar, de los primeros pasos en el mundo de los adultos, de las responsabilidades, de la alegria. Manabi, como ya hacia Suzumiya Haruhi y como también hacían series como Azumanga o Ichigo Mashirano, nos muestra una visión adulta de la niñez, de como los adultos añoramos un tiempo que sabemos no volverá.Independientemente de lo sugerente de su argumento, o de lo bien tratado que pueda ser en futuros episodios, nos encontramos con el apartado técnico de la serie. Y es espectacular. El diseño de los personajes es excelente, cada uno se distingue del resto y son todos muy "kawaiis" sin tener un ápice de sex-appeal (como dije antes, se agradece que haya tan poco fanservice). La animación es fluída y elegante, con un trabajo bastante cuidado y que carece de la clásica sensación de "ya visto" que tiene este género. La música es también bastante correcta y reparto de voces es sencillamente espectacular. La dirección, como suele ser normal en UFOtable, es sobervia, altera secuencias muy clásicas con un enfoque centrado en los personajes y sus rostros con otras de pura fantasía para exteriorizar los mundos interiores de los personajes. El ritmo es endiablado pero al mismo tiempo clásico, y todo se desarrolla a la perfección.
3 comentarios:
Está bastante curiosa, se agradece ver una serie distendida y relajante de vez en cuando ^^
Se nota que te gusta... A ver si lo encuentro...
verdaderamente es una serie que me gusta.
Creo que es un anime infantil de verdad bueno. Con ello quiero decir que, si tuviera hijos, este sería un buen anime para que ellos vieran, pero no por ello es insufrible para un adulto.
ps: y también influye que poco o nada sabía de él antes de ponerme a verlo
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