martes, septiembre 16, 2008

Lo bueno de los conciertos.

Edenbridge - My earth dream

Una de las mejores sorpresas con las que un aficionado a la música puede encontrarse en un concierto es, sin duda, unos buenos teloneros. Tal cosa me sucedió cuando, estando en Madrid hace unos meses, fui a un concierto de los siempre fiables Rage; como comenté en una entrada, aquel concierto me pareció brutal, pero dejando a un lado la potencía y genialidad del terteto cabeza de cartel, pude ver a un grupo cuya música me llamó bastante la atención. Al fin he podido hacerme con su último disco, y me ha reparado una muy grata sorpresa.
Edenbridge es un grupo austriaco que practica un heavy melódico muy operístico. El disco presenta a lo largo de toda su extensión un sonido muy compacto y definido; todas las canciones son diferentes, pero todas suenan igual (no entiéndase este como un defecto). El estilo del grupo viene definido principalmente por su vocalista, la banda cuenta con una preciosa voz femenina que vocaliza con una precisión portentosa y está dotada de un gran número de registros. Esa voz tan estudiada y definida peca para mi gusto de falta de sentimiento, pues si bien es preciosa y es capaz de alcanzar tonos agudos y graves, no tiena la garra que muchas veces agradecemos en los grandes momentos de las canciones (si bien esos estribillos en los que los cantantes parecen dejarse la voz no suelen quedar demasiado bien con vocalistas femeninos). La música es tan elaborada como la voz, aunque igualmente se añora una mayor pasión en ella. Tenemos unas melodias preciosas, rápidas y terriblemente cuidadas (el grupo recurre a la orquestación clásica para incluir más de medio centenar de instrumentos de clásica para diversificar el sónido y pulirlo). El dominio de los instrumentos es bueno, pero no hay solos largos y la música se compone más como pequeños fragmentos de interpretaciones sobre una melodía que como una demostración de poder sobre un instrumento.
Particularmente, en su primera escucha, el disco no me llenó demasiado, seguramente por esa falta de pasión que antes he mencionado. Pero con posteriores escuchas se descubre un sonido precioso, cuidado y muy uniforme. Me gusta el heavy y me gusta la clásica, y si bien este disco no es una opera-rock de Meat Loaf ni alcanza el glorioso nivel que alcanzó Blind Guardian en el "A night at the opera", es un trabajo más que loable. Es esta, Edenbridge, una banda que voy a seguir en el futuro.

2 comentarios:

Goseki dijo...

No me gusta este tipo música... soy más clásico, lo mio es el rock y hard rock... por cierto, en nada nuevo disco de AC/DC!!!

eter dijo...

Aquí se da el caso curioso de que a mi, una persona más o menos clasificable como heavy, no me gustan demasiado ni AC/DC ni Metallica.