Un mal que creo que esta terriblemente instaurado en los videojuegos modernos es el de los "pasillos". Los escenarios son basicamente una línea recta que nos propone algún que otro desafio ocasionalmente. Un pasillo en el que nos movemos hacia delante y hacia atrás, hacia la izquierda y la derecha, y en el que podemos agacharnos, saltar y escalar alguna que otra cornisa... pero en el que siempre tenemos que ir hacia delante. Esto no son tres dimensiones, es una única dimensión mal camuflada. En los tiempos de las 2d se entendía por las obvias limitaciones técnicas, pero en los tiempos actuales me duele que la inmensa mayoria de los juegos no sean otra cosa que pasillos mal disimulados. Sí, cierto, mejoran los gráficos, permiten establecer una jugabilidad más clara y se puede definir una historia más facilmente... pero la libertad que me mostraron aquellos primeros y grandiosos juegos tridimensionales ha quedado atrás en favor de el clásico juego de disparos de toda la vida... más bonito y espectacular, eso sí.
Ese es el fallo que le veo principalmente a este "Tenchu". Un juego que tiene una buena idea pero que esta demasiado anclado en los pasillos... y las limitaciones que estos imponen se notan aún más al encontrarnos ante un juego de espionaje, porque sencillamente resulta ridículo que los enemigos se dispongan en línea para que podamos ir acabando con ellos uno a uno y no se vigilen más entre ellos o se olviden a los 20 segundos de que han visto a un compañero muerto para seguir haciendo su ronda normalmente.
La jugabilidad de este juego en sus 10 fases es muy sencilla. Tenemos un pasillo, en una punta hay un enemigo que esta vigilando la zona... tenemos que aprovecharnos de las sombras, las cornisas o lo que sea para alcanzar su ángulo muerto y matarlo desde las sombras. El enemigo no puede vernos, porque si no nuestro ninja lanza una bola de humo y aparece al principio de la pantalla (sólo morimos si nos quemamos o nos caemos por algún barranco... claro que entonces igualmente apareceremos al principio de la pantalla). En ocasiones los enemigos son más dificiles, estan escondidos o protegidos por otros guardias tal que tengamos que calcular el momento exacto en el que podamos atacarlos. El juego más o menos funciona y va subiendo de dificultad, y algunos asesinatos son buenos puzles... pero en general no puedo evitar sentirme algo estafado cuando miro lo que eran este tipo de juegos en sus principios (recordemos esos grandes "Commandos" que vimos hace una década). Este no es un juego de espionaje o infiltración, es un juego de asesinatos elegantes.
Para colmo de males, las 10 fases no son otra cosa que más o menos 5 repetidas, con modificaciones y con enemigos más complicados en "la vuelta", pero los mismos escenarios. Hay que afrontar los puzles de otra forma, y los escenarios estan bien a nivel técnico y de ambientación... pero me transmite una sensación desgana y cutrez bastante grande.
¿Es divertido el juego? ¿Es largo? La respuesta sería un "si" sin demasiado convencimiento. El juego ofrece desafios en modo de misiones suplementarias y el reto de superar las estadísticas de cada pantalla... y creo que esto es lo verdaderamente divertido del juego. No es dificil, y completar la historia principal puede llevar una decena de horas sin demasiadas complicaciones (no mueres y hasta avances mínimos como apagar una antorcha se guardan de una intentona fallida a la siguiente). El verdadero reto del juego es superar un nivel en un determinado tiempo, sin ser descubierto y acabando con cierto número de enemigos. El juego se vuelve entonces más desafiante al probar la verdadera pericia del jugador, pero particularmente no me gusta demasiado cuando la vida de un juego depende tanto del jugador y sus ansias de superación.
En aspectos más meramente relacionados con la producción, la sensación que me deja el juego tampoco es demasiado alta. A nivel técnico presenta unos gráficos resultones con unos buenos escenarios y personajes (ambos bien diseñados, aunque la variedad de enemigos brilla por su ausencia), pero tiene problemas con el fuego y la superposición de objetos (y eso siempre queda muy cutre). El control es cutrecillo, con ese uso clásico del mado de wii que implementan las compañías que no saben usar el control de wii y que piensan que sacudir el mando es el culmen de la felicidad de los usuarios... y a esto hay que sumarle unas animaciones que me parecen algo robóticas y torponas (y que se unen al problema de colisiones antes mencionado). El aspecto sónoro es el único en el que creo que el juego raya a un alto nivel de verdad, con una banda sonora muy acertada (recordemos que es un juego ambientado en el Japón feudal) que ambienta mucho y unos buenos efectos sonoros.
Argumentalmente el juego nos coloca en una intriga en mitad del siglo XVIII en Japón, donde nuestro señor feudal intenta mantener la paz en sus dominios y nosotros somos los que nos manchamos las manos de sangre. Aparecerá una trama con un malo entre las sombras que quiere sembrar el caos y la muerte en la región, pero desde luego el guión tampoco es lo que podamos llamar una obra maestra... y lo mejor de todo es la escena final, bastante buena... pero también frustrante pues deja el final completamente abierto de cara a la segunda parte de una trilogia que las ventas me temo no han querido permitir.
¿Recomendable? Por los 10 euros que me costó... sí. ¿Por 20? Creo que también. Por más particularmente no lo recomendaria. Un DVD entretenido y valido para matar el tiempo, pero un juego que esta muy lejos de ser recordado en mi cabeza como un imprescindible.
Ese es el fallo que le veo principalmente a este "Tenchu". Un juego que tiene una buena idea pero que esta demasiado anclado en los pasillos... y las limitaciones que estos imponen se notan aún más al encontrarnos ante un juego de espionaje, porque sencillamente resulta ridículo que los enemigos se dispongan en línea para que podamos ir acabando con ellos uno a uno y no se vigilen más entre ellos o se olviden a los 20 segundos de que han visto a un compañero muerto para seguir haciendo su ronda normalmente.
La jugabilidad de este juego en sus 10 fases es muy sencilla. Tenemos un pasillo, en una punta hay un enemigo que esta vigilando la zona... tenemos que aprovecharnos de las sombras, las cornisas o lo que sea para alcanzar su ángulo muerto y matarlo desde las sombras. El enemigo no puede vernos, porque si no nuestro ninja lanza una bola de humo y aparece al principio de la pantalla (sólo morimos si nos quemamos o nos caemos por algún barranco... claro que entonces igualmente apareceremos al principio de la pantalla). En ocasiones los enemigos son más dificiles, estan escondidos o protegidos por otros guardias tal que tengamos que calcular el momento exacto en el que podamos atacarlos. El juego más o menos funciona y va subiendo de dificultad, y algunos asesinatos son buenos puzles... pero en general no puedo evitar sentirme algo estafado cuando miro lo que eran este tipo de juegos en sus principios (recordemos esos grandes "Commandos" que vimos hace una década). Este no es un juego de espionaje o infiltración, es un juego de asesinatos elegantes.
Para colmo de males, las 10 fases no son otra cosa que más o menos 5 repetidas, con modificaciones y con enemigos más complicados en "la vuelta", pero los mismos escenarios. Hay que afrontar los puzles de otra forma, y los escenarios estan bien a nivel técnico y de ambientación... pero me transmite una sensación desgana y cutrez bastante grande.
¿Es divertido el juego? ¿Es largo? La respuesta sería un "si" sin demasiado convencimiento. El juego ofrece desafios en modo de misiones suplementarias y el reto de superar las estadísticas de cada pantalla... y creo que esto es lo verdaderamente divertido del juego. No es dificil, y completar la historia principal puede llevar una decena de horas sin demasiadas complicaciones (no mueres y hasta avances mínimos como apagar una antorcha se guardan de una intentona fallida a la siguiente). El verdadero reto del juego es superar un nivel en un determinado tiempo, sin ser descubierto y acabando con cierto número de enemigos. El juego se vuelve entonces más desafiante al probar la verdadera pericia del jugador, pero particularmente no me gusta demasiado cuando la vida de un juego depende tanto del jugador y sus ansias de superación.
En aspectos más meramente relacionados con la producción, la sensación que me deja el juego tampoco es demasiado alta. A nivel técnico presenta unos gráficos resultones con unos buenos escenarios y personajes (ambos bien diseñados, aunque la variedad de enemigos brilla por su ausencia), pero tiene problemas con el fuego y la superposición de objetos (y eso siempre queda muy cutre). El control es cutrecillo, con ese uso clásico del mado de wii que implementan las compañías que no saben usar el control de wii y que piensan que sacudir el mando es el culmen de la felicidad de los usuarios... y a esto hay que sumarle unas animaciones que me parecen algo robóticas y torponas (y que se unen al problema de colisiones antes mencionado). El aspecto sónoro es el único en el que creo que el juego raya a un alto nivel de verdad, con una banda sonora muy acertada (recordemos que es un juego ambientado en el Japón feudal) que ambienta mucho y unos buenos efectos sonoros.
Argumentalmente el juego nos coloca en una intriga en mitad del siglo XVIII en Japón, donde nuestro señor feudal intenta mantener la paz en sus dominios y nosotros somos los que nos manchamos las manos de sangre. Aparecerá una trama con un malo entre las sombras que quiere sembrar el caos y la muerte en la región, pero desde luego el guión tampoco es lo que podamos llamar una obra maestra... y lo mejor de todo es la escena final, bastante buena... pero también frustrante pues deja el final completamente abierto de cara a la segunda parte de una trilogia que las ventas me temo no han querido permitir.
¿Recomendable? Por los 10 euros que me costó... sí. ¿Por 20? Creo que también. Por más particularmente no lo recomendaria. Un DVD entretenido y valido para matar el tiempo, pero un juego que esta muy lejos de ser recordado en mi cabeza como un imprescindible.
6 comentarios:
Interesante juego, no le tengo prioritario pero si lo veo barato o me lo prestan me lo podría pillar.
¿Qué empezarás ahora? ¿The World Ends With You, tal vez? (si, publicidad subliminal)
Yo lo pillé por 10 euros, por ese precio que es una buena compra.
Ahora estoy con el "Miles Edgeworth". El TWEWY (otro que pillé por 10 euros, por cierto) llegará en algún momento, pero no tengo prisas.
Me lo dejaron esta semana y lo estoy jugando a ratos.
Obviamente no es una genialidad pero almenos me está gustando más que los Ninja Gaiden de PS3.
De segunda mano lo he visto entre 8/12 € en buen estado.
Joder, eso dice poco de los Ninja Gaiden, que se supone que son la panacea y todo eso
Ninja Gaiden para mí ha sido una de las grandes decepciones de la actual generación. Las dos primeras entregas son mediocres. La tercera parte cumple bien pero la reciente versión "Razor´s Edge" no ha aportado nada nuevo.
Si algún día tienes ocasión, juega al Metal Gear Rising Revengeance. De lo mejor que he tocado en PS3. Argumentalmente no tiene nada que ver con Ninja Gaiden o Tenchu, pero la mecánica de juego y la calidad técnica son sublimes.
Revegeance tiene detras a Platium... otra cosa no, pero la jugabilidad esta más que garantizada fijo.
Publicar un comentario