Hail Capi!

Capitán América: el Soldado del Invierno.

Ya no es una sorpresa, la Marvel ha vuelto a cascarse una más que decente película de superheroes. En la fase 1 las películas quizás pecaban de convencionales y genéricas; pero tras la palomitera primera reunión de los Vengadores (ver reseña) saben que tienen ya una marca más que asentada y se dedican a variar su producto para no agotar el filón y con un poco de suerte encontrar alguna nueva veta. Yo soy de los fans de Iron man 3 (ver reseña) y tengo ganas de ver la secuela de esa comedia que estoy seguro que será Ant-man. Pero ahora toca hablar del Capi, o del CAPITÁN AMÉRICA, que se merece que pongamos todas las letras, y en mayúsculas.

Este es un personaje que te tira de primeras para atrás... porque es una jodida bandera andante, pero cuando conocí un poco al personaje pasó a gustarme, y ya en la primera película lo retrataban muy bien (ver reseña) no como una exaltación de las barras y estrellas si no como un simple hombre honrado que tiene en todo momento presente aquello de que lo único que hace falta para que el mal venza es que el bien no haga nada. En los Vengadores no hubo tiempo, así que ahora la Marvel unos hermanos Russo cuyo trabajo no puede ser calificado de otra forma que impecable, tienen ahora barra libre para enfrentar al anacrónico Capi a esta era de mentiras globalizadas. Así pues, tenemos una película de espias light con el Capi corriendo de un  lado para otro tratando de encontrar la verdad y enfrentándose a todas las mentiras y, al final, si es necesario, a la propia verdad. Y funciona, funciona muy bien. Chis Evans se ha hecho con el papel de Steven Rogers de una forma admirable, encarna la honradez inflexible de este a la perfección. La película da el siguiente paso lógico en el personaje y este pasa de soldado a capitán en el sentido menos militar de la palabra; el Capi se convierte en la brújula moral de todos y en el líder natural a quienes todos siguen, porque saben que sencillamente hace lo correcto.

Hay que decir que el tono de película de espías es leve, los giros de guión se ven venir a un kilómetro, los buenos son muy buenos y los malos son muy malos. Esto no deja de ser una película de superhéroes que visten mallas de colorines (aunque hay que decir que la fotografía de la serie es menos colorida que la de otras películas del estudio, recurriendo más a tonos grises y metálicos (lo cual sienta bien a una película que no deja de ser el enfrentamiento del idealista Capi contra el sucio mundo)). Hay un poco de conspiración y poco más. No quiero que la Marvel se ponga a hacer películas en plan Nolan y sus "hago películas de superhéroes  para comer pero intento que no tengan nada de superhéroico", no obstante me habría encantado que la película hubiera sido un poco más valiente con sus villanos y no hubiera caído en lo fácil, si sencillamente el Capi se tuviera que enfrentar a la corrupción del sistema y esta no tuviera nombre me da miedo pensar el peliculón que podría haber salido.  

Pero esto no son "los tres días del cóndor" como parece que se menciona en cada entrevista o reseña. Esto es una película de superhéroes. Y tiene trama y esta bien, y además del Capi desarrolla a la Viuda y a Nick Furia, y además presenta bien al Halcón... pero lo importante es el espectáculo. Y de eso hay de sobra en esta película.

El ritmo es buenísimo y se suceden de una forma lógica pequeñas escenas de personajes con otras de la trama y otras de acción muy bien rodadas. Salvo en el festival inevitable de pirotecnia del clímax de la película, todo lo digital está reducido al máximo (o al menos bien disimulado). Las peleas apuestan por planos abiertos y continuos y se dejan ver muy bien sin la habitual sensación de caos de muchas películas. Las numerosas persecuciones y batallas contra vehículos también son muy buenas, estando muy lejos de meras persecuciones en autopistas y siendo auténticos intercambios de tiros con obstáculos de por medio. Tiros hay, y hay muchos, así como algún que otro corte y muchos puñetazos y escudazos en los morros. La violencia de la película es menos fantástica que la de otros productos Marvel, y uno siente que los golpes que se dan los personajes son reales y verdaderamente duelen. Y naturalmente la máxima expresión de la acción es el Soldado del Invierno, un supersoldado con un brazo metálico que apenas habla pero que tiene una presencia brutal. El soldado me recuerda a los Terminator, sencillamente anda y por donde pisa no vuelve a crecer la hierba. Es un asesino implacable y la película consigue que te creas que pone en apuros a un Capi que en esta película es más superhombre que en ninguna anterior.

En fin, una película absolutamente recomendable... incluso para los que no sean fans de este tipo de cine pues es muy equilibrada y, sencillamente, muy entretenida. Ahora, con los Guardianes de la Galaxia más como un aparente preludio de la Fase 3 que otra cosa, a esperar que la amenaza de Ultron provoque una nueva unión de los héroes más poderosos de la Tierra.