Una partida de culo

Creo que esa expresión define a la perfección la película Una jaula de grillos. Una de las películas más divertidos que recuerdo haber visto en mucho tiempo.
El argumento no es demasiado original. Un par de jóvenes se van a casar y sus padres quieren conocerse: unos son unos ultraconservadores políticos, los otros son un par de maricas que regentan un club de drag-queens en Florida. Por supuesto, todo acaba con una comedia de situación donde el par de gays tratan de ocultar su -exhuberante- pluma ante los dos vejetes tradicionales y formales. La historia no es demasiado original -es un gag mil veces visto ya-, y de hecho una de mis quejas para con la película es que el final es demasiado simple y "fácil"... sin embargo funciona. El trabajo del director y del guionista para acertar con los chistes, las situaciones y el guión en general es muy bueno. Y luego estan los actores, la verdadera esencia de la película. Porque Gene Hackman esta muy bien en su papel de senador tradicional y severo -y también bastante lento-, porque Kevin Kline se sale como gay "macho" que trata de ocultar su condición por su hijo, pero sobre todo porque Nathan Lane sencillamente se come la pantalla con su Albert, un gay que tiene tanta pluma que es dificil verle.
La película, como otras como "In & Out", se encuadra dentro de lo que se podrían llamar "comedias gays amables". Se estereotipa tanto el personaje del homosexual como el del hetero retrogrado y reprimidor. Ambos son exageraciones y vemos como se suceden los chistes uno detrás de otro por su colisión, pero en al final los dos descubren que hay cosas más importantes que los prejuicios y que en verdad son muy parecidos. Canto a la tolerancia, mensaje optimista y todos contentos.
En resumen, una comedia amable y muy divertida.