Este si es mi Oda

One Piece 700 - Su espacio

Este es capítulo es una absoluta salvajada. Me parece de los mejores de Oda en mucho tiempo... y me gusta porque además no hay ninguna gran revelación, algo que odio siempre en este tipo de series. Mucho se revela en este 700, pero nada fuera de lugar o que haya forzado la historia para hacer su debut en tan simbólico episodio. 

Largo tiempo ha pasado desde la última vez, así que para celebrar que sale en una viñeta...
¡Hancock´s festival!

Ahora bien, la cantidad de información que proporciona el capítulo es sorprendente incluso para lo habitual en los capítulos de entresagas. Saga de "entresagas" que también parece haber acabado ya con la llegada a la isla de Dressrosa; la narrativa de Oda esta cambiando y nos presentado tanto sagas más cortas como unas revelaciones de la historia global más dispersas a lo largo de los capítulos. Hemos dejado atrás sagas largas como las de Arabasta o Skypea donde la banda vivía aventuras al margen del resto del mundo, ahora todo parece entrelazarse más, y quizás por ello mismo entre sagas no tengamos una explosión de revelaciones colaterales. Me extraña que no vayamos a ver a Big Mom en este interludio, pero en cierta manera personajes como Kid o el propio Doflamingo han estado más que presentes desde la saga anterior. 

Es curioso, no obstante, que mientras todo el mundo parece fijar su vista en la banda del Sombrero de Paja, estos van a su bola. Curioso porque, con previsibles sagas de 100 capítulos, a Oda le queda relativamente poco margen de libertad en el manga y debería empezar a encarar grandes sagas... sobra decir que desde luego una saga con Doflamingo como enemigo puede ser catalogada como cualquier cosa menos como de transición, pero no deja de ser extraño que con un par de Emperadores en el horizonte las dos siguientes islas en la ruta de la banda parezcan ya fijas.

¿Y que islas son estas?

La serie no nos engaño finalmente con Green Pit, y no hay motivos ya para pensar que pueda engañarnos con sus siguientes destinos: Zou y Wano. De la segunda no hace falta hablar mucho. Una isla con espadachines donde además Oda podrá vestir a Robin-chuan y Nami-swan con kimonos. La primera me parece más enigmática. La banda de Law está esperando en ella, pero por las palabras de Kinemon no parece una isla normal (o por lo menos facil de acceder, aunque las dotes de navegación de los orgullosos samurais podrían no ser las mejores). Muchas dudas plantean los personaje de Kinemon y Momonosuke, y ahora junto a ellos esta Kanjurou y un enigmático tercer samurai que en teoria habría muerto en el naufragio... pero cuya muerte no se menciona explicitamente (amen de que parece muy poco propio de Oda inventarse un personaje sólo para matarlo casualmente). ¿Cuales eran los motivos secretos que llevaban a los samurais a esa isla? Momonosuke y Kinemon tienen todavía mucho que contar, en esta isla, en la siguiente y en la posterior... y no olvidemos que el primero es un dragón por una fruta seguramente artificial y el segundo es un espadachín que combate el fuego con fuego... pretendiendo Dofla usar precisamente el "fuego" contra la banda.

Y llegamos pues a Dofla. Su banda parece cada vez más loca, pero nuestro buen shichibukai parece comenzar a recuperar el control de la situación. Por una parte, como ya advirtió en su momento, el haber perdido su patente de corso no parece haberle puesto en jaque por completo. La venganza es un plato que se sirve mejor frío, y el mar es muy frío, capitan Law. Dofla tiene la Mera-Mera no mi, sinceramente no me gusta demasiado y verdaderamente creo que a Luffy no debería importarle demasiado quien tenga la habilidad que tuviera su hermano... pero si me gusta que Dofla haya tenido en estos años la idea de prepararse una salvaguarda para cuando el tio más estupidamente previsible y peligroso de los mares llamara a su puerta.

No obstante, más allá de su "onepiecesca" conversación con Luffy y la derivación inmediata de esta hacia la carne, más allá de la revelación de la Mero-Mero no mí, lo divertido de este capítulo es la presentación de los palos de la baraja del Joker. Los que parecen ahora "secundarios" de la banda de Dofla continuan ganando carisma, pero ahora se han presentado los cuatro asientos de los que en teoria parece que -Vergo aparte- son sus subalternos más poderosos. Y tenemos a Trebol y Diamante ya presentados... pero lo que me llama la atención es el asiento vacío del Corazón... pues si esto hace cobrar sentido por fin a las palabras de Buffalo... y si la banda de Law se llama la de los piratas del Corazón... entonces me intriga el otro hombre que permanece en las sombras en el asiento de las Espadas... porque en One Piece las coincidencias son muy poco casuales y uno recuerda que la banda de Ace era la de los piratas de Espadas.

Law y Dofla nos llevan a los Shichibukais y a la base la Marina. Oda hace un más que tramposo recuento de los Shichibukais en el que excluye al séptimo para aquellos que no hayan leído entrevistas, pero donde revela un par de datos curiosos. Por una parte se confirma que Buggy es un shichibukai, no deja de ser una salida lógica y natural para no presentar forzosamente más personajes (algo a lo que será obligado con el séptimo Shichibukai o con el enigmático personaje previsiblemente almirantable que responde al nombre de Fujitora y en el que Akainu confía para acabar con todo en un día), y tengo ganas de ver esa curiosa sociedad pirata de nuestro buen payaso. Por otra parte se nos menciona a Law como la mente maestra de el "Incidente del Puerto". Otra nueva incógnita para serie.

Por otra parte me alegra ver que el puesto de Law peligra, esto y la explicación de la revelación de la alianza de Kid del capitulo anterior son un par de detalles que me encantan, pues me parecían un par de serios boquetes formales del capítulo anterior. Un par de boquetes que Oda ha tapado con bastante rapidez y solvencia.

Y Abusa en cierta manera enlaza la serie con su pasado y ese futuro que esta más lejos de esa enigmática fábrica de Sonrisas de Dressrosa. El periódico sirve de excusa para mostrarnos un fugar vistazo a Jimbe, pero también a una sombra muy "Cocodrilizable" y a una siempre sugerente Bonney. Por los foros además he leído la más que convicente teoría de que Abusa sea un pseudónimo de Absalon... y eso nos traería de vuelta a Moria, algo que todos sabemos que tarde o temprano pasará.

Este no es mi Oda

One Piece 699 - El periódico de la mañana

Corría el capítulo 400... la banda llega a la torre de la justicia y de repente nos cuentan la chorrada de las llaves. Vale, los combates estuvieron medianamente bien, hubo un carrusel de intercambios memorables... era una chapuza pero entraba dentro de lo esperable porque de alguna forma tenía que montar Oda los uno contra uno (que tampoco son algo tan increíblemente habitual en este manga). Aquello fue forzar la historia mucho, pero bueno... esto es un shonnen.

Ahora bien, en este capítulo he tenido un deja-vú muy inquietante....

Entiendo que es un capítulo de transición como una casa. 18 páginas para sembrar un poco de incertidumbre sobre Aokiji y aumentar la tensión de cara a lo que está por venir. La renuncia de DonQuixote Doflamingo ha sorprendido por su inmediatez (aunque no había muchas más alternativas). Oda tiene margen para poder gastar un capítulo sólo acrecentando la tensión y mostrando inocuo fanservice de Robin (¡¡ Robin existe !!). Entiendo que en el siguiente capítulo comenzaremos a ver las verdaderas consecuencias de una situación tan peliaguda como esta que ha dejado en jaque al Gobierno Mundial, la Marina y Latveria Dressrosa. Este capítulo es la calma que precede la tempestad.

Pero lo de los periódicos me ha parecido una soberana chapuza. Lo de que Law y Luffy estén aliados es... cuando menos extraño habida cuenta de la prudencia que estaba mostrando el hombre con nombre de catástrofe bélica marítima francoespañola. Se entiende que algún periodista habría viendo la retransmisión y claramente los vería juntos (como a Smoker)... y también habría alguien de Gobierno y seguramente tenga alguna pregunta para Smoker y para el Shichibukai. Pero de ahí a que la alianza aparezca formalizada va un trecho. Lo del "no comentarios" del Gobierno es ya épico XD.

Pero esto, que ya me parece una torpeza narrativa bastante notable... se queda en nada con lo de la alianza de Kidd. Habría bastado con mostrar a alguién del submundo comentando esta noticia -es de suponer que Jack y esa gente tendrán sus medios- o una viñeta de las tres bandas atacando un barco con Pekoms y algún otro tripulante de BigMom. Pero lo de hacer la alianza pública... me ha sonado raro. No puedo evitar pensar en Killer dando una rueda de prensa con el hombre-gato de Hawkings al lado o en que hay alguna especie de Boletín Oficial de los Piratas en los que se publican estás cosas para que la gente esté al tanto. Y ya... siguiendo con la coñas... este capítulo abre preguntas tan interesantes como ¿le pagaba Barbablanca la Seguridad Social a Doma, el caballero bohemio? ¿Y a su mono?

En fin, un capítulo que me ha parecido extraño. Entiendo que es mera transición y que algún bombazo está por estallar ahora que los grandes nombres comienzan a moverse (me encantaría que el Gobierno decidiera disolver los Shichibukai).

Pero habituado a su buen hacer, la falta de sutileza de Oda con todo esto de las alianzas me extraña de sobremanera.

Escritores y dibujantes

Medaka Box 183 - His heart was full

Vs

Beelzebub 193 - The Poltergesist!

Los últimos capítulos de estas series ejemplifican en cierta manera lo mejor y lo peor de estas series. Medaka sin duda alcanza uno de sus clímax dramáticos... pero se atisba poco futuro para ella. Beelzebub se marca un capítulo muy molón que podría dar lugar a muchos buenos capítulos en el futuro, pero en su caso lo que se echa en falta es que el pasado fuera más consistente.

Medaka es una serie que se nota que tiene detrás a un escritor, que no un mangaka. Y además un escritor raro como él sólo. Esto acarrea muchos problemas, la serie tiene capítulos que sencillamente son un tiro en el pie narrativamente, con explicaciones y disertaciones largas, largas... muy largas. No es el ritmo propio de un manga, y sigue siendo extraño que este manga se publique en esa oda al comercialismo que es la Jump. Pero se publica. Y tiene detrás un escritor... alguién que tiene como objetivo desarrollar trama y personajes, y se nota. La resolución de Iihiko puede ser lo más cursi del mundo... pero es emotiva y más efectiva. Sencillamente, esta bien trabajada. No se hasta que punto lo tendría Nisio preparado. Supongo que no desde el principio con la aparición de Shiranui, pero si una vez que la serie fue prolongada más allá de su final natural allá por el 140 o por ahí. Todo el último año de esta serie ha estado enfocado hacia este momento. La culminación de los estilos.

Eso si, no se muy bien como pretende sobrevivir esta serie a si misma, pues no se me ocurre nada que emotivamente pueda superar esta saga. La serie parece haber quemado ya todas naves.

Con Beelzebu pasa casi lo contrario. Lo que tenemos en esta serie es un dibujante. Nisio no es un mangaka, pero sabe contar historias. Ryuhei Tamura tampoco es un manga, pero en su caso la cosa se agrava al ser un simple dibujante.

Beelzebub era una historia con potencial, pero ha tenido ya varios momentos en la que la historia ha requerido un plus de manos de su autor. Beelzebub ha rogado a su autor que creciera, que evolucionara a un mangaka completo... y Tamura no lo ha hecho. Se ha escudado en el humor y en el absurdo y ha convertido algunas de las mejores armas de la serie en un problema.

Sigo sin perdonar a la serie el final absurdo de la saga de En, y desde entonces hemos deambulado con minihistorias cortas que no conducían a ninguna parte. Ahora volvemos a ver una saga que parece seria. Y el humor sigue estando presente y se agradece, y el autor consigue mantener al grupo principal de protagonistas pese a la evidente espiral de poder. Pero... sencillamente, el carisma de los nuevos villanos es nulo. Demasiados malos demasiado juntos y demasiado ensalzados. Y el recurso de los capitanes mola, es obvio... pero no tiene sentido que aparezca ahora y no durante la saga de En.

Así pues tenemos a Medaka, una serie construida sobre su guión. Una serie que puede sacrificar muchas cosas con el fin de emocionar y de que sus palabras alcancen al lector (nunca mejor dicho). Beelzebub, por desgracia, ha pasado de ser una serie que apuntaba algo a un conjunto de clichés del género y mero efectismo dramático.

Esperando que StealthSymphony sea serializada. 

Una serie guionizada por Narita Ryougo puede ser muy, muy grande.

La última fantasía

Final Fantasy IX

La novena entrega de la saga siempre ha sido calificada como un regalo, un regalo porque la saga se había desviado ya definitivamente hacia el steampunk que despuntaba en la sexta entrega y que ya se convirtió en una mezcla de fantasía futurista a partir de la célebre aventura de Cloud y el puto Sephirot. Yitan y cía fueron un canto de cisne del espíritu de rol medieval de la serie, una mirada al pasado en todos los sentidos posibles. La última colaboración de todos los padres clásicos de la serie.

Y es una gozada. 

No soy un gran experto en fantasías finales, sólo he jugado 5 entregas numeradas... pero esta la coloco sin duda en mi podio particular, un podio en el que simbólicamente ahora Vivi se pelea con Celes y Rydia por un primer puesto nada claro.

Final Fantasy IX nos transporta a Alexandria, la capital de un reino donde un extraño personaje bajito con ojos amarillos despierta. Una obra de teatro se va a celebrar ante la reina y la princesa, y Vivi consigue asistir al gran evento al tiempo que la princesa Garnet ruega al simpático ladronzuelo Yitan que la secuestre para la fustración de su fiel caballero Steiner. Comenzará así una fuga repleta de peligros durante la cual los personajes comienzan a averiguar las extrañas intrigas que se suceden bajo la reina y sus sombríos aliados.

La historia no tiene mucho más. Clásico malo muy malo y héroes muy heroicos. En la simplicidad está la elegancia y la trama se mantiene muy bien hasta que a los japoneses les invaden sus manías y comienzan con cosas extrañas del pasado de Yitán que joden la historia (aunque desde luego no llegan a la altura de las paranoias surreales de Cloud y los pretenciosos líos ya directamente inclasificables de Squall). La historia es algo irregular; Yitán es un protagonista carismático y magnífico durante los dos primeros cds, perdiéndose después en su propio protagonismo, como sucede con la propia historia principal que al final acaba cayendo en una sucesión demasiado grande de tópicos. Es una pena porque la historia de los primeros cds es simplemente preciosa, y personajes como Garnet, Steiner o Freija son magníficos... de Vivi sencillamente no diré nada más que es un personaje mágico.

Vivi es DIOS, todo lo sabemos. Garnet es adorable. Yitan un puntazo.... pero  ¿quién demonios diseño a Quina? 

Sin embargo la historia sólo es un plus en un juego, un hilo conductor que no tiene más obligación que conducirnos de una situación a otra y que mientras no sea insultante me satisfará de sobra. Y como juego, Final Fantasy IX es muy bueno. Es una vuelta a las clases, a las características definitorias de mi adorado Final Fantasy IV. Un mago negro es débil físicamente  una maga blanca cura, un invocador invoca, un guerrero es un tanque, un ninja tira cosas y un caballero-dragón salta. Si exceptuamos lo dopado que está el ladrón por el factor "soy el protagonista" y que el rol de mago blanco e invocador se ha fusionado, las clases son extraordinariamente cerradas. Únicamente Vivi es capaz de lanzar un Piro, y únicamente Garnet y Eiko son capaces de usar Cura o invocar un espíritu (y los espíritus que cada una puede invocar son distintos). Disponemos de una gran cantidad de habilidades y ataques que vamos consiguiendo por medio los objetos que nos equipamos; en cierta manera podemos configurar mucho a los personajes, pero suelen ser habilidades pasivas o de defensa y no podemos hacer que las clases se solapen entre ellas. El juego, no obstante, no consigue escapar a esa pequeña maldición de muchos de estos juegos en la que pasada la mitad del juego la party protagonista se ha hecho tan poderosa que la mayoría de los enemigos no suponen un gran desafío para el jugador. 

Desafíos extra al margen, Final Fantasy IX no es un juego excepcionalmente largo; dura unas 40 horas no demasiado complicadas. El desarrollo es muy lineal durante su primera mitad, donde ni siquiera llegamos a tener al mismo tiempo más de los cuatro personajes que podemos manejar en batalla. El juego controla mucho al jugador durante esos momentos (y no le ha permitido adquirir muchas habilidades) y consigue una dificultad bastante decente, después las opciones se multiplican y la libertad conlleva consigo una disminución drástica de la dificultad y un aumento del tedio de los combates. Las batallas se basan en   semi-turnos mediante la clásica barrita que se va llenando; cada personaje puede realizar un ataque normal o usar objetos, así como dispone de un par de menús para actividades propias de cada clase que se van consiguiendo de acuerdo a los objetos que vayamos equipando (magias, invocaciones, saltos, lanzamientos, robos, etc). En las batallas existen alineación de elementos y estados de todo tipo, aunque desgraciadamente se cumple muchas veces esa regla de que te puedes pasar un Final Fantasy pulsando un botón. Uno de los factores diferenciales de esta entrega es el "Trance" una especie de barra de "se me han hinchado las pelotas" que se va cargando conforme te van dando hostias y que convierte al prota en un apocalipsis andante cuando se llena... pero sobre la que no tenemos ningún control y que suele servir para apalicemos de una forma inmerecidamente cruel a algún enemigo cutre. Dejando a un lado el problema del trance y el hecho de que si el usuario tiende a levear es posible que el juego se haga demasiado fácil, el férreo sistema de clases obliga al jugador a usar la estrategia y hace los combates bastante entretenidos (sobre todo al principio). También hay que decir que el juego, dentro de su estilo, presenta algunas variaciones interesantes sobre las batallas colocándonos en ocasiones en escenarios muy concretos y bien diseñados.

Las mazmorras son cortas y los puzles no son nada del otro mundo, pero al menos están ahí y no han sido sustituidos por horas y horas de video... cinemáticas haberlas haylas pero suelen ser muy cortas y no interrumpen el ritmo de la partida.

Recomendable hasta decir basta, el juego es una pequeña maravilla. Un precioso juego con toda la potencia y los recursos de una Playstation llevada al límite, pero con el corazón de un juego de un juego de 16 bits.

Espero no tener faltas de ortografía en esta reseña

Arma fatal

El mejor policia de Londres es tan bueno que hace quedar mal al resto de sus compañeros, por ello sus mandos lo envían a un pequeño pueblo de la campiña que luce con orgullo el membrete de ganador del concurso de mejor pueblo de Inglaterra para que se tranquilice. Allí, donde no se ha registrado un asesinato en 20 años y donde la fuga de un cisne es una cuestión casi de estado, un hombre que se conoce a la perfección la ley y que no tolera la menor infracción se encontrará en serios problemas...

Tenía ganas de ver esta película, es de esas que siempre ves que ponen bien en foros y blog (así como su precuela espiritual Zombies Party, que tampoco he visto pero que desde ya se ha convertido en una de mis prioridades cinéfilas). Eso si, me esperaba una especie de Torrente británico, una comedia ligerilla y divertida.

Y No.

Esto es otra "Kiss Kiss Bang Bang". O sease... una película poco menos que perfecta. 

La película parece una especie de buddy-movie con el clásico argumento del contraste entre la ciudad y el campo, con un sentido del humor muy británico y un componente cinéfilo... pero cuando menos te lo esperas te mete cosas de slasher... y cuando la formula comienza a agotarse se reinventa por completo y le da la vuelta a todas las líneas pronunciadas hasta el momento de su SOBRESALIENTE GUIÓN para acabar como un divertimento exagerado y terriblemente disfrutable.

No diré más porque esta es una de esas películas que los spoilers te joden. Una de esas películas que cuando la ves por primera vez te sorprende y disfrutas como no esperabas. Una sencilla y jodida maravilla de película que no había terminado de ver cuando ya me estaba preguntado cuando la iba a revisionar.

Un momento mítico más, con sentimiento

Cuando hace unos años se anunció que sería Joss Whedon el encargado de dirigir "Los vengadores" salté de alegría (supongo que en sentido figurado, no tengo un recuerdo exacto de aquel día). El hecho de que este hombre fuera el creador de esa pequeña maravilla llamada Firefly bastaba ya para que el proyecto de los héroes más poderosos de la Tierra fuera esperanzador... pero pro encima de todo estaba el hecho de que ese hombre era el creador también de otra serie, una de mis favoritas.

MOMENTO MÍTICO 35 - Buffy, the vampire slayer

No me gusta nada el terror. De hecho mi primer recuerdo de la serie datará del 98-99 y fue una escena fugaz en la que a Buffy le seguía una Drusila con su maquillaje de vampiro, y la caracterización me dio un mal rollo increible que me alejó de la serie durante varias de las reposiciones que Canal + solía echar a medio día. 

Sin embargo, quizás porque en aquellos apenas echaban nada por la tele que valiera la pena, le dí otra oportunidad a la serie. Y me encontré una pequeña maravilla.

El argumento de Buffy es una soberana estupidez. Tenemos una chica en un instituto que se dedica a cazar vampiros porque es "la cazadora", una especie de figura mitológica paladina de las fuerzas del bien. A Buffy le ayudara un pequeño grupo compuesto por Giles, un "vigilante" de una surreal orden británica (qué alguién me explique para que servía "el Consejo"), Willow, su mejor amiga y una aprendiz de bruja; Xander, que es una mala influencia para él mismo, y un grupo de secundarios que va variando un poco a lo largo de las temporadas. Y Buffy necesitará esos aliados, pues Sunnydale es un pueblo con una tasa de mortalidad digna de un monumento.

Pero incluso en los vergonzosos momentos en los que la serie intenta dotar a la figura de la cazadora de un halo de misticismo (aspecto en el que fracasa estrepitosamente por encuadrarse dentro de lo que yo siempre he llamado "gigantes con pies de barro", series que intentan construir algo demasiado grande sobre una base enclenque), incluso cuando tontea con los tópicos del género o se ve arrastrada en una obvia espiral de poder, uno ve que la serie tiene algo más. Es una serie que intenta avanzar siempre, y lo hace sin miedo. Los personajes evolucionan a lo largo de sus siete temporadas en todos los sentidos posibles y uno llega a encariñarse verdaderamente con ellos. La serie muestra a sus personajes más allá de la lucha contra él mal, les somete a traiciones, les mata familiares o amantes, los vuelve locos, los sume en la mediocridad y les provoca crisis de identidad e incluso entra en temas tan tabú como la identidad sexual. Todo ello hace que Buffy sea una serie notable, pero lo que la hace sobresaliente son sus formas. Porque incluso cuando uno lleva ya más de cinco temporadas a su espaldas y cree haberlo visto todo se queda con la cara a cuadros cuando ve que un episodio comienza así:

Es en las formas donde esta serie seduce. Los diálogos entre sus personajes tienen una frescura brutal; frases de todo tipo se cruzan entre sus carismáticos personajes consiguiendo arrancar siempre una sonrisa cómplice al espectador. Hay tramas serias naturalmente, pero pueden estar manejadas por un villano tan hilarante y memorable como el alcalde de la tercera temporada. Un apocalipsis puede narrarse grandilocuente en segundo plano mientras el secundario cómico de la serie vive la más surreal de sus noches. Un personaje muy secundario puede volver 30 episodios después para cambiar toda la serie mediante un hechizo que altera la realidad.

Y luego por descontado están las dos joyas de la serie, curiosamente opuestas... un episodio mudo y otro músical, y lo mejor de todo es que estos dos formalismos pudiendo ser un mero recurso cómico son puestos al servicio de la trama  y la historia haciendo avanzar de sobremanera la serie.

Mobilis in mobile

Canción de titiriteros y marionetas: Winter is coming

One Piece 698: Llega Doflamingo

Jodido, muy jodido, reseñar este capítulo. Básicamente lo tiene todo. Es la definición de perfección dentro de lo que es el arquetipo de capítulos de la serie. Todo lo que hace grande a One Piece esta aquí, y lo esta no sólo en grandes cantidades, si no perfectamente conjuntado.

Hay cosas malas también, eso es cierto. Parece que todo el mundo no tiene ya solo un gran control del Haki, si no que directamente todos los grandes nombres parece que van a poseer el del conquistador (algo que también hay que admitir que es relativamente lógico). Luego por supuesto está la guarrada del gas "te mato, te mato, pero no" de Caesar, que me sigue pareciendo una reiteración de uno de los errores más típicos de Oda. Y como fan de Smoker me duele lo mucho que esta saga se ha ensañado con él. Y luego probablemente el final sea una trampa gigantesca...

No importa.

El capitulo es una gozada a todos los niveles de principio a fin. Desde la surreal historia de Cariboo a esa espectacular viñeta final con el retorno del carismático faisán azul.

El capítulo, siendo argumental y formalmente muy fuerte, mantiene el humor absurdo en segundo plano que tanto se agradece en la serie. ¿Qué cerramos un cabo suelto del que nadie se acordaba como era el Mini-Merry? Pues mejor si lo hacemos con un Franky con unas coletas dignas de Pocahontas. ¿Qué tenemos que rescatar a los petrificados? Pues evidentemente el marine del cubo en la cabeza no se va a dejar este por una nimiedad como es tener que colocarse un traje anti-gas. ¿Qué Law va a explicar algo de Kaidoh y de la Alianza? Pues mejor si al mismo tiempo se da cuenta de Chopper de sombrero era sólo un anticipo de lo que le puede esperar donde se ha metido. Todos esos grandiosos detalles, fruto de horas de trabajo en la sombra, hacen más grande el capítulo, pues serían verdaderamente... el capítulo casi se escribe solo.

Los capítulos entre sagas de One Piece siempre son muy celebrados... y este se puede clasificar ya entre los mejores dentro de los mejores. Estos capítulos suelen suponer el cierre de una saga y mostrar las consecuencias de esta al tiempo que vemos como otros guijarros de la montaña se precipitan al mismo tiempo que los desprendidos por la banda. 

Así, se cierra el arco de Punk Hazard, pero se sigue mostrando a Caesar y nos valemos de él para conocer algún que otro detalle de las frutas mientras la sombra de Vegapunk se hace más y más alargada. El SAD-Smile continua siendo un motor de la serie y se toma como excusa para explicar finalmente la organización del Nuevo Mundo... un océano gobernado por los piratas desde la sombra (valiéndose Oda de una comparación con las familias mafiosas), lo cual en cierta manera nos permitirá seguir viendo a la Marina y a los Revolucionarios en la serie sin que ello resulte incongruente. Conocemos que el número de zoans de Kaidoh es de más de 500, y que estas tienen algún tipo de defecto (en este capítulo mismo además se ve un cambio muy repentino de Momonosuke humano a dragón). La concepción de estas bandas como auténticos mini ejércitos en la sombra choca algo con la concepción de dos bandas tan "pequeñas" como la de Shanks y la de Teach, supongo que en el primero de los casos Oda se valdrá de bandas afines como podía ser Doma o White Bay con respecto a Barbablanca... pero en el caso de Teach tengo alguna duda.

Sin embargo Kaidoh queda un poco lejos, y el capítulo nos sorprende olvidando Green Bit y dirigiendo los pasos de la banda hacia Dressrosa. Allí todo parecería propicio para una saga shonnera con una presentación ya realizada de los miembros de la banda de Doflamingo, pero el futuro de este es ahora incierto a pesar de su juramento de caza. En Dressrosa, no obstante, hay una gran incógnita en forma de compañero de Kinemon... un samurai que parecía el clásico aliado de saga en Punk Hazard pero que ahora parece evolucionar a algo más. Tanto el samurai como su hijo se sorprenden demasiado ante la mención de la alianza de Kaidoh y Doflamingo, y al compañero de Kinemon deberíamos añadir aquella extraña visión de  Doflamingo de Momonosuke. Oda se guarda algo con ellos, parece claro.

No obstante, hay una clara diferencia con respecto al comienzo de las aventuras de la banda, donde veíamos en segundo plano la persecución de Ace de Barbanegra. Entonces tardamos mucho, 440 capítulos, en saltar hacia el clímax que fue Marineford. Naturalmente el gran desenlace de la serie será Raftel, pero Oda tiene unos 500 capítulos por delante y demasiadas tramas abiertas como para abrir más. Doflamingo era una de esas tramas. Como Kaidoh y Big Mom son dos Emperadores "de relleno". Como Kuma y Dragon representan una parte de la historia que -aunque quizás sea tangencial a los protagonistas- tarde o temprano habremos de ver. Como la rivalidad entre los Supernovas puede servir de nexo para no embarullar la serie con grandes nombres. Oda tiene que comenzar a cerrar argumentos. Ya ha gastado 100 capítulos, 2 años de la serie, para suavizar los efectos del salto temporal. Tras un Hodi que había de ser débil, y un Caesar que se encontraba en una isla innacesible, ya ha quedado bastante probado el nivel de la banda y es momento de pasar a las ligas mayores. 

Hay que cerrar tramas, hay que hacer hueco para Shanks, Teach y Akainu.

Y luego por supuesto esta la entrada en escena verdadera de Doflamingo. Un personaje que se presentó allá por el capítulo 235 (capítulo arriba, capítulo abajo) y que desde entonces no ha hecho nada más que incrementar su peso en la serie desde la sombra. La personificación del caos ha entrado por fin en escena, y no como un espectador como en Marineford, el flamenco esta cabreado de veras y -mostrando por primera vez sus hilos- ha despachado a todo un logia con una facilidad pasmosa.

Y para pararlo... nade mejor que uno de los dos "freelance" de excepción de la serie. Aokiji, el villano más benigno de la serie, ahora reconvertido... a algo que sencillamente mola.

Lo único malo de esta escena es que no puede tener desenlace, pues argumentalmente parece imposible que cualquiera de los actores de esa imagen muera, son personajes que indudablemente serán capitales en el futuro desarrollo de la serie. Supongo que este combate se omitirá y que Dofla regresará a su casita para encontrarse una bonita sorpresa... pero no hay que olvidar que estamos entre sagas, Kidd y su Alianza no creo que monten una más pequeña que la de Luffy y Law, a Big Mom podría llegarle en breve un cofre bomba, Shanks y Teach deberían al menos ver un periódico del regreso de Luffy, Jack y el resto de la liga de las Sombras podrían acelerar su plan de atacar Gothan, Akainu de buen seguro querrá lucir su perilla,  de Moria y Cocodrile no sabemos nada, y quizás hasta los revolucionarios se dignen a hacer algo.

Zack & Nick

Ghost Trick

Te despiertas amnésico en un basurero donde, sin que nadie parezcan verte, una joven es asesinada por un mafiosillo. Entonces un flexo comienza a hablarte y descubres que puedes ir hacia el cadáver y habar con su fantasma... porque tu eres otro fantasma, un fantasma con ligeros poderes telequinéticos y la facultad de regresar atrás en el tiempo unos  minutos antes de la muerte de otros fantasmas. Comienza así una muy larga noche en la que deberás salvar a varias personas al tiempo que vas descubriendo poco a poco la verdad sobre tu propia identidad y muerte.

Ghost Trick es obra de Shu Takumi, creador de la saga Phoenix Wright. Y se agradece que entre juicio y juicio este hombre tenga el tiempo necesario para crear esta pequeña joya a medio camino entre las aventuras de Phoenix y Maya y las correrías "point and click" de Zack and Wiki. 

Las pantallas están claramente diferenciadas, presentándonos el juego una a continuación de otra pequeñas escenas de crímenes (muchos de ellos absurdamente rebuscados y surreales). Presenciamos el crimen y después hemos de evitarlo actuando sobre objetos para evitar la sucesión de fatales casualidades que llevaran a la muerte de la víctima de turno (normalmente cierta detective hiperactiva y feliz). Las cosas se irán complicando en forma de márgenes de tiempo estrechos, muertes encadenadas o asesinados en los cuales hemos de salvar a alguien pero aparentando que muere. 

Técnicamente es un juego que cumple de sobra. Los diseños de los personajes y los escenarios son primos hermanos de los de Phoenix Writgh, y tienen la calidad y simpatía de estos. Buena banda sonora -con muchos efectos reciclados de la saga de abogados- y unas animaciones excelentes. Los escenarios son como un gigantesco comic por el que nos moveremos con el lápiz táctil de la DS. El control es más simple que nada y apenas hay problemas. Sissel, nuestro fantasma, sólo puede poseer ciertos objetos inanimados dentro de un pequeño rango de acción. Arrastramos el fantasma de un objeto a otro y hacemos el pequeño truco de poltergeist que podemos sobre el objeto en cuestión (sólo hay un tipo de truco por cada objeto).

El problema es que las acciones son muy limitadas, y normalmente no obvias pero si bastante predeterminadas. Alguna que otra secuencia es muy ingeniosa y original, complicada de ver incluso cuando es algo un pelín rebuscado a efectuar en un momento complicado... pero lo cierto es que el juego no es demasiado complicado y que por su concepto puede ser resuelto facilmente por el prueba y error (normalmente no hay mucho que probar). Un mayor número de posibilidades a la hora de salvar a los desafortunados habría sido de agradecer, pues el juego tendrá unas 10 horas de duracción y su rejugabilidad es completamente nula más allá de lo simpático y entrañable que es.

El gran aliciente del juego llega por supuesto, habida cuenta de su autor y de su particular interpretación de las aventuras gráficas, en el argumento y los personajes. El argumento tiene bastantes y currados giros de guión, enarbolando un surrealismo exagerado que además influye en el juego colocándonos en escenarios imposibles o modificando las condiciones de juego (la escena de la fuga parece sacada de Metal Gear). El argumento sorprende y está bien hilado. Y luego están los personajes, ridículos y unidimensionales hasta cierto punto... pero carismáticos y simpáticos como ellos solos.

Missile sencillamente es DIOS

No se juega con Shiranui

Medaka Box 180 - Kurokami Final

Parecía que Medaka había llegado al extremo de lo imaginable hace unos pocos capítulos con la muerte -algo decepcionante- de la propia Medaka, pero la protagonista se levantó de entre los muertos y en la mejor tradición de movimientos absurdos del shonnen lo hizo con una ultra-mega-super técnica. Todo parecía acabado.

Pero a veces un árbol no nos deja ver el bosque. Desde el principio esta saga era la del rescate de Shiranui, y la amenaza era que Iihiko la poseyera... y finalmente ha pasado. 

Medake es un zombi al que ahora le han hecho un boquete y Shiranui ha sido poseida, no era improbable pero si algo que ya habíamos perdido de vista y que ha vuelto como un magnífico cliffhanger. Supongo que en el próximo capítulo llegara la hora de Zenkichi y el poder de la amistad, pero desde luego la capacidad de Nisio para los guiros de guión es memorable... y como todo el mundo atribuye la gracia de esta serie a sus guiones enrevesados... mencionaré también a Akatsuki Akira... me encanta su dibujo angular y axiomático para la serie.

Ojala vivas tiempos interesantes....

One Piece 697 - Acuerdo

Capítulo de transición de One Piece con bonitas escenas de amistad y respeto entre los hombres de Luffy y los de Smoker; pero si bien dentro de la serie este parece el primer paso hacia Green Bit, parece cada vez más claro que Punk Hazard es también un primer paso hacia una nueva era, la nueva era que Barbablanca anunció. Los grandes nombres han estado guardando fuerzas y consolidando sus dominios, mientras los jóvenes más ladinos escalaban hacia ellos entre las sombras y los más audaces y temerarios les desafiaban abiertamente. Barbanegra se ha ido preparando, los Marines se han radicalizado, los Revolucionarios han esperado pacientemente hasta que llegase su momento, y por supuesto la banda ha tenido su entrenamiento post-traumático. Ahora, como no podía ser de otra forma, la banda lo revoluciona todo directa o indirectamente, intencionadamente o sin apenas darse cuenta. Existe una bomba de relojería llamada Shirahoshi con un detonador remoto aleatorio que vive una extraña aventura con viejas que apedrean piratas. Y ahora el mundo subterraneo esta siendo sacudido. Doflamingo, señor del caos, mercader de esclavos y armas... esta siendo chantajeado por un antiguo grumete de su tripulación, y las dos opciones que tiene ante él pueden ser la gota definitiva que colme el vaso harto rebosante del Nuevo Mundo.

Doflamingo no es un Moria de la vida. Es poderoso, eso es indudable. Sus hilos se extienden por todo el mundo, quizás hasta en un sentido puramente físico (hasta que el Sky Road quede explicado pensare que tenía enganchada la cabeza de Baby 5). Es alguién que podría enfrentarse de tú a tú a un Almirante... pero eso no significa que desee hacerlo. Barbanegra sin duda podría haber acabado con cierto perro rojo pero huyo por patas consciente de que el precio de tal canicidio no sería pequeño. Nadie quiere enfrentarse a un  Gran Nombre, ni siquiera otro Gran Nombre. 

Dentro de la trampa que parece tener el plan de Law (dudo que devuelva a Caesar, o al menos que se lo devuelva con corazón), nuestro buen Shichibukai tiene dos opciones a cada cual peor.

a) No hacer nada. Kaidoh no parece ser un chico razonable. El hombrecillo iba a por Barbablanca y masacró a la tripulación de Moria... pacífico no parece. Así pues tenemos a "algo" (me encantaría que fuera una locura como un fonegrifo con la furta humano-humano modelo demonio, pero con la viñeta de Garp en la memoria supongo que sera un gigante) con un ejército de "Minotauros" y muy malas pulgas. En todo caso, no parece un rival accesible para el bueno de Doflamingo... y creo que la Marina actual tampoco debe tener en gran aprecio a los shichibukais como para defenderlo a muerte.

b) Abandonar su puesto de Shichibukai. Complicado. Por mucho que a Dofla le gustase tirarse este farol, una cosa es hacerlo por su propia voluntad y otra obligado y sin poder prepararse para las consecuencias. No parece el tipo de noticias que al Gourosei le guste leer, y menos al bueno de Akainu. El gobierno puede conocer más o menos los chanchullos de Doflamingo, pero lo que parece claro es que si anuncia que se marcha pronto tendrá a un par de Almirantes y unos cuantos Pacifistas llamando a su puerta... y se acabó su libertad para trabajar. Naturalmente la opción lógica sería ampararse en la protección de Kaidoh, parecería lo más sensato... pero eso supondría que un tio muy tocho que controla muchos negocios chungos trabajaría en exclusiva para un Emperador... a la Liga de la Sombras no le haría mucha gracia tal situación.

Naturalmente puede pasar que Dofla consiga un poco de tiempo de manos de Kaidoh y se presente en la siguiente isla con toda su tripulación y muy malas ideas con respecto a cierto cirujano de la muerte... isla donde tambien podría estar alguién de la tripulación de Big Mom para alegrarle aún más el día a Law... así como Aokiji, Moria, Cocodrile, Marco, Gin o dios sabe quién más. 

Pero lo importante es que Doflamingo se había colocado en el centro de una telaraña con un Emperador, la Marina y el Inframundo a su alrededor; una teleraña desde la que podía observarlo todo... y desde luego nada previsible puede pasar al sacudir esa red tal y como Law y Luffy están haciendo.