Normalmente el anime no suele tratar bastante bien los deportes de equipo. Hasta cierto punto es normal, narrativamente no es fácil dividir el protagonismo de una historia entre varios personajes y se suele caer en centralizar este en uno que acaba acaparando el drama sobre si mismo haciendo que el carácter colectivo de los deportes de equipo se diluya. Vamos a decir que esto es relativamente tolerable en una serie de baloncesto, con 5 jugadores es fácil entender que los individuos puedan ser extremadamente decisivos... sin embargo cuando nos vamos a deportes que colocan más de una decena de jugadores en el campo pasa a ser muy ridículo, y obviamente es imposible no pensar en míticas series como "Oliver y Benji" que eran muy disfrutables, pero que también eran comedias casi involuntarias.
Y eso es lo bueno de esta "Cramer", que trata el deporte del futbol relativamente bien, con muchas tácticas, con entrenadores que explican temas de presión o desmarques sobre pizarras al tiempo que referencian a figuras reales del deporte. La protagonista es la protagonista, y hay 4 o 5 chicas también con mucho peso en la historia... pero cada una está en su posición y defienden los defensas y atacan los atacantes, y aunque una chica sea muy buena si esta marcada no le llegan pases, o puede fallar un remate porque la vida no son certezas. Todo eso esta muy bien. Y si una serie que trata de una forma realista un deporte es algo a destacar, más aún lo es si lo que trata es el deporte femenino aficionado con todo el tema de los problemas de competitividad y profesionalización.
"Cramer" es una serie muy digna y notable sobre el futbol femenino que además tiene una comedia bastante eficaz y presenta unos personajes con una carga dramática decente -pequeños conflictos pero nada absurdamente rebuscado ni sobredimensionado-. Es una serie tremendamente disfrutable que seria muy recomendable de no ser porque su apartado técnico es muy, muy pobre. Los diseños, si bien simples, son variados, coloridos y bonitos, pero son demasiado planos en el sentido de que se nota demasiado una animación por ordenador con unos modelados demasiado simples. El trabajo de fondos o de animación es también muy simple y, en general, es una serie bastante pobre visualmente. Es triste, es una serie muy apañada a nivel argumental, con un buen ritmo y donde todo lo que hay puesto en el guión funciona bastante bien... pero la factura técnica es tan pobre que por momentos es imposible ignorarla. Una pena, creo que es una buena serie, pero adolece demasiado de su pobre presupuesto.
Nueva edición del podcast con nuestro habitual programa sobre las series que veremos esta temporada, añadiendo en esta ocasión un par de videojuegos como extra al final.
Los tiempos del programa son los siguientes:
Intro - Bokutachi no Remake OP
00:01 - Temporada de anime
Higurashi no Naku Koro ni Sotsu
Kageki Shoujo!!
Yami Shibai 9
Tensei shitara Slime Datta Ken 2nd Season Part 2
Tsuki ga Michibiku Isekai Douchuu
Kobayashi-san Chi no Maid Dragon 2
Love Live! Superstar!!
Shiroi Suna no Aquatope
Ore, Tsushima
Otome Game no Hametsu Flag shika Nai Akuyaku Reijou ni Tensei shiteshimatta... X
Seirei Gensouki
Sonny Boy
Peach Boy Riverside
Deatte 5-byou de Battle
Genjitsu Shugi Yuusha no Oukoku Saikenki
Bokutachi no Remake
Shinigami Bocchan to Kuro Maid
Megami Ryou no Ryoubo-kun
Tantei wa Mou, Shindeiru.
Kanojo mo Kanojo
02:23 - Sakuna
02:39 - Runersia
Fin - Slayers Next OP
Como siempre, gracias por escucharnos. Esperamos vuestros comentarios sobre este programa o sobre el podcast en general, así mismo también agradecemos likes, retuits (@eter_nigromante, @STZtwi y @chusetto) o subscripciones.
El problema de los japoneses es que quieren meter el alma en todo, y además llegan al alma por el puto kokoro. Entonces, tenemos una serie de ciencia-ficción, una serie sobre una androide que realizará un viaje de 100 años para evitar un apocalipsis en el que los robots exterminen a la humanidad. El argumento no es especialmente original, viajes en el tiempo con robots de por medio, destino y debates existencialistas. Todo eso no pintaría mal. Regreso al futuro + Asimov. La idea tiene mucho potencial.
¿El problema? Que la puta robot es una idol que tiene como tarea principal de su programación hacer a la gente feliz con sus canciones.
Y podría funcionar, lo de ser idol te daría para meter canciones que podrían encajar muy bien como marco de la -disparatadamente espectacular- acción que se marca la serie. Pero... llegado un momento de la serie, cuando esta tendría que estar planteándose dudas existencialistas sobre la identidad de su protagonista, sobre la evolución del pensamiento propio de las IAs, sobre lo que significa ser un ser vivo y no un objeto, lo correcto que es un personaje altere el futuro, el tema religioso de la rebelión de las creaciones contra sus creadores, cuando la serie en definitiva tendría muchos y muy potentes argumentos dramáticos a los que agarrarse... se lanza a la crisis de identidad de que la protagonista no puede cantar porque no sabe cual es su corazón. He leído demasiados grandes autores de ciencia-ficción como para tragarme esto. Quiero la ciencia-ficción de Eve no Jikan, no la de Macross.
Y la serie comienza bien, se vertebra en torno a sagas de -inicialmente- dos episodios y los primeros conflictos que plantea a Vivy están a punto de destruirla por las paradojas lógicas a las que la someten, aunque la serie no plantee las leyes de la robótica sientes que están ahí y las retuerce con algunas interpretaciones interesantes. El primer arco es muy bueno, y el segundo en el espacio es sencillamente memorable. Hay buenos personajes y buenos conflictos del género de la ciencia-ficción. Además, tanto a nivel de diseños como de animación, se nota que en la serie hay invertido mucho dinero y talento y es sencillamente espectacular, un regalo para la vista y para los oídos.
Pero la técnica no basta para llenar una historia si el guion es flojo, y creo que llegado un momento la serie pasa de plantear sus debates con frialdad a recurrir a una emoción artificial y artificiosa, a querer verlo todo más con el corazón que con la cabeza. Me parece un grave error y, una serie que comenzó monstruosamente bien poco a poco fue perdiendo mi interés hasta que su final me provocó la más absoluta de las indiferencias. Una pena, la idea principal era buena y la factura técnica es increíble, pero el guion es demasiado japonés en algunos de los peores sentidos.
Nueva edición del podcast en la que, como es habitual, repasamos la temporada recién acabada de anime, para después viajar a la más espectacular China del siglo III
Slime Taoshite 300-nen, Shiranai Uchi ni Level Max ni Nattemashita
Seijo no Maryoku wa Bannou Desu
Isekai Maou to Shoukan Shoujo no Dorei Majutsu Ω
MiniDragon
Kumo Desu ga, Nani ka?
Wonder Egg Priority Special
Kingdom 3rd Season
OVA guarrilla de Kaguya-sama
Kuro Gal ni Natta kara Shinyuu to shitemita.
02:34 - Dynasty Warriors
Como siempre, muchas gracias a aquellos que nos escucháis y le daís al like o comentáis y ayudais a darle visibilidad a este pequeño modesto podcast. Nuestros perfiles en twitter son @eter_nigromante, @STZtwi y @chusetto
Algo muy importante en una serie es como se cierra. El final de una serie la marca. Una serie puede ser perfecta, pero si su conclusión no está a la altura de todo lo anterior siempre nos quedará esa agridulce sensación de "Ains, Naoki, me has vuelto a fallar". Y una serie puede ser normalita, pero si su final es bueno la vamos a recordar mejor de lo que era. Una serie mala no la arregla nada, claro. Una serie mala la olvidamos si no la ignoramos directamente tras ver unos pocos minutos y decidir no gastar en ella algo tan importante como nuestro tiempo, hay demasiadas opciones de ocio y el tiempo es una moneda cara en ese sentido. Ahora bien, hay una sensación horrible y es ver como una serie se va a la mierda, como poco a poco va degenerando hasta que en su final no hay apenas ya nada de lo que en su día apreciamos.
El apartado técnico
El como luzca una serie es importante. Naturalmente en esta categoría ganarían las arañas a las hueveras. En ningún momento habría competición, dejando a un lado Kumo Desu ga, Wonder Egg Priority es una auténtica salvajada a nivel visual, con unos diseños potentes, una animación muy consistente y unas escenas de acción terriblemente fluidas y espectaculares. Wonder Egg es un pequeño regalo para los ojos tanto en su faceta más urbana y cotidiana, como cuando se sumerge en las fantasías de sus sueños donde todo puede pasar. Uno puede tener problemas con algunos temas de diseño como los dos Acca, pero ya es un tema de cuestión de gustos.
En circunstancias normales la simple excelencia de Wonder Egg colocaría como ganadora de esta categoría a Kumo desu ga... pero es que esta hace méritos para ganar a cualquier serie en cuanto a cutrez técnica porque:
a) es fea y cutre.
b) consigue degenerar tanto que al final es sencillamente increíble.
El apartado técnico cutre de los primeros episodios de Kumoko no pasaría de anecdótico, de "me gustaría que hubieran tirado de animación tradicional en lugar de CGI cutre"... uno podría entender que es un producto barato y no les ha quedado otra, que las partes humanas son tan malas porque al menos se centran todo lo que pueden en las partes de la araña. Pero no estábamos preparados para la segunda mitad de la serie, donde sencillamente se ve que la serie no esta terminada con infinidad de planos estáticos poco animados y secuencias donde directamente faltan escenas y te intentan meter un par de dibujos fíjos con un cutre movimiento para simular animación... y eso sin contar con unos personajes por ordenador pobremente animados y sin apenas detalle (se podía entender hasta cierto punto en las primeras Kingdom por lo verde que estaba la técnica y cuestión de presupuestos y de necesidades de la historia de mostrar miles de personajes, se podía entender hasta cierto punto entonces y aún así hace una década estas series tenían mejor animación que esta serie ahora). Normalmente lo técnico es un adorno, es el continente y no el contenido... pero pocas veces he visto un continente tan malo que degenere hacia algo tan extremadamente malo.
Punto obvio para la araña.
El argumento
Este debería ser el punto más importante, y aquí gana Wonder Egg.
El argumento de Kumo desu ga no es especialmente malo, no es tampoco ninguna maravilla, pero no es malo. Es un isekai de libro, con mucho sentido del humor y un buen par de giros de guion comandado por una protagonista con un carisma inmenso. Es una serie que se disfruta, y que de hecho cuando acaba te deja con ganas de más porque el mundo tiene muchas posibilidades. Tendría más posibilidades si no hubiera trama humana, la trama humana de la serie es muy mala, tiene todos los defectos de los isekais y ninguna de sus virtudes; toda la gracia de la serie está en la araña y los episodios y tramos de los humanos son una imposición necesaria y comprensible en favor de la trama. Shin es un protagonista odioso, y ya ni hablar de su antagonista o la especie de novia que le acompaña. Cada vez que ves un episodio donde el porcentaje de minutos de estos es superior al de Kumoko te da la sensación de haber perdido 20 minutos de tu vida... pero bueno, las partes de Kumoko siguen siendo muy disfrutables, y en cierta forma al ser una serie tan densa a nivel de carteles y diálogos de Kumoko sus partes compensas el tedio de las otras.
El problema de Wonder Egg es que aspira a tener buen argumento de verdad. De verdad, no de anime. Tiene una protagonista muy sugerente inicialmente y con un auténtico problema, y de manos de ella pasamos a una odisea de cuatro chicas que se sumerge en algunos de los aspectos más sórdidos de la sociedad japonesa. Tenemos suicidios, tenemos violaciones, tenemos acoso, tenemos maltratos y tenemos todos los monstruos a los que se puede enfrentar una joven japonesa -ya sea porque son reales o porque a esa edad se ven problemas que un adulto ya no considera tales-. La serie es una pasada en su ambición, en la madurez con la que trata esos temas, en todos los recursos que usa para ser sutil o directa como una pedrada a la cabeza. Es prodigiosa por lo jodido de sus temas y el conseguir ser al mismo tiempo entretenida y adictiva a pesar de su innegable densidad. El camino es una maravilla. El final es una ****** de proporciones bíblicas. Lo que eran metáforas, lo que era poesía narrativa, lo que eran recursos dramáticos tienen la necesidad de materializarse como elementos estables del guión. Wonder Egg no era una serie que necesitase cerrarse, porque no podía hacerse, era una huida de la realidad que estaba más en la mente de unas niñas que en la "realidad" en sí, pero la serie se siente en la obligación de materializar su cierre, de aportar salidas argumentales justificadas a lo que era más onírico que real y pasa a ser una idea de olla japonesa en el peor sentido de la palabra con robots, dimensiones paralelas y cosas que parecen sacadas de Evangelion... y lo peor de todo es que con ello se lleva por delante la coherencia de los personajes.
Wonder Egg gana aquí.
Y el argumento sería lo más importante, pero hay otro elemento que hace que Kumoko sea aún peor, y ese es...
“La esperanza es algo bueno, quizás lo mejor de todo y las cosas buenas no mueren.”
La esperanza es una mierda. Te hace pensar que algo puede mejor, te hace seguirla hasta el final, hasta que llegas a sus últimos minutos y ves con triste resignación que el milagro no se ha obrado. Con Wonder Egg eso no pasaba. Los primeros 7-8 episodios son una maravilla, luego llegas a uno raro con el que no sabes que pensar, y luego y saltamos a cuento de nada a la trama de la niña-IA y te quedas con cara de circunstancias... pero sabes que no es relleno, sabes que ha comenzado el arco final de la serie y que sencillamente va a tener un desenlace malo (luego sería aún peor de lo que temíamos, pero eso es otra historia). Mala suerte, la serie se ha ido a la mierda... pero al menos ha sido de repente.
Pero con Kumoko no pasaba eso. Kumo desu ga te metía un episodio de los humanos y te jodía, pero luego volvía a salir la araña y te reconciliabas con ella. Y en su segunda mitad la animación bajó lo que no está escrito, y comenzaba a haber más parte humana... pero luego también las partes de la araña eran más extensas y también más alocadas y querías pensar que el final de la serie se iba a centrar más en la araña porque... bueno, porque es el puto título de la serie. Pero ese final se acercaba, y seguía habiendo humanos, y había partes divertidas con la araña, pero también una guerra que no le interesaba a nadie. Querías pensar que la traca final sería con la araña, y que vendría acompañada de una animación no sangrante... pero no, porque se estaban adaptando novelas y la trama principal conducía a otro frente. Y eso es peor porque dices "solo quedan 3 episodios... serán de Kumoko principalmente" "solo quedan dos episodios... ya tiene que ser la araña todo el rato" "esta mierda de episodio al menos acabara con la llega de Kumoko como salvadora en el último instante de cara al final". Y no. El milagro no se produjo.
Wonder Egg cayó de repente, sin margen de maniobra. Kumoko gana esta categoría porque lo suyo ha sido como aquella escena de Austin Powers... una lenta y ridícula agonía
Así pues, y aún a pesar del épico desplome de Wonder Egg, Kumo desu ga se alza con la victoria en este triste duelo.
Y sí, quizás Super Cub podía haber entrado en esta lista... pero nunca pretendió llegar tan alto como Wonder Egg (a pesar de ese esperpéntico ascenso al monte Fuji de Reiko) ni se precipitó tan descaradamente hacia un abismo como Kumo desu ga (a pesar de esa caída de Shii-chan cuyo flirteo con la muerte por congelación no fue si no un prólogo a una fiesta de pijamas)
Nueva colección de reseñas en formato audio, aunque en esta ocasión lo de "colección" es un pelín excesivo al limitarse la entrada a la reseña habitual de One Piece.