viernes, enero 31, 2014

Hay margen de mejora

One Piece: Jefe oficial Diamante

El momento de Lao-G es brutal, la comedía es el motivo de que esta serie no haya sido devorada por su propia longuitud. Además, aún a costa de desmerecer bastante a un enano con una zoan de insecto (el cual me parece que debería ser extremadamente fuerte), presenta un poco más a otro de los carismáticos hombres de Doflamingo. Al margen de ello, pues es un capítulo normalito de transición hacia las hostias finales de la saga donde comienza se presenta y comienza una gran final del Coliseo. Que la Mera-Mera esté en un pez podría ser la excusa perfecta para que Rebecca se apoderara de ella, y me parece bastante hábil por parte de Oda. Tengo curiosidad por ver como Oda desarrolla este frente tan importante sin el apoyo de un protagonista de la serie en él.
Ahora bien, el mejor escritor echa un borrón y me parece que este capítulo es bastante chapucero en lo referente a la presentación de Diamante.
La banda de Doflamingo me parece, sencillamente, de lo mejor que ha hecho Oda en este manga. El diseño de todos los personajes es brutal, y ha sabido presentarlos gradualmente con mucha habilidad. Pocas bandas ha tenido un tratamiento tan bueno, ni la de Barbablanca, ni los CP9, ni me atrevería casi incluso a decir que la mismísima banda de los Sombrero de Paja. En este capítulo, además del brutal momento de Lao-G, tenemos una muy buena presentación de Picas; personaje que siempre se ha mantenido muy a la sombra y que Oda ha desvelado con una gran majestuosidad. Por desgracia, con Diamante, ha pasado justo lo contrario.
La presentación de la habilidad de Diamante me ha parecido, sencillamente, una chapuza. No entraré a valorar la habilidad en si, seguro que Oda le saca mucho juego, y esta claro que Diamante tiene que ser muy tocho independientemente de su habilidad cuando se muestra tan tranquilo ante el que él creía que era un pirata de renombre con una recompensa de 400 millones y todo un miembro de la tripulación de Barbanegra. Pero que justo en los prolegómenos de la batalla haya decidido mostrar su habilidad ante sus enemigos me parece absurdo, más habida cuenta del tipo de habilidad que tiene... creo que por ejemplo Bartolomeo no hubiera derrotado a Hack si este conociera su habilidad. Ahora no creo que Burgess de un puñetazo a la plancha de acero que cubre la espalda de Diamante (aunque creo que hay un grupo de personajes en esta serie que no vacilarían en liarse a puñetazos con una viga, y uno de esos es el timonel de Teach).
Siempre he defendido que One Piece es una serie que, contra lo habitual, gana al ser leída semanalmente. Que Oda maneje el ritmo del folletín siempre me ha parecido una de las cosas que lo eleva como mangaka. Sin embargo con Diamante no ha estado fino. Creo que con él ha sido víctima del formato. Ha escondido demasiado tiempo la habilidad para mantener la espectación, y con Picas le ha salido bien con una presentación espectacular... pero con el alter ego de Steven Taylor creo que se ha dado cuenta demasiado tarde de que su habilidad era demasiado "discreta" para presentarla en la final como un giro de guión y se ha visto obligado a revelar ese secreto antes... y por eso se ha sacado unos masillas de relleno cutres. Es fácil ahora decir que quizás el mejor momento para presentar la habilidad habría sido el flashback de Riku,  lo cierto es que este tipo de cosas siempre tienen que ser muy complicadas de planificar y en este caso, sencillamente, creo que no le ha quedado demasiado bien a Oda.

martes, enero 28, 2014

La perfección de la comedia de acción

Full Metal Panic Σ

Cuando me reenganché a este mundillo del manganime hace una década ya existía Full Metal Panic, y no dejaba de ser curioso como dos de las series más populares eran "Full Metals". Me gustó mucho la primera temporada de las aventuras de Sousuke Sagara y Kaname Chidori, y disfruté como un enano con "Fumoffu", y poco después, antes de que el moé la destrozada (ver triste crónica), antes del bombazo de Haruhi (ver reseña), Kyoani parió una obra maestra llamada "second raid" que aún a día de hoy me parece uno de los mejores animes que he tenido el placer de ver. Pero, después de una OVA fanservicera que daba vergüenza ajena incluso a un fan de Tessa como yo, la cosa se quedó ahí. Nunca hemos llegado a ver una "third raid", y no han sido pocas las ocasiones en las que me he planteado comprarme las novelas publicadas en inglés. Afortunadamente quedaba la adaptación manga de estas.
Hiroshi Ueda ha sido el mangaka encargado de realizar esta adaptación, que continúa la primera adaptación del manga (uno de los primeros mangas que compré, por cierto) y que abarcá en 19 tomos los hechos de "second raid" y de las siguientes novelas hasta el final de la franquicia.
Lo primero que hay que decir es el trabajo del mangaka me ha parecido excelente, los diseños de los personajes son detallados, la acción bastante clara, y las viñetas en general son muy limpias. El dibujo se apoya en el ordenador ocasionalmente, y también sabe recurrir sin abusar a las deformaciones cómicas. Tenemos un buen diseño de mechas también, y los fondos suelen estar bastante trabajados. La composición de las páginas, como he dicho, es bastante limpia y ordenada. El manga no inventa nada, pero utiliza a la perfección los recursos visuales del medio. Es un trabajo funcional pues no deja de ser una adaptación, pero está muy bien realizado. 
El mundo nunca será perfecto mientras
no veamos a Nami animada
Hay series así. Uno ve "Black Lagoon" y piensa, "Perfecto, esto es lo que quería ver" (ver reseña). Normalmente son series sin pretensiones, simplemente productos que aunan a la perfección muchos de los tópicos que inundan esta industria, series que son la culminación de un género. Full Metal Panic me parece una de estas series, la comedia estudiantil de acción refinada hasta su más selecta perfección. Full Metal Panic nos traslada al a vida de Sousuke Sagara uno de tantos niños que se crían con un fusil, Sousuke es un soldado de élite de una organización secreta llamada Mithril que vela por la paz mundial y que dispone de una tecnología muy avanzada. Sousuke y su escuadrón son asignados a proteger a Kaname Chidori, una estudiante japonesa que pertenece a un pequeño grupo de personas que parecen "escuchar voces" que les revelan secretos tecnológicos. Tenemos así varios de los clichés del anime, por un lado mechas, por otro comedia estudiantil de enredo con una chica fuerte y un chico bastante rarito. La trama poco a poco se va complicando y haciéndose más oscura, y ¿por qué no decirlo? épica, pero la comedia siempre está ahí para proporcionar un más que satisfactorio contraste.
"Second raid" ya era un claro avance en el drama de esta serie, con un Leonardo Testarossa apareciendo como villano principal de la serie y una clara evolución de la relación del duo protagonista. Aproximadamente el material de este anime sería el primer cuarto o quinto de este manga, todo lo demás es material nuevo para el que no haya leído las novelas. Y, es un material muy bueno. La comedia quizás retroceda un poco pues saltamos por completo al drama y a la trama militar para cerrar la historia, y creo que en su recta final la serie no esté tan inspirada al exigirle el fin de la historia perder parte de su libertad. Pero sigue siendo un manga muy divertido, y el cariño que le hemos tomado a los personajes hace que ciertas escenas sean muy emotivas: SPOILERS la destrucción de Mithrill, el secuestro de Chidori y la destrucción de la fachada de Sousuke ante el resto de estudiantes, toda la historia de Tessa, la muerte de Webber o el cruel arco de Nami son sencillamente momentos maravillosos.FIN SPOILERS. Es una verdadera pena que parece que no vayamos a ver todas estas grandes escenas animadas, porque "second raid" se queda a las puertas de la que practicamente es la mejor parte de la serie.
Full Metal Panic es una comedia ligera de acción con unos personajes tremendamente carismáticos y algún que otro momento en el que sabe ser seria y bastante dramática. No inventa nada, pero es un divertimento inmenso que muestra el potencial que las novelas ligeras japonesas, en su vertiente más inocua, pueden llegar a alcanzar. 

sábado, enero 25, 2014

El anacronismo del Ouka Shichibukai

One Piece 735 - El objetivo de Fujitora

Hace mucho tiempo, cuando One Piece era un manga con una vida proyectada de cinco años, los shichibukai tenían sentido… Rayleigh ya estaba allí y es muy probable que hubiera historias pensadas con Barbanegra o la Marina, pero los shichibukai tenían sentido como enemigos, como ese Cocodrile que continuaba la subida de nivel habitual de los enemigos en estos mangas, ese Jimbe amenazante de Arlong Park o ese Ojos de Halcón como enemigo final de Zoro que -aún hoy- es quizás la mayor atadura de la serie.
Hoy en día, con una proyección de vida que prácticamente quintuplica la original, los shichibukai no tienen sentido. Son un recurso muy importante de Oda, pero en un momento su viabilidad se convirtió en un problema para el mangaka (como prueba las dificultades que tuvo para llenar los asientos que quedaron libres en Marineford). Tenemos dos enemigos finales claros para la banda: Barbanegra y Akainu/Marina. Y un servidor cree que con todo el enemigo final será Shanks (con Cobby en la sala anterior). Los shichibukai, con la grandeza que siempre ha rodeado a su título, no tienen sentido como enemigos en la serie ya, al menos no como grandes enemigos. Podemos tener a Doflamingo como enemigo, como tuvimos a Cocodrilo al principio del Grand Line… pero el manga ha crecido de tal forma que esta institución no da para más. La mitad de los shichibukai son más aliados que enemigos, y la otra mitad son relativamente débiles. Cocodrilo y Moria reaparecerán, y aún en los prolegómenos del combate contra Luffy tengo la sensación de que Doflamingo podría ser perfectamente el enemigo final de Law en Raftel. Pero, al margen de Ojos de Halcón, el resto de nombres de este grupo no parecen destinados a acompañar a Akainu, Teach, Shanks, Big Mom, Kaidoh y Kidd como siguientes enemigos. Jimbe, Law y Hancock son aliados claros de la banda. Buggy es una coña. Kuma será muy importante en una saga, pero no creo que sea el final boss de esta. Y el séptimo creo que hasta podrían estar guardándoselo para una película.
Pero ¿Qué hacer con los shichibukai? ¿Cómo justificar el renombre de los dos piratas que tendrían que sustituir a Law y Doflamingo? ¿Qué carisma le quedaría al grupo cuando la mayoría de sus integrantes iniciales hubieran desaparecido del grupo? La solución más fácil y acertada creo que es la eliminación de la institución. Es algo acorde con la Marina actual, es algo que creía que sucedería en los momentos finales de Marineford. La Marina no puede depender de una alianza con un poder tan volátil y caprichoso como son unos piratas para enfrentarse a otros piratas aún más poderosos. Law mencionó que la Marina, como los Emperadores, había estado curando sus heridas en silencio, preparándose para la nueva era que estaba por venir; creo que pronto mostrara su carta secreta para imponerse como el poder hegemónico por encima de los otros 3, y ello conllevaría la destrucción de los Shichibukai.
Con Kuma convertido en el Pacifista 0, y con las conspiraciones de Doflamingo descubiertas, no parece ya haber ningún pirata en el que la Marina pueda confiar. Los únicos puntos problemáticos del shichibukai son, junto al enigmático séptimo, Hancock y Ojos de Halcón. La primera es muy fuerte, pero las Kuja viven tan ensimismadas que no creo que la Marina la considere una amenaza real, y además ya pueden alcanzar su isla. El segundo es harina de otro costal, creo que sería prácticamente una excusa lícita para mantener la institución, tener a Ojos de Halcón con ellos es mejor que tenerlo contra ellos. Pero Oda está por encima de la Marina, y como he comentado antes, mi particular apuesta es que el enemigo final de Luffy será Shanks… y si Luffy lucha contra Shanks, Zoro tiene que luchar contra su segundo, y siendo esa una batalla claramente amistosa, veo más a Mihawk en ese papel que a un Ben Beckman que podría perfectamente dedicarse a jugar una partida de shogi con Nico Robin.

miércoles, enero 22, 2014

Regreso al 221B Baker Street

Sherlock - 3ª temporada

Mucho esperaba esta temporada, y mucho la temía a raíz del final de la segunda. El resultado difícilmente podía haber sido más satisfactorio. Naturalmente hay cosas que pueden gustar más o menos, pero es algo implícito a los riesgos que Moffat y Gatiss han tomado siempre al actualizar el mítico detective de Conan Doyle. La serie continua mostrándose terriblemente respetuosa con los personajes y relatos originales, pero está inspirada en ellos y los homenajea, no trata de copiar cada página que encuentra... el signo de 3 que tenemos en esta temporada es muy distinto al signo de 4 de la obra original, pero sigue habiendo un signo numérico y una historia de militares en un país lejano.
Particularmente el primer episodio me ha parecido el más flojo de la temporada, pero el día que los guionistas consigan que las tres películas que componen cada temporada sean redondas será el momento de cerrar la serie. El caso es algo flojo y la serie intenta arreglar el desagisado del final de la segunda temporada, aunque tengo que decir que más que hacerlo se lo toma a broma. El humor es el gran protagonista de esta tercera temporada, donde se ha optado por un enfoque claramente distinto sobre los personajes para evitar el encasillamiento. El segundo episodio, para mi el mejor de la temporada y uno de los mejores de la serie, es el que mejor ejemplifica este punto; humor con una narrativa que salta entre varios casos pequeños que convergen en la espectacular y surreal boda de Watson. El tercero es el episodio serio, con un villano realmente grande y un Holmes que es finalmente derrotado.
Quizás los casos de los dos primeros episodios sean algo flojos. Quizás la resolución del tercero sea discutible. Quizás se lían demasiado con el final de Moriarty y Holmes de la segunda. Quizás Lestrade es demasiado amigo de la pareja protagonista y quizas no, seguro, Mycroft es demasiado amigo de Holmes... pero son defectos bastante perdonables ocasionados por ideas que provocan que la serie siga conservando una gran frescura y sea tan adictiva y entretenida como el primer día.
Esperando ya que estoy la cuarta temporada... esperando además del previsible Jack del siglo XXI, se les ocurra de paso traer a nuestros tiempos a Arsène Lupin.

sábado, enero 18, 2014

Un flamenco corto de miras

One Piece 734 - El remolino de Rommel

Capítulo extraño este último de One Piece. Es un capítulo de transición para seguir alargando Dressrosa y aumentar un poco la tensión antes de que comiencen el festival de hostias finales de Dressrosa (o como sea que vaya a acabar esta saga), capítulo que Oda también utiliza para intentar arreglar uno de los factores más inciertos de la saga: Cavendish. Capítulo que me ha parecido algo torpe por parte de Oda.
Lo de que Cavendish sea sonámbulo no me desagrada, es algo 100% One Piece... aunque es algo exagerado que el pirata se duerma en el fragor de la batalla (ni Garp ni sus nietos, los narcolépticos por excelencia de la serie llegan tan lejos). Sin embargo me parece que el grupo D se ha resuelto con una trampa que no le ha quedado muy bien a Oda. Creo que aunque Oda ha conseguido que Rebecca y Cavendish ganen el bloque en cierta forma, al final los otros frentes de la saga han cogido demasiado protagonismo y el mangaka ha tenido que cerrar apresuradamente este bloque D.
Y dejando al margen el Coliseo, y a Big Mom, está la batalla contra Doflamingo. Me ha parecido raro que Doflamingo haya interpretado tan mal a Luffy. Smoker y Ojos de Halcón conocieron pronto a la banda y vieron que eran especiales, Aokij también lo mencionó en aquella isla larga en la que se encontró con ellos por primera vez. Pero es raro que Doflamingo, una de las mentes más afiladas de la serie, se muestre tan confiado. Doflamingo fue testigo en Marineford de un momento en el que Barbablanca ordenó a todos sus hombres que se ayudaran a Luffy, esa es la más terrible habilidad de los mares como dijo Ojos de Halcón, y es la habilidad de Luffy. Es obvio que individualmente no podía prever algo como lo de Sabo, y tendió una trampa a Luffy en el Coliseo, y se ha encargado de Law... pero me extraña mucho la confianza y hasta despreocupación que parece que muestra. Tiene toda una nación de enanos conspirando contra él, tiene una bomba de relojería en forma de juguetes, y tiene un seguro como son los Marines que diría que podría pasar a ser su mayor amenaza en cualquier momento.

martes, enero 14, 2014

Emblem Quest

Shining Force II

No creo que, para nadie que haya observado el listado de reseñas de videojuegos del blog, sea una sorpresa la afirmación de que soy un gran fan de la saga "Fire Emblem" (ver etiqueta). Una de las incontables deudas pendientes que tenía como videojugador, una de las más dolorosas, era no haber jugado a su gran competidora inicial. Me refiero por supuesto a la saga de rol estratégico de SEGA que en su día codificará el estudio que posteriormente realizó los Golden Sun.
Ah, aquellos tiempos de portadas molonas
Shining Force II nos coloca en un mundo fantastico medieval en el que el gran señor del mal está escapando del sello que lo encerraba. Nosotros, el héroe de turno, debemos derrotar a sus fuerzas malignas en compañía de los personajes que encontremos por el camino y, finalmente, rescatar a la princesa de turno y acabar con el señor del mal. Como puede verse no es que el argumento sea una cosa especialmente original, pero es un juego del 94 y entonces uno no solía preocuparse demasiado por lo trillado de la historia o lo pobre del desarrollo de personajes, lo que importaba era el juego en si. Y el argumento sirve de sobra para ir avanzando entre diversas pantallas y sumar más y diversos integrantes a nuestra compañía de héroes.

Es un juego de rol táctico, por lo tanto se nos muestra un campo de batalla y hemos de mover a nuestros personajes como si fueran fichas de un juego de mesa con el objetivo de acabar con las fuerzas enemigas o, en algunos casos, derrotar a su lider. En nuestro ejército podemos tenemos desde arqueros a enanos con hachas, pasando por magos, sacerdotes, ladrones, golem e incluso algún que otro monstruo o robot... cada uno de ellos con una defensa o un ataque distinto, así como agilidad o movimientos distintos, e incluso algunos con alguna particularidad especial. Evidentemente el tiempo pasa por el juego y hay algunos puntos en los que su sistema de juego se nota muy arcaico. Principalmente me molesta la agilidad de los combates; se hacen muy largos debido al gran número de personajes y al tener que ver como se mueve cada una de ellas por separado… además apenas hay contraataques, con lo cual el número de enfrentamientos es casi el doble que en un Fire Emblem. No podemos saltar tampoco las acciones de la computadora, siendo esto bastante tedioso cuando no hay opción de batalla por medio. Los movimientos del jugador y la cpu se alternan, esto NO ME GUSTA, creo que le quita componente estratégico pero esto no deja de ser el sistema de juego basado en el parámetro agilidad y es algo común en los juegos por turnos. Es un juego antiguo y su sistema de batalla, como es normal, es bastante primitivo; funciona y da lugar a grandes batallas, pero sobra decir que no está tan depurado como los de los juegos modernos. Sin embargo, con toda su antigüedad, el juego muestra ideas muy interesantes y efectivas como batallas con visibilidad muy reducida, un importante factor de terreno a tener en cuenta y algunas unidades como las rocas explosivas o los cañones originales y condicionantes.
El juego tiene una importante parte de juego fuera de las batallas; recorreremos todo el mundo, hablando con personajes y recogiendo items, actualizando nuestro inventario, reclutando más miembros para nuestra compañía y desgranando los secretos de la historia (aunque es una granada bastante pequeña, todo sea dicho). El juego es muy "rol de 16 bits" hasta las batallas, donde salta al rol táctica. Particularmente me gusta que los juegos de este tipo sean más directos y ágiles, pero es una mezcla interesante y también funciona bastante bien.
Tecnicamente es un juego difícil de valorar al estar hablando de un juego de Mega Drive. Las animaciones y los diseños son bastante justitos, en batalla uno puede suponer que el gran tamaño de los escenarios y el número de personajes acababan con la memoria de la mítica Génesis, pero en los pueblos me parece que no hay excusa que valga y que el juego es muy pobre para ser un juego del 94.
¿Recomendable? Es indudable que hoy en día, en su mismo género, hay juegos mucho más gratificantes. Pero además de lo gratificante que, históricamente, pueda ser jugar a uno de los padres fundadores del género, es un buen juego con algún que otro personaje carismático (ese Peter) y que proporciona unas buenas batallas por turnos bastante desafiantes en algunos casos.

sábado, enero 11, 2014

La más irreverente película

MOMENTO MÍTICO 43 - South Park: Más grande, más largo y sin cortes

Corría el año 2000, más o menos. Todo el mundo había oído hablar de una serie del corte de los Simpsons, maravillosos todavía por aquellos años. Se decía que era una salvajada, se decía que era muy burra. Muchos la habían visto, pero muchos otros aún no. Y así llegó a los cines en España, en una época en la que películas minoritarias se colaban en las salas y podían durar varias semanas en cartel. Y yo y mis hermanos, sin saber nada de ella, en mi caso casi pretendidamente, sacamos nuestra entrada y nos sentamos en nuestras butacas para encontrar esto...
Pueden decirse muchas, muchas cosas de South Park, es una serie que continua en antena y que para mi perdió su gracia centrándose más en el continente que en el contenido allá por la tercera temporada. Pero desde luego es una serie que impacta, y mucho, de primeras. La animación burda y apapelada es evidentemente chocante, le confiere a la serie el aspecto de que no sólo está protagonizada por niños si no que estos mismos la han hecho mediante recortes y stop-motion; el estilo visual, muy acertadamente, le da a la serie un aspecto inofensivo y de inocencia. La animación es lo primero que entra por los ojos, y sirve perfectamente a ese gran objetivo de la serie que es el contraste.
La serie es basicamente un paso más en esa idea que los Simpsons instauraron, mostrando en un medio que se creía claramente para niños unos argumentos adultos y profundos. Esto último podría ser relativo, pues considero que las series actuales (South Park y los Simpsons y todos sus hijos bastardos) están más enfocados a adolescentes o a adultos sin ganas de pensar que a su público original. Son series que impactan en un primer momento y que proporcionan grandes momentos, pero que no sobreviven a los visionados también como aquellas primeras temporadas de la familia de Evergreen terrace. 
Pero aquella película, aquella serie en sus primeras temporadas, apostaba aún más por el guión y la relativa sutileza que por la sal gorda y la comedia fácil (componentes que también tenía, y no en pequeñas cantidades). Había una crítica mordaz y terrible a la sociedad americana, y la egoista cultura globalizada en sí misma, bajo la aparente inocencia de aquellos niños malhablados y sus movimientos pesimamente animados. Había una burla a las autoridades y a los ídolos de barro que hemos construido en esta, y en cualquier sociedad, los humanos tendemos a construir. Había una serie que nos enseñaba a temer a Barbra Streisand.


El próximo momento mítico nos llevará a balancearnos por las alturas de la Nueva York de mediados de los noventa.

miércoles, enero 08, 2014

Secondo Gear

One Piece: Pirate Warriors 2



¿Es One Piece: PW 2 un buen juego?
60 % Si.
40% No.
Digamos que es un entretenido musou.


¿Es One Piece: PW 2 un buen juego de One Piece?
85% Si.
15% No.

Hace año y pico reseñé la primera entrega de esta inclusión de One Piece en el género musou (ver reseña). Aquel era un juego extraño, las fases de musou funcionaban bien... pero luego te metía unas fases de aventura con saltos, QTE y puzles bastante anodinas... y para rematarlo el plantel de personajes eran obviamente escaso. Era un juego por momentos entretenido, pero lastrado por muchas decisiones de diseño francamente discutibles.
Esta segunda parte renuncia a la ridícula pretensión de contar de mala manera la historia del manga y se concentra en lo que tiene que ser: un videojuego. La historia en esta ocasión es una soberana chorrada de unos diales oscuros que vuelven malos a todo el mundo y contra los que la alianza de Luffy y Barbablanca tiene que luchar (sí, Luffy post-salto temporal peleando junto a Barbablanca, coherencia a tope con la historia original). Pero vamos, la absurda historia sobra para lo que tiene que hacer. El juego basicamente es un mata-mata masivo (rara será la fase en la que acabemos con menos de 1000 enemigos derribados) en el que hemos de limitarnos a derrotar enemigos, conquistar territorios, acabar con jefes y defender a algún que otro aliado. No hay más, ni falta que le hace.
GIGANTESCO MANO
Los combates más o menos se desarrollan con agilidad, siendo los masillas... masillas, y los enemigos importantes un reto más considerable contra el que no valdrá el ir a lo loco. Podemos esquivar y tenemos ataques cortos y de distancia, dependiendo estos también del tipo de personaje que usemos, disponemos también de una barra que se va cargando con ataques especiales y de una acción de estilo que nos permitirá controlar -o dañar- a los logia. Hay monedas y habilidades que nos permiten personalizar a nuestro luchador, y por último existen también aliados que podemos invocar durante la batalla para realizar un golpe de gracia. Está es, a grandes rasgos, la jugabilidad del juego.
Como juego de One Piece, está bastante bien. Basicamente es un juego para repartir guantazos a diestro y siniestro con los diversos personajes de la serie, no promete más... pero lo que promete lo da. Tenemos, como en la entrega anterior, las monedas para satisfacer nuestro ansia de coleccionismo y esconder los guiños a la serie. Pero el juego basicamente va de representar bien los personajes y sus ataques, y eso lo hace muy bien. Tanto en los protagonistas como en una serie de aliados que no son controlables pero que aparecen para realizar sus acciones más características. El plantel de personajes es el siguiente:

-Luffy
-Zoro
-Sanji
-Nami
-Robin
-Chopper
-Franky
-Brook
-Usopp
-Smoker
-Trafalgar Law
-Ace
-Marco (algo difícil de controlar)
-Jimbe (ataques de área pequeños pero potentes)
-Perona (no pinta nada en el juego, pero es divertido verla correr XD)
-Kuma
-Hancock
-Buggy
-Mihawk (o él personaje después del cual no usarás otro)
-Cocodrile
-Aokiji (apocalipsis)
-Kizaru (apocalipsis frenético)
-Akainu (apocalipsis lento)
-Garp (sorprendentemente limitado)
-Barbablanca (lento pero... barbablanquesco)
-Enel
-Teach 

Y luego además están los miembros de la banda antes del salto temporal... porque ya los tenían hechos del juego anterior. Como aliados encontramos a los enemigos hechos del juego anterior (no meten a Hodi Jones pero si a Arlong) y a algunos aliados de la banda como Vista o Jozu. El juego sigue siendo bastante tramposo e implementa lo justo y necesario, pues verdaderamente resulta casi ridículo que Shanks o Rayleigh no estén siquiera como ayudantes (así mismo Moria, Magellan e Ivankof aparecen como ayudantes cuando tendrían que aparecer como jugables antes que Perona o los propios Marco y Enel).
A nivel de escenarios... ¡sorprendentemente el juego reutiliza los del juego anterior! Unicamente tenemos Skypea, Thriller Bark y Punk Hazard como nuevos escenarios, y no son demasiado buenos.
En modos de juego tenemos un modo historia relativamente largo, luego tenemos un modo de pantallas individuales para ganarnos a cada uno de nuestros aliados (más de 40 en total), y luego tenemos un modo de desafíos con... desafíos. Salvo este último punto, el resto son jugables a uno o dos jugadores (habiendo opción de jugar vía internet).
A nivel técnico... es un juego irregular. Los diseños están trabajados, especialmente los protagonistas, pero los escenarios son bastante vacíos y sosos. Algunos ataques son espectaculares... algunos otros... bastante chapuceros. El juego muestra en pantalla muchos personajes, pero la inteligencia artificial no es la mejor del mundo, muchos enemigos aparecen de la nada una decena de metros de nosotros... y si juegas a dobles con pantalla partida te puedes preparar para unas cuantas ralentizaciones.

¿Recomendable? Es un juego entretenido y divertido, pero es un musou de One Piece... creo que es obvio que te tienen que gustar ambas cosas para que este juego te satisfaga. El juego no es perfecto, y bajo mi punto de vista seguiría estando por detrás de las entregas de Wii (ver reseña de unlimited cruise 1 y unlimited cruise 2), pero se deja de las chorradas de la anterior entrega y resulta muy disfrutable.

domingo, enero 05, 2014

FESTIVUS 2013

En primer lugar agradecer a @Mixtli1984 que me dio la idea para esta entrada; fiel a mi idea de no repetir el tipo de entradas recopilatorias de principios de año, y estando cubierto el resumen del año en la espectacular semana de la Golden Tower Week (enlace) me parece una divertida idea honrar mi serie favorita enumerando lo que me habría gustado hacer y lo que por un motivo o por otro no he podido hacer, es decir, como me he decepcionado a mi mismo. ¡Ese es el espíritu del Festivus!

Literatura.

Este ha sido el año de los clásicos, y aunque alguna me ha decepcionado un poco, estoy bastante contento con las lecturas. La Iliada y la Odisea eran dos espinitas que tenía clavadas desde hace mucho, y me alegra poder haber finalizado esa lectura de las peripecias de Aquiles y la quema de vacas que deje aparcada hace una década. Sin embargo, no he podido ni con la Divina Comedia ni con Julio Cesar, quería leer la novela de Dante, y quería leer Shakespeare… pero me cuesta mucho salir de la prosa y son dos libros que abandoné tras unas pocas páginas. Marcados los tengo, pero son lecturas que tendrán que esperar pues este 2014 será el año Dickens en mi agenda literaria.

Tsoukalos tiene que haber escrito algún libro de Aliens. Y yo tengo que leerlo.
Cine y tv

Diría que me ha decepcionado más el cine que otra cosa, que me parece increíblemente anodino últimamente y que además me obliga a coger el coche para ir a las salas. Hay alguna que otra película como Gravity, Elysium, Dolor y dinero o Capitán Phillips que me habría gustado ver, otras como Thor 2 o "El juego de Ender" que aunque solo sea por los efectos habrían caído otro año, y siempre pienso que me gustaría ver algo de cine no americano… pero me da una pereza terrible ir al cine y es muy caro, y en ese sentido prefiero verme las películas tranquilamente en DVD y no pasó por la taquilla a no ser que entienda que es un espectáculo que debe ser visto en pantalla grande.
En series si tengo algo de lo que me arrepiento “The wire”. Quiero verla, por desgracia las horas del día son finitas y no puedo ver todo lo que quiera… y ver Star Trek requiere muuuucho tiempo. 
Sobrenatural, uno de mis objetivos durante mucho tiempo, creo que definitivamente ha quedado relegada a una posición en mi lista de prioridades con tantas temporadas y alargamiento artificial de la serie. 

Heisenberg, Denny Crane y Jean Luc Picard van primero, pero esta serie caerá

Anime

He visto más anime este año del que solía ver, e incluso he repescado series de hace algunos años que en su día me llamaron la atención como Index-Railgun o Horizon, así que en cuestión de anime diría que es donde menos asignaturas pendientes he tenido este año. Eso sí, Harlock sigue estando ahí, esperando verla alguna vez. Major había sido elegido como mi anime para el verano, pero al final no tuve tanto tiempo como querría haber tenido. Me gustaría ver estas dos más pronto que tarde, y Gundam Build Figther ha despertado al seguidor de Gundam que hay en mi y que Norma editorial había aletargado con su pausadísima -aunque agradecida- edición de Gundam: the origin.

Anime ja nai!

Manga

En manga me había propuesto de una vez leer Sket Dance. No ha podido ser. Empecé el año fuerte con Bakuman, que es uno de esos clásicos modernos de la Jump, y luego por fin leí la otra gran obra de la autora de Skip Beat… pero con Bossun y cía no pude ponerme, me habría gustado leer esta serie, comenzar la Chica misteriosa y esa de “Yankee-kun to Megame-chan“. A finales de año comencé la primera, así que espero poder acabarla relativamente pronto; espero también poder saldar mi deuda con las otras dos a lo largo del año.

Y si leyera algún clásico no protagonizado por adolescentes tampoco me pasaría nada.

Música

Aquí tengo que correr un tupido velo. No dejo de ser un aficionado al heavy, pero apenas he escuchado nada nuevo este año y me he dedicado a tirar de mi pequeña colección de cds. Ni siquiera he escuchado los nuevos discos de Helloween o de otros de mis grupos favoritos.

Desgraciadamente ni siquiera puedo añadir mucho a esta entrada en este punto.
Videojuegos.

Empecé fuerte con los videojuegos este año con la intención de quitarme muchos clásicos en un año de transición hacia la WiiU... pero luego llego la certificación SAP, y me quedé sin tiempo para jugar practicamente durante la última mitad del año. Unicamene un juego largo entonces, el INMENSO Xenoblade, el resto han sido arcades o aventuras muy cortas. Y aunque me he jugado al fin varios juegos que tenía pendientes como el Final 9, el DQ VI, los mismos Last Story y Xenoblade o recientemente el Zelda de Snes... ha habido demasiados juegos que tenía idea de jugar este año y que, obviamente habida cuenta de las reseñas, no he jugado. "Chrono Trigger", "Monkey Island" y "The world ends with you" son los  que más me han dolido, pero no son los únicos.

Sí, quiero jugar el Pilotwings de 3DS, no creo que tenga nada de malo.

jueves, enero 02, 2014

Una bonita canción de cerezos en flor

Yozakura quartet: hana no uta

Hace un lustro apareció la primera aproximación del anime a esta franquicia (ver reseña). Aquella era una serie entretenida, pero normalita. Años después apareció una continuación en forma de tres OVAs con el subtítulo de "Hoshi no ume" en el cual el grupo protagonista se tenía que enfrentar a una nigromante. El estilo visual de aquella "secuela" era distinto, con una animación más desenfadada y fluida, con unos diseños más parecidos a los del manga original. Esta serie es una revisión de la serie original, que abarca lo que aquella en sus primera mitad, luego muy acertadamente en un opening inserta un resumen de las tres OVAs y narra finalmente el arco "Hana no uta" en si. La serie pretende hacer borrón y cuenta de nueva de la serie original y reutilizar las OVAs, y en mi opinión lo hace magnificamente.
El estilo de la serie original ya era muy de comedia y slice of life sobrenatural, ahora todo ello se ha acentuado. La serie flirtea con el absurdo en ocasiones, se permite alguna que otra licencia en el montaje y, en definitiva compone una extraña mezcla de comedia costumbrista y acción fantástica en el particular escenario de un pueblo en el que conviven humanos y demonios. La serie tiene su vena dramática, y también de vez en cuando se saca un echii nada necesario pero extrañamente inocuo, pero principalmente es una comedia de acción que funciona sorprendentemente bien a raíz de la simpatía que despiertan sus protagonistas, que incluso en las situaciones más límites suelen hacer tener puntazos de estupidez.
Visualmente, los diseños no son los comunes, y la animación y el colorido son muy llamativos. El ritmo de la serie es bastante bueno, desarrollando más o menos simultaneamente todos sus personajes y un par de tramas argumentales. Los personajes caen bastante bien, e incluso los episodios que parecen más de relleno se usan bien para desarrollar estos. Tras esta serie hay un manga bastante trabajado y eso, en esta adaptación bastante más fiel al material original que el anime original -valga la redundancia- se nota.
En la reseña de hace cinco años dije que aquella no era una serie que inventase nada, esta tampoco lo es (aunque toma algunas decisiones narrativas más arriesgadas que aquella, bastante más convencional en todos los campos). La serie sigue sin ser un imprescindible que revolucione el panorama del anime, pero es, ahora más, una serie entretenida y agradable de ver.