Realismo trágico

Las uvas de la ira

Ya sea por las referencias a ella en los Simpsons o en otras series, tenía ganas de leer esta novela. Temía que fuera una lectura difícil, y lo es, el lenguaje de Steinbeck en algunas ocasiones se prodiga demasiado en descripciones y no es el más ameno del mundo... pero es indudable que es una novela que está bien escrita y construida. Es también una novela larga, cerca de 600 páginas en mi edición, y en algunos momentos -sobre todo al principio y en los campamentos de California, puede hacerse algo larga. Pero es una maravilla. Una maravilla que, a tenor de su mensaje, me parece increible que pudiera publicarse en EEUU a finales de los años 30.

No diré que es un relato procomunista, rojo o anticapitalista; diría más bien que es humanista y realista, terriblemente realista. La literatura social o política me parece la más complicada de todas, pero en este libro he encontrado una obra capaz de mirar de tu a tu a las obras de Orwell.

"Las uvas de las ira" nos traslada a los últimos años de la década de los 30, en ese momento acompañaremos a una de tantas familias del corazón de los Estados Unidos que fueron expropiadas por los bancos y que se vieron obligadas a emigrar hacia una supuesta Tierra prometida llamada California... donde sólo encontrarían discriminación, más pobreza y la más absoluta desesperanza.

El relato es terriblemente duro. Steinbeck te agarra el corazón desde el primer momento y te dice "preparate, porque no sabes la cantidad de formas que sé de retorcertelo". Y lo peor de todo es que, como en muchos de estos casos, es muy probable que se quedase corto. Steinbeck se defención de las descalificaciones de rojo diciendo que, sencillamente, contaba lo que veía. Y lo terrible es que sin duda era cierto.

La de arriba es una foto de la granja de los padres de un servidor. Y gran parte de lo descrito por Steinbeck lo he vivido en primera persona, y -aunque he tenido la suerte de no sufrirlo tanto- se que es cierto. Mis padres pudieron mantener a nuestra familia durante las décadas de los 80 y 90 del siglo pasado con una pequeña granja unifamiliar... conforme avanzaba este siglo eso se iba haciendo cada vez más y más imposible ante el poder de las grandes empresas. Hoy en día sencillamente creo que es muy díficil y arriesgado mantener un negocio de este tipo, y tengo la suficiente edad ya para saber que las cosas no van a ir si no a peor... por desgracia el mundo descrito por Steinbeck en el que los ricos son cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres es el mundo en el que vivimos.

No diré que es una lectura recomendable. Creo que debería ser una lectura obligada. Dejemos de obligar a los niños a leer Quijotes y hagamos que lean más "1984", más "Momo", más "La verdad" de Pratchett, más "Historia de dos ciudades", más "Guerra y paz" y más "Uvas de la ira"... y quizás entonces, dentro de algunas décadas, tengamos una sociedad en la que no tengamos que matarnos los unos a los otros para malvivir.

Alabemos a Shane Black

Iron Man Three

Tenía unas espectativas muy altas para con esta película. La razón, su director y guionista, Shane Black, autor de mi venerada "Kiss kiss bang bang". Creía que sus diálogos ágiles y memorables podían encajar a la maravilla en el mundillo de Tony Stark.

Tenía unas espectativas altas.

Y se han quedado cortas.

No se si Iron-Man 3 es la mejor película de superhéroes que he visto... pero oposita firmemente para ello. "Los Vengadores" es una fiesta pirotécnica absoluta, y "El caballero oscuro" juega en otra liga... esta película sería como el punto medio, una película que quiere -intenta con toda su alma- conseguir un trasfondo complejo y sugerente, pero que no renuncia a la fantasía y el heroísmo más espectacular.

Es curioso como esta película comienza la fase 2 de Marvel sin apenas hacer referencias a los Vengadores (a la segunda entrega, la primera si está muy presente al haber sumido a Tony en un trauma por su insignificancia ante todo lo que hay en el universo). Esta película es un cierre por completo del personaje de Tony Stark, culminando el viaje en el que se libra de sus fantasmas, homenajeando nostálgicamente a sus predecesoras y enfréntandose más que nunca a la pregunta de Iron-man es la armadura o el hombre que la construye.

La película tiene, desde mi punto de vista, dos puntos fuertes. Dos puntos donde arriesga y donde se nota la mano de un autor, aunque es justo decir que también se nota cuando la Marvel mete mano para redirigir la película hacia cauces más comerciales (osease... explosivos) en alguna que otra ocasión.

Lo más llamativo es el enemigo. No diré nada del Mandarin porque no quiero contar spoilers, pero desde luego su tratamiento no gustará anda a los seguidores más puristas de este personaje. No obstante, creo que el enfoque que da la película es terriblemente valiente y sugerente para una película de estas características. La película no puede tirar por el thriller político y conspiranoico, tiene que volver en un momento dado a la senda del bueno contra el malo, pero no todo es tan simple como un terrorista malo-maloso y eso se agradece.

Casi tan llamativo como el enemigo, es el protagonista. Tony Stark. La armadura aparece poquísimo en escena (incluso Rhodes tiene más acción como tal que como War Machine). Privado de su armadura durante gran parte de la película, y después con esta enfrentado a unos enemigos que pueden partir por la mitad las armaduras con una facilidad pasmosa, la película es un lucimiento de Downey Jr en la que hace mil y un cosas investigando y tratando de resolver los problemas al mismo tiempo que se permite alguna que otra gran secuencia de combate en la que -sin el traje- claramente está en desventaja. El ingenio de Stark, la crisis en la que está sumido, su personalidad como héroe... todo ello queda reflejado a la perfección.

Y todo ello esta enmarcado en un guión brutal de Shane Black en el que siempre pasa algo, donde los giros de guión sorprenden pero son lógicos, y donde las coñas se suceden con una naturalidad y frescura increibles, y donde cada personaje tiene su pequeño momento de gloria. El ritmo es muy elevado y las escenas son bastante variadas entre ellas, pero ninguna está especialmente forzada y tampoco en ningún momento el espectador pierde la perspectiva de lo que está sucediendo en general. Técnicamente hay alguna que otra escena mejorable a nivel de efectos, pero en general es un espectáculo notable para los ojos.

Terriblemente divertida, espectacular, sugerente y -y ello es muy meritorio para la que es casi la cuarta entrega de la franquicia- refrescante, el hombre de hierro alcanza sin duda su mejor momento cinematográfico con el cierre de una trilogía que no creo que veamos continuar más allá de las apariciones del filántropo genial en la franquicia de los Vengadores.

Y recordemos que este hombre, además de firmar guiones memorables, en su día cazó depredadores

La historia del capitán disfrazado y la bella gladiadora

One Piece 707 - Bloque B

El anterior era un capítulo extraño, este es algo más convencional pero no deja de ser raro que Oda se esté entreteniendo tanto en el coliseo. Habida cuenta de lo que pasó con Burgess, habida cuenta de que ya se nos habían presentado algunos luchadores carismáticos ante la estatua de Kyros, habida cuenta de que al final esperan Diamante y los suyos, habida cuenta de que toda esta saga no deja de ser un mero entretenimiento hasta que la saga se encuentre con su trama principal con Doflamingo y su factoria (y para rematar recordemos que hay numerosas tramas secundarias paralelas) todo esto es muy raro y que más pronto que tarde Oda se va a reír de nosotros en nuestra cara. 

Sigo pensando que no veremos demasiado del coliseo... pero lo que estamos viendo, sea relleno, mola, para que negarlo.

El tiempo dirá si las burradas de presentaciones de Corrida tienen la relevancia de Shabody (no obstante, para mi gusto es un pequeño error que tantos de los Supernovas hayan resultado importantes)... pero de momento está resultando más afortunada que la legión de presentaciones de Marineford (muy sugerente en un principio pero después algo decepcionante porque la intensidad de la batalla no permitió a Oda mucho más que presentar nombres en muchos casos). 

La duda es, por supuesto, cual será el papel de los gladiadores con nombre. Naturalmente Rebeca parece que tiene algo de trama detrás, como Bartolomeo y ese ya entrañable Cavendish, así mismo Bellamy parece que no ha regresado unicamente para un gag cómico... pero es que incluso personajes que parecía que no iban a tener más que una viñeta de gloria ahora apuntan a algo más como ese Ricky o ese vejete chino de 6 metros amiguete de Garp.

El capítulo, irrelevante salvo en su página final, es no obstante una fiesta de One Piece, con diseños estrambóticos, alguna referencia histórica sutil (me habría gustado algo más relevante para la batalla de Lepanto, y más en una saga con Don Quijote de villano), humor absurdo como ese King Hippo con su superpuñetazo con tiempo de carga y momentos manly-manly-fish como ese Hack que piensa que la mejor manera de unir razas es a puñetazo limpio. No deja de resulta sorprendente la capacidad de Oda para sacarse de la mano diseños originales y conseguir que, 15 años después del comienzo de su publicación, su manga siga siendo ante todo una obra tremendamente cómica.

Y no deja de sorprenderme que ni llevemos 10 capítulos en Dressrosa con todo lo que ha pasado, todo lo que está por pasar y todo lo que hemos olvidado ya... y con decenas y decenas de personajes nuevos a añadir al elenco de caracteres de la serie, personajes que en su mayoría podremos olvidar dentro de un centenar de capítulos porque entonces estaremos en otra isla.

Una isla, un mundo. Me sigue pareciendo la característica más importante de la serie. Salvando a la banda y a una historia de fondo que se va desarrollando poco a poco, en cada isla Oda puede resetear todo lo que quiera y realizar un planteamiento completamente distinto si así lo desea. 

En la cresta de la ola

Las grandes estrellas de Hollywood siempre tienen papeles por los que son recordados, muchas veces ya no sólo por una interpretación en concreta si no por un conjunto de papeles indudablemente parecidos que le hacen ser plenamente reconocibles para el público... tanto que cuando otro actor hace un papel parecido es inevitable pensar que le imita... tanto que cuando el actor comete el error de repetirse demasiado acaba encasillado. En los últimos años creo que hay dos actores que destacan en este sentido por encima de todos, con roles relativamente parecidos y con un éxito monumental a sus espaldas, creo que ahora mismo hay pocos actores que puedan sostener mejor el peso de una película que el Jhonny Deep de principios de milenio y el Robert Downey Jr post-boom de Iron man.

Con motivo del estreno de Iron man 3, mi hermano y yo organizamos una pequeña marathon homenaje al principal protagonista de las crónicas desde el trullo de aquel mítico programa del cine de lo que yo te diga. Dos de las cuatro películas que componían la marathon ya las había reseñado previamente. La primera sería la modélica Iron-man (ver reseña), una más que correcta primera piedra del universo Vengador "para toda la familia" que la Marvel ha conseguido construir. La segunda es "Kiss kiss bang bang" (ver reseña), una película tan divertida y redonda que no me canso de verla.

Ahora, engrosando el listado de reseñas cinematográficas del blog...

Jóvenes prodigiosos

Una de mis películas favoritas, de esas comedias amables que descubres casi por casualidad pero te maravillan y las revisiones de vez en cuando con cariño y melancolía.

Después de dirigir L.A.Confidential Curtis Hanson se marcó una pequeña obra maestra sobre la madurez con un escritor en crisis anclado en su pasado y un fin de semana loco en el que se ve obligado a abandonar su refugio de inmovilismo. Niños prodigios que se cruzan con versiones desencantadas de si mismos y viceversa protagonizan una historia donde pequeñas grandes frases se entrecruzan con secuencias que rozan el disparate puro. Es una de  esas películas donde parece haber varias tramas o donde algunas escenas no parecen cuadrar con otras... pero donde al final todo resulta estar relacionado. Una película de ambiente triste pero mensaje claramente esperanzados que además desprende amor por la literatura por los cuatro costados.

Un guión que funciona a la perfección, un ritmo y una dirección notables y unos actores en estado de gracia con un Michael Douglas antológico, un Toby McGuire inquietante, una tentadora Katie Holmes y un Robert Downey Jr pasándoselo pipa en su papel.

Sherlock Holmes: juego de sombras

Sherlock Holmes molón. Una premisa a todas luces muy comercial. La primera entrega de esta franquicia molona del detective asesor de Baker Street resultó un entretenimento relativamente fresco y divertido. Guy Ritchie no inventaba nada, camara lenta y frases mordaces no eran precisamente una novedad en el cine... pero funcionaban más o menos bien y la química e idoneidad entre Downey Jr y Law como Holmes y Law era indudable.

El problema de esta segunda parte es que.. le falta algo. La primera parte era una idea medio buena hecha con manual, pero contaba con el factor sorpresa. Esta no. Y sigue siendo una película que se nota prefabricada, como si el guión hubiera salido de un generador de guiones automático. Pasamos de Londres a toda Europa, algo casi previsible. Incluimos a Moriarty, algo mucho más previsible. Seguimos metiendo escenas de acción con camara lenta. Nos libramos de Irene Adler de forma cutre porque supongo que la actriz no podría trabajar en la película o querría cobrar mucho. Y tenemos mucho Holmes y Watson intercambiando puyas. La película tiene todo lo que uno espera de ella, pero le falta algo, una chispa de originalidad o inspiración... todo es demasiado "más de lo mismo". 

La película entretiene, y uno no acaba harto de Holmes (la pareja sigue teniendo una química brutal), pero mientras uno la ve tiene la sensación de haberla visto ya.

Música a lomos de una alpaca contra el capitalismo

Love Live

No es este el tipo de animes que suelo ver... de hecho huí de él como de la peste en su momento y no ha sido hasta ahora, por sus buenas críticas y el recuerdo de Idolm@aster, me decidí a verlo. Y el resultado, por desgracia, ha sido el esperado... una pequeña decepción.

La serie está por encima de K-on... pero es que el cero absoluto ya está por encima de K-on. Pero está muy debajo de las peripecias de Azusa (ara ara), Miki-Miki, Chihaya y el resto de las idols de 765 Pro que Puchimas tan bien nos ha recordado hace apenas unas semanas.

La serie nos narra las peripecias de un grupillo de jovenes que, ante la amenaza de que su instituto sea demolido, montan una especie de club de idols para atraer más alumnas de cara a los siguientes cursos. El argumento es raro, uno no sabe esa obsesión de los japoneses por cerrar sus colegios... y entiende aún menos esa determinación de los alumnos por protegerlos, y ya luego lo que tenemos no son ni idols... si no "school idols" que en ningún momento intentan ser profesionales pero que compiten a través de la red y que incluso podríamos decir que tienen una suerte de campeonatos nacionales, por último tampoco entiendo porque un club de idols atraerá chicas a un colegio... pero bueno... es un colegio que tiene alpacas, así que creo que está claro que es uno de esos animes en los que hay que desconectar gran parte del cerebro.

Bajo el pretexto del club de idols tenemos a un grupillo de chicas que se esfuerzan y se van haciendo muy amigas en base al sacrificio y todo eso, y naturalmente son muy monas y hacen cosas muy monas y graciosas con clichés para dar y tomar. Es uno de esos animes simpaticones que no aportan nada pero que tampoco son un insulto flagrante contra la inteligencia del espectador. Un slice of life sencillote y optimista con cancioncillas y humor inocuo.

Las canciones son J-pon cutrecillo y no hay ninguna que destaque especialmente... los bailes al contrario destacan, aunque para mal. Los diseños son bonitos y coloridos, y la animación normalmente es más que correcta... pero cuando llegan los bailes la serie suele sustituir en ocasiones los personajes por modelos poligonales... el ordenador logra un efecto muy resultón y apenas se distingue de la animación tradicional... pero se distingue, y además de un poco de rostros de plástico se tiene la sensación de que los movimientos de las chicas son demasiado perfectos y simultáneos.

Una serie normalilla (con una divertida carencia de coherencia espacio-temporal-argumental en algunos momentos). ¿Recomendable? Pues no especialmente, no diría que es una serie mala aunque habría motivos para mantener tal afirmación, pero desde luego tampoco diría que es una buena serie pues para mantener esa postura en un debate si que no habría argumento alguno.

Definición de épica

Personajes, personajes everywhere...

One Piece 706 - No me reiré de tí

Hay algo raro en este capítulo. Diría que es claramente un capítulo de relleno, pues verdaderamente no pasa nada en él... pero hay algo extraño.

Tenemos algo parecido a una redención para Bellamy, algo que creo que pocos esperaban. Bellamy convertido en un pirata que persigue su sueño de servir a Doflamingo. La Hiena no sólo se permite soltar frases grandilocuentes del palo de "las grandes olas que están por venir" si no que  -en el marco del recuerdo de Skypea- añade más misterio todavía a la figura de Doflamingo y la de la propia nación de Dressrosa.

Junto al inesperado baño de carisma de Bellamy, aparece Bartolomeo en toda su horrible y bizarra grandeza... una especie de versión cruel y retorcida de la bastarda maldad alegre del bueno de Kidd.

Y junto a ellos... más y más personajes para el Circo. Un gigante, un hombre-pez, una momia, un león y un toro para tópicos de romanos y españoles.... diseños, diseños por todas partes en una explosión de creatividad de Oda que recuerda la presentación de secundarios de la Gran Guerra.

Pero es extraño. El repentinamente carismático héroe de Dressrosa que es Bellamy se enfrenta al pirata que encabeza el ranking de odiados en el bloque B. Y en el D tenemos a la bella Rebbeca y su cruzada Doflamingera contra el bello Cavendish y su cruzada Supernovera. ¿Y contra Luffy? Pues un trío familiar, unos hermanos funkis y un gigante... Oda no ha dibujado entre ellos a ninguno que parezca que pueda plantar cara al protagonista. Es muy raro.

Como también es raro que el bloque A acabara en un instante y que tras varios capítulos apenas hayamos comenzado el B... que además es la típica cosa que Oda omite en sus narraciones pero que ahora parece que veremos tras el bombo que se le ha dado a Bellamy y Bartolomeo en los últimos capítulos. 

Tenemos decenas de personajes molones, muchos de los cuales seguramente no veamos en más de cuatro o cinco viñetas. Tenemos un coliseo que se esta haciendo sorprendentemente lento y tenemos muchas otras tramas que esperan para ser desarrolladas.

No puedo evitar pensar que Oda se está riendo a nuestras espaldas y que pronto algo revolucionará el torneo.

Everything louder than everything else...

One Piece 705 - Maynard el perseguidor

La pregunta no es que pasa en este capítulo. La pregunta es que no pasa. Es una tradición en One Piece que al llegar a una isla la banda se separe en -al menos- dos o tres frentes, cada uno de esos frentes suele avanzar por separado hasta que al final colisionan y comienza a desarrollarse la trama principal de la isla. En este capítulo, uno de los pertenecientes a ese extraño grupo en el que Luffy no aparece, Oda nos ubica en cada una de esas tramas. Pero no son dos ni tres; Cariboo. la Factoría, el intercambio de Caesar, el Sunny, el Coliseo, las hadas, Kanjurou y Violeta.

Cada miembro de la banda está envuelto prácticamente en una trama, y encima tenemos a la Marina y el Gobierno mundial comenzando a desplegar todo su potencial en una isla sobre la que se parece cernirse una saga de corte clásico como lo fueron Arabasta y Water 7.

La trama de la Factoria comienza a avanzar con un Franky que parece ser el único en tomarla en serio y que ahora esta acompañado por un juguete cojo parlante. El objetivo de la saga no es otro que el de volar la fábrica... y por mucho que Franky tenga experiencia reventando edificios, dudo que el origen del poder de un Emperador disponga de un botón de ayuda pirata o que no esté salvaguardado por un lugarteniente poderoso de Doflamingo.

Precisamente, para dar margen a 5 idiotas que en su mayoría han olvidado ya su misión, Law, Usopp y Robin se dirigían hacia Green Pit para entregar a Caesar. El plan de Law parecía raro. Ahora comenzamos a ver algo más de él, Green Pit no parece ya un enclave normal... sea lo que sea nadie ha vuelto desde hace 200 años y un ominoso puente de hierro no parece ser defensa válida contra una especie de peces gigantes, cornudos y malhumorados (si me gusta la idea de que pueda haber indicios revolucionarios en la trama de portadas de Cariboo, más me gusta aún que podamos volver de alguna forma a la trama de los hombres-pez de alguna forma ahora). Sin embargo los planes de Law se tuercen más que su épico bigote postizo, el país parece sorprendentemente calmado pese a la abdicación del rey. Y para colmo de males Oda se ha sacado de la mano el CP0.

Dificilmente el manga recupere a una de mis féminas favoritas... así que el capitulo de hoy es una excusa perfecta para fanservice Cypherpollero (que mal que suena esto último, por cierto).

Naves se dirigen hacia Green Pit, y el misterioso ciego ya se ha revelado finalmente como un Almirante sorprendentemente ecuánime, más cercano a Aokiji que a Akainu en principio. Con apenas una frase, Fujitora ya se ha ganado un cariño considerable.

Ahora la pregunta es... ¿Cúal es el objetivo de la Marina? No creo que Law y Luffy sean su prioridad, por mucho que a Akainu le incomode el Sombrero de Paja. Hay una amenaza mucho más inmediata llamada Doflamingo. La presencia del CP0 sólo refuerza esa teoría. Esta saga, a nivel político, puede resultar mucho más interesante de lo que me había atrevido a imaginar con el Gobierno Mundial metido de pleno.

Sin embargo Fujitora comienza a ver que la situación les desborda. Al margen de los tres grandes piratas que pensaban encontrarse, la trampa de Dofla para Luffy ha acarreado unos visitantes que sólo complican la aún más situación para todos aquellos presentes en la isla. A Burgess se le suma ahora el inquietante Bartolomeo... esperabamos mucho de un rookie loco, pero una cosa es ser un supernova y otra muy distinta el aparentemente dejar fuera de combate a todo un vicealmirante de la marina como si nada... hay que ser muy, muy bestia o tener una fruta muy poderosa para algo así.

Y por si Burgess, Bartolomeo y el CP0 fueran pocos añadidos inesperados a una saga a la que de por si le sobran enemigos, ahora se oyen misteriosas voces que vienen del Sunny...

Cuesta encontrar imágenes originales de Califa que no sean hentai

¿Quién demonios puede haber dentro del Sunny? ¿Más hadas como las que Zoro parece haber encontrado? ¿Algo de alguna forma relacionado con el pasado traumático de Momonosuke? ¿Monet copiando a Robin hasta en el sentido de polizona? ¿Algo que nos conduzca ya a la siguiente isla?

La cantidad de frentes abiertos de esta saga y la velocidad a la que se están desarrollando me esta sorprendiendo. Pensaba que el coliseo haría las veces de cuasi saga de relleno, pero visto los actores que ahora están en él no parece que vaya a ser tan simple. 

Y no hay que olvidar que mientras se elige un nuevo héroe de Corrida, mientras Law y Dofla se reencuentran, mientras Fujitora intenta salvar a la gente y el CP0 maquina... Zoro ha encontrado unas "hadas", Sanji sigue inmerso en su particular aventura y Kinemon encuentra en el submundo una pista hacia su antiguo compañero.

Extraordinariamente ordinario

Beelzebub - 200 - La tercera

No hablaré del decepcionante fin de la saga del torneo de Navidad... torneo que pintaba para memorable pero que como ya es desgraciadamente costumbre se cerró nefastamente.

Tampoco hablaré de lo forzado de la saga de los hechiceros; por mucho demonio en las sombras que le ponga esta saga no tiene sentido ahora mismo en el manga.

Hablaré del desproposito de Kunieda...

Aoi Kunieda es, en mi opinión, uno de los mejores y más carismáticos personajes de la serie. Juega un rol algo raro de heroina, en competición tsundere con Hilda y siendo ademas bastante poderosa. El autor no la ha olvidado en ningún momento y eso me encanta... pero los últimos capítulos con el arco de las Red Tails me parecen un sencillo desproposito.

Podían haber pasado cosas muy buenas. Un recurso cómico brutal habría sido el regreso de la hermana de Oga. Podían haber crecido otros personajes. Nene tenía una gran ocasión para demostrar su valía, no deja de ser un personaje que en cierta manera parece colocarse como pareja de Furuichi, el otro gran pilar de la serie. Nene habría sido una gran "2".

Pero no. El 2 ha ido para Aoi. Aoi no es el 2. El 2 es un número sin carisma ninguno, un numero genérico dentro de un escalafón. El 1 para Kanzaki quedó bien, pero en cierta manera muy forzado; es obvio que el lugarteniente de Oga es Furuichi. Pero aceptemos barco como animal acuático, aquel 1 no dejó de ser un el mejor cliffhanger que se le recuerda a la serie en mucho tiempo.

Ahora el problema es quien vendría después. Y Aoi no podía ser, como tampoco podía ser Toujo. Son personajes que han hecho méritos para tener un tratamiento especial. Miki, Himekawa o la propia Nene habrían sido perfectos para ese rol.

Aoi no. Kunieda ni siquiera debería necesitar ese tatuaje para poder ganar. Se entrenó con Oga. Sabemos que ya de por si tiene cositas de miko y tiene un pokemón pervertido a su disposición. Además, siendo un personaje principal podría haber tenido una escena más importante (o una cómica en su caso) para convertirse en una subordinada de Oga.

Y luego para colmo es surreal esa escena:
Nene: Lo siento Aoi-neesan, soy muy débil, por mi culpa...
Aoi: No, Nene. Eres muy fuerte. No es culpa tuya. . . . . Ahora devuélveme la chaqueta, inútil.

Por desgracia, no es la primera vez que esta serie me decepciona. Una pena. Tuvo en su día un potencial gigantesco, pero el autor no ha tenido el talento para encauzar correctamente sus partes dramáticas.

La más olvidada serie

MOMENTO MÍTICO 37 - El escuadrón Exo

Ni siquiera internet, hogar del conocimiento y refugió de la piratería, puede arrojar mucha luz sobre esta serie más allá de algunos artículos de wikis y alguna subida de video a youtube (y es un avance, hace años no había ni eso). Según estas páginas "Exo squad" surgió como una especie de contraprogramación a la invasión de anime que en los 90 desembarcó en EEUU. Nunca pensé en ello hasta que lo vi por ahí escrito, siempre me ha parecido que era una de esas series que pertenecían a una franquicia, se notaba muy, muy mucho, que había toda una industria juguetera detrás. Ahora con perspectiva si que le veo algo de parecido con las series Gundam, e incluso con la Leyenda de los héroes galácticos, aunque con el clásico toque disfrutable de plenitud de acción de las series americanas.

Pero a principios de los 90, cuando la echaban a las 7 y poco de la mañana en la 1, en aquellos años en los que por las mañanas echaban dibujos en lugar de noticiarios, sin saber nada de eso un servidor madrugaba para disfrutar de esa serie terriblemente divertida, entretenida, emocionante e interesante. Una auténtica joya. Después la cancelaron como tantas otras grandes series americanas de animación... pero en España no recuerdo ni siquiera que fuera repuesta en un horario decente.

La serie nos trasladaba al futuro, donde los hombres luchaban contra los neo-sapiens, una raza de hominidos  creados artificialmente para los trabajos pesados de colonización de planetas que se rebelaba contra sus creadores. Pero no era una simple batalla de buenos y malos enfundados en una especie de exoesqueletos como el de Ripley en Aliens armados hasta arriba, era deliciosamente compleja. Había política para aburrir y cada personaje estaba algo trabajado. Había diversos bandos en los neo-sapiens, como en los propios humanos había tropocientas facciones... había quienes deseaban el exterminio de la otra raza, quienes querían la paz o quienes deseaban que se perpetuara la guerra para su propio beneficio. La guerra tenía varios giros, con avances tecnológicos de todo tipo, traiciones y alianzas de bandos, batallas sobre posiciones importantes, rebeliones y sacrificios. La serie seguía principalmente a un heroico escuadrón, pero  el tono de la serie era claramente antibelicista.

Casi 20 años después sigo recordando los nombres de JT Marsh y Marshala.

En aquellos años, acostumbrados a las típicas y vacuas series que nos llegaban, una serie con semejante carga política y un tratamiento relativamente adulto de una guerra estelar entre especies era algo que no podía definirse de otra forma que fascinante.

Una pena que la serie tuviera tan poco éxito, es de las series que mejor recuerdo me han dejado en mi vida (admito, naturalmente, que seguramente la he mitificado bastante).

El siguiendo momento mítico narrara un siglo en una aldea que comenzó como 20 casas de barro y cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. 

No hay memoria

One Piece 704 - La estatua de Kyros y Lucy

Supuestamente hay una trama con el gobierno mundial y los revolucionarios... hay un tal Shanks por ahí, la banda le ha declarado la guerra a una mujercilla a la que subordinados llaman Mama y también tiene intención de vengar a la tripulación de Moria. Pero todo eso ahora no importa. En este manga no hay memoria. Es una de sus mejores virtudes, el zarpar de una isla y al llegar a la siguiente no tener que acordarse para nada de todos los personajes o tramas que se han dejado atrás. Nadie recuerda ya que Cariboo conoce el secreto de Poseidon a pesar de su interesante historia de portadas. Nadie recuerda la alianza de Kidd, Hawkings y Appo. Llevamos apenas 5 capítulos en Dressrosa y no es que uno no se acuerde de lo que pasaba -y no era poco- antes de la isla, es que apenas se acuerda de lo que ha pasado en ella.

Ten-shin-chan... esperando su momento

El coliseo es claramente una saga de relleno, pero Oda se está luciendo. En el capítulo anterior vimos un poco de desarrollo de la trama de las espadas, y apareció Violet con una nueva trama. Hay un ciego inquietante. Varios miembros de la banda permanecen en el barco con una Vivre Card y un dragoncito que tiene extraños recuerdos de Doflamingo. Un Doflamingo -recordemos, uno de los personajes más céntricos de la serie- hacia el que se dirigen Law y Robin. Y no olvidemos que una factoria y un samurai eran los objetivos principales de la saga. Todo eso no importa, se desarrollará poco a poco en segundo plano y cristalizará en el eje principal y auténtico de la saga... todo lo que Oda haga hasta entonces es dar tiempo a que esas tramas maduren lo suficiente... pero lo esta haciendo, sencillamente, de puta madre. Un torneo es de esas clásicas cosas que lo eclipsa todo, un recurso narrativo peligroso pero también muy efectivo. Porque no es ya que Oda esté consiguiendo desviar nuestra atención de las tramas principales de la isla, es que incluso consigue desviarla de la propia saga del torneo.

Odio que Oda no mate a los Pell de turno...
pero traer de la nada a Bellamy
es una pequeña genialidad

La gloria es efímera y los 15 minutos de fama de Warhol se pasan en nada, pero es que la avalancha de personajes de Dressrosa no tiene equivalente en el manga de One Piece, ni Shabody ni Marineford pusieron tantos personajes en el mapa en tan poco tiempo. Parece claro que Rebbeca será importante, como también lo será el recuerdo de Kyros (mi particular y disparatada teoría en estos momentos es que Kyros es el ciego y que este a su vez es el padre/mentor de Doflamingo... sucediéndole este como rey de Dressrosa después de derrotarle en el Coliseo). Cavendish parece un personaje relevante a corto plazo, aunque supongo que habiéndose presentado Burgess y teniendo Lucy y Rebbeca una plaza fija en las finales, y habiendo un rookie alocado por ahí, su papel podría ser el de animar el grupo de Luffy con alguno de los duos-trios presentados... amen del absolutamente glorioso segundo round que veremos contra Bellamy.

La primera ronda es un todos contra todos. Primer acierto contra Oda. El combate contra el espartano con ese homenaje a Krilin ya cubrió en parte la cuota de combates cómicos, un todos contra todos evita varias rondas relativamente anodinas para el lector y el tener que idear varios combates al autor. En dos o tres capítulos, un par de mamporros bien dados, algún que otro recurso cómico y pasamos a la ronda definitiva contra los miembros de la familia Doflamingo... de los que ya nos hemos olvidado.

Diamante y sus compañeros molaban... hace unas semanas uno se entretenía haciendo quinielas de que miembro de la banda lucharía contra que secuaz de Dofla... ya no. Ahora tenemos a un buen grupo de gladiadores carismáticos entre los que incluso se encuentra un hombre de Barbanegra abriendo inesperadamente varias posibilidades argumentales. 

Y aún no ha llegado Fujitora. 

Lo mejor y lo peor de Ippo

Hajime no Ippo
Volg Zangief versus Mike Elliott

Ippo ha alcanzado los 1000 capítulos con este combate tras ya cerca de un cuarto de siglo de publicación ininterrumpida. Y ahora mismo Ippo, duele decirlo, se encuentra en un momento muy bajo de forma. Se ven sagas prometedoras en el horizonte, y este combate podría suponer un despegue de una serie en muy bajas horas... pero no soy especialmente optimista. Los combates se eternizan siempre y no emocionan, y este, un combate muy bueno en su primera mitad, es destrozado por el propio autor.

Porque la primera mitad del combate me hizo recordar al mejor Ippo. Mike resultaba sorprendentemente carismático (y tenía a Eagle medio de comentarista) y Volg siempre ha caído bien. Y veíamos un combate estratégico como ninguno hasta la fecha. Quizás lento, pero para eso están las elipsis narrativas. El combate era original, distinto y muy intenso a su manera. 

Pero entonces Morikawa recordó... "¡Ey, estamos en un manga! La estrategia no importa una mierda, sólo aquel que grite más fuerte por la amistad"

Morikawa lo jode todo por miedo a algo para lo que ya, desgraciadamente, parece que es muy tarde. ¿Por qué demonios Volg no podía perder? Mike se había rebelado como un grandísimo enemigo-rival, noble e inteligente como pocos. Volg tenía el condicionante de la preparación y de un gran enemigo. Podía perder. Es más, debía perder. Incluso tenía el árbitro y el ambiente en contra (y bastaba con que contara despacio, lo del árbitro poniendo en pie al boxeador me pareció demasiado exagerado para villanizarlo todo). ¿Qué Volg se merecía un combate épico? Sí, pero una derrota puede ser épica, incluso una muerte puede ser épica. Pero un puñetazo milagroso es algo que todos los que llevamos algo de tiempo en el mundillo odiamos (y por definición un seguidor de Ippo lleva tiempo, mucho tiempo). Fue horrible contra Randy Boy Jr, fue sencillamente insultante contra Wooli... contra Mike... ha sido triste. Era un combate demasiado bueno para echarlo a perder.

Virtudes y defectos del shonnen moderno

Magi: Labyrinth of magic

Creo que dentro de unos meses lo que más recordaré de esta primera temporada de Magi es que tiene tanto las virtudes como los defectos del shonnen manga actual, como, al mismo tiempo, las virtudes y los defectos de una adaptación al anime.

El trio protagonista, como buen shonnen es machista y Morgiana es la princesita del grupo... pero aunque los otros sean los que tengan magia, mola que sea una bestia física

Magi es una serie que parte de una premisa muy sugerente: una confrontación entre los diversos imperios clásicos en la cual unos pocos magos errantes seleccionan a sus paladines para conseguir la unificación del mundo. La arábica acción inicial (la fuente principal de inspiración son las 1001 noches, cada capítulo es considerado una noche) pronto se ve ampliada con los restos del imperio mongol, el gran imperio chino, la sombra de Roma y algún que otro retazo más. Incluso se podría decir que, a un nivel muy pequeño, hay cierta confrontación y debate sobre las diversas formas de gobierno. No obstante es un shonnen con buenos y malos en el sentido más amplio de la palabra, con idealistas por un lado y una organización harto mala y conspiranoica por el otro... y para luchar tenemos a un grupo de héroes que consiguen la ayuda de Djinns y que reciben así cada uno de ellos diversos poderes. Personalidades esperpénticas y carismáticas, grandes discursos, algún que otro idiota y comedia para aligerar la acción y la carga dramática... la receta habitual de un shonnen ubicada esta vez en un marco muy sugerente. Hasta ahí todo perfecto. Pero entonces llegamos al Ruth oscuro.

Los poderes son lo que da variedad y estrategia a los combates en una buena serie, pero si el propio poder en su vertiente más pura se convierte en una habilidad... al final todo se reduce a gritos, transformaciones y gritos de odio y de amistad. Esto estropea los combates. Y para colmo los shonnen tienen un gran problema potencial llamado corrupción, y esto lo que estropea es el drama. Cuando una serie recurre a la corrupción, a la degeneración... pisa terreno pantanoso. Que el protagonista tenga que luchar contra sus demonios interiores es un recurso dramático más o menos eficaz y sirve para salir del paso, pero si eso se convierte en algo recurrente, si se le da mucho peso... resulta contraproducente. Y si este recurso fácil del mangaka es utilizado además por los guionistas para cerrar de una forma dramática la temporada el problema se multiplica por dos. Eso es lo que pasa en esta serie.

La factura técnica de Magi es bastante notable (espectacular en muchos momentos, pero con algunos altibajos no menos notorios). La serie tiene un buen diseño de animación, se ha gastado dinero contratando dobladores, tiene una música bien elegida, la animación normalmente raya a buena altura y cuando ha de ser espectacular es espectacular.

Pero el guión es otra cosa. Es una serie en la que su saga intermedia es claramente el clímax. Se nota claramente que el material del manga estaba estructurado como unas sagas de presentación -resueltas relativamente bien-, luego una gran saga y luego una más pequeña como presentación de otra grande a continuación. El problema es que la serie no abarca esta última... con lo que tiene que cerrar la serie con la saga pequeña, saga que infla con un final que parece claramente inventado y que en líneas generales resta más que suma al global de la serie.

Para hacer un shonnen necesitas personajes carismáticos...
y Simbad y sus 8 generales desde luego están diseñados bajo esa premisa

¿Recomendable? En los foros y demás no la ponen demasiado bien, pero a mi me ha gustado bastante aunque al final se note que se hayan inventado un poco la historia con respecto al manga para cerrarla. Es entretenida, tiene personajes carismáticos e incluso se permite alguna que otra reflexión ligera. Eso si, es también una de esas series en las que se nota que el manga es muy superior... así como también se ve que es probable que llegado a un punto de su desarrollo comience a trampear de mala manera. 

El color de los cerezos en flor

Sakurasou no pet na kanojo

Sakurasou es una de esas series que navegan por un mar incierto y peligroso. El punto de partida es muy, muy inestable, la clásica comedia romántica de dormitorios de colegiales. La protagonista es... especial, no diré autista porque ese me parece un tema muy serio, ni que tiene el síndrome de Asperger tan común estos días, pero si de ese tipo de personajes que parecen desconocer por completo como tratar con personas o como "sentir" en si. Este es un asunto delicado, pero la serie sobrevive a él y además proporciona un buen motor para la comedia de enredo (en este punto hay que decir que no es un harem en si, hay únicamente un triángulo amoroso, y tampoco es una serie echii (la protagonista aparece desnuda en el primer episodio, pero en ningún momento es algo sensual o morboso, es un simple recurso de comedia y el tono general de la serie es bastante inocente)). La comedia romántica divide en varios frentes con unas tres parejas más además del triángulo principal, siendo cada una de ellas radicalmente distinta a las otras y teniendo cada una de ellas también un enfoque distinto (una de comedia, otra dramática y otra melancólica).

Al romance se añade un drama constante sobre la toma de las decisiones y la capacidad de los hombres para enfrentarse a su propio destino; dicho así suena demasiado dramático, pero basta decir que los protagonistas acuden a un instituto especializado en arte y que algunos de ellos son genios mientras los otros son "gente normal" que se esfuerza por estar a la altura de estos, así tenemos un poco de drama de superación y de frustración.

Alternando comedia romántica y drama de autosuperación, vemos la divertida convivencia del grupo de estrafalarios personajes que pueblan la pequeña residencia (algo forzado, eso si, tanto lo estrambótico de algunas personalidades como el hecho de que el colegio mantenga una casita para un número tan pequeño de estudiantes).

El ámbito de estudiantes de arte le permite a la serie hacer juegos con las fantasías y las "formas de ver el mundo" de los diversos protagonistas, con lo que puede meter algunos recursos visuales con facilidad, aunque es agradablemente moderada y no cae en la tentación de llenarlo todo con simbolismo. A nivel de narrativa no maneja demasiados personajes, y al no llegar a la fatídica decena puede desarrollarlos más o menos coherentemente todos de una forma relativamente simultanea (obviamente el trío protagonista tiene más peso) sin que nos olvidemos de ninguno de ellos durante varios episodios. Algún que otro pequeño drama es algo forzado, y particularmente no me gusta nada el recurso utilizado para conseguir emotividad en el final de la serie, pero este es un problema heredado del material original (el clásico recurso que más o menos funciona pero que ha sido ya explotado en demasiadas ocasiones). El trabajo de los actores de doblaje me parece magnífico (en especial las féminas, con papeles mucho más agradecidos), y la animación -si bien no prodigiosa- raya a gran altura y lo hace durante los 24 episodios de la serie de una forma constante. Para culminar un apartado técnico sobresaliente, los diseños y la paleta de colores son preciosos y se salen ligeramente de lo cotidiano.

No es una serie que pasará a la historia, pero es una serie ligera, simpática, agradable de ver y con una carga dramática bastante bien llevada. No es una serie imprescindible, pero si una bastante recomendable.