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Solaris

Considerada una de las obras maestras de la ciencia ficción, esta última semana me he leído "Solaris", de Stanislaw Lem. Mi impresión sobre la novela es extraña, no me parece tan buena como he leído en muchas críticas, pero creo que a muchas personas si puede parecerles una auténtica obra maestra.
Solaris es un brillante ejemplo de la mejor ciencia-ficción. La novela parte de un argumento terriblemente sugerente: un planeta desconocido donde un océano vivo parece ser capaz de convertir en realidad las fantasías de los hombres, para, a partir de ese escenario recrearse en un análisis de la psique del protagonista y reflexionar sobre la condición humana.
El argumento es original y la idea muy sugestiva. Y a partir de como el protagonista ve como su novia muerta cobra vida vemos una interesante reflexión sobre la vida, el protagonista duda de la suya misma al principio, pero luego la duda se convierte en la pregunta de que por que considera que la réplica de su antiguo amor no lo esta (esta misma es conocedora de su situación, pero paradojicamente esto sólo sirve para hacerla más humana, más humana incluso que los propios humanos pues al haber sido formada de los recuerdos del protagonista en ella sólo estan los aspectos positivos de su caracter). Y paralelamente a esta reflexión sobre el concepto de la vida, el autor también nos muestra sus ideas sobre la sobervia humana en cuanto a nuestra idea misma de nuestro lugar en el universo, así como pequeños análisis sociales e históricos.
Solaris es, filosóficamente hablando, una novela increiblemente rica y disfrutable. Una vez explicado el argumento y la idea de la novela, sólo me queda hablar de las formas, y aquí es donde entran los gustos subjetivos. Solaris no se recrea en la ciencia-ficción, todo esta narrado de una manera muy sencilla, simple y directa, y se agradece de sobremanera pues resulta un libro muy accesible y fácil de leer. Mi única pega es que en ocasiones el autor se recrea demasiado en la descripción física de los fenómenos que ocurren en el planeta (así como en la historia de la ciencia "solarística"), todo esto son aspectos importantes de la trama, pero al menos para mi gusto mucho menos interesantes que los propios debates internos del protagonista. Al menos a mi, en ocasiones, me cortaban un poco el ritmo.
En todo caso, al margen de estos pequeños defectos, sin duda se trata de un libro magnífico que, merece con todo merecimiento, ser considerado uno de los puntos de referencia del género.

Gran pequeño anime

Shijou Saikyou no Deshi Kenichi

"Kenichi, el discípulo más fuerte" es, desde su concepción hasta su realización, un producto sumamente vulgar. Pero tiene una gran virtud y esa es que no engaña en ningún momento. Y al menos para mi eso vale su peso en oro, desde el principio uno sabe que esta viendo un anime "menor", la serie nunca lo camufla y su máxima aspiración es entretener al espectador. Y lo hace.
Son 50 episodios que abarcan los primeros 17 tomos de un manga que temo que nunca podré leer. La historia es simple, un muchacho débil que siempre sufre los abusos de unos desproporcionados -en número- matones decide comenzar a practicar artes marciales. Entra en un dojo monstruoso dondo sufre un terrible entrenamiento a cargo de maestros de varias disciplinas, todos ellos extraordinariamente fuertes pero igualmente despiadados y "particulares". Tenemos una evidente rama cómica. Después Kenichi ira enfréntandose poco a poco a los diversos matones que apareceran ante él, todos crecientes en fuerzas y todos con pequeñas historias que iremos conociendo poco a poco. Tenemos drama. Y por supuesto esta la chica de la historia, que es otra discípula del dojo y que es tan monstruosamente fuerte como el resto de los maestros. Tenemos romance. La historia es asi de simple. No hay nada más.
Se trata de una historia simple, con un tratamiento de las artes marciales relativamente "leal" (al menos no se esta inventando cada dos por tres "puños del dragón" ni nada así, lo hace en momentos determinados... pero no dejan de ser golpes normales y durante los entrenamientos de Kenichi parece que de verdad le enseñan algo). La trama principal resulta forzada desde el primer episodio ya que resulta ridículo pensar en la exagerada organización de los matones de una ciudad (matones que constituyen auténticos ejércitos, por cierto), es un aspecto en el que se pide bastante la complicidad del lector. No obstante, la serie, como todos los shonnen con los que uno se encariña, engancha por los personajes. Por el carisma de los secundarios, por las historias de los "villanos", por la estupidez bonachona del protagonista y el ver como consigue hacer que redima a muchos de sus enemigos.
Kenichi, como he dicho desde el principio, es una serie mediocre. Pero es mediocre en relación a las series actuales, donde parece que todos los personajes tengan que tener infinitos traumas infantiles y donde los ritmos narrativos son lentos y las sagas tardan eternidades en desarrollarse. El problema radica en que el espíritu de esta serie no es de las actuales. Kenichi es una serie simple y sin más pretensiones que la de entretener en el momento. El autor sabe que es un mangaka, sabe que no esta escribiendo un libro y no pretende hacerlo. Sabe que esta escribiendo un manga y como tal, pretende siempre que la saga actual sea lo mejor que pueda aún a costa de futuros problemas de coherencia, aunque en el caso de esta serie nos encontramos con una marcada historia principal y una trama consistente y continuada que si son propios de los manga actuales (aunque como he dicho, la historia no deja de ser una excusa para combates, humor y algo de romance). Esto nos da un manga relativamente sólido, pero dotado de un ritmo bastante elevado y de una intensidad siempre creciente.
Kenichi es una serie actual (comenzó a publicarse en el 2002), pero tiene en su interior el corazón de un shonnen ochentero.

Olvidada joya pirata

Running Wild - Death or glory

Sucede que, de vez en cuando, uno coge un CD de su ya vieja colección. Un compact que tenía casí olvidado y que recuerda que en su día le gustaba, pero que cree que ese grupo ya no le gusta. Y sucede que de vez en cuando, cuando escucha el CD recuerda porque en su día compró aquel disco y se alegrá por ello.
Eso me pasó con este CD. Running Wild es un grupo que me cae antipático, quizás sea por la actitud dictatorial de "Rock and´Rolf" el cantante, guitarra y compositor principal del grupo, pues este ha cambiado siempre a diestro y siniestro a los diversos componentes del grupo. Running Wild no puede considerarse un grupo, es más bien un cantante que, en ocasiones, recurre a varios músicos para grabar discos. No obstante... es muy bueno.Y este disco es una auténtica maravilla.
"Death or Glory" tiene 11 canciones, y si bien algunas son más flojas, el disco tiene una media notable y tiene algunas canciones sencillamente antológicas. "Bad to the bone" "Evilution" o "Tortuge bay" son una muestra del mejor heavy alemán ochentero, a medio camino entre la épica y la melodica de Blind Guardian y la velocidad y el "power" de Helloween. Y luego está "Riding the Storm", una canción increible que se recrea en todas las virtudes de la banda y que esta pensada desde un principio para impresionar con una guitarra superlativa.
En este aspecto lo único que se puede criticar a este disco es su año, pues siendo un disco grabado en el 89 el nivel de la producción no es demasiado alto, o al menos no está a la altura de las ambiciones musicales del grupo. Si el disco se grabara hoy, sin duda las canciones serían mucho más complejas y espectaculares, con muchos más efectos y melodías en segundo plano.

Imposible juzgar nada

Hitomi no Catoplebas

Leído este manga me resulta sencillamente imposible juzgarlo. Se trata de una obra que comenzó a publicarse este año en la Jump pero que, por su falta de popularidad, acabó en 15 capítulos (y fueron tantos gracias a que la autora de Gray-man se tomó un descanso). En tan pocos capítulos poco puede decirse: se nos presentó algo la trama, el mundo donde se desarrollaba la acción, los personajes y sus distintos poderes... y el resto se empleó en algún que otro chiste, batallas más o menos espectaculares y originales y un poco de desarrollo de personajes. Pero naturalmente, por muy buenas intenciones que tuviera el autor, o por muy grande que fuera su habilidad, es imposible hacer eso en tan pocos capítulos.
Es una pena, porque la serie no pintaba mal, aunque ojo, tampoco bien. "Hitomi no Catoplebas" tenía pinta de ser el típico shonnen donde un grupo de jovenes con poderes se van enfrentando a uno demonios siempre de creciente poder. El dibujo no era nada del otro mundo, pero los encuadres y las ideas del autor componían un cuadro bastante espectacular con notables posibilidades plásticas debido a las diversas posibilidades elementales de los protagonistas. La historia a su vez, si bien no era un derroche de originalidad en su fondo, era bastante interesante y presentaba un cuadro de personajes y enemigos rodeados por una mitología muy sugerente. No obstante, todo esto quedó igualmente lastrado por el escaso número de capítulos de la obra, pues obviamente el autor se vio obligado a acelerar hasta el extremo los acontecimientos para ofrecer -en sólo dos tomos- algo aproximado a un final.
Me parece verdaderamente triste como este manga ha sido engullido por esas terribles encuestas de popularidad de la Jump. Como he dicho, el manga no parecía una maravilla, pero tampoco era tan horroroso (incluso Blue Dragon, un subproducto del merchandising y un horror de historia sustentada en el fanservice consiguió que le dieran 28 capítulos para contar la más absoluta nada). En 15 capítulos, poco o nada se puede contar. Los shonnen tardan en arrancar los 5 o 6 tomos que tardan en presentar los personajes y pocos pueden presumir de unos primeros 5 tomos realmente buenos. Normalmente se recurre a una sobredosis de humor para superar estos primeros capítulos y conseguir que el manga "caiga bien". "Hitomi" tenía ese humor, pero se entreveía una trama bastante seria y oscura tras ella (trama a buen seguro acelerada porque el autor pronto sabría que su seríe tenía que terminar a la fuerza pronto).

El peor tomo de lo que va de serie

Eyeshield 21 - Tomo 7

Como siempre en esta serie: tomo par, tomo memorable, tomo impar, tomo malo; capítulos de partido de futbol, capítulos buenos, capítulos de transición, capítulos torpes y mal resueltos. El sexto había sido el mejor tomo de la serie hasta la fecha, así que sólo podía sucederle el peor. Así ha sido. Este séptimo tomo es, de lejos, el peor de la serie. Y lo malo es que en este caso no parece que el octavo vaya a ser muy bueno.
Lllegamos a uno de los peores aspectos de los mangas deportivos: el complejo de inferioridad nipón. Japón es una potencía en muchos deportes, pero en otros tantos no. Y en todos aquellos deportes en los que jamás ha destacado, el manga de turno siempre tiene como objetivo enfrentar a un combinado nacional con la selección más fuerte del mundo y hacerles ganar (o al menos que tengan una derrota muy digna y los americanos, brasileños, franceses de turno se queden impresionados ante el espíritu japonés y temán los deportistas que de allí saldrán después). Este defecto lo hemos visto en muchas series, y ahora aparece también en Eyeshield 21. El autor lo necesitaba. Los Deimon Devil Bats habían sido eliminados del campeonato nacional a las primeras de cambio y el autor tenía que tener una linea argumental para hacerles crecer a la espera del siguiente campeonato. El recurso elegido fue un colegio americano que, dios sabe porqué, decide jugar un partido contra un colegio del tercermundisa futbol americano japones. La razón nunca ha estado demasiado bien expuesta, y los motivos por los que se eligió a un colegió malo entre los malos tampoco, pero bueno... al menos nos dió la excusa para ver el partido contra los "egipcios".
Ahora ha llegado el momento de ese partido. De primeras tenemos este tomo, absolutamente de relleno. Se introduce la figura de Mushashi como próximo "pateador" del equipo y se nos presenta a los jugadores americanos (entre los cuales existen los cuatro o cinco medianamente carismáticos que serán el rival de los jugadores "con nombre" de los Devil Bats). Lo malo es que, si bien tiene algún que otro gag, todo esto es presentado y realizado de una manera muy tópica y predecible. Parece que el autor ha estirado un poco la historia para dar más sensación de un inexistente desarrollo de personajes y dejar el final del tomo justo en al principio del partido.
En resumen, un tomo muy mediocre.

Ejemplo de novela sobrevalorada

El perfume

Esta primera novela del escritor alemán Patrick Süskind ejemplifica como pocas las virtudes y los defectos de la literatura actual. La novela se convirtió casi en el momento de su publicación en un best-seller, un libro increiblemente popular en todo el mundo. Además, en el caso de esta novela, el halo que la rodeabe era más engañoso todavía pues al contrario que lo que normalmente consideramos "best-seller" o "literatura de aeropuerto", la obra siempre era descrita como una obra maestra y un ejercicio de estilo y de descripción impresionante. Es cierto hasta cierto nivel. Sin embargo, y dejando claro que la novela es muy buena (y que además no tengo verdaderamente nada contra los best-seller (novelas como "El ocho" o "Los pilares de la tierra" me han entretenido bastante)), el recibir tan buenas críticas es algo que siempre repercute en contra de la impresión del lector.
Supongo que toda la parrafada anterior se puede resumir en que el libro me ha decepcionado, pero no creo que sea una impresión tan simple y rápida. "El perfume" es un buen libro, un gran libro. No obstante, no me parece la gran obra maestra que se me ha vendido desde que tengo algo de memoria literaria.
Tiene virtudes y defectos, como la inmensa mayoría de los libros. Pero si bien en las obras maestras las virtudes hacen que nos olvidemos de los defectos, tal cosa no sucede en esta novela.
La simpleza argumental es un gran contratiempo. El argumento de la novela es tan endeble que, de no ser por su magistral narración (y siendo francos por el interés del lector en leer un libro tan famoso) podríamos abandonar su lectura en las primeras páginas. Este aspecto me parece curioso porque verdaderamente no me gusta el estilo del autor (o quizás, la forma en la que ha sido traducido) pues abusa de la reflexión en primera persona, alternando esta con un narrador omniscente sin mediación alguna. Naturalmente esto es una cuestión de gustos personales, el autor lo hace muy bien, pero no me gusta ese tipo de narración. Y luego en el otro lado de la balanza tenemos la magnífica capacidad descriptiva de Süskind que consigue hacer que "olamos" la francia del siglo XVIII. Este extraño equilibrio se rompe para mi gusto en algunos momentos, pues el autor en ocasiones se va por las ramas con las historias de los secundarios o, sencillamente, se lía una o dos frases de más con alguna descripción.
En resumen, un buen libro (además es bastante corto), que presenta un personaje y unas situaciones bastante originales y sugerentes (aunque si no se es algo complice con la historia resulta ridículo), pero no una obra maestra.

Our return to the land of the free

GammaRay - Land of the free II

Disco mítico donde los allá, "Land of the free" colocó definitivamente a GammaRay en la cumbre del power metal en 1995, Kai Hansen volvía a estar coronado como el rey de este género musical del que puede considerarse padre.
Cuatro discos de estudio sucedieron a este disco. En todos ellos la banda germana demostró que dominaban el género como pocos, regalándonos en cada uno de ellos grandes temas. No obstante en sus últimos discos (que seguían teniendo una calidad increible) la banda fue derivando hacia un sónido más triste, más complejo y elaborado, pero también más oscuro y menos "feliz". Es por ello que decidieron dar un nuevo impulso a su música a fin de no encasillarse, volver un poco la vista atrás hacia sus orígeneas, volvieron así... al país de la libertad.
Llamar a un disco de esta manera es toda una osadía, pero en el caso de Gamma este atrevimiento esta muy lejos del error que constituyo que Helloween se atreviera a sacar un "Keeper III" casi veinte años del último y sin su formación original. Creo que este "Land of the free II" no es tan redondo como el original (le faltan quizás un par temás estrellas y una mayor coherencia temática), pero es indudablemente un gran disco.
Y si bien antes he mencionado que no todos los temas encajan tan bien entre ellos como en el disco del 95 (donde incluso las canciones enlazaban unas con otras), esta gigantesca variedad hace más honor al nombre del disco. Libertad. En los Gamma actuales, si bien Hansen sigue siendo el compositor principal, todos los miembros componen. Y los tres temas que han aportado los otros tres miembros de la banda (Hansen es mucho Hansen recordemos, no creo que mucha gente sea capaz de componer en un par de años cinco temas mejores que los quince que él haya compuesto) entonan perfectamente y no son, ni mucho menos, los peores del albúm. En este aspecto siempre me ha gustado la participación del batería Zimmermann, que ha compuesto en estos años temás tan espectaculares como "Gardens of the sinner" o "Figth". "Empress", "Rain" y "Opportunity" son tres grandes temas, indudablemente Gammaray pero al mismo tiempo particulares y atípicos.
Hansen, por su parte, sigue en plena forma. Para mi gusto el único punto débil de este disco son "To mother Earth" y "Into the storm", ambas dos excelentes canciones lastradas por un estribillo a mi parecer bastante inferior al resto del tema. No obstante, el resto de los temas son magnificos. "From the ashes" y "Real world" estan destinados a ser himnos en los conciertos. "When the world" es un grandioso tema que me suena más a Iron Maiden que todo el "A matter of life and death". Y luego esta "Insurrection". Un tema grandioso que enlaza perfectamente con "Rebellion in dreamland" del Land of the free original y que supone además una evolución del épico "Armaggedon" del Powerplant. Hansen desatándose con el tradicional tema épico de más de diez minutos que nos regala cada lustro.
En resumen. Kai Hansen no me ha decepcionado nunca. Esta vez tampoco. Ha conseguido algo tan complicado como no mancillar el mitificado recuerdo del Land of the free original.

¿Aprovechando o desperdiciando el tiempo?

Clannad

No soy un gran fan de Kyoto Animación. La calidad de sus trabajos es indudable, y creo que es justo decir que son el estudio más notable de la actualidad. No obstante, producen un anime por temporada. No es mucho, unicamente tenemos una serie cada semana de ellos. Y las series que eligen... no siempre son de mi agrado. Es aquí donde esta mi queja.
Suzumiya Haruhi fue un producto rompedor y arriesgado. Full Metal Panic afrontó un género tan tópico como la comedia de acción dando prioridad al drama y ofreciendo una serie con un ritmo y un montaje digno de película. Lucky Star, con sus múltiples fallos, fue una adaptación de un género tan complicado como el 4-koma. Todos eran productos con mayor o menor riesgo donde el buen hacer técnico del estudio quedo eclipsado por su capacidad para contar historias de una manera distinta. Todas las producciones del estudio esgrimían una calidad artística y narrativa que distaban de ser las habituales en los géneros que trataban. Algo parecido podía decirse de Air o Kanon, ambas series que adaptaban "eroges" (aunque estos fueran light). No puede decirse lo mismo de Clannad.
Clannad es demasiado parecida a Kanon. No me refiero al evidente diseño de personajes o a las similitudes de la animación o del enfoque visual (ambos igualmente parecidos a los de su predecesora por razones obvias). Me refiero a que Clannad cuenta la historia de la misma manera en la que lo hacía Kanon, es decir: comedia ligera + drama + kawaiismo + suspense intrigante. No es una mala manera de contar la historia, de hecho es seguramente excelente, pero es la misma.
Clannad tiene un enfoque más alegre y desenfadado que Kanon. Me parece bastante más divertida en sus situaciones y en su argumento (y ello incluso se traslada a la narrativa visual con una mayor tendencia al surrealismo y al humor absurdo), pero no deja de ser la misma historia. Las mismas chicas con las mismas personalidades y los mismos dramas en su pasado.
Creo que el trabajo del estudio nipón sigue siendo excelente. Aporta sobriedad, elegancía y nivel a un género tan maltratado por la industria del anime como el de la comedia harem. Kyoto, verdaderamente, consigue llegar este subgénero a unas cotas de calidad y grandeza que parecían casi vedadas para él. Pero al mismo tiempo no puedo evitar sentir algo de pena. Kyoto encierra en su interior mucho talento y es una lástina que este no este a disposión de historias más fuertes e interesantes.

La mayor ensalada de ostias de la historia

One Piece 479: El guerrero de la esperanza

Todavía no se si el último episodio de One Piece me ha gustado o no. Thriller Bark es una saga muy rara, no me gustaba que parecía que había más capítulos de combates que de "trama", pero tampoco esperaba -ni quería- que todo acabase tan abruptamente como lo ha hecho. Basicamente Luffy ha llegado, ha visto y ha vencido. Y eso no esta bien.
El capítulo resulta espectacular, no hay duda de ello. Jamás habíamos visto a Luffy repartir de tal manera, una auténtica bestia parda que cada golpe que suelta es más terrorífico que el anterior. Un tormenta de puñetazos que hace que sientas lástima por Moria y Odr. Ha sido una paliza increible que a buen seguro sera más memorable aún en el anime si la animan bien, no le meten relleno y la rodean de una buena banda sonora. Pero es... extraño.
Pese al caracter de transición que aparentemente tenía esta saga, la idea de una batalla de toda la tripulación contra un gigante bastardo de Luffy era genial. El combate, aunque muy largo, era espectacular. Sin embargo, el tópico shonnen de que sea el protagonista quien acabe siempre con el villano principal lo ha lastrado. No me ha gustado que sea Luffy quien haya vuelto a acudir en ayuda de sus nakama cuando estos estaban destrozados. Hay esperanzas, claro. Puede que Oda utilice esta derrota para espolear a la banda a mejorar (algo así como la derrota contra Ao Kiji lo hizo claramente con Luffy).
No obstante, el futuro es incierto. Moria puede haber sido derrotado, pero ello no implica que lo haya sido Odr. El zombi, en teoría, no siente dolor; si bien Oda ha rizado el rizo de la "lógica one piece" para darle habilidades "gomu gomu" espero que no olvide esta regla que él mismo mencionó hace una treintena de capítulos. Si hay suerte, Odr despertará en el siguiente capítulo. Pero Luffy está inconsciente, y la salida del sol imposibilita que luchen Zoro, Sanji y Nami. Chooper, Franky y Brook, los que componen lo que podríamos llamar la segunda línea de ataque de la banda estan inconscientes. Oda me ha dado muchas alegrías a lo largo de su serie de piratas y verdaderamente, aunque es muy complicado, sería grande que acabaran con el enemigo más poderoso fisicamente al que la banda se ha enfrentado los dos miembros más débiles de la tripulación: Nami y Usopp.
En fin, una saga que todavía no se si me ha gustado o no, pero en todo caso es una saga menor para presentar a Brook y creo que en ese aspecto supera claramente a episodios como el de Drum o los primeros de la aventura. Y, en todo caso, siempre nos quedaran unas buenas batallas y, como he titulado en esta entrada, la mayor exhibición de brutalidad que Luffy ha ejercido a lo largo de esta serie de ya casi 500 capítulos.

Enesima anime bueno pero no imprescindible

Jyushin Enbu - Hero Tales

La nueva serie de Hiromu Arakawa tiene ya una adaptación al anime. No conoczco el manga, asi que no puedo decir si es mejor (aunque eso lo dudo) o peor, pero por otra parte este no comenzó a publicarse hasta el año anterior así que dudo que la autora verdaderamente haya llegado a entrar en la parte interesante de la historia. El anime, con 26 episodios, se separará pronto de la trama, así que supongo que todo lo que esta serie tendra de la creadora de Full Metal Alchemist será el diseño de personajes y el germen inicial de la historia.
No obstante, tan poco de esa genio puede ser bastante. El diseño es excelente, todos los personajes se salen un poco del dibujo típico pero tampoco resultan extraños, y la calidad del dibujo impulsa igualmente los bellos paisajes y la calidad de una animación que se hace notar en unos combates bien coreografiados y espectaculares. En cuanto a la historia, nos encontramos ante una aventura de corte medieval con claros tintes de videojuego. Tenemos un protagonista, al que se le uniran poco a poco unos pocos paladines que tienen (cada uno con unas características distintas, claro) y que harán frente a un tirano. Como se puede ver la historia no es nada del otro mundo, pero siempre puede salir algo bueno de ella y en todo caso es de agradecer que no se nos meta la habitual parafernalia filosófica con la que los japoneses impregnan cualquier historia con leves tintes sobrenaturales.
Vistos los cuatro primeros episodios no creo que este anime vaya a pasar a la historia. A todas luces parece muy convencional y tópico, no obstante, igualmente parece entretenido y "visible". Este tipo de historias no son muy comunes en el anime, y si los guionistas son hábiles y la criatura no se les va de las manos en los últimos episodios y mantienen cierta coherencia en los poderes y las acciones de los personajes, puede ser una serie bastante notable. No sobresaliente, que quizás ese sea su problema, pero si notable.

Consola pequeña, juegos gigantescos

Osu! Tatakae! Ouendan!

Cada vez estoy más contento de haberme comprado la Ds. No obstante, tanto el Phoenix Right como su secuela eran juegos de Gameboy advance (aunque en su edición para DS incluyeron en el primero de ellos un caso que hacía uso de la pantalla táctil y el micrófono), y Zelda, si bien se manejaba unicamente con el stylus y ofrecía unos grandes puzles, seguía siendo un juego al estilo antiguo. Este que me ocupa ahora, no. Es un juego basado por completo en las características de la consola, un juego imposible de concebir sin una pantalla táctil y un lápiz. Y es una condenada maravilla.
Es un juego bastante simple. Escuchamos una canción y debemos seguir su ritmo para pinchar en la pantalla en el momento adecuado. Hay distintos tipos de "pinchamientos" y si no pinchamos en el momento adecuado no obtendremos la máxima puntuación (lo cual hará que nuestra barra de vida, que siempre mengua, recupere menos puntos). La premisa es fácil y en su ejecución resulta sorprendente adictiva y divertida.
El juego, no obstante, cuenta con dos factores que pueden ser considerados defectos o virtudes. El idioma en este caso no es un problema, pues los menus son muy intuitivos y se puede jugar perfectamente, pero las historias que se narran estan contadas como un manga y en perfecto japones. Se pueden seguir ya que son muy gráficas y además tampoco son ninguna obra maestra (son en su mayoría cómicas y bizarras). Pero si no te gusta el manga y el tipo de humor que muchas veces se ve en el, este título no te gustará. Si te gusta el manga y te gusta este humor inocente y absurdo japones (como es mi caso), el juego te gustará aún más.
El segundo problema radica en las canciones. Tenemos 15 canciones para los 15 niveles del juego. Todas ellas, como es natural, japonesas. Hay muchos tipos de canciones, desde canciones tradicionales japonesas hasta J-pop pasando incluso por el rap. Las canciones son variadas, normalmente todas tienen bastante ritmo pero encontramos incluso baladas. Todas las canciones se adaptan perfectamente al juego y a la historia que enmarcan, y todas ellas son lo suficientemente distintas para ofrecer variedad y evitar la sensación de monotonía. No obstante, aquí entran en juego gustos personajes y si no te gusta este tipo de canciones, pues no te gustará el juego. Si te gusta esta música, el juego te gustará.
Poco más se puede decir del juego. Divertido y adictivo, es también bastante dificil. Pero, si uno se considera minimamente un otaku debe hacerse con él. Es una frikada del 15 con la que se disfruta como un enano.

Mejor quedarse en "La voz de los muertos".

Los hijos de la mente

"El juego de Ender" era un libro excepcional. Su continuación "La voz de los muertos", era igual de bueno, pero además era terriblemente valiente al ser completamente distinto al original. Con dos libros más "Ender el xenocida" y este que ahora critico, Orson Scott Card cierra la tetralogía que compone la saga principal del universo de ciencia ficción que creo en torno al carismático Ender Wiggin.
Ahora bien, como ya comenté en mi análisis del tercer libro, la saga pierde mucho una vez que terminamos el segundo libro. En el tercer libro el autor se iba demasiado por las ramas con aspectos meramente tecnológicos, divagando al mismo tiempo sobre el sentido de la vida y uniendo ambos mediante el concepto de filote. Aquella idea no me pareció demasiado bien llevada, y el libro en sí sufría un terrible problema de falta de ritmo.
Este cuarto libro comienza bien, recuperando la narrativa centrada en personajes de los primeros libros, con una nueva pareja de personajes (joven Val y Peter) que abrían muchas posiblidades narrativas. Además, la tensión por la llegada de la flota con el Pequeño Doctor, la muerte inminente de Jane y la existencia de los Descoladores ofrecía igualmente muchas tramas apetecibles. Y el libro las maneja bien en un principio, vemos un poco de rebundancia en los pensamientos de los protagonistas y algo de simpleza y pesadez en la trama política. Pero hasta la página 100 esta bien. El problema radica en que luego estos problemas se multiplican hasta decir basta y la novela además se vuelve previsible. Si en el tercer libro se hacía demasiado énfasis en la parte tecnológica aquí se hace en la parte psicológica. El gran acierto de las novelas originales era su excelente retrato mental de Ender, aquí los personajes son mucho peores, sus acciones son previsibles hasta decir basta y las interiarizaciones de sus pensamientos son rebundandtes, absurdas e incluso cargantes y enervantes. Todo sucede "porque sí". No hay demasiada lógica en los actos y, si bien el mensaje de Scott Card queda claro al final, hay siempre la sensación de que todo se esta contando con prisas y sin ellas al mismo tiempo.

Como siempre suele pasar en estas obras, es una saga demasiado alargada. El autor tiene buenas ideas, pero la historia hace mucho que se agotó y sus recursos no consiguen reanimarla.

En Sunrise confiamos

Gundam 00

Un par de años después de que finalizara la funesta "Gundam Seed Destiny", Sunrise presenta el proyecto destinado a continuar su saga por excelencia. "00" no es un proyecto pequeño, es seguramente el proyecto más ambicioso de todos los que se han estrenado este año. Desde hace 30 años la compañía nipona tiene en su franquicia de mechas su producto estrella; "00" supone además la creación de un nuevo mundo tras la relativa mala aceptación del universo C.E debido a Destiny, ello quiere decir que la empresa quiere sentar las bases para un universo que seguramente explotará durante unos cinco años. Gundam 00 es una serie de anime, pero antes es un gigantesco macroproyecto económico que predente encandilar a los fans de las sagas anteriores para segir sacándoles un dineral en dvd, plamos, mangas, videojuegos y todo tipo de merchandising. Es decir, hay mucho en juego mucho dinero.
Comenzare hablando de lo primero que destaca en esta serie: entra por los ojos. "Gundam 00" es una serie hecha con mucho dinero, y eso se nota. La serie se emite además en HD y eso obviamente le da un aspecto mucho mejor que a su predecesora. El diseño, tanto de mechas como de personajes es bastante bueno, en especial los mechas son bastante espectaculares (incluyen pequeñas transformaciones) se diferencian de los vistos en anteriores sagas pero siguen siendo "gundam". Lo unico que en este aspecto no me ha gustado demasiado es la ambientación, tanto los paisajes como las ropas y los objetos que vemos son demasiado convencionales en lo que a diseño futurista se refiere. La animación es excepcional, los personajes se mueven con elegancia y sin brusquedad (y no se deforman demasiado, al menos en estos primeros episodios), los combates de mechas se desenvuelven con velocidad y fluidez, y además se puede apreciar bastante velocidad y espacio.
Después del apartado gráfico llega el momento de hablar de la trama, y aquí hay que decir que Gundam 00 parece más heredera de Gundam Wing que de Gundam Seed. En las sagas gundam siempre hay política y conflictos humanos, pero esta es una de esas series que parece claramente enfocada hacia ella. Tenemos un mundo futurista donde una organización terrorista aparece para acabar con las guerras uniendo a todos los países del mundo contra ellos. Idealismo hipócrita obviamente, pero se trata de una serie profundamente antibelicista y los protagonistas son hijos de la guerra a los que no les importa convertirse en demonios si con ello evitan las guerras. Este argumento es bastante sugerente, y desde luego el tratamiento es muy distinto al que vimos en la teatral -pero magistral- Code Geass. No obstante, recordemos que esto es Gundam, la serie en si es una excusa para mostrar mechas y venderlos; habra batallas, y muchas. El argumento inicial es sugerente, y será una serie larga (50 episodios divididos en dos temporadas), y como he dicho anteriormente Sunrise no le pone el título "gundam" a cualquier proyecto. "Gundam 00" podrá ser muchas cosas, pero desde luego una de ellas es que es un producto elaborado y cuidado, pensado desde el primer momento para arrasar. Queda todo en mano de los guionistas, de ver si conseguiran sacar una gran serie Gundam o si por el contrario se perderan en las intrigas políticas y la serie acabará siendo larga y pesada. El tiempo dirá.
En todo caso siempre nos quedaran las decenas de doujin que a buen seguro protagonizaran Sumeragi ri Noriega y Wang liu mi.

La mejor es la primera

007: Goldeneye

Las películas de James Bond tienen un grave problema, no se han rodado una veintena de ellas, se ha rodado veinte veces la misma película. Vista una, vistas todas. Es por ello que creo que, sencillamente, la película favorita de Bond de alguién es la primera que ve.
Son películas simples y malas, en cierta manera reflejan lo peor de los "hombres" como tal. James Bond es algo así como la puesta al día de Conan el bárbaro: se dedica a matar a los malos y a tirarse a toda mujer que pase a menos de cinco metros de él. Sueño masculino elevado a la enésima potencia (lo cual no dice mucho de nosotros). En todo caso, las películas de Brossnan le daban una faceta de autoparodia que me gustaba bastante. El actor británico mantenía siempre una sonrisa de cabroncete que parecía decir a todos los malos "Bond no ha muerto en 17 películas, no esperes que un piltrafilla como tu se lo vaya a cargar". Más ironías y más coñas en una saga que al final en "Muere otro día" se desmadró tanto que bordeaba la ciencia ficción.
No obstante, no creo que nadie vea hoy en día las películas de Bond por el espionaje. Creo que todos sabemos que el espía 007 podía vivir en los años de la guerra fría, pero que en los tiempos actuales es más bastante improbable que exista alguién así. No obstante, para cine de espionaje recomiendo la saga de Bourne, Bond no deja de ser una saga de películas de acción que se repite hasta la saciedad y que sobrevive gracías a una extraña complicidad que ha creado con sus espectadores.
He visto 5 películas de Bond, y las cinco me parecen absolutamente iguales, y lo cierto que esta -mi favorita- vista ahora después de bastantes años me ha parecido bastante más simple y mala de lo que recordaba. No obstante, esta película que descubrí al amparo de un memorable videojuego de la Nintendo 64, es un filme que me sigue pareciendo bastante divertido y entretenido. Si obviamos la simplicidad de la trama y el completo absurdo de la historia romántica, nos encontramos con escenas bastantes divertidas (M presentándose, Valentin, Bond y sus ironías, Bond conduciendo un tanque por las calles de Moscú...).
En fin, no creo que a nadie al que no le guste Bond le vaya a gustar esta película, pero creo que esta al menos es una película perfecta para introducirse en la saga.

¿Decepcionado? ¿Espectante? Confiado.

One Piece 478: "Luffy vs Luffy"

No me estan gustando los combates de esta saga. Los combates contra los 4 misteriosos fueron muy buenos cada uno, y este de la banda entera contra Odz es bestialmente divertido y espectacular (seguramente de los mejores de la serie). Sin embargo, en global, me parecen algo flojos. El principal problema, claro, radica en que ahora tenemos 8 (9 si contamos a Brook) protagonistas, y esto complica mucho que cada uno de ellos tenga un gran combate en una saga corta como previsiblemente parecía ser Thriller Bark.
Al principipo parecía que tendríamos un espectacular combate de toda la banda contra un monstruo titánico. Pero Oda comenzó a tumbarlos a todos uno a uno, y despues dotó a Odr de las habilidades "gomu gomu" de Luffy. Supongo que la posibilidad de que el protagonista se enfrentara a si mismo era demasiado golosa como para que el autor la ignorara. Así pues Luffy, en su versión "mr.hyde", ha aparecido para salvar a su tripulación. No me ha gustado que el capitan los vuelva a salvar, es un tópico demasiado visto en los shonnen. No obstante, a pesar de esta pequeña decepción y de que hubiera preferido que la banda acabara con Odz e incluso con un shichibukai sin la ayuda de Luffy, confio en Oda. El autor se lo ha ganado de sobra durante estos años y estoy seguro de que cualquier cosa que escriba o tenga pensada superara mis espectativas.
A fin de cuentas, la pelea "Mugiwara vs Odz" estaba últimamente amañada debido a la inclusión de Moria y al darle este las habilidades de Luffy al zombie (aunque para mi gusto era también algo bastante forzado). Los efectos de las sombras en Luffy duraran poco, asi que supongo que apalizará a Odz y que finalmente cuando este a punto de derrotarle se acabara el tiempo de las sombras. Tendremos un Luffy vs Moria y un nuevo round de la banda contra Odz. No obstante el amanecer se acerca, sigue habiendo por ahí dos zombies con las sombras de Sanji y Zoro, e incluso Robin carece ahora de sombra.
Esta saga es, desde luego, mucho más compleja de lo que en un principio parecía. No se lo que tendrá previsto Oda, pero como he dicho antes, confio plentamente en él. En One Piece... lo mejor esta siempre por llegar.

Mucho más raro y mucho peor

Ender el xenocida

Mi sensación tras terminar de leer este libro no puede ser otra que la de decepción. Tanto "El juego de Ender" como "La voz de los muertos" tenían defectos, pero los enmascaraban con una gran cantidad de virtudes que, al menos desde mi humilde punto de vista, los convertía en auténticas maravillas. Sin embargo, en esta tercera parte de la saga, los defectos han aumentando y ya no hay virtudes que los suplan.
La novela retoma la historia allí donde la dejó su predecesora y plantea un gran número de amenazas sobre Lusitania, sobre las razas alienígenas que allí viven y sobre el propio Ender y sus amigos. El problema radica en que no sabe como arreglar ninguna de ella. Todo parece arreglarse de repente "porque sí"; los protagonistas tienen un problema que parece imposible de solucionar, pero al final llegado el momento siempre lo resuelven de una manera fácil y sencilla. Eso no esta bien. La historia esta continuamente muy forzada. Los personajes se convierten en arquetipos demasiado inflexibles y sólo se salen de su papel para realizar acciones que parecen a todas luces ilógica e irreales y que no son si no otra forma más de forzar la historia por parte del autor.
Además, en este libro tenemos una carga sensiblemente superior de ciencia-ficción que en los anteriores. Esta ciencia ficción es además bastante especulativa y muy filosófica, lo cual hace que en muchas ocasiones se haga pesada y repetitiva.
El libro tiene, como sus predecesores, cosas buenas. Algunos aspectos de la trama resultan muy sugerentes (principalmente la interrelación entre las especies o las reflexiones sobre el miedo, el poder y la manipulación de unos u otros), aunque como he dicho antes no están tan bien narrados como en los dos libros anteriores.
No obstante, a pesar de que la sombra de la genialidad de Scott Card permanece y de que Ender es indudablemente un personaje muy carismático, es un libro muy irregular. Tenemos partes de 50 páginas donde no sucede nada y donde los personajes se dedican a debatir sobre filosofía sin añadir nada realmente nuevo, y luego todo avanza una barbaridad en un par de páginas sin explicar demasiado bien el porque.
No puedo juzgar este libro individualmente, pero de lo que no me cabe ninguna duda es de que es muy inferior a sus dos predecesores.

Con todo el poder y la velocidad del Norte

Sonata Artica - Ecliptica

El heavy-metal tiene infinidad de variantes o estilos. Uno de mis favoritos es el que comunmente se llama "speed-metal". Consiste basicamente en un sónido muy rápido, complejo y elaborado, un sonido al mismo tiempo muy melódico y elaborado. Es un sónido que conocí gracias a Stratovarius y que por ello asocio a la escuela nórdica.
"Sonata Artica" son unos dignos sucesores de aquella banda. Si sentí curiosidad por escucharlos fue por este impresionante AMV de One Piece que, si bien tiene una calidad que tira de espaldas... por encima del montaje y casi de la propia épica de las imágenes destaca el impresionante tema "Full moon" de la banda que me ocupa ahora mismo.
He empezado escuchando "Ecliptica", el primer disco de la banda. Las sensaciones son inmejorables. Pocas veces he escuchado un primer album tan bueno (o al menos que se adapte tanto a mis gustos). "Full moon" es la joya de la corona, pero el disco en si es muy bueno, unas cinco canciones más que decentes y otras tantas que son sencillamente maravillosas. El ritmo y la velocidad de la banda, se ven ya en el primer tema: Blank File. La velocidad es espeluznante, la bateria no descansa, los solos rápidos y elaborados de guitarra se sucenden uno detrás de otro, y para rematar tenemos una gran cantidad de coros que le dan un aire épico. Y luego tenemos canciones como "Replica" o "8th Commander"... baladas y canciones increiblemente vibrantes se suceden una detrás de otra concordando entre ellas a la perfección.
Toda una gozada de disco.

Obra maestra o pufo impecable

Kimikiss - pure rouge

Esta es sin duda una de las grandes series de la temporada. Normalmente estas vienen precedidas de un gran manga o un gran presupuesto, pero hay estudios que poco a poco logran hacer que sus proyectos siempre destaquen. Gonzo o Gainax en sus buenos tiempos, o Kyoto o Shaft en estos últimos años son el ejemplo más reciente. JCStaff son todos unos veteranos de la animación, pero últimamente, y por medio del brillante director Kenichi Kasai y su estudio, nos han acostumbrado a unos proyectos de una calidad poco menos que prodigiosa. No creo que nadie sea capaz de poner en duda que Honey and Clover y Nodame Cantabile son dos de los mejores animes de los últimos años.
No obstante Kimikiss es un proyecto mucho más complicado que aquellos dos. Tanto Nodame como Honey se apoyaban en unos mangas de una calidad y popularidad escepcional. Kimikiss lo hace en un videojuego bishojo( y su pertinente universo de novelas, mangas y drama-cd). Es decir, no hay una gran historia tras ella. Pero quizás esto sea una ventaja, pues lo que hace es otorgar al estudio una gran libertad para hacer lo que les venga en gana, y no se puede dudar del talento de esta gente.
Así pues, la serie nos coloca en un instito y nos presenta a un grupo de unos seis u ocho protagonistas cuyas relaciones veremos evolucionar poco a poco. No hay un protagonista fijo, y la historia se narra desde al menos tres puntos de vista diferentes. No es un harem, al menos no en el sentido tradicional de la palabra. La serie maneja a su vez varios ritmos diferentes, uno para cada una de las parejas que la protagonizan. En este aspecto es una serie muy arriesgada y valiente, pues es dificil mantener todas las historias a un mismo nivel, y si bien cada una a comenzado a una velocidad distinta más complicado será que el climax de todas converga al final de la serie. Esta estructura me gusta, y el ritmo lento donde las historias avanzan poco a poco también me gusta, en ese aspecto es una serie que se ve tranquila y bien, con una pequeña sonrisa en la boca. No obstante, hay defectos, las parejas estan descompensadas y Mao-nechan eclipsa bestialmente a los otros dos protagonistas (y se puede decir que despues de ella el mejor personaje es su partener, Kai), y lo peor es que si bien la historia de uno de ellos si tiene pinta de mejorar, la del otro tiene pinta de topicazo a más no poder (chico y chica enamorados pero tan tímidos que parecen lerdos). Además, los secundarios supuestamente cómicos de la serie, las dos "imouto", son uno de los mayores crímenes perpetrados contra los seguidores de la animación japonesa con cerebro (todavía no me explico como "Iwao" y "Juliet" han podido pasar el filtro de los directores o productores, o sólo el del sentido común de los guionistas). Aborrecibles hasta decir basta.
A nivel técnico poco se puede decir que no se suponga. Nodame y Honey and Clover. La serie entra por los ojos. Una gozada visual con unos escenarios y colores magníficos y un uso más que perfecto de las deformaciones. Además su origen bishojo ha dado la excusa perfecta a la gente de JCStaff para recrearse con el diseño de las féminas y regalarnos el anime con las mejores chicas que he visto en mucho tiempo (las chicas son guapas, así de simple, no son exhuberantes, sencillamente son bonitas). Además, como extra tiene un opening que me maravilla. La canción por si sola no es gran cosa, pero creo que le pega como pocas a la serie. Es bonita, romántica y hasta delicada.
No puedo decir mucho más de la serie. He leído en varios blogs que hasta que no se emita el último episodio no se podrá decir si es una buena serie o un bodrio pretencioso, y estoy de acuerdo con esa afirmación. La idea es buena y refrescante en un género tan trillado como el de la comedia colegial. Pero es muy complicado que una comedia coral funcione.

Hola, me llamo Iñigo Montoya, tu mataste a mi padre...

Stardust

Películas como esta aparecen muy de vez en cuando. Mi hermano me la había recomendado comparándola a "La princesa prometida", una de mis películas favoritas, y después de haberla visto no puedo si no confirmar esa impresión. "Stardust" es la secuela que nunca vimos de aquella maravillosa película de los 80.
Son películas extrañas. Transcienden su género y su tiempo para quedarse grabadas en la memoria del espectador para toda la vida. Me es imposible olvidar a Wesley, a Iñigo Montoya a Cesik, al Pirata Roberts, a la princesa Butterfly y a todos aquelos personajes. De inmediato esa película pasó a formar parte de mi. Es algo que muy pocas películas logran. Creo que Stardust lo ha conseguido de igual manera. Sólo el tiempo lo dira, claro, pero las sensaciones que me ha producido esta película son similares. Y su mérito es quizás mayor, pues aquella cinta la vi con la fascinación de un niño, esta la he visto con el desencanto de un adulto.
Poco o nada se puede decir el argumento, sencillamente es un cuento de hadas. Tenemos a un protagonista muy bueno y noble, a una princesa, a una bruja malvada, a un principe ambicioso y terrible, a un maestro mentor y a todos los típicos personajes que esperamos encontrar en un mundo de fantasia. Y la historia, como todas aquellas que merecen la pena ser contadas, es una historia de amor.
Tecnicamente la película cumple de sobra, unos efectos que se amparan en la magia que transmiten para ser perfectos, unos paisajes sencillamente increibles y hermosos, una escenografía muy cuidada, y hasta un score que realza todo lo que se ve.
Pero lo importante de la película no es ni su argumento, ni sus paisajes ni nada. Lo importante de la película es todo. Porque Stardust es una de esas películas que se ve con una sonrisa en la boca. No es una comedia. Es una película sencillamente alegre y feliz, y contagia ese mismo sentimiento al espectador.

Porque Wind Waker era una maravilla...

The legend of Zelda: Phantom hourglass

Cuando Wind Waker fue lanzado al mercado, allá por el ya lejano 2002, fue muy criticado. La sombra del mítico "Ocarina of Time" era demasiado larga y el público esperaba un Zelda cuasi fotorealista que no llegaría hasta varios años más tarde con "Twiligth Princess", fue por ello que a muchos les sorprendió un juego con apariencia de dibujo animado. En este caso el aspecto gráfico era tan destacado (para bien o para mal) que marcó el juego. Para mi, aficionado al manga y al anime, era una gozada jugar un juego que -por su estética y desarrollo mismo- casi parecía una película del gran maestro Hazao Miyazaki. Para muchos esa estética era un lastra, pera mi no, y hoy me sigue fascinando, y al estar en el mar y ser piratas... mejor todavía.
Sin embargo, una vez que comenzabas a jugarlo, te olvidabas del aspecto gráfico. Wind Waker era un Zelda con todas las letras de la palabra, tenía exploración y tenía aventuras, tenía monstruos invulnerables contra los que había que encontrar un punto débil, tenía sus tesoros escondidos, tenía un mundo entero vivo que visitar. No obstante, todas esas virtudes se dan siempre por supuestas en un juego de la serie y no sorprenden, porque se exigen. En el caso de Wind Waker el factor que lo diferenciaba era la sensación de estar jugando una película de animación, la sensación de que el cuento de hadas era más fantástico que nunca. Wind Waker era distinto al Ocarina, si Majora era la versión "oscura" del Zelda en tres dimensiones que estandarizó Ocarina, Wind Waker era su versión alegre y desenfadada.
No obstante, el juego fue un relativo fracaso. Lejos de su estética, que disgustó a muchos y a buen seguro le hizo perder muchas ventas, el juego tenía muchos fallos. El océano no estaba bien diseñado, era demasiado grande y estaba demasiado vacio, y los trayectos de isla a isla se hacían largos y tediosos (la rutina para cambiar el viento no era demasiado ágil). Particularmente no me parece lo peor del juego, y te proporcionaba momentos gloriosos como los combates en alta mar. Sin embargo, en las 40 cuadrículas que componían aquel mundo, si era cierto que había demasiado poco, había muy pocas islas "grandes" y eso también se vio reflejado en las mazmorras. Wind Waker era un juego demasiado corto y fácil. Apenas 5 mazmorras propiamente dichas no llenan ningún juego de la saga.
Nintendo abandonó aquel estilo tan "distinto" y la saga Zelda regresó al estilo "Ocarina" con el espectacular pero "decepcionante" Twilight Princess. Sin embargo el éxito de la consola portatil le permitió recuperar aquella historia y continuar la historia con la secuela que desde el principio habían concebido. "Phantom Hourglass" retoma la historia al final de Wind Waker y sumerje a Link en el enésimo rescate de Zelda (la historia, como es sabido, nunca es demasiado original). Pero lo importante es que Nintendo aprende de sus errores, y este juego corrige todos los defectos de su predecesor y añade virtudes hasta ahora desconocidas gracias a las posibilidades de la tactil.
El juego es un Zelda de toda la vida. Historia simple que sirve de nexo entre las distintas mazmorras (en este mundo además identificadas con islas), mazmorras que superar y objetos que nos dan poco a poco más habilidades para afrontar los puzzles. En todos estos aspectos el juego cumple de sobra, tiene una extensión considerable y una dificultad bastante bien medida. El aliciente en esta ocasión es la pantalla táctil de la DS, mediante la cual controlamos integramente al personaje y realizamos todas sus acciones. Es una manera distinta -muy bien resuelta- de jugar, y tambien abre grandes posibilidades a los puzles. El marcar la trayectoria del boomerang, el tener un mapa sobre el que realizar anotaciones, el apuntar con nuestro cañon con total precisión o trazar nuestra ruta con igual exactitud son pequeñas gozadas que añade esta consola y que serían impesables en otro sistema. Esta nueva forma de afrontar las mazmorras, así como algunos puzles que nos exigen soplar, gritar o incluso cerrar la consola son pequeños extras que hacen a esta aventura completamente distinta de las anteriores. No obstante, si tuviera que mencionar algo de este juego serían sus jefes, de lejos, de muy lejos, el mejor grupo de jefes que he visto en un Zelda. Cada uno completamente distinto de los anteriores (y de sus predecesores en la saga) y cada uno aprovechando de una manera distinta las dos pantallas de la DS. Memorables.
No obstante, no todo podían ser virtudes. Phantom Hourglass camufla gracias a sus renovados puzles un esquema de juego que ya tiene 15 años ("A link to the past", SuperNintendo) y que a todas luces necesita una renovación. Ocarina of time dio el salto a las 3d magistralmente, Majora era más oscuro, Wind Waker más "animado", Phantom Hourglass tiene la doble pantalla, pero Twilight princess ya adolecía de ser "más de lo mismo pero más bonito". Zelda necesita renovar sus esquemas de juego.

¿Secuela? No. Continuación

La voz de los muertos

El juego de Ender era un gran libro. Era sugerente, era inteligente, era adictivo y era, sencillamente, entretenido. Su continuación es mejor.
"La voz de los muertos" retoma la historia allí donde la dejó su predecesor (dentro de la relatividad de "allí" en esta serie), y la continua. No entraré a valorar si el libro es más o menos entretenido que su predecesor, al menos a mi me ha parecido tan adictivo como este (y eso no es poco). Sin embargo, de lo que no me cabe ninguna duda es de que su calidad literaria es muy superior.
Ender era un gran libro, pero por eso mismo este libro es igual de bueno o mejor. Porque Scott Card no nos plantea una nueva lucha contra los insectores. Esta novela sólo comparte con su predecesora el protagonista. Todo es distinto. En la primera parte veíamos como se forjaba a un militar, en esta vemos la redención de este, como intenta expiar sus crímenes. Son novelas completamente diferentes en la trama, y ahí radica la grandeza del autor pues este libro es la perfecta y lógica continuación del anterior. Y "El juego de Ender", si bien era un libro enmarcado en una guerra, era una obra eminentemente intimista y centrada en la psique de Ender y el resto de los niños, este libro esta todavía más centrado en los personajes, en sus miedos y en sus ansias.
Además, esta la historia. Porque aquella maravilla que era el final de Ender, aquel verdadero choque de razas entre humanos e insectores que era el encuentro de Ender con la Reina Colmena, es ahora plenamente desarrollado gracias a la inclusión de los cerdis. Choca ver que un autor tan "derechoso" como Scott Card es capaz de hacer un canto a la tolerancia y a la igualdad como el que propone este libro. En este aspecto si tengo una queja con respecto a su predecesor, en este libro hay una carga mucho más grande de filosofía y religión, y en este aspecto en ocasiones queda demasiado evidente el pensamiento del autor (cuando Ender habla nadie puede rebatirle nada, no soy católico -ni mucho menos- pero no me gusta que alguién destroze todas las convicciones de otro con unas pocas palabras).